Pregunta parlamentaria - E-1922/2003Pregunta parlamentaria
E-1922/2003

Situación administrativa del embalse de Breña II

PREGUNTA ESCRITA E-1922/03
de María Izquierdo Rojo (PSE), Pedro Aparicio Sánchez (PSE), Juan Izquierdo Collado (PSE) y Fernando Pérez Royo (PSE)
a la Comisión

La cuenca del Guadalquivir padece un grave déficit hídrico estructural, con un enorme impacto negativo desde el punto de vista económico y social. La inseguridad en las dotaciones de agua para riego provoca pérdidas de inversiones en una región como la andaluza declarada objetivo 1 por la Unión Europea.

 

El embalse de Breña II no sólo es demandado por los agentes socioeconómicos relacionados con el sector agrícola, como son los regantes de la cuenca del Guadalquivir y las organizaciones profesionales agrarias (ASAJA, COAG y UPA), sino también por los sindicatos de los trabajadores (CC.OO. y UGT), consumidores (UCE-UCA), las Diputaciones Provinciales de la cuenca (Córdoba, Granada, Jaén y Sevilla), la Administración Autonómica Andaluza y la propia Administración del Estado Español, y también por el  Parlamento de Andalucía.

 

Y todo esto porque este embalse, junto con la actual política de modernización de regadíos y la mejora del uso y gestión de los escasos recursos hídricos disponibles, son las únicas medidas que harán posible solucionar el déficit hídrico que padece la cuenca del Guadalquivir.

 

En noviembre del 2001, el Gobierno Español,  remitió a la Comisión Europea de acuerdo con la Directiva del Consejo 92/43/CEE[1] relativa a la  conservación de hábitats naturales, el proyecto del embalse de Breña II y el proyecto de compensación y de medidas correctoras, así como la justificación de las razones de interés público de primer orden que hacen necesario este  embalse.

 

Como bien conoce la Comisión, el mencionado embalse no sólo cuenta con el apoyo y el visto bueno de las autoridades institucionales de carácter medioambiental del Gobierno de España y de la Administración Autonómica Andaluza, sino también con el  del Grupo Lince Ibérico, solo falta, por tanto, la aprobación de la Unión Europea.

 

Por todo lo expuesto y ante la lentitud con que se está llevando a cabo la resolución de este proceso,

 

¿Cuáles son las razones por las que la Comisión aún no ha dado el visto bueno definitivo a la ejecución de esta obra hidráulica de vital importancia para Andalucía? ¿Qué requisitos no han sido aún cumplidos por el Gobierno español? ¿Cuándo tiene previsto la Comisión Europea resolver definitivamente este asunto?

DO C 51 E de 26/02/2004