Juan Fernando López Aguilar (S&D). – Señor presidente, de nuevo enésimo debate en el Parlamento Europeo sobre la emergencia humanitaria en el Mediterráneo, solo que esta vez no estamos hablando de la tragedia, de ese balance de muertos del que se conmemoran ahora cinco años, de la gran mortandad en Lampedusa. No. Estamos hablando simplemente de cómo ayudar, de cómo apoyar a las autoridades locales y regionales, que están dando de sí en el primer frente de respuesta ante la ausencia, el fracaso de la Unión Europea y, sobre todo, ante la vergüenza del comportamiento de algunos Gobiernos de Estados miembros instalados en el modo pánico.

Por eso, tenemos la obligación de hablar de cómo establecer un capítulo en el marco financiero plurianual para ayudar a las corporaciones locales y regionales. De cómo coordinarlas, de cómo elegir las mejores prácticas entre esas autoridades locales. Como la del alcalde de Riace, infamemente encarcelado —y que merece la solidaridad de este Parlamento Europeo— exactamente por dar una respuesta humanitaria en un momento necesario.

Estamos hablando también de cómo ayudar a las corporaciones locales a mantener integración, educación, asistencia social, primera respuesta, incluso sanitaria, ante esta tragedia. Pero, sobre todo, estamos hablando de que esto pone de manifiesto que tomaremos medidas paliativas en tanto los Estados no decidan acatar el Derecho europeo que suscribieron en el Tratado de Lisboa, con una gestión integrada de las fronteras exteriores y con solidaridad y responsabilidad compartida en la atención a los inmigrantes y a los demandantes de asilo y refugio.

Pero lo que esto pone claramente de manifiesto es que las autoridades locales y regionales nos dicen que los ciudadanos van muy por delante de sus Gobiernos en la respuesta ante la emergencia humanitaria.