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2014-2019
{AFCO}Comisin de Asuntos Constitucionales
{01/06/2016}1.6.2016
DOCUMENTO DE TRABAJO
sobre la democracia digital en la Unin Europea: posibilidades y retos
{AFCO}Comisin de Asuntos Constitucionales
Ponente: Ramn Juregui Atondo
La relacin entre los ciudadanos y la poltica tiende a verse cada vez ms afectada por el desafecto y la desilusin. Cuando la ciudadana no se siente representada como desea, deja de participar en la vida democrtica, y este fenmeno repercute negativamente sobre las instituciones y sus representantes, que se perciben alejados de las necesidades de los ciudadanos. Por consiguiente, tanto a nivel nacional como de la Unin, el deterioro de la relacin entre poltica y ciudadana puede incidir gravemente en la legitimidad del sistema representativo. A ello se aaden los efectos sociales de la profunda crisis econmica de estos ltimos aos, que ha empeorado gravemente las condiciones de vida en la mayora de los pases.
Es urgente restablecer la conexin entre poltica y ciudadana, tanto a nivel nacional como europeo, y por tanto mejorar la participacin y la transparencia en la toma de decisiones; fortalecer los mecanismos de control democrtico; reforzar la apertura de los partidos polticos, y establecer reformas electorales para dar ms voz a los ciudadanos en esos procesos. Son solo algunas de las demandas que nos hacen.
En este contexto, el auge de las nuevas herramientas de comunicacin digital y de las plataformas abiertas y colaborativas puede inspirar soluciones creativas para reducir la insatisfaccin ciudadana respecto de las instituciones polticas y elevar sus niveles de confianza en el sistema democrtico, sobre todo para las generaciones ms jvenes.
Cmo se pueden llevar a cabo estas reformas? Cmo podran beneficiarse la legitimidad y la responsabilidad democrtica y poltica de las tecnologas de la informacin y la comunicacin (TIC)? Cmo puede incorporar la democracia clsica estos nuevos mtodos de trabajo?
E-Democracia: En qu consiste?
El ponente ha preferido no centrase en forjar una nueva definicin de democracia electrnica, puesto que otras instituciones ya han realizado este ejercicio con anterioridad, y porque corremos el riesgo de crear un concepto demasiado vago o demasiado concreto, que carezca de la necesaria flexibilidad para integrar a las diferentes herramientas que engloba.
No obstante, cabe hacer mencin a la definicin aprobada en la Recomendacin CM/Rec (2009)1 del Comit de Ministros del Consejo de Europa, que ofrece estndares para la aplicacin de la democracia electrnica. La Resolucin establece que la democracia electrnica debe promover, garantizar y mejorar la transparencia, la rendicin de cuentas, su capacidad de respuesta, la participacin, la deliberacin, la inclusin, la accesibilidad, la participacin, la subsidiariedad y la cohesin social.
La doctrina distingue tres conceptos, aunque existen evidentes solapamientos entre ellos:
- E-Gobierno: se refiere a la aplicacin de las TIC al funcionamiento del sector pblico y, en particular, a la prestacin electrnica de informacin y servicios a los ciudadanos por parte de las administraciones pblicas (por ejemplo: el pago de una multa de trfico).
- E-Gobernanza: se refiere a la aplicacin de las TIC para establecer canales de comunicacin que permitan incorporar a los distintos agentes que tienen algo que decir en la elaboracin de las polticas pblicas (por ejemplo: una consulta electrnica a los ciudadanos sobre si un determinado lmite de velocidad debe ser cambiado o una consulta local sobre el Presupuesto).
- E-Democracia: se refiere a la utilizacin de las TIC para la creacin de canales para la consulta y la participacin ciudadana (por ejemplo: parlamento electrnico, iniciativa electrnica, voto electrnico, peticin electrnica, consulta electrnica, etc.).
Situacin actual en la Unin
La Comisin Europea se ha centrado, en particular desde 2009, en la participacin y la gobernanza electrnicas. DG CONNECT est impulsando la e-participacin como parte de su Estrategia para el Mercado nico Digital. Adems, la accin preparatoria de la Unin en materia de e-Participacin, y que fue apoyada por el Parlamento Europeo y form parte de los Programas Marco 5 y 6, ha financiado varios proyectos piloto (entre otros, los exitosos OURSPACE, PUZZLED BY POLICY y PARTERRE) que proporcionan una gama de herramientas para lograr la implicacin en lnea de los ciudadanos en el proceso de elaboracin de polticas. Actualmente, en el mbito del Sptimo Programa se est desarrollando el proyecto FUPOL, que tiene como objetivo crear un modelo de gobierno que involucre a todas las partes interesadas en el ciclo de vida de diseo de polticas. La Comisin ya realiza consultas pblicas y evaluaciones de impacto, sobre todo antes de proponer actos legislativos, a fin de aumentar la participacin pblica y mejorar la gobernanza europea. Estos procesos podran beneficiarse de un uso ms amplio de las nuevas tecnologas.
Al mismo, el artculo 11 del Tratado de la Unin Europea introdujo un instrumento innovador de democracia participativa en la Unin Europea: la Iniciativa Ciudadana Europea. El mecanismo se inici en 2012, a raz de un reglamento adoptado por el Parlamento y el Consejo. Hasta ahora se han registrado ms de 35 solicitudes, de las cuales 3 consiguieron llegar al umbral de 1 milln de firmas y por lo tanto han recibido una respuesta oficial de la Comisin.
El Parlamento Europeo public El futuro de la democracia en Europa: tendencias, anlisis y reformas en 2008, y E-pblico, e-participacin y e-voto en Europa - Perspectivas y desafos, en 2012; en dichos estudios se analizan las nuevas herramientas y se subrayan, particularmente, las dificultades que plantea la introduccin generalizada del voto electrnico en Europa por razones de costes y beneficios, conflictos tecnolgicos y preocupaciones de legitimidad poltica.
Durante la Presidencia luxemburguesa del Consejo, el 6 de octubre de 2015, la Conferencia de la Juventud de la Unin emiti recomendaciones conjuntas de llamada para el desarrollo, ejecucin y seguimiento de las herramientas online para la participacin poltica de los jvenes.
Ejemplos de implementacin exitosa de la e-Democracia
Estonia constituye el ejemplo ms exitoso de voto electrnico en Europa. En 2005, fue el primer pas en celebrar elecciones vinculantes a travs del voto electrnico. En la actualidad, el electorado puede votar en lnea entre 11 y 4 das antes de las elecciones, incluso desde el extranjero. El porcentaje global de votos electrnicos asciende al 25-30%. Los factores de xito clave son la reducida poblacin de Estonia, la alta densidad de su industria tecnolgica, una gran penetracin de conexin a internet y la abundancia de la conectividad Wi-Fi en su territorio.
En el Reino Unido, los gobiernos locales han desarrollado varias iniciativas de e-participacin. El municipio del sudeste de Inglaterra, Milton Keynes, por ejemplo, ha desarrollado un importante sitio web gestionado por jvenes voluntarios. Adems, en 2011 el gobierno del Reino Unido puso en marcha la peticin electrnica con un enorme xito (ms de 14000 peticiones fueron aceptadas el primer ao) que permite que toda peticin efectuada desde la pgina web oficial de peticiones al Parlamento y el gobierno que est firmada por ms de 100000 ciudadanos britnicos o residentes en el Reino Unido en menos de seis meses sea automticamente objeto de un debate parlamentario.
En Espaa, slo la Comunidad Autnoma de Euskadi cuenta con legislacin electoral en materia de voto electrnico. Su proyecto Demotek es un novedoso sistema de voto electrnico que, respetando la forma actual de votacin, agiliza el recuento de las papeletas y la transmisin y comunicacin de los resultados electorales. A nivel local, se han llevado a cabo novedosas acciones en materia de participacin ciudadana en Catalua, Madrid y Andaluca.
En Italia, la Declaracin italiana de derechos de internet fue publicada por la Cmara de Diputados el 28 de julio de 2015, por vez primera en forma de declaracin de un parlamento de inspiracin constitucional y alcance internacional. La declaracin, de carcter no vinculante, pide al Gobierno y al Parlamento italianos que se comprometan con los principios enunciados en el proyecto a la hora de abordar proyectos legislativos en el mbito de internet.
E-Democracia: grandes posibilidades o riesgos potenciales?
El progreso tecnolgico debe favorecer a la humanidad. La digitalizacin puede y debe ser utilizada al servicio de una democracia ms transparente y participativa y que mejore la conexin entre poltica y ciudadana. Pero esta aspiracin no debe excluir los riesgos asociados a este nuevo tiempo tecnolgico. En particular, debemos tener en cuenta:
- La brecha digital: en muchos pases hay todava zonas sin las necesarias condiciones de acceso a la red y todas las sociedades muestran enormes capas de poblacin sin capacidad tcnica de uso (analfabetos digitales). Resulta fundamental evitar que un uso distinto de la tecnologa pueda crear desigualdades democrticas.
- El fraude electoral: los sistemas de votacin debern evitar todo tipo de irregularidades que perturben el fiel reflejo de la voluntad de los electores.
- Proteger la intimidad y los datos personales. Dado que la seguridad total de los datos es imposible, la privacidad es susceptible de verse socavada. Esta es una cuestin especialmente sensible en el mbito de las opiniones pblicas.
- Necesidad de contabilizar los procesos democrticos Los procedimientos democrticos implican generalmente un extenso debate y la conciliacin de los diferentes puntos de vista. No siempre la red es el lugar ideal para la deliberacin racional y la profundizacin de los argumentos. La actividad en lnea no siempre permite discernir entre opinin pblica y posiciones que parezcan mayoritarias por el papel de los usuarios ms activos de la red.
- Algunas experiencias han puesto de manifiesto una tendencia creciente hacia la utilizacin de la informacin y las redes por parte de intereses privados, lo que podra propiciar el que un inters particular se considerara errneamente un inters general, lo que pondra en entredicho la tica y la transparencia. Las solicitudes de expertos en TIC y grupos de inters de carcter sectorial no deben prevalecer sobre las necesidades de la sociedad en su conjunto.
Una forma posible de avanzar
Varias sugerencias y recomendaciones han sido formuladas por expertos, instituciones, gobiernos y el pblico en general: El ponente, tras un extenso debate con sus colegas, opina que las siguientes propuestas podran formar parte de su informe y presentarse tanto a escala europea como nacional:
- Dado que la revolucin digital ya es una realidad tangible e influir inevitablemente en la vida diaria de los ciudadanos, resulta aconsejable facilitar los recursos educativos y tcnicos para mejorar las competencias en materia de TIC, lo que redundar en ltima instancia en beneficio de la democracia.
- Fomentar la superacin de la brecha digital y el acceso generalizado a la tecnologa para todos los ciudadanos (e-inclusin) y propiciar una mayor seguridad en la utilizacin de internet, en particular en lo que se refiere a la seguridad de la informacin y los datos, la creacin de registros pblicos digitales seguros y la verificacin de las firmas digitales nicas para evitar interacciones fraudulentas mltiples.
- La tecnologa digital podra utilizarse para mejorar los procesos de consulta pblica y de evaluacin de impacto como una ayuda en el proceso decisorio para promover la gobernanza.
- Promover e impulsar mecanismos de participacin y de interaccin de los ciudadanos con las instituciones y los responsables pblicos que les representan. Las TIC deben permitir el acceso a la informacin, la transparencia, la escucha activa, el debate y, por tanto, podran contribuir a colmar la brecha entre el pblico y un proceso decisorio mejorado. Tambin deben facilitar la rendicin de cuentas, etc.
Fomentar la participacin activa de los representantes pblicos en los foros existentes con miras a impulsar el debate y el intercambio de puntos de vista y de propuestas con los ciudadanos.
- Intercambiar proyectos de buenas prcticas en materia de e-Democracia como medio para avanzar hacia una democracia ms participativa y deliberativa que responda a las demandas e intereses de la ciudadana.
- Crear redes de colaboracin con las universidades y los centros de estudio para fomentar la investigacin e implementacin de nuevas herramientas y canales de comunicacin y participacin.
- Promover la cooperacin a nivel europeo, especialmente en lo referente a la transparencia de las instituciones europeas y la participacin de los ciudadanos en la adopcin de decisiones democrticas.
- Ofrecer a los partidos polticos nuevos instrumentos de apertura y conexin con sus afiliados y simpatizantes.
Para concluir, me permito formular las siguientes preguntas abiertas: Ha de hacerse la e-Democracia ms madura, antes de evaluar su posible yuxtaposicin con unos procesos democrticos autnticos? Debe seguir considerndose un proceso participativo en curso y en fase de desarrollo?
Lo cierto es que estamos asistiendo a una revolucin digital que requiere una observacin constante y una atencin cuidadosa, en beneficio del ser humano.
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