Propuesta de resolución - B7-0427/2013Propuesta de resolución
B7-0427/2013

PROPUESTA DE RESOLUCIÓN sobre la situación en Siria

10.9.2013 - (2013/2819(RSP))

tras una declaración de la Vicepresidenta de la Comisión / Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad
presentada de conformidad con el artículo 110, apartado 2, del Reglamento

Guy Verhofstadt, Ramon Tremosa i Balcells, Graham Watson, Marietje Schaake, Johannes Cornelis van Baalen, Edward McMillan-Scott, Jelko Kacin, Charles Goerens, Hannu Takkula, Louis Michel, Philippe De Backer, Phil Bennion en nombre del Grupo ALDE
Hélène Flautre

Véase también la propuesta de resolución común RC-B7-0413/2013

Procedimiento : 2013/2819(RSP)
Ciclo de vida en sesión
Ciclo relativo al documento :  
B7-0427/2013
Textos presentados :
B7-0427/2013
Debates :
Textos aprobados :

B7‑0427/2013

Resolución del Parlamento Europeo sobre la situación en Siria

(2013/2819(RSP))

El Parlamento Europeo,

–   Vistas sus anteriores resoluciones sobre Siria, en particular las de 16 de febrero de 2012, sobre la situación en Siria[1]; 13 de septiembre de 2012, sobre Siria[2]; y 23 de mayo de 2013, sobre la situación de los refugiados sirios en los países vecinos[3],

–   Vistas las Conclusiones del Consejo de Asuntos Exteriores sobre Siria de 23 de enero, 18 de febrero, 11 de marzo, 22 de abril, 27 de mayo, 24 de junio, 9 de julio, 22 de julio y 7 de septiembre de 2013, y las Conclusiones del Consejo Europeo sobre Siria de 8 de febrero de 2013,

–   Vistas las declaraciones de la Vicepresidenta de la Comisión / Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Catherine Ashton, de 9 de mayo, 14 de junio, 24 de junio, 21 de agosto y 23 de agosto de 2013, y las de la Comisaria de Cooperación Internacional, Ayuda Humanitaria y Respuesta a las Crisis, en particular las de 3 de septiembre de 2013,

–   Vista la Resolución 1540 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, de 28 de abril de 2004, y las numerosas declaraciones del Secretario General de las Naciones Unidas y de su portavoz, en particular las de los días 25, 26 y 28 de agosto, y 2 y 3 de septiembre de 2013,

–   Visto el informe de la Comisión de Investigación Internacional Independiente sobre la República Árabe Siria, de 18 de julio de 2013,

–   Vista la declaración del Presidente de los EE.UU., Barack Obama, de 31 de agosto de 2013,

–   Vistas las declaraciones de la ACNUR sobre el número de refugiados sirios de 3 de septiembre de 2013,

–   Visto el comunicado final de la reunión del Grupo de acción en favor de Siria (Comunicado de Ginebra) de 30 de junio de 2012,

–   Vistos los Convenios de Ginebra de 1949 y sus protocolos adicionales, en particular el Protocolo de Ginebra a la Convención de La Haya sobre la prohibición del empleo en la guerra de gases asfixiantes, tóxicos o similares y de medios bacteriológicos y las normas consagradas en la Convención sobre las Armas Químicas

–   Visto el artículo 110, apartado 2, de su Reglamento,

A. Considerando que, según cálculos de las Naciones Unidas de septiembre de 2013, al menos 100 000 personas, la mayoría civiles, han perdido la vida en Siria en el transcurso de los dos últimos años a causa de la violencia registrada en el país; que, según la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios de las Naciones Unidas (OCHA), el número de personas desplazadas en el interior del país asciende a 4,25 millones y que los refugiados sirios superan los dos millones, en particular en Turquía, Jordania, Líbano e Irak, así como que más de la mitad son menores de 17 años, lo que supone una crisis regional, desafíos y una inestabilidad sin precedentes;

B.  Considerando que en la Resolución 1540 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, de 28 de abril 2004, se afirma que la proliferación de armas nucleares, químicas y biológicas constituye una amenaza para la paz y la seguridad internacionales;

C. Considerando que el uso de armas químicas en Siria y la conducta y las acciones del régimen contra la población civil deben considerarse crímenes contra la humanidad por los que el régimen debe rendir cuentas y que constituyen una grave amenaza para la estabilidad regional y la paz mundial; así como que se puede recurrir a una amplia gama de medidas de represalia, sanciones y otras formas de presión, así como a un tribunal internacional, para dar respuesta a todos y cada uno de los crímenes perpetrados por Bachar el Asad, al que nadie tiene intención de eximir de sus responsabilidades;

D. Considerando que la incapacidad del régimen de Asad de proteger su arsenal de armas químicas constituye una amenaza de la misma gravedad para la seguridad y la estabilidad, tanto en Siria como en su región;

E.  Considerando que el Presidente de los EE.UU. ha decidido solicitar autorización al Congreso de los EE.UU. para el uso de la fuerza; y que el 29 de agosto de 2013 la Cámara de los Comunes rechazó una moción del Primer Ministro, David Cameron, en la que se apoyaba el principio de una intervención en Siria;

F.  Considerando que, según los EE.UU., el objetivo de los ataques militares será dar respuesta al uso de las armas químicas y disuadir y reducir las posibilidades de un uso de estas armas en el futuro por parte del Gobierno de Siria;

G. Considerando que la UE y la comunidad internacional no pueden dejar sin respuesta el uso de armas químicas, ya que tienen la obligación de reaccionar para proteger a la población civil y evitar el riesgo de que las armas químicas puedan volver a utilizarse en el futuro;

H. Considerando que el 21 de agosto 2013 se perpetró un ataque a gran escala con armas químicas en las afueras de Damasco que se saldó con la muerte de varios cientos de personas, incluidas numerosas mujeres y niños; que ese ataque constituyó una violación flagrante del Derecho internacional, un crimen de guerra y un crimen contra la humanidad; así como que la información recibida de numerosas fuentes confirma que ese ataque tuvo lugar y que parece constituir prueba suficiente de que el régimen sirio es el responsable de estos ataques, ya que es el único que posee armas químicas y que dispone de los medios para suministrarlas en cantidades suficientes;

I.   Considerando que las actitudes y vetos de Rusia y China han impedido al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas la adopción de una posición común con respecto a la crisis en Siria;

J.   Considerando que el 1 de septiembre de 2013 la Liga Árabe instó a las Naciones Unidas y a la comunidad internacional a asumir sus responsabilidades en el contexto de la Carta de las Naciones Unidas y el Derecho internacional mediante la adopción de las medidas disuasivas necesarias contra el régimen sirio, y que la Liga Árabe suspendió la participación de Siria en su seno en 2011 y que el 26 de marzo 2013 reconoció a la Coalición Nacional de Fuerzas Revolucionarias y de Oposición de Siria como representante de Siria;

K. Considerando que antes del ataque del 21 de agosto de ataque 2013 en el barrio de Damasco de Ghuta un equipo de investigadores de las Naciones Unidas encabezado por el científico sueco Åke Sellström recibió permiso para entrar en Siria con el fin de investigar el uso de las armas químicas; que transcurrieron varios días hasta que el régimen sirio concedió permiso al equipo para visitar los lugares objeto de los ataques en Ghuta; que el equipo de investigadores tomó muestras que serán analizadas fuera de Siria en las próximas semanas; así como que el equipo de las Naciones Unidas abandonó Siria el 31 de agosto de 2013;

L.  Considerando que el 27 de mayo de 2013 el Consejo de Asuntos Exteriores llegó a un acuerdo con respecto a la prórroga de las medidas restrictivas contra Siria y, en particular, a la suspensión del embargo de armas, que permite la venta, el suministro, la transferencia o la exportación por parte de los Estados miembros de la UE de equipos militares o de otros equipos que pudieran ser utilizados para fines de represión interna en caso de que se destinen a la Coalición Nacional de Fuerzas Revolucionarias y de Oposición de Siria y su objeto sea proteger a la población civil;

M. Considerando que el número de refugiados sirios y de personas que necesitan ayuda está aumentando extraordinariamente como consecuencia del deterioro cotidiano de la situación política y humanitaria como consecuencia de la continuación del conflicto armado; que la UE ha contribuido con un total de 1 300 millones de euros en concepto de ayuda humanitaria para ayudar a Siria y a los países vecinos que acogen a los más de dos millones de refugiados sirios;

N. Considerando que el papel cada vez más importante que desempeñan los grupos y milicias extremistas es motivo de enorme preocupación y que debe ser plenamente evaluado en el contexto de las acciones de la UE en relación con Siria y su región;

1.  Condena de la manera más rotunda la matanza de civiles en Siria y el ataque con armas químicas perpetrado por el régimen de Assad en el barrio de Damasco de Ghuta el 21 de agosto 2013 que, según los servicios de inteligencia occidentales, se saldó con la muerte de, por lo menos, 1 400 personas, incluidos 400 niños; observa con grave preocupación que se trata de la matanza más importante perpetrada con armas químicas desde la perpetrada por las fuerzas armadas de Sadam Husein contra la población civil en el norte de Irak; recuerda al Presidente Asad sus obligaciones en virtud del Protocolo de Ginebra en lo que se refiere a la no utilización de armas químicas y pide a las autoridades sirias que respeten escrupulosamente las obligaciones que han asumido a nivel internacional;

2.  Condena las ejecuciones extrajudiciales sumarias y todas las demás formas de violación de los derechos humanos perpetradas por grupos extremistas y por las fuerzas que se oponen al régimen de Asad;

3.  Expresa su preocupación por la violencia que se está registrando en Siria y pide a todas las partes que cesen las acciones violentas con carácter inmediato; señala el papel que desempeñan los interlocutores regionales, incluso en lo que se refiere a la entrega de armas, y expone su preocupación por las repercusiones del conflicto sirio en los países vecinos;

4.  Expresa sus condolencias a las familias de las víctimas; reitera su solidaridad con los sirios que luchan por la libertad, la dignidad y la democracia, y aplaude su valentía y determinación, en particular en el caso de las mujeres y niños;

5.  Pone de relieve que, ante la utilización cínica de armas químicas, la comunidad internacional no puede permanecer inactiva; considera que una respuesta clara y firme y, si fuera necesario, un uso limitado y controlado de la fuerza, son fundamentales para dejar claro que estos delitos son inaceptables y que no se pueden dejar impunes; considera que una estrategia de estas características es coherente con el objetivo de la UE consistente en iniciar un proceso encaminado hacia una solución política negociada del conflicto y que debemos impedir la creación de un precedente terrible en relación con el uso de armas químicas en el futuro en Siria o en cualquier otro lugar;

6.  Pide a las Naciones Unidas que concluyan rápidamente sus investigaciones en profundidad sobre el uso de armas químicas en Siria y que exija responsabilidades a los culpables; pide a los miembros del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que debatan la matanza en Siria sobre la base de las conclusiones del equipo de investigadores de las Naciones Unidas y que evalúen las medidas que deben ser adoptadas en consecuencia para dar respuesta al uso de armas químicas en Siria;

7. Lamenta que hasta la fecha el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas no haya adoptado ninguna medida y no haya llegado a ningún acuerdo sobre una resolución para ejercer una presión más decidida y eficaz para poner fin a la violencia en Siria; insta, en particular, a Rusia y China a que asuman sus responsabilidades y a que contribuyan a alcanzar una posición común; toma nota, a pesar de los continuos esfuerzos diplomáticos, de las escasas probabilidades existentes de superar la oposición en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas a la autorización de una acción militar contra el régimen de Asad; reitera su firme apoyo al llamamiento realizado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en favor de que el Consejo de Seguridad remita la cuestión relativa a la situación en Siria a la Corte Penal Internacional de cara a una investigación formal;

8.  Pide a la UE que dé muestras de liderazgo en lo que se refiere al impulso de los esfuerzos diplomáticos desplegados por todas las partes en relación con el conflicto en Siria con el fin de participar con urgencia y de manera constructiva en el proceso de Ginebra II que debería conducir a una solución política de la crisis siria;

9.  Considera que la comunidad internacional debe alcanzar una solución política negociada en relación con Siria que pueda detener la violencia, evitar nuevas acciones con armas químicas y fomentar una verdadera transición política hacia la democracia dirigida por los sirios que responda a las demandas legítimas del pueblo sirio y se base en un diálogo inclusivo en el que participen todas las fuerzas democráticas y componentes de la sociedad siria con el fin de poner en marcha un proceso de reformas democráticas profundas que también tenga en cuenta la necesidad de velar por la reconciliación nacional y que se comprometa a garantizar el respeto de los derechos y libertades de las minorías, incluidas las de carácter étnico, religioso, cultural y de otro tipo.

10. Considera que la estrategia para alcanzar una solución política negociada al conflicto en Siria debe incluir los elementos siguientes: (1) la prestación de todo tipo de ayuda al Consejo Militar Supremo de Siria y a los demás grupos sirios que se oponen al gobierno de Bachar al Asad que han sido objeto de un examen exhaustivo y que comparten los valores democráticos e intereses comunes con la UE; (2) la prestación de todo tipo de ayuda a la oposición política siria, incluida la coalición de oposición; (3) el despliegue de esfuerzos para aislar a los grupos extremistas y terroristas en Siria con el fin de evitar que influyen en los futuros gobiernos transitorios y permanentes de Siria; (4) la coordinación con aliados y socios; y (5) el despliegue de esfuerzos para limitar el apoyo por parte del Gobierno de Irán y otras partes al régimen sirio;

11. Hace hincapié en que la UE tiene una responsabilidad especial en relación con la estabilidad y la seguridad de sus países vecinos y señala que la situación en Siria justifica un enfoque común y coherente por parte de los Estados miembros de la UE, en cooperación con la OTAN; pide, por consiguiente, a la UE y a sus Estados miembros que desplieguen esfuerzos diplomáticos intensos para compartir las informaciones de carácter militar, analizar profundamente las consecuencias políticas de cualquier tipo de acción militar, así como la naturaleza precisa de la intervención militar y sus objetivos y duración, para decidir qué medidas debería adoptar la UE para responder al uso de armas químicas por parte del régimen de Asad; insta a que la diplomacia de la UE se centre en todos los actores regionales relevantes, incluidos Rusia, Irán, Israel y Turquía, y que su objetivo debe ser definir distintas posibilidades para una solución política duradera al conflicto sirio basada en la democracia pluralista y el Estado de Derecho;

12. Reitera su llamamiento al Presidente Bachar al Asad y a su régimen para que abandone el poder con carácter inmediato, para que pueda producirse una transición pacífica, inclusiva, viable y democrática dirigida por los sirios en el plazo más breve posible;

13. Expresa su honda preocupación por la crisis humanitaria que se registra en Siria y por sus repercusiones en los países vecinos; recuerda que la responsabilidad básica de garantizar el bienestar de su pueblo recae en el Gobierno de Asad; pide que se refuerce la ayuda humanitaria a la población de Siria y de los países vecinos, en particular Líbano y Jordania; apoya y acoge con satisfacción la importante contribución realizada por la Comisión y los Estados miembros a los programas internacionales de ayuda humanitaria; pide a la Vicepresidenta de la Comisión / Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad que adopte medidas apropiadas y responsables en relación con el flujo de refugiados hacia los Estados miembros para aliviar la presión a la que están sometidos los países vecinos; pide a la Vicepresidenta de la Comisión / Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad que presione a los países que han prometido ayuda pero que no han transferido todavía los fondos prometidos;

14. Encarga a su Presidente que transmita la presente Resolución al Consejo, a la Comisión, a la Vicepresidenta de la Comisión / Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, a los Gobiernos y a los Parlamentos de los Estados miembros, al Gobierno y al Parlamento de la Federación de Rusia, al Gobierno y al Parlamento de la República Popular China, al Gobierno y al Parlamento de la República de Turquía, al Gobierno y a la Cámara de Representantes de los Estados Unidos de América, al Gobierno y al Parlamento del Reino Hachemí de Jordania, al Gobierno y al Parlamento de la República Libanesa, al Secretario General de las Naciones Unidas, al Secretario General de la Liga Árabe, a la Coalición Nacional de Fuerzas Revolucionarias y de Oposición de Siria, y al Gobierno y al Parlamento de la República Árabe Siria.