PROPUESTA DE RESOLUCIÓN sobre el empeoramiento de la crisis democrática en Georgia tras las recientes elecciones parlamentarias y el presunto fraude electoral
22.11.2024 - (2024/2933(RSP))
presentada de conformidad con el artículo 136, apartado 2, del Reglamento interno
Adam Bielan, Rihards Kols, Mariusz Kamiński, Małgorzata Gosiewska, Jadwiga Wiśniewska, Sebastian Tynkkynen, Michał Dworczyk, Assita Kanko, Reinis Pozņaks, Alexandr Vondra, Roberts Zīle, Joachim Stanisław Brudziński
en nombre del Grupo ECR
Véase también la propuesta de resolución común RC-B10-0179/2024
B10‑0184/2024
Resolución del Parlamento Europeo sobre el empeoramiento de la crisis democrática en Georgia tras las recientes elecciones parlamentarias y el presunto fraude electoral
El Parlamento Europeo,
– Vistos sus anteriores informes y resoluciones sobre Georgia, en particular su Resolución, de 25 de abril de 2024, sobre los intentos de reintroducir una ley sobre agentes extranjeros en Georgia y sus restricciones sobre la sociedad civil[1],
– Vista la Decisión del Consejo Europeo, de diciembre de 2023, de conceder a Georgia el estatuto de país candidato a la Unión Europea,
– Vistas las recomendaciones del documento de trabajo de los servicios de la Comisión, de 8 de noviembre de 2023, titulado «Georgia 2023 Report» (Informe de 2023 sobre Georgia) (SWD(2022)0697),
– Vistos los principios y normas internacionales en materia de elecciones democráticas que garantizan procesos libres, justos y transparentes, que se espera que Georgia respete,
– Visto el artículo 136, apartado 2, de su Reglamento interno,
A. Considerando que, el 26 de octubre de 2024, Georgia celebró elecciones parlamentarias en las que la Comisión Electoral Central de Georgia informó de que el partido gobernante Sueño Georgiano había ganado con el 53,92 % de los votos, más que en las anteriores elecciones parlamentarias de 2020 y 2016, lo que le permitió formar gobierno; que los resultados electorales oficiales han sido rechazados por la oposición y por numerosos observadores internacionales, que constataron que las elecciones no cumplían las normas internacionales y que los resultados no reflejan con exactitud la verdadera voluntad del pueblo georgiano;
B. Considerando que casi todos los sondeos previos a las elecciones mostraban que los partidos de la oposición aventajaban a Sueño Georgiano por un amplio margen;
C. Considerando que la presidenta de Georgia, Salomé Zurabishvili, y los partidos de la oposición se negaron a reconocer los resultados de las elecciones y afirmaron que hacerlo significaría «aceptar la subyugación de Georgia por parte de Rusia»; que la presidenta de Georgia describió el proceso electoral como una «operación especial rusa» y lo calificó como una nueva forma de guerra híbrida dirigida contra el pueblo y el Estado georgianos; que presentó un recurso ante el Tribunal Constitucional alegando violaciones de los principios constitucionales de secreto del voto y sufragio universal durante las elecciones parlamentarias del 26 de octubre de 2024 y pide que los resultados finales se declaren inconstitucionales;
D. Considerando que la magnitud del fraude y la manipulación electorales no tenía precedentes, según los sondeos a pie de urna independientes realizados por Edison Research y HarrisX, y los informes creíbles de la Asociación de Jóvenes Abogados de Georgia, My Vote y otras misiones nacionales de observación de elecciones independientes, y que los análisis estadísticos revelan graves injerencias electorales;
E. Considerando que, según informes independientes, los observadores internacionales documentaron más de 120 000 casos en los que se puso en peligro el secreto del voto, se denunciaron más de 15 000 casos de prácticas fraudulentas de identificación, se detectaron aproximadamente 50 000 casos de posible usurpación de identidad mediante el análisis de las listas de votantes, se descubrió que el 82 % de los miembros de la comisión electoral tenían vínculos directos con el partido gobernante, se impidió sistemáticamente el acceso de más de 2 500 observadores auténticos a los colegios electorales y se utilizó videovigilancia no autorizada en el 60 % de los colegios electorales, lo que supone una vulneración directa del artículo 8 del Convenio Europeo de Derechos Humanos;
F. Considerando que este nivel de mala práctica respalda las afirmaciones sobre la existencia de una «extensa trama» para amañar las elecciones parlamentarias de 2024, en la que se produjeron numerosas vulneraciones entre las que figuraban también un clima preelectoral de miedo e intimidación de la sociedad civil, incluida la aprobación de la «Ley sobre Agentes Extranjeros», informes sobre compra de votos, coacción y presión sobre los votantes, violaciones de la privacidad de los votantes, altercados físicos, encarcelamiento del líder del principal partido de la oposición y polémicos cambios en las normas de administración electoral antes de la votación;
G. Considerando que una misión internacional de observación de elecciones, compuesta por 529 observadores de 42 países, incluida una delegación electoral oficial del Parlamento Europeo, declaró que las elecciones se vieron empañadas por una polarización arraigada y expresó su inquietud por la legislación recientemente adoptada y su impacto en las libertades fundamentales y la sociedad civil; que la misión internacional de observación de elecciones también observó una retórica de campaña sumamente divisiva y denuncias generalizadas de presiones sobre los votantes en un contexto de intensificación de las divisiones políticas, desequilibrios significativos en los recursos financieros y numerosas ventajas obtenidas por el partido gobernante, que contribuyeron a agravar unas condiciones de competencia ya de por sí desiguales;
H. Considerando que los resultados de las elecciones provocaron un importante malestar interno, mientras los partidos de la oposición y la presidenta Salomé Zurabishvili pidieron nuevas elecciones;
I. Considerando que el 28 de octubre de 2024 comenzaron las protestas en Tiflis, donde miles de personas se congregaron para cuestionar la legitimidad de la victoria declarada por el partido gobernante; que las manifestaciones continuaron el 4 de noviembre de 2024, aumentando en escala e intensidad;
J. Considerando que, desde entonces, han continuado las protestas en Tiflis, a las que se han sumado políticos de numerosos países de la Unión Europea —entre ellos, Alemania, los países bálticos, Finlandia, Francia, Polonia y Suecia—, lo que pone de manifiesto el apoyo internacional y la inquietud por la legitimidad del resultado de las elecciones y la trayectoria política de Georgia;
K. Considerando que el partido gobernante, Sueño Georgiano, ha adoptado numerosas medidas que socavan radicalmente las aspiraciones europeas del pueblo georgiano, siendo el ejemplo más destacado la Ley de Transparencia de la Influencia Extranjera («Ley sobre Agentes Extranjeros»), de 28 de mayo de 2024, la cual se considera basada, en gran medida, en una infame ley que Rusia ha utilizado ampliamente para reprimir la disidencia;
L. Considerando que, entre la población georgiana, el nivel de apoyo a la adhesión a la Unión sigue siendo excepcionalmente elevado, con más del 80 % de las personas a favor;
M. Considerando que el fundador del partido Sueño Georgiano, el oligarca más importante del país, Bidzina Ivanishvili, regresó a la política activa el 30 de diciembre de 2023, convirtiéndose en «presidente honorario» del partido; que el estatuto actualizado del partido confiere a Ivanishvili, en calidad de presidente honorario, una serie de prerrogativas que formalizan la concentración de poder en sus manos sin definir ningún mecanismo de rendición de cuentas;
N. Considerando que Mijeíl Saakashvili, presidente de Georgia de 2004 a 2013 y líder del mayor partido de la oposición, está detenido desde octubre de 2022, ha sido maltratado en prisión y ha sido sometido a un trato degradante durante las vistas del proceso judicial, lo que representa una amenaza clara y real para la integridad de las credenciales democráticas de Georgia;
O. Considerando que las recientes elecciones de Georgia han puesto de manifiesto muchos de los problemas que han obstaculizado el proceso de democratización del país en los últimos años;
P. Considerando que el partido Sueño Georgiano sostiene la tesis de que Occidente trata de empujar a Georgia a una nueva guerra con Rusia, país que invadió Georgia en 2008 y sigue ocupando parte de su territorio; que esta estrategia de comunicación antioccidental fue utilizada por el partido Sueño Georgiano para justificar su falta de adhesión a las declaraciones de la Unión contra Bielorrusia o Irán y su negativa a apoyar a Moldavia y Ucrania;
1. Reitera su firme apoyo al desarrollo democrático de Georgia y a las aspiraciones euroatlánticas de su población;
2. Subraya que los numerosos informes creíbles, tanto de observadores nacionales e internacionales como de observadores electorales, sobre intimidación electoral, compra de votos e irregularidades son lo suficientemente graves y generalizados como para cuestionar la legitimidad de los resultados electorales de Georgia por no reflejar la voluntad del pueblo georgiano;
3. Reitera su preocupación por las violaciones de los derechos humanos y las acciones antidemocráticas del Gobierno de Sueño Georgiano; condena enérgicamente la conducta de Sueño Georgiano durante las elecciones parlamentarias; subraya que estos intentos de controlar políticamente o frenar las actividades de la sociedad civil socavan los valores democráticos y contravienen las recomendaciones de la Comisión;
4. Se solidariza plenamente con el pueblo georgiano y su dinámica sociedad civil, que tradicionalmente ha desempeñado un papel muy activo y fundamental a la hora de acercar el país a Occidente, promover la democratización e impulsar la integración euroatlántica en consonancia con los deseos del pueblo georgiano; lamenta, en este sentido, la intensificación de la retórica antioccidental y hostil de los representantes del partido gobernante hacia los socios estratégicos occidentales de Georgia, como los Estados Unidos, la Unión Europea, en particular sus diputados al Parlamento Europeo y funcionarios, así como su promoción de la desinformación y la manipulación rusas;
5. Expresa su consternación por los continuos y muy preocupantes casos de intimidación y violencia contra la oposición, así como por las amenazas de una mayor represión manifestadas por los dirigentes de Sueño Georgiano, en particular el oligarca Bidzina Ivanishvili, para ilegalizar a la oposición democrática prooccidental y silenciar las voces disidentes;
6. Pide a la Unión que inicie una evaluación internacional exhaustiva de las elecciones de 2024 a través de una misión de seguimiento electoral de la UE que trabaje en coordinación con la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE/OIDDH) para investigar a fondo el fraude electoral, evaluar la integridad de las instituciones electorales, formular recomendaciones para futuras elecciones y reiterar que el proceso de adhesión de Georgia a la Unión se ha estancado como consecuencia de las políticas del Gobierno anteriores a las elecciones y de la celebración de las elecciones parlamentarias;
7. Pide a la Unión que suspenda todas las comunicaciones formales a escala de la Unión con el Gobierno y el Parlamento georgianos actuales, lo que incluye la cancelación de las reuniones del Consejo de Asociación UE-Georgia, la suspensión del diálogo político de alto nivel, la congelación de los mecanismos de cooperación técnica, la introducción de la obligación de visado para los funcionarios georgianos que viajen a la Unión Europea, la reorientación de la ayuda financiera (aproximadamente 120 millones EUR anuales) destinada al Gobierno hacia las organizaciones no gubernamentales georgianas y los medios de comunicación independientes y el apoyo a programas que promuevan la resiliencia democrática y la integridad electoral;
8. Pide a la Comisión que intensifique y amplíe su apoyo a la sociedad civil en Georgia, especialmente a la luz de las medidas cada vez más draconianas impuestas al pueblo georgiano;
9. Pide a todos los partidos políticos prodemocráticos que han recibido el apoyo del electorado georgiano que oficialicen su coordinación y creen una estructura unificada que represente las aspiraciones proeuropeas del pueblo georgiano dentro y fuera del país;
10. Expresa su preocupación por las palizas brutales infligidas a una serie de figuras políticas, líderes de la sociedad civil y periodistas durante y después de las manifestaciones contra la Ley sobre Agentes Extranjeros en primavera; expresa, asimismo, su preocupación por el hecho de que no se haya detenido, imputado ni tan siquiera identificado a un solo autor, y pide a las autoridades georgianas que lleven ante la justicia a los autores de estas palizas;
11. Expresa su profunda preocupación por la creciente influencia rusa en el país, así como por las acciones del Gobierno de Sueño Georgiano, que ha mantenido su acercamiento a Rusia —a pesar de la ocupación progresiva del territorio georgiano y la agresión contra Ucrania por parte de Rusia— reforzando los vínculos comerciales, pese a las sanciones de la Unión, y negándose a imponer sanciones a Moscú;
12. Insta a Georgia, como país candidato a la adhesión a la Unión, a que cumpla sus compromisos e imponga sanciones a Rusia en respuesta a su invasión a gran escala de Ucrania y a que aplique medidas eficaces para evitar la elusión de las sanciones europeas, como se ha comprometido a hacer;
13. Recuerda al Gobierno georgiano que una gran mayoría de la población apoya firmemente el rumbo prooccidental del país y su adhesión a la Unión;
14. Acoge con satisfacción las sanciones personales impuestas por los Estados Unidos a cargos del partido Sueño Georgiano; pide a la Unión que imponga prohibiciones de viaje análogas a quienes participaron en la adopción de la Ley sobre Agentes Extranjeros y en las malas prácticas electorales, y que amplíe dichas prohibiciones a otros miembros de alto rango del partido gobernante, así como a los jueces que dicten sentencias cuyos fallos obedezcan a razones políticas y a los responsables de eludir sanciones y de prestar servicio a los objetivos militares, económicos y políticos de Rusia;
15. Condena enérgicamente el destructivo papel personal que ha desempeñado el oligarca dominante de Georgia, Bidzina Ivanishvili, al orquestar la actual crisis política y sabotear sistemáticamente la trayectoria prooccidental del país en favor de la alineación con Rusia; lamenta sus continuos esfuerzos por erosionar las instituciones democráticas de Georgia y traicionar las aspiraciones de su pueblo; reitera encarecidamente su llamamiento al Consejo y a los socios democráticos de la Unión para que impongan sanciones personales directamente a Ivanishvili por su implicación directa en el deterioro del proceso político en Georgia y en sus actos contrarios a los intereses de su pueblo, en particular los esfuerzos por recuperar la esfera de influencia de Rusia sobre el país;
16. Subraya que la suspensión del acuerdo de liberalización de visados con Georgia solo debe tomarse en consideración una vez se hayan impuesto sanciones personales contra miembros del partido gobernante y del oligarca dominante Bidzina Ivanishvili;
17. Reitera enérgicamente su petición urgente de liberación inmediata e incondicional del expresidente Mijeíl Saakashvili por motivos humanitarios a fin de que pueda recibir tratamiento médico en el extranjero; pide a la presidenta Salomé Zurabishvili que utilice sus poderes de indulto; hace hincapié en que el Gobierno georgiano tiene una responsabilidad plena e innegable por la vida, la salud, la seguridad y el bienestar del expresidente Mijeíl Saakashvili y deben exigírsele plenas responsabilidades por cualquier perjuicio que este sufra;
18. Lamenta que en el pasado no se haya permitido a los diputados al Parlamento Europeo visitar al anterior presidente Saakashvili para evaluar las condiciones de su encarcelamiento; pide a las autoridades georgianas que cambien de parecer y permitan las visitas de los diputados al Parlamento Europeo;
19. Encarga a su presidenta que transmita la presente Resolución al vicepresidente de la Comisión / alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, al Consejo, a la Comisión, a los Gobiernos y los Parlamentos de los Estados miembros, al Consejo de Europa, a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa, a la Oficina de Instituciones Democráticas y Derechos Humanos de la OSCE y a la presidenta, el Gobierno y el Parlamento de Georgia.