Xabier Benito Ziluaga (GUE/NGL). – Señor presidente, lo que hemos vivido hoy en esta Cámara es un esperpento. Los propios diputados y diputadas a este Parlamento votando en contra de este Parlamento, votando en contra de la democracia. Han votado que esta Cámara y el resto de Parlamentos nacionales y locales pierdan su poder, pierdan su soberanía para dársela al negocio, para dársela a los lobbies.

¿Cómo? Con el CETA, un tratado de libre comercio que antepone el beneficio privado a las personas y al planeta, que creará su propia justicia y que herirá de muerte a las pymes y a los pequeños agricultores y ganaderos.

Populares, liberales, socialistas de pegatina que votaron a favor: la semana que viene se os llenará la boca diciendo que necesitamos más Europa, pero vuestro modelo de Europa es un precipicio y la gente no va a seguirles a su precipicio. Más de tres millones y medio de firmas, más de dos mil municipios declarados libres de CETA. Este tratado no verá la luz. La gente lo va a enterrar para siempre a su paso por los Parlamentos nacionales.