Xabier Benito Ziluaga, en nombre del Grupo GUE/NGL. – Señor presidente. Nos encontramos a las puertas del 60.º aniversario del Tratado de Roma y en la mayor crisis de este proyecto de Unión Europea. Eso sí, con un Libro Blanco bajo el brazo. Sería un desastre seguir cualquiera de las opciones del señor Juncker.

Sería un desastre, también, que el próximo presupuesto de la Unión Europea no saliese de la ambigüedad calculada y de las opciones-soluciones a medias. En el informe se habla de la necesidad de reforzar la identidad europea. Pero, ¿quién quiere sentirse parte de algo que deja a personas refugiadas muertas de frío en las fronteras, que privatiza los sectores públicos o ahoga a los países con deudas, mientras rescata a banqueros? La identidad europea se construye con políticas materiales que no dejen tiradas a las personas.

Y, por favor, dejen de hacer referencia a la brillante idea del PPE de regalar viajes a los jóvenes para que se sientan europeos. Es insultante. ¿De verdad creen ustedes que un joven puede irse de viaje cuando su familia no llega a fin de mes? Para esto los presupuestos son un instrumento fundamental: recaudar más recursos propios, con impuestos progresivos europeos y contribuciones nacionales equilibradas con la renta per cápita de cada país y con un plan serio de inversión pública europea, con criterios sociales y medioambientales y no con austeridad y despliegue militar, como estamos viendo.