Propuesta de resolución - B6-0054/2009Propuesta de resolución
B6-0054/2009

PROPUESTA DE RESOLUCIÓN

12.1.2009

tras las declaraciones del Consejo y de la Comisión
presentada de conformidad con el artículo 103, apartado 2, del Reglamento
por Daniel Cohn-Bendit, Monica Frassoni, David Hammerstein, Hélène Flautre, Caroline Lucas, Margrete Auken, Jill Evans, Angelika Beer y Cem Özdemir
en nombre del Grupo Verts/ALE
sobre el conflicto en la Franja de Gaza

Véase también la propuesta de resolución común RC-B6-0051/2009

Procedimiento : 2009/2504(RSP)
Ciclo de vida en sesión
Ciclo relativo al documento :  
B6-0054/2009
Textos presentados :
B6-0054/2009
Textos aprobados :

B6‑0054/2009

Resolución del Parlamento Europeo sobre el conflicto en la Franja de Gaza

El Parlamento Europeo,

–  Vistas sus anteriores resoluciones sobre Oriente Próximo, en particular las de 16 de noviembre de 2006, sobre la situación en la Franja de Gaza, 12 de julio de 2007, sobre la situación en Oriente Próximo, 11 de octubre de 2007, sobre la situación humanitaria en Gaza, y 21 de febrero de 2008, sobre la situación en Gaza,

–  Vistas las Resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas 242 (1967), 338 (1973) y 1860 (8 de enero de 2009),

–  Vistos el Cuarto Convenio de Ginebra (1949) y los cinco principios del mismo,

–  Vista la Declaración de la Unión Europea, de 30 de diciembre de 2008, sobre la situación en Oriente Próximo,

–  Visto el artículo 103, apartado 2, de su Reglamento,

A.  Considerando que el 27 de diciembre de 2008, tras el final de la tregua de seis meses entre Israel y Hamás negociada el 18 de junio de 2008 por Egipto, el ejército israelí inició una ofensiva aérea, seguida de una invasión por tierra de la Franja de Gaza, en represalia por el lanzamiento de misiles por parte de militantes palestinos,

B.  Considerando que la tregua fue violada en numerosas ocasiones por ambas partes y que no desembocó en el levantamiento del bloqueo israelí de la Franja, según lo acordado por las partes, que una profunda crisis humanitaria afecta a toda la población de la Franja de Gaza y que la mejora de la situación en Cisjordania es limitada y no sustancial,

C.  Considerando que la ofensiva israelí ha causado hasta la fecha casi 1 000 muertos y 3 000 heridos, entre ellos una gran proporción de mujeres y niños, así como la destrucción de infraestructuras civiles, edificios, casas e incluso una escuela de las Naciones Unidas que acogía a familias refugiadas,

D.  Considerando que en la Declaración de Annapolis, de 27 de noviembre de 2007, israelíes y palestinos manifestaron su determinación de entablar de buena fe negociaciones bilaterales a fin de celebrar un tratado de paz que resolviera todas las cuestiones pendientes antes de finales de 2008 y de aplicar de inmediato sus obligaciones respectivas en virtud de la Hoja de Ruta, que incluyen la congelación de todas las actividades de colonización, la supresión de las restricciones a la circulación de mercancías y personas en los Territorios Ocupados y el fin de la violencia y el terrorismo,

1.  Condena enérgicamente las enormes y desproporcionadas ofensivas de las fuerzas aéreas y terrestres israelíes en una zona densamente poblada, que han causado un número cada vez mayor de víctimas entre la población civil y la destrucción generalizada de infraestructuras civiles, y pide a Israel, a este respecto, que respete las obligaciones que le incumben en virtud el Derecho internacional humanitario y en materia de derechos humanos y permita un acceso humanitario sin trabas a la zona de conflicto; condena, al mismo tiempo, el lanzamiento de misiles contra civiles israelíes por parte de Hamás;

2.  Reitera su opinión de que no puede existir una solución militar al conflicto entre Israel y Palestina, por lo que acoge favorablemente todas las acciones diplomáticas encaminadas a lograr una tregua sostenible basada en la interrupción del lanzamiento de misiles por parte de Hamás, el fin del contrabando de armas a través de los túneles y el fin del bloqueo israelí de la Franja de Gaza, junto con la apertura de las fronteras y un acuerdo nuevo y eficaz sobre la gestión de los pasos fronterizos;

3.  Apoya, en particular, la iniciativa franco-egipcia y pide al Consejo que haga cuanto esté en su mano para revitalizar el Cuarteto y facilitar las negociaciones entre todas las partes afectadas; acoge con satisfacción la resolución aprobada por el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, en la que se pide un alto el fuego inmediato, duradero y plenamente respetado que desemboque en la retirada total de las fuerzas israelíes de Gaza, así como la prestación y distribución sin cortapisas de asistencia humanitaria en toda Gaza, y deplora que ninguna de las dos partes se muestre dispuesta a respetar los términos de dicha resolución;

4.  Reafirma el derecho de Israel a defenderse, pero subraya que ese derecho debe ser proporcional a la amenaza recibida y debería ejercerse en el pleno respeto del Derecho humanitario y las obligaciones internacionales en virtud de los Convenios de Ginebra, que conceden una importancia fundamental al respeto y la protección de los civiles contra los efectos de las hostilidades, y recuerda a Israel, en particular, sus obligaciones como potencia ocupante con arreglo al Cuarto Convenio de Ginebra relativo a la protección debida a las personas civiles en tiempo de guerra; insta a los Estados miembros a no entregar armas a Israel en tanto no haya garantías de que esas armas no se utilicen en violación del Derecho internacional y de que Israel no utiliza armas prohibidas por el Derecho internacional, como los proyectiles de fósforo blanco;

5.  Expresa su profunda preocupación por el destino y la seguridad del millón y medio de palestinos atrapados en Gaza sin posibilidad alguna de abandonar la Franja, así como por la situación humanitaria de los palestinos que viven en Cisjordania, cuyas condiciones no han mejorado a pesar de la actitud cooperativa de la Autoridad Nacional Palestina; opina que una pausa de tres horas diarias en los bombardeos no basta para hacer frente a la catástrofe humanitaria actual, que sólo puede empezar a mejorar con un alto el fuego inmediato y duradero; recuerda que la crisis actual no ha hecho más que exacerbar la situación creada por el largo bloqueo de la Franja de Gaza impuesto por las autoridades israelíes desde 2007;

6.  Invita, por consiguiente, a ambas partes a poner fin a las hostilidades con objeto de permitir una asistencia humanitaria adecuada a la población civil, facilitar la evacuación de los heridos, restablecer los servicios de emergencia y las infraestructuras vitales y permitir a aquellos palestinos que lo deseen abandonar la zona de conflicto de forma segura y con la asistencia de los Estados vecinos;

7.  Insta, en particular, a las autoridades egipcias a que hagan cuanto esté en su mano para abrir el paso fronterizo de Rafah y permitan la salida de los refugiados y de la población civil y el suministro de ayuda humanitaria;

8.  Señala que una condición fundamental para un acuerdo estable y para la participación internacional en la crisis actual es un acuerdo interno entre todos los componentes de la sociedad palestina basado en el Acuerdo de la Meca de febrero de 2007;

9.  Señala que la acción militar israelí está destruyendo de forma irreversible el proceso de Annapolis y poniendo en peligro los escasos logros que se han conseguido, así como las esperanzas que puedan quedar de alcanzar una solución general negociada del conflicto a medio plazo; pide, por tanto, a la UE que adopte, sin más demora, una iniciativa firme con miras a convocar una conferencia internacional que cuente con la participación de todos los actores principales y tenga por objeto ultimar las propuestas de paz existentes, con especial referencia a la propuesta de la Liga Árabe, y a sentar las bases para un acuerdo exhaustivo basado en una solución que establezca dos Estados, a saber, el Estado de Israel, con unas fronteras seguras y reconocidas, y un Estado palestino viable, con capital en Jerusalén Oriental;

10.  Pide al Consejo que inicie los preparativos para el despliegue en la Franja de Gaza de una fuerza internacional de mantenimiento de la paz dirigida por la UE y que cuente con un mandato de las Naciones Unidas, y que también debería incluir contingentes de los países árabes y musulmanes;

11.  Pide al Consejo que se congele el proceso de fortalecimiento de las relaciones con Israel hasta que las partes accedan a la aplicación plena, completa y permanente de un alto el fuego e Israel permita el acceso humanitario sin trabas; reafirma al mismo tiempo que el fortalecimiento de las relaciones entre la UE e Israel debe estar firmemente supeditado al respeto de los derechos humanos y del Derecho internacional humanitario, al final de la crisis humanitaria en Gaza y en los Territorios Palestinos Ocupados, al logro de compromisos reales sobre un acuerdo de paz exhaustivo y a la aplicación plena del Acuerdo interino de asociación CE-OLP;

12.  Opina que los ataques israelíes contra Gaza son contrarios a lo dispuesto en el Acuerdo de Asociación UE-Israel, en particular a la cláusula de derechos humanos, que jurídicamente se considera un elemento esencial de dicho Acuerdo; subraya una vez más la necesidad de establecer un mecanismo claro para la aplicación de dicha cláusula;

13.  Lamenta la decisión de las autoridades israelíes de no autorizar la entrada de periodistas en la Franja de Gaza, y de permitir únicamente un pequeño número de convoyes humanitarios; pide que se conceda a los observadores internacionales un acceso ilimitado y sin trabas con objeto de permitir que se investiguen los crímenes perpetrados antes y durante la ofensiva militar; lamenta la decisión de las autoridades israelíes de detener y expulsar, el 15 de diciembre de 2008, a Richard Falk, el Enviado del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas para los Territorios Ocupados, que está investigando el trato dispensado a los palestinos por Israel;

14.  Manifiesta su profunda preocupación por las graves repercusiones en todo el mundo de la ofensiva israelí, que está fomentando el resentimiento mutuo entre todos los pueblos afectados, debilitando a los elementos moderados del mundo islámico y propagando un clima de violencia que conduce a una radicalización de los grupos extremistas y a un aumento de los actos de antisemitismo;

15.  Pide una liberación sustancial adicional de presos palestinos, y en especial la liberación de los miembros del Consejo Legislativo Palestino encarcelados, incluido Marwan Barguti; subraya que un acto semejante podría alentar a las partes a restablecer el diálogo;

16.  Encarga a su Presidente que transmita la presente Resolución al Consejo, a la Comisión, al Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común, a los Gobiernos y a los Parlamentos de los Estados miembros, al Secretario General de las Naciones Unidas, al Enviado Especial del Cuarteto a Oriente Próximo, al Presidente de la Autoridad Nacional Palestina, al Consejo Legislativo Palestino, al Gobierno de Israel y a la Knesset, así como al Gobierno y al Parlamento de Egipto.