INFORME sobre la protección de infraestructuras críticas de información – logros y próximas etapas: hacia la ciberseguridad global

16.5.2012 - (2011/2284(INI))

Comisión de Industria, Investigación y Energía
Ponente: Ivailo Kalfin

Procedimiento : 2011/2284(INI)
Ciclo de vida en sesión
Ciclo relativo al documento :  
A7-0167/2012
Textos presentados :
A7-0167/2012
Textos aprobados :

PROPUESTA DE RESOLUCIÓN DEL PARLAMENTO EUROPEO

sobre la protección de infraestructuras críticas de información – logros y próximas etapas: hacia la ciberseguridad global

(2011/2284(INI))

El Parlamento Europeo,

–   Vista su Resolución, de 5 de mayo de 2010, titulada «Una nueva agenda digital para Europa: 2015.eu»[1],

–   Vista su Resolución, de 15 de junio de 2010, titulada «La gobernanza de Internet: los próximos pasos»[2],

–   Vista su Resolución, de 6 de julio de 2011, titulada «Banda ancha europea: inversión en crecimiento impulsado por la tecnología digital»[3],

–   Visto el artículo 48 de su Reglamento,

–   Vistos el informe de la Comisión de Industria, Investigación y Energía, y la opinión de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior (A7-0167/2012),

A. Considerando que las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) son capaces de desplegar todo su potencial como factores de progreso de la economía y la sociedad, únicamente cuando los usuarios confían en su seguridad y resistencia, y cuando la legislación sobre cuestiones tales como la privacidad de los datos y los derechos de propiedad intelectual se aplica de forma efectiva en el entorno de Internet;

B.  Considerando que Internet y las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) tienen cada vez un mayor impacto en diversos aspectos de la vida de los ciudadanos y constituyen un factor crucial de la interacción social, el enriquecimiento cultural y el crecimiento económico;

C. Considerando que la seguridad de las TIC y de Internet es un concepto muy amplio que incide a nivel mundial en aspectos económicos, sociales, tecnológicos y militares, que exigen una clara definición y diferenciación de las responsabilidades, así como un sólido mecanismo de cooperación internacional;

D. Considerando que el objetivo de la iniciativa emblemática Agenda Digital de la UE es impulsar la competitividad de Europa mediante el fortalecimiento de las TIC, así como crear las condiciones para un crecimiento elevado y sólido y la creación de puestos de trabajo basados en la tecnología;

E.  Considerando que el sector privado sigue siendo el principal inversor, propietario y gestor de productos, servicios, aplicaciones e infraestructuras para la seguridad de la información y ha invertido miles de millones de euros en la última década; que esta participación debe reforzarse mediante estrategias políticas adecuadas para promover la resistencia de las infraestructuras que son propiedad, o están operadas, por el sector público, el privado o una combinación de ambos;

F.  Considerando que el desarrollo de un alto nivel de seguridad y resistencia para redes, servicios y tecnologías de TIC aumentaría la competitividad de la economía de la UE, al mejorar tanto la evaluación como la gestión de los ciberriesgos, y al ofrecer a la economía de la UE en general infraestructuras de información más sólidas para promover la innovación y el crecimiento, generando nuevas oportunidades para que las empresas sean más productivas;

G. Considerando que los datos sobre delitos cibernéticos de las autoridades policiales y judiciales, que incluyen los ciberataques, pero también otros tipos de delitos cometidos en línea, indican que se ha producido un fuerte aumento en varios países europeos; que, no obstante, los datos estadísticamente representativos sobre ciberataques, tanto de las autoridades policiales y judiciales como del CERT (equipo de respuesta a emergencias informáticas), siguen siendo escasos y deberían recogerse mejor en el futuro, para permitir que las autoridades policiales y judiciales den una respuesta más firme en toda la UE así como respuestas legislativas mejor fundadas a las amenazas cibernéticas en constante evolución;

H. Considerando que un nivel adecuado de seguridad de la información resulta crucial para que los servicios basados en Internet se expandan con solidez;

I.   Considerando que los ciberincidentes, las perturbaciones y los ataques que se han producido recientemente contra las infraestructuras de información de las instituciones, la industria y los Estados miembros de la UE ponen de manifiesto la necesidad de establecer un sistema sólido, innovador y eficaz de protección de infraestructuras críticas de información (PICI), basado en una plena cooperación internacional y en estándares mínimos de resistencia acordados por los Estados miembros;

J.   Considerando que el rápido desarrollo de nuevas avenidas de las TIC, como la computación en nube, exige que se preste mayor atención a la seguridad a fin de que sea posible obtener el máximo beneficio de los avances tecnológicos;

K. Considerando que el Parlamento Europeo ha insistido en repetidas ocasiones en la aplicación de altos niveles de privacidad y protección de los datos, en la neutralidad de las redes y en la protección de los derechos de propiedad intelectual;

I. Medidas para reforzar la protección de infraestructuras críticas a nivel nacional y de la Unión

1.  Celebra la aplicación por parte de los Estados miembros del Programa europeo para la Protección de Infraestructuras Críticas de Información (PICI), incluyendo la creación de la Red de información sobre Alertas en Infraestructuras Críticas (CIWIN);

2.  Considera que los esfuerzos llevados a cabo en el marco del PICI no solo aumentarán la seguridad general de los ciudadanos, sino que también mejorarán su percepción de la seguridad y su confianza en las medidas adoptadas por el Gobierno para protegerlos;

3.  Reconoce que la Comisión está estudiando la posibilidad de revisar la Directiva 2008/114/CE del Consejo[4], y pide que se presenten pruebas de la eficacia y las repercusiones de esta Directiva antes de seguir adelante; pide que se examine la posibilidad de ampliar su ámbito de aplicación, en concreto incluyendo al sector de las TIC y los servicios financieros; pide, además, que se preste atención a sectores como la salud, la alimentación y los sistemas de suministro de agua, la investigación nuclear y la industria, cuando no estén cubiertos por disposiciones específicas; opina que estos sectores también deberían beneficiarse del planteamiento intersectorial adoptado en la CIWIN, consistente en una cooperación, un sistema de alerta y el intercambio de mejores prácticas;

4.  Subraya la importancia de establecer y asegurar la integración duradera de la investigación europea a fin de mantener y reforzar la excelencia europea en el ámbito de la protección de las infraestructuras críticas de información;

5.  Pide, en vista de la naturaleza interconectada y altamente interdependiente, sensible, estratégica y vulnerable de las infraestructuras críticas de información nacionales y europeas, una actualización regular de los estándares mínimos de resistencia de preparación y respuesta frente a cualquier interrupción, incidente, intento de destrucción o ataque, como los resultantes de una infraestructura que no sea lo suficientemente robusta o de una seguridad insuficiente de las terminales;

6.  Destaca la importancia de las normas y protocolos de seguridad de la información y acoge con satisfacción el mandato concedido en 2011 al CEN, al CENELEC y al ETSI para que elaboren normas de seguridad;

7.  Espera que los propietarios y operadores de infraestructuras críticas de información permitan y, de ser necesario, presten asistencia a los usuarios para utilizar los medios adecuados para protegerse de ataques maliciosos o perturbaciones, mediante una supervisión tanto humana como automatizada;

8.  Apoya la cooperación entre las partes interesadas, tanto públicas como privadas, a nivel de la Unión, y alienta sus esfuerzos para desarrollar y aplicar normas de seguridad y resistencia para las infraestructuras críticas de información civiles (públicas, privadas o público-privadas), nacionales y europeas;

9.  Resalta la importancia que revisten los ejercicios paneuropeos de preparación para incidentes a gran escala de seguridad de las redes, y el establecimiento de un único conjunto de normas relativo a la evaluación de amenazas;

10. Pide a la Comisión que evalúe, en cooperación con los Estados miembros, la aplicación del plan de acción de PICI; pide a los Estados miembros que creen CERT nacionales o gubernamentales eficaces, desarrollen estrategias nacionales de ciberseguridad, organicen periódicamente ejercicios nacionales y paneuropeos para hacer frente a ciberincidentes, elaboren planes nacionales de contingencia para ciberincidentes y contribuyan al desarrollo de un plan europeo de contingencia para ciberincidentes antes de que finalice 2012;

11. Recomienda la creación de planes de seguridad por parte de los operadores o medidas equivalentes para todas las infraestructuras críticas de información europeas, así como el nombramiento de responsables de enlace para la seguridad;

12. Acoge con beneplácito la actual revisión de la Decisión marco 2005/222/JAI del Consejo[5] relativa a los ataques de los que son objeto los sistemas de información; señala que es necesario coordinar los esfuerzos de la UE para luchar contra los ciberataques a gran escala, mediante la inclusión de las competencias de la ENISA, los CERT de los Estados miembros y el futuro CERT europeo;

13. Considera que la ENISA puede desempeñar un papel clave a escala europea en lo relativo a la protección de las infraestructuras críticas, ofreciendo peritajes de orden técnico a los Estados miembros y a las instituciones y organismos de la Unión Europea, así como mediante informes y análisis sobre la seguridad de los sistemas de información a escala europea y mundial;

II. Otras actividades de la UE para reforzar la seguridad en Internet

14. Insta a la Agencia Europea de Seguridad de las Redes y de la Información, ENISA, a que coordine y celebre anualmente el mes de concienciación sobre seguridad en Internet a nivel de la UE con objeto de llamar la atención de los Estados miembros y los ciudadanos de la UE sobre las cuestiones relacionadas con la ciberseguridad;

15. Apoya a la ENISA, de acuerdo con los objetivos de la Agenda Digital, en el ejercicio de sus funciones en lo relacionado con la seguridad de las redes de información y, en particular, para que ofrezca orientación y asesoramiento a los Estados miembros para que sus CERT cumplan las capacidades básicas, y apoye el intercambio de buenas prácticas mediante el desarrollo de un entorno de confianza; pide a esta Agencia que consulte a las partes interesadas con vistas a definir medidas similares de ciberseguridad para los propietarios y operadores de redes e infraestructuras privadas, y que preste asistencia a la Comisión y a los Estados miembros para que contribuyan al desarrollo y la adopción de sistemas de certificación, normas de conducta y prácticas de cooperación en materia de seguridad de la información entre los CERT nacionales y europeos y los propietarios y operadores de infraestructura y, en aquellos casos en los que sea necesario, mediante la definición de requisitos mínimos comunes que sean neutros desde el punto de vista tecnológico;

16. Acoge con satisfacción la reciente propuesta de revisión del mandato de la ENISA, en particular la extensión de éste y la ampliación de las tareas de la agencia; considera que, aparte de prestar asistencia a los Estados miembros por medio de conocimientos técnicos y análisis, la ENISA debería poder gestionar una serie de tareas ejecutivas a nivel de la UE relacionadas con la prevención y detección de incidentes de seguridad en las redes y la información, en cooperación con sus homólogos estadounidenses, y mejorar la cooperación entre los Estados miembros; señala que, de conformidad con el Reglamento ENISA, también se podrían atribuir a la agencia responsabilidades adicionales relacionadas con la respuesta a los ataques en Internet, ya que se trata de algo que, sin lugar a dudas, añade valor a los mecanismos nacionales de respuesta;

17. Acoge con beneplácito los resultados de los ejercicios paneuropeos de seguridad realizados en 2010 y 2011 en toda la Unión y supervisados por la ENISA, cuyo objetivo era ayudar a los Estados miembros a diseñar, mantener y ensayar un plan de contingencia paneuropeo; pide a la ENISA que mantenga estos ejercicios en su plan de trabajo y que involucre progresivamente a los operadores privados oportunos, según proceda, a fin de aumentar las capacidades generales europeas de seguridad en Internet; espera su expansión a nivel internacional con socios que persigan los mismos objetivos;

18. Pide a los Estados miembros que elaboren planes de contingencia nacionales en materia de ciberincidentes y que incluyan elementos clave como puntos de contacto pertinentes y disposiciones en materia de asistencia, contención y reparación en caso de ciberataques o perturbaciones de alcance regional, nacional o transfronterizo; señala que los Estados miembros también deberían establecer mecanismos y estructuras de coordinación apropiados en el plano nacional, que contribuirían a garantizar una mejor coordinación entre las autoridades nacionales competentes y a dotar de una mayor coherencia a sus acciones;

19. Sugiere que la Comisión proponga medidas vinculantes a través del plan de contingencia contra ciberincidentes de la UE para coordinar mejor a escala de la UE las funciones técnicas y de dirección entre los CERT nacionales o gubernamentales;

20. Pide a la Comisión y a los Estados miembros que adopten las medidas necesarias a fin de proteger las infraestructuras críticas frente a los ciberataques, y que prevean maneras de cerrar herméticamente el acceso a una infraestructura crítica si un ciberataque plantea una grave amenaza para su buen funcionamiento;

21. Espera que se realice plenamente el CERT de la UE, que será un factor clave para la prevención, detección, respuesta y recuperación de ciberataques mal intencionados dirigidos contra las instituciones de la UE;

22. Recomienda que la Comisión proponga medidas vinculantes destinadas a imponer estándares mínimos sobre seguridad y resistencia y a mejorar la coordinación entre los equipos de respuesta ante emergencias informáticas (CERT) nacionales;

23. Pide a los Estados miembros y a las instituciones de la UE que velen por la existencia de CERT eficaces, que cuenten con las capacidades mínimas de seguridad y resistencia basadas en las buenas prácticas acordadas; señala que los CERT nacionales deberían formar parte de una red eficaz en la que se intercambie información pertinente de acuerdo con las normas de confidencialidad necesarias; pide la creación de un servicio permanente de PICI en cada Estado miembro, así como el establecimiento de un protocolo europeo de emergencia para su aplicación entre los puntos de contacto nacionales;

24. Subraya que el fomento de la confianza y la promoción de la cooperación entre los Estados miembros son cruciales para proteger los datos y las redes e infraestructuras nacionales; pide a la Comisión que proponga un procedimiento común para la identificación y designación de un enfoque común para hacer frente a las amenazas transfronterizas de TIC, y espera que los Estados miembros faciliten a la Comisión información genérica sobre los riesgos y las amenazas para sus infraestructuras críticas de información, así como sus aspectos vulnerables;

25. Celebra la iniciativa de la Comisión de desarrollar un sistema europeo de intercambio de información y alerta (EISAS) para 2013;

26. Acoge con satisfacción las diversas consultas a las partes interesadas en materia de seguridad en Internet y PICI puestas en marcha por la Comisión, como la Asociación público-privada europea de resistencia; reconoce la participación y el compromiso, ya importantes, de los proveedores de TIC en dichos esfuerzos, e insta a la Comisión a que realice nuevos esfuerzos para fomentar que el mundo académico y las asociaciones de usuarios de las TIC desempeñen un papel más activo, así como para promover un diálogo constructivo con múltiples partes interesadas sobre cuestiones de ciberseguridad; apoya el desarrollo de la Asamblea Digital como marco para la gobernanza de la PICI;

27. Celebra el trabajo realizado hasta la fecha por el Foro Europeo de Estados miembros en lo referente al establecimiento de criterios específicos para el sector destinados a identificar las infraestructuras críticas europeas, concentrándose en las comunicaciones fijas y móviles, así como para debatir las directrices y principios de la UE en materia de resistencia y estabilidad de Internet; desea que continúe la constante búsqueda de consenso entre los Estados miembros, y en este contexto invita al Foro a que complemente su enfoque actual centrado en los recursos físicos con esfuerzos para incluir igualmente las infraestructuras lógicas que adquirirán cada vez más importancia para la eficacia de la PICI a medida que se desarrollen las tecnologías de virtualización y computación en nube;

28. Propone que la Comisión ponga en marcha una iniciativa pública paneuropea en materia de educación, destinada a educar y sensibilizar a los usuarios finales, tanto privados como empresariales, sobre las posibles amenazas en Internet y los dispositivos fijos y móviles de TIC a todo lo largo de la cadena de servicio, así como a promover conductas personales más seguras en línea; recuerda a este respecto los riesgos que presentan los equipos y software informáticos desfasados;

29. Pide a los Estados miembros que refuercen, con la ayuda de la Comisión, los programas de formación y educación sobre seguridad de la información dirigidos a las autoridades policiales y judiciales nacionales y a las agencias de la UE competentes;

30. Apoya la creación de un plan de estudios de la UE para expertos académicos en el ámbito de la seguridad de la información, pues tendría efectos positivos en los conocimientos técnicos y la preparación de la UE ante un ciberespacio en constante evolución y las amenazas de que puede ser objeto;

31. Aboga por el fomento de la educación en ciberseguridad (prácticas de postgrado, cursos universitarios, talleres, formación de estudiantes, etc.) y ejercicios de formación especializada en materia de PICI;

32. Pide a la Comisión que proponga, para finales de 2012, una estrategia integral de seguridad en Internet para la Unión, basada en una terminología clara; opina que la estrategia de seguridad en Internet debería estar orientada a la creación de un ciberespacio, respaldado por una infraestructura resistente y segura y normas abiertas, que favorezca la innovación y la prosperidad a través del libre flujo de información y garantice al mismo tiempo una sólida protección de la privacidad así como otras libertades civiles; mantiene que la estrategia debería detallar los principios, los objetivos, los métodos, los instrumentos y las políticas, tanto interiores como exteriores, necesarios para racionalizar los esfuerzos realizados en el plano nacional y de la UE, y para establecer estándares mínimos de resistencia entre los Estados miembros, con el objetivo de garantizar un servicio seguro, constante, sólido y resistente, ya sea en relación con las infraestructuras críticas o con el uso de Internet en general;

33. Destaca que la próxima «Estrategia de Seguridad en Internet» de la Comisión debería tomar como centro de referencia la labor en materia de CIIP y adoptar un enfoque global y sistemático de la ciberseguridad que incluya tanto medidas proactivas, por ejemplo, la introducción de pautas mínimas para las medidas de seguridad o la formación de los usuarios particulares, las empresas y las instituciones públicas, como reactivas, por ejemplo, sanciones penales, civiles y administrativas;

34. Insta a la Comisión a que proponga un mecanismo sólido para coordinar la aplicación y la actualización periódica de la estrategia de seguridad en Internet; opina que este mecanismo debería contar con el respaldo de recursos administrativos, técnicos y financieros suficientes, y tener competencias para facilitar la elaboración de las posiciones de la UE sobre cuestiones referentes a la seguridad en Internet en las relaciones con las partes interesadas tanto internas como internacionales;

35. Pide a la Comisión que proponga un marco de la UE para la notificación de las violaciones de seguridad en sectores fundamentales como la energía, el transporte y el suministro de agua y alimentos, así como en las TIC y los servicios financieros, con vistas a informar a los Estados miembros y a los usuarios de incidentes, ataques y perturbaciones de carácter cibernético;

36. Insta a la Comisión a que mejore la disponibilidad de datos estadísticamente representativos sobre los costes de los ciberataques en la UE, los Estados miembros y la industria, en particular en el sector de los servicios financieros y de las TIC, mediante la mejora de las capacidades de recopilación de datos del futuro Centro Europeo contra la Ciberdelincuencia, cuya creación se prevé en 2013, de los CERT y de otras iniciativas de la Comisión, como el sistema europeo de intercambio de información y alerta, a fin de garantizar una transmisión y un intercambio de datos sistemáticos sobre ciberataques y otras formas de ciberdelincuencia que afecten a la industria europea y a los Estados miembros, así como para reforzar la observancia de la ley;

37. Aboga por una estrecha relación e interacción entre los sectores privados nacionales y la ENISA para la interfaz del CERT nacional/gubernamental con el desarrollo del Sistema Europeo de Intercambio de Información y Alerta (EISAS);

38. Señala que el principal motor del desarrollo y uso de tecnologías diseñadas para aumentar la seguridad en Internet es el sector de las TIC; recuerda que las políticas de la UE deben evitar ser un obstáculo para el crecimiento de la economía europea de Internet e incluir los incentivos necesarios para explotar plenamente el potencial de empresas y asociaciones público-privadas; recomienda que se estudien otros incentivos para que el sector desarrolle planes de seguridad más sólidos para operadores de conformidad con la Directiva 2008/114/CE;

39. Pide a la Comisión que presente una propuesta legislativa para la ulterior tipificación de los ciberataques (es decir, spear-phishing, fraude en línea, etc.);

III. Cooperación internacional

40. Recuerda que la cooperación internacional es el instrumento central para la introducción de unas medidas efectivas de ciberseguridad; reconoce que, en estos momentos, la UE no participa de forma activa y constante en los diálogos y procesos de cooperación internacional en materia de ciberseguridad; pide a la Comisión y al Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) que inicien un diálogo constructivo con todos los países con ideas afines, y ello con vistas a desarrollar un entendimiento común y políticas orientadas a aumentar la resistencia de Internet y de las infraestructuras fundamentales; mantiene que, al mismo tiempo, la UE debería incluir las cuestiones de seguridad en Internet, de forma permanente, en el ámbito de aplicación de sus relaciones exteriores, entre otras cosas a la hora de diseñar diversos instrumentos de financiación o celebrar acuerdos internacionales que contemplen el intercambio y almacenamiento de datos sensibles;

41. Toma nota de los positivos logros del Convenio del Consejo de Europa sobre la ciberdelincuencia celebrado en Budapest en 2001; señala, no obstante, que, aunque alienta a más países a que firmen y ratifiquen este Convenio, el SEAE debería celebrar también acuerdos bilaterales y multilaterales sobre seguridad y resistencia en Internet con socios internacionales que persigan los mismos objetivos;

42. Señala que las innumerables actividades en curso llevadas a cabo por diferentes instituciones, organismos y agencias internacionales y de la UE, así como por los Estados miembros, requieren coordinación a fin de evitar la duplicación, para lo cual cabe considerar la designación de un funcionario responsable de la coordinación, posiblemente a través del nombramiento de un coordinador de ciberseguridad de la UE;

43. Subraya la importancia de un diálogo estructurado entre los principales actores y legisladores de la UE y los EE UU que intervienen en la CIIP intercontinental, para llegar a un entendimiento, una interpretación y una posición comunes respecto del marco jurídico y de gestión;

44. Acoge con satisfacción la creación, en la Cumbre UE-EE.UU. de noviembre de 2010, del Grupo de trabajo UE-EE.UU. sobre ciberseguridad y ciberdelincuencia, y respalda sus esfuerzos para incluir temas relacionados con la seguridad en Internet en el diálogo político transatlántico; celebra la elaboración conjunta por parte de la Comisión y el Gobierno de los Estados Unidos, bajo la égida del Grupo de trabajo UE-EE.UU., de un programa común y una hoja de ruta para realizar ciberejercicios transcontinentales conjuntos o sincronizados en 2012 y 2013;

45. Sugiere el establecimiento de un diálogo estructurado entre los legisladores de la UE y los Estados Unidos, a fin de debatir cuestiones relacionadas con Internet como parte de una búsqueda de un entendimiento, una interpretación y unas posiciones comunes;

46. Insta al SEAE y a la Comisión, en base del trabajo realizado por el Foro Europeo de Estados miembros, a que aseguren una posición activa dentro de los correspondientes foros internacionales, entre otras cosas mediante la coordinación de las posiciones de los Estados miembros, con vistas a promover los principales valores, objetivos y políticas de la UE en materia de seguridad y resistencia en Internet; señala que estos foros incluyen la OTAN, las Naciones Unidas (en particular a través de la Unión Internacional de Telecomunicaciones y el Foro para la Gobernanza de Internet), la Corporación de Asignación de Nombres y Números de Internet, la Autoridad de Número Asignado por Internet, la OSCE, la OCDE y el Banco Mundial;

47. Insta a la Comisión y a la ENISA a que participen en los principales diálogos entre las partes interesadas para definir las normas técnicas y legales del ciberespacio a nivel internacional;

48. Encarga a su Presidente que transmita la presente Resolución al Consejo y a la Comisión.

  • [1]  DO C 81 E de 15.3.2011, p. 45.
  • [2]  DO C 236 E de 12.8.2011, p. 33.
  • [3]  Textos aprobados P7_TA(2011)0322.
  • [4]  DO L 345 de 23.12.2008, p. 75.
  • [5]  DO L 69 de 16.3.2005, p. 67.

EXPOSICIÓN DE MOTIVOS

El papel de la tecnología ha adquirido una importancia creciente en la vida cotidiana en todos sus aspectos, desde la comunicación hasta las finanzas y la banca, desde el transporte hasta la energía, desde la cultura y el entretenimiento hasta la salud.

En la actualidad, con el creciente uso de Internet y de las tecnologías informáticas, la seguridad de Internet supone una de las máximas prioridades políticas de la Unión Europea y del resto del mundo. La Estrategia UE 2020, lanzada en 2010, incluía la Agenda Digital de la UE como política estrella y establecía ambiciosos objetivos para el desarrollo tecnológico de la Unión Europea. El creciente uso y despliegue de innovadoras tecnologías TIC, tales como las redes celulares y de Internet fijas y móviles rápidas y ultrarrápidas y redes inteligentes, pero también servicios de Internet tales como la computación en nube y la Internet de las cosas, todos dependen de un aspecto simple pero crucial: la seguridad, la resistencia y la confianza.

En diciembre de 2006, la Comisión adoptó la Comunicación sobre un Programa Europeo para la Protección de Infraestructuras Críticas (PEPIC), que establece un marco general para las actividades de protección de las infraestructuras críticas a nivel de la UE. Dos años más tarde, el Consejo aprobó la Directiva 2008/114/CE sobre la identificación y designación de infraestructuras críticas europeas y la evaluación de la necesidad de mejorar su protección. En su primera fase, la Directiva se concentraba en los sectores de la energía y el transporte, tratando exclusivamente la cuestión de las infraestructuras cuya interrupción afectaría a dos o más Estados miembros de la UE.

La Directiva 2008/114/CE identificó el sector de las TIC como prioritario de cara al futuro, aunque no lo clasificó como una infraestructura crítica. No obstante, desde 2005 la Comisión ha puesto de manifiesto la necesidad de coordinar esfuerzos para generar confianza en las comunicaciones electrónicas[1]. A tal efecto, en 2006 se aprobó una estrategia para una sociedad de la información segura[2] , cuyos elementos principales se vieron respaldados en la Resolución del Consejo 2007/C 68/01.

En 2009 la Comisión adoptó una Comunicación sobre «Proteger Europa de ciberataques e interrupciones a gran escala: aumentar la preparación, seguridad y resistencia»[3]. Con esta Comunicación, la Comisión creó el «plan de acción PICI», con el objetivo de estimular y respaldar la seguridad de las infraestructuras de información críticas, tanto a nivel nacional como de la UE. El plan define las funciones específicas de la Comisión, la ENISA, los Estados miembros y el sector. El tema del aumento de la seguridad y la resistencia de las infraestructuras TIC se abordó también con mayor intensidad en la Agenda Digital para Europa[4] y las conclusiones del Consejo relacionadas[5], en la Directiva propuesta sobre los ataques contra los sistemas de la información[6], y también en la Propuesta de la Comisión relativa a un nuevo mandato para una ENISA[7] reforzada y modernizada.

En marzo de 2011, la Comisión publicó una Comunicación sobre la PICI: «logros y próximas etapas: hacia la ciberseguridad global»[8]. En ese documento la Comisión evalúa los resultados de la aplicación del plan de acción PICI desde 2009 y describe los siguientes pasos que se deben dar, concentrándose en la cooperación internacional más allá de las fronteras de la UE.

Todos estos acontecimientos en un período de pocos años, si bien no agotan los esfuerzos por aumentar la seguridad del ciberespacio en la Unión, ponen de manifiesto la importancia del tema de la seguridad en Internet. Resulta evidente que Internet es una infraestructura crítica y que la interrupción de Internet podría conllevar importantes pérdidas y riesgos para la seguridad, afectando a un gran número de empresas y ciudadanos europeos. Además, el rápido avance de la tecnología exige que la prevención de los ataques en Internet, las reacciones correctoras y la resistencia de la red mundial se basen en un marco a largo plazo, innovador, flexible, reactivo e integral. Este marco debe garantizar una interacción eficaz entre los gobiernos, las empresas, los individuos y todas las demás partes interesadas. Por último, aunque no menos importante, el aumento de la resistencia de Internet solamente resulta posible cuando existe un sistema eficiente de cooperación internacional y unas normas internacionales.

  • [1]  COM(2005) 229.
  • [2]  COM(2006) 251.
  • [3]  COM(2009) 149.
  • [4]  COM(2010) 245.
  • [5]  Conclusiones del Consejo de 31 de mayo de 2010.
  • [6]  COM(2010) 517.
  • [7]  COM(2010) 521.
  • [8]  COM(2011) 163 final.

OPINIÓN de la Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior (22.3.2012)

para la Comisión de Industria, Investigación y Energía

sobre la protección de infraestructuras críticas de información. Logros y próximas etapas: hacia la ciberseguridad global
(2011/2284(INI))

Ponente: Ágnes Hankiss

SUGERENCIAS

La Comisión de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior pide a la Comisión de Industria, Investigación y Energía, competente para el fondo, que incorpore las siguientes sugerencias en la propuesta de resolución que apruebe:

1.  Considera que la protección de infraestructuras críticas de información requiere un enfoque interdisciplinario que tiene que incluir los aspectos importantes de las libertades civiles, la justicia y los asuntos de interior, así como la seguridad interna, la protección de los datos personales y el derecho a la confidencialidad y a la vida privada, mejorando la seguridad en observancia de los derechos fundamentales;

2.  Recuerda que la protección de infraestructuras críticas de información está incluida en la Estrategia de Seguridad Interior de la UE con vistas a aumentar los niveles de seguridad para los ciudadanos y las empresas en el ciberespacio;

3.  

asimismo, subraya la necesidad de crear cuanto antes a escala europea una Red de información sobre alertas en infraestructuras críticas (CIWIN); insiste en que, dada la fuerte dependencia de instituciones públicas, empresas y hogares de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), es preciso modificar la Directiva 2008/114/CE del Consejo para que reconozca también las TIC como un sector crítico;

4.  Pide a los Estados miembros que desarrollen una estrategia nacional y aseguren un sólido entorno político y normativo, procedimientos exhaustivos de gestión del riesgo y medidas y mecanismos de preparación adecuados; insta a los Estados miembros que no hayan creado a nivel nacional un Equipo de Respuesta ante Emergencias Informáticas (CERT) a que lo creen a su debido tiempo, con la asistencia de la Agencia Europea de Seguridad de las Redes y de la Información (ENISA), en caso necesario;

5.  Estima que las bases de datos de gran magnitud que gestionen datos personales sensibles, como los de la UE, los de los Gobiernos de los Estados miembros y las instituciones financieras y sanitarias, deben considerarse como parte de las infraestructuras críticas de información, y que la protección de dichos datos debe garantizarse aplicando las más altas normas de seguridad;

6.  Pide a la Comisión y a los Estados miembros que adopten las medidas necesarias a fin de proteger las infraestructuras críticas frente a los ciberataques, y que dispongan medios para cerrar el acceso a una infraestructura crítica si un ciberataque compromete gravemente su buen funcionamiento;

7.  Resalta la importancia que revisten los ejercicios paneuropeos de preparación para incidentes a gran escala de seguridad de las redes, y el establecimiento de un único conjunto de normas relativo a la evaluación de amenazas;

8.  Considera que ENISA puede desempeñar un papel clave a escala europea en lo relativo a la protección de las infraestructuras de información críticas, ofreciendo peritajes de orden técnico a los Estados miembros y a las instituciones y organismos de la Unión Europea, así como informes y análisis sobre la situación de la seguridad de los sistemas informáticos a escala europea y mundial;

9.  Cree que es indispensable la cooperación internacional más allá de la UE, ya que las ciberamenazas tienen una naturaleza global y requieren, por tanto, respuestas a nivel mundial, de conformidad con las disposiciones del Derecho internacional; subraya, asimismo, que todo acuerdo internacional que implique el intercambio de datos sensibles debe tomar en consideración la seguridad de la transferencia y del almacenamiento de estos datos;

10. Advierte de que la próxima «Estrategia de Seguridad en Internet» de la Comisión debería tomar como centro de referencia la labor de CIIP y adoptar un enfoque global y sistemático de la ciberseguridad que incluya tanto medidas proactivas (por ejemplo, introducir pautas mínimas para las medidas de seguridad o formar a los usuarios particulares, empresas e instituciones públicas) como reactivas (por ejemplo, sanciones penales, civiles y administrativas);

11. Cree que debe reforzarse y mejorarse la cooperación entre las autoridades judiciales y otras autoridades competentes en materia de prevención, lucha y sanción de los ataques directos contra los sistemas informáticos, incluidas la policía y otras autoridades responsables de la aplicación de la ley en los Estados miembros, así como agencias especializadas a escala europea como Eurojust, Europol y ENISA;

12. Resalta la importancia de una cooperación sólida entre el sector público y privado, ya que sus diferentes puntos fuertes deben contribuir, mediante su complementación mutua, a los esfuerzos realizados para proteger las infraestructuras y, por lo tanto, las vidas y la privacidad de los ciudadanos europeos; pide a la Comisión que establezca la asociación público-privada europea de resistencia, integrada por la labor de la Agencia Europea de Seguridad de las Redes y de la Información (ENISA) y la organización europea de CERT gubernamentales;

13. Señala que las innumerables actividades en curso llevadas a cabo por diferentes instituciones, organismos y agencias internacionales y de la UE, así como por los Estados miembros, requieren coordinación a fin de evitar la duplicación, para lo cual cabe considerar la designación de un funcionario responsable de la coordinación, posiblemente a través del nombramiento de un coordinador de ciberseguridad de la UE;

14. Considera que los esfuerzos por proteger las infraestructuras críticas de información no solo aumentarán la seguridad general de los ciudadanos, sino que también mejorarán su percepción de la seguridad y su confianza en las medidas adoptadas por el Gobierno para protegerlos;

15. Subraya la importancia de establecer y asegurar la integración duradera de la investigación europea a fin de mantener y reforzar la excelencia europea en el ámbito de la protección de las infraestructuras críticas de información;

16. Subraya la importancia de un plan de investigación activa en el campo de la ciberseguridad;

17. Aboga por el fomento de la educación en ciberseguridad (prácticas de postgrado, cursos universitarios, talleres, formación de estudiantes, etc.) y ejercicios de formación especializada en protección de las infraestructuras críticas de información;

18. Aboga por una estrecha relación e interacción entre los sectores privados nacionales y ENISA para la interfaz del CERT nacional/gubernamental con el desarrollo del Sistema Europeo de Intercambio de Información y Alerta (EISAS);

19. Subraya la importancia de una estrategia europea común de ciberseguridad y de articular un calendario para su definición en cuanto a actuaciones y recursos necesarios;

20. Subraya la importancia de un diálogo estructurado entre los principales actores y legisladores de la UE y los EE UU que intervienen en la CIIP intercontinental, para llegar a un entendimiento, interpretación y posición comunes respecto del marco jurídico y de gestión.

RESULTADO DE LA VOTACIÓN FINAL EN COMISIÓN

Fecha de aprobación

21.3.2012

 

 

 

Resultado de la votación final

+:

–:

0:

45

0

2

Miembros presentes en la votación final

Roberta Angelilli, Edit Bauer, Arkadiusz Tomasz Bratkowski, Philip Claeys, Carlos Coelho, Rosario Crocetta, Frank Engel, Cornelia Ernst, Tanja Fajon, Kinga Göncz, Nathalie Griesbeck, Sylvie Guillaume, Anna Hedh, Salvatore Iacolino, Lívia Járóka, Teresa Jiménez-Becerril Barrio, Juan Fernando López Aguilar, Monica Luisa Macovei, Svetoslav Hristov Malinov, Véronique Mathieu, Anthea McIntyre, Jan Mulder, Antigoni Papadopoulou, Judith Sargentini, Csaba Sógor, Renate Sommer, Rui Tavares, Kyriacos Triantaphyllides, Wim van de Camp, Renate Weber, Josef Weidenholzer, Cecilia Wikström

Suplente(s) presente(s) en la votación final

Vilija Blinkevičiūtė, Andrew Henry William Brons, Michael Cashman, Anna Maria Corazza Bildt, Ana Gomes, Nadja Hirsch, Stanimir Ilchev, Iliana Malinova Iotova, Franziska Keller, Wolfgang Kreissl-Dörfler, Mariya Nedelcheva, Hubert Pirker, Zuzana Roithová, Kārlis Šadurskis

Suplente(s) (art. 187, apdo. 2) presente(s) en la votación final

Luis de Grandes Pascual

RESULTADO DE LA VOTACIÓN FINAL EN COMISIÓN

Fecha de aprobación

8.5.2012

 

 

 

Resultado de la votación final

+:

–:

0:

51

7

0

Miembros presentes en la votación final

Amelia Andersdotter, Josefa Andrés Barea, Jean-Pierre Audy, Zigmantas Balčytis, Ivo Belet, Bendt Bendtsen, Jan Březina, Maria Da Graça Carvalho, Giles Chichester, Jürgen Creutzmann, Pilar del Castillo Vera, Dimitrios Droutsas, Adam Gierek, Norbert Glante, Robert Goebbels, András Gyürk, Fiona Hall, Edit Herczog, Kent Johansson, Romana Jordan, Krišjānis Kariņš, Lena Kolarska-Bobińska, Béla Kovács, Philippe Lamberts, Judith A. Merkies, Angelika Niebler, Jaroslav Paška, Aldo Patriciello, Vittorio Prodi, Miloslav Ransdorf, Herbert Reul, Michèle Rivasi, Paul Rübig, Salvador Sedó i Alabart, Francisco Sosa Wagner, Konrad Szymański, Britta Thomsen, Evžen Tošenovský, Ioannis A. Tsoukalas, Claude Turmes, Marita Ulvskog, Vladimir Urutchev, Kathleen Van Brempt, Alejo Vidal-Quadras, Henri Weber

Suplente(s) presente(s) en la votación final

Ioan Enciu, Françoise Grossetête, Takis Hadjigeorgiou, Roger Helmer, Jolanta Emilia Hibner, Bernd Lange, Werner Langen, Zofija Mazej Kukovič, Silvia-Adriana Ţicău, Inês Cristina Zuber

Suplente(s) (art. 187, apdo. 2) presente(s) en la votación final

Anne E. Jensen, Nicole Kiil-Nielsen, Norica Nicolai