Iniciativa emblemática de la Unión en el sector de la confección (debate)
Beatriz Becerra Basterrechea, en nombre del Grupo ALDE. – Señor presidente, señor comisario, acaban de cumplirse cuatro años del derrumbe del Rana Plaza en Bangladés: Murieron más de mil personas que fabricaban la ropa que llevamos cada día.
A todos nos gusta comprar ropa barata y bonita. El problema es que lo que es barato para nosotros, a otros les cuesta la vida.
Durante veinte años se han desarrollado directrices voluntarias para mejorar la situación del sector, el sector de la confección, y no han funcionado. La situación de millones de trabajadores sigue siendo indigna. Necesitamos requerimientos vinculantes para todas las empresas europeas y los terceros Estados.
Solo normas vinculantes, normas legalmente vinculantes pueden asegurar que todas las empresas —las multinacionales también— garanticen la protección de los derechos humanos, en línea con los Principios Rectores de las Naciones Unidas sobre las empresas y los derechos humanos. Y solo una regulación obligatoria garantizará que aquellas empresas que sí respetan los derechos humanos de sus trabajadores no tengan una desventaja competitiva respecto a las que no lo hacen. Nuestro trabajo es premiar a las empresas que se comportan de acuerdo con los estándares que la Unión Europea se ha comprometido a respetar.
Quiero decir algo a los diputados del Grupo popular y conservadores que se oponen a este informe: el Papa Francisco comparó las condiciones de trabajo de las víctimas de Bangladés con la esclavitud. Y la esclavitud no se derogó con medidas voluntarias. Sencillamente, se prohibió. Hagamos caso al papa Francisco en esto.