Carlo Casini (PPE-DE). – (IT) Señora Presidenta, creo que debo explicar de manera más clara porqué no estoy de acuerdo y considero injusto que las enmiendas presentadas por el Grupo del Partido Popular Europeo (Demócratas Cristianos) y los Demócratas Europeos al informe de Gebhardt se rechazara porque la votación abordara una cuestión totalmente diferente.
Una cosa es decir que se puede elegir la ley de cualquier país del mundo, siempre que no viole los derechos humanos; y otra bien distinta decir que se puede elegir entre las leyes de los Estados miembros de la Unión Europea. Ambas cosas son diferentes, y, por lo tanto, creo que es injusto que las enmiendas sobre esta cuestión fuesen retiradas.
No obstante, apruebo —y espero que como el debate sobre esta regulación prosigue, se acepte mi argumento— los esfuerzos para crear un espacio jurídico europeo, con la armonización europea. No tiene sentido aplicar la ley de China o de cualquier Estado remoto del Pacífico, por ejemplo, en una cuestión tan delicada como las relaciones matrimoniales, cuando la necesidad apremiante es, en cambio, unir a los veintisiete países de la Unión.