PROPUESTA DE RESOLUCIÓN sobre la situación en Rusia, en particular el envenenamiento de Alexéi Navalny
14.9.2020 - (2020/2777(RSP))
presentada de conformidad con el artículo 132, apartado 2, del Reglamento
Michael Gahler, Andrius Kubilius, Sandra Kalniete, Andrzej Halicki, Antonio López‑Istúriz White, Rasa Juknevičienė, Eugen Tomac, Radosław Sikorski, Miriam Lexmann, Roberta Metsola, David Lega
en nombre del Grupo PPE
Véase también la propuesta de resolución común RC-B9-0280/2020
B9‑0284/2020
Resolución del Parlamento Europeo sobre la situación en Rusia, en particular el envenenamiento de Alexéi Navalny
El Parlamento Europeo,
– Visto el Convenio para la Protección de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales,
– Vista la Constitución de la Federación de Rusia, y en particular el capítulo 2 sobre los derechos y las libertades del hombre y del ciudadano,
– Vista la declaración del vicepresidente de la Comisión / alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Josep Borrell, de 2 de septiembre de 2020, sobre el envenenamiento de Alexéi Navalny,
– Visto el comunicado del hospital Charité – Universitätsmedizin Berlín, de 24 de agosto de 2020, en la que se afirma que Alexéi Navalny fue víctima de un envenenamiento con un agente químico nervioso,
– Vista la declaración del Gobierno Federal alemán, de 2 de septiembre de 2020, en la que pide urgentemente al Gobierno ruso que emita una declaración sobre el incidente y condene el ataque en los términos más enérgicos,
– Vista la declaración del director general de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ), de 3 de septiembre de 2020, sobre las acusaciones de uso de armas químicas contra Alexéi Navalny, en la que se afirma que «en virtud de la Convención sobre las Armas Químicas, cualquier envenenamiento de una persona mediante el uso de un agente nervioso se considera un uso de armas químicas»,
– Vistas sus anteriores resoluciones sobre Rusia, y en particular la de 13 de marzo de 2014 sobre Rusia: condena de manifestantes que participaron en los sucesos de la plaza Bolótnaya[1], la de 15 de enero sobre Rusia, en particular sobre el caso de Alexéi Navalny[2], la de 12 de marzo de 2015 sobre el asesinato del líder opositor ruso Borís Nemtsov y la situación de la democracia en Rusia[3], y la de 6 de abril de 2017 sobre Rusia: la detención de Alexéi Navalny y otros manifestantes[4]; así como su Recomendación al Consejo, de 2 de abril de 2014, sobre el establecimiento de restricciones comunes en materia de visados a los funcionarios rusos implicados en el caso Serguéi Magnitski[5],
– Vista la Convención sobre la Prohibición del Desarrollo, la Producción, el Almacenamiento y el Empleo de Armas Químicas y sobre su Destrucción, que prohíbe el empleo, el desarrollo, la producción, el almacenamiento y la transferencia de armas químicas,
– Vistas la Constitución de la Federación de Rusia, y en particular su artículo 29, que protege la libertad de expresión, y las obligaciones internacionales en materia de derechos humanos que Rusia se ha comprometido a respetar como miembro del Consejo de Europa, de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE) y de las Naciones Unidas,
– Vistos el artículo 5 de la Declaración Universal de Derechos Humanos y el artículo 7 del Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, de los que la Federación de Rusia es parte, que disponen que nadie puede ser sometido a torturas ni a penas o tratos crueles, inhumanos o degradantes,
– Vista la Declaración de las Naciones Unidas sobre el derecho y el deber de los individuos, los grupos y las instituciones de promover y proteger los derechos humanos y las libertades fundamentales universalmente reconocidos, aprobada por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 9 de diciembre de 1998,
– Visto el artículo 132, apartado 2, de su Reglamento,
A. Considerando que, según la reputada asociación rusa de derechos humanos Memorial, hay más de 300 presos políticos y religiosos en la Federación de Rusia;
B. Considerando que Alexéi Navalny es uno de los líderes más destacados de la oposición en Rusia;
C. Considerando que la UE muestra su solidaridad con todos los disidentes y con el pueblo ruso, que pese a las amenazas contra su libertad y su vida y las presiones del Kremlin y de las autoridades rusas, siguen luchando por la libertad, los derechos humanos y la democracia;
D. Considerando que Alexéi Navalny y su equipo participaron activamente en los preparativos para las elecciones regionales rusas del 13 de septiembre de 2020, introduciendo una estrategia de «votación inteligente» para derrotar a los candidatos del régimen de Putin;
E. Considerando que Alexéi Navalny y sus colaboradores investigan exhaustivamente la corrupción generalizada de miembros de las élites gubernamentales locales y nacionales, corrupción que forma parte del régimen cleptocrático del Kremlin;
F. Considerando que, justo antes de su envenenamiento, Alexéi Navalny estuvo en las ciudades de Novosibirsk y Tomsk investigando casos de corrupción entre los gobernadores locales;
G. Considerando que Alexéi Navalny, a través de sus actividades de lucha contra la corrupción en las regiones, contribuyó a difundir estos casos entre la ciudadanía local, lo que se tradujo en un aumento de la participación en las elecciones regionales y de la movilización del voto opositor;
H. Considerando que Alexéi Navalny ha establecido una red de 40 oficinas regionales en todo el país, que controlan permanentemente a las autoridades locales, pero que también son objeto de intimidación y persecución por parte de las autoridades rusas;
I. Considerando que Alexéi Navalny expresó su firme apoyo a los manifestantes de Jabárovsk y a la actual revolución democrática en Bielorrusia, que constituye también un renacimiento nacional de este país; que pidió apoyo a las víctimas del régimen de Lukashenko y a los participantes en la huelga nacional de Bielorrusia y utilizó su plataforma mediática para sensibilizar a la opinión pública sobre los sucesos inéditos y las protestas pacíficas de personas que exigían cambios en Bielorrusia, pero también sobre la represión y la tortura perpetradas por el régimen de Lukashenko contra sus ciudadanos; que percibió los cambios en Bielorrusia como inspiración para el pueblo de Rusia;
J. Considerando que los asesinatos políticos y los envenenamientos en Rusia son un arma sistémica del régimen dirigida deliberadamente contra la oposición; que ello se ve agravado por la reticencia de las autoridades de investigar a fondo los asesinatos por motivos políticos de Anna Politkóvskaya, Borís Nemtsov, Vladímir Kará-Murzá y otros;
K. Considerando que los asesinatos e intentos de asesinato por motivos políticos por parte de los servicios secretos rusos tienen un impacto directo en la seguridad interior de la UE, ya que muchos de ellos tienen lugar en suelo europeo; que, según las investigaciones, los autores entran en el espacio Schengen utilizando datos falsificados;
L. Considerando que el hospital Charité – Universitätsmedizin Berlín ha concluido que Alexéi Navalny fue envenenado con un inhibidor de la colinesterasa conocido comúnmente como agente nervioso novichok, dato que también ha sido confirmado por varios laboratorios independientes; que esta sustancia concreta es una sustancia de carácter militar que también se utilizó en la tentativa de asesinato del antiguo oficial de inteligencia militar Serguéi Skripal en 2018 en Salisbury (Reino Unido);
N. Considerando que el agente nervioso novichok es un arma utilizada por las estructuras militares en Rusia, en particular por la Dirección Central de Inteligencia (GRU) y el Servicio Federal de Seguridad (FSB); que dichas sustancias están reguladas por la legislación rusa; que el agente nervioso novichok es un arma química que solo puede desarrollarse en laboratorios militares de propiedad estatal y no puede ser adquirido por particulares; que, no obstante, si tal fuera el caso, se trataría de una violación de las obligaciones jurídicas internacionales de Rusia;
O. Considerando que el día del intento de envenenamiento el equipo jurídico de Alexéi Navalny presentó inmediatamente varias denuncias ante la Comisión de Investigación de Rusia en virtud de los artículos 105 (tentativa de asesinato) y 277 (atentado contra la vida de un estadista o una personalidad pública cometidos para poner fin a sus funciones u otras actividades políticas, o por venganza por dichas actividades) del Código Penal de la Federación de Rusia, solicitando la apertura de una adecuada investigación nacional;
P. Considerando que la Comisión de Investigación no dio curso a la denuncia presentada; que el 4 de septiembre de 2020 el equipo jurídico presentó otra denuncia, esta vez ante el Tribunal de Distrito de Basmanny (Moscú), ante la inacción de la Comisión de Investigación en relación con la petición de apertura de una investigación penal por el envenenamiento de Alexéi Navalny, y que esta nueva denuncia también fue inadmitida; que, de este modo, se agotaron todas las vías legales disponibles para la apertura de una investigación penal por parte de las autoridades rusas;
Q. Considerando que los medios de información rusos controlados por el Estado intentan encubrir la participación de las autoridades rusas en el atentado contra la vida de Alexéi Navalny difundiendo desinformación y desviando el foco de atención de las constantes violaciones de los derechos humanos y la democracia en Rusia;
R. Considerando que las elecciones regionales celebradas el 13 de septiembre de 2020 en Rusia dieron lugar a un número récord de denuncias sobre manipulación de resultados; que en las ciudades donde Alexéi Navalny estuvo presente antes de su envenenamiento (Novosibirsk y Tomsk), su sistema de votación inteligente demostró ser eficaz y ayudó a derrotar a los candidatos de Putin;
S. Considerando que la intimidación, detención y encarcelamiento de ciudadanos extranjeros en Rusia, incluido el galardonado con el Premio Sájarov en 2018 Oleg Sentsov y muchos otros, constituyen violaciones del derecho internacional;
1. Condena enérgicamente el intento de asesinato de Alexéi Navalny con el agente nervioso de carácter militar novichok, así como todos los anteriores asesinatos y tentativas de asesinato de ciudadanos rusos por motivos políticos; considera que las autoridades rusas están implicadas y son responsables de estos asesinatos, algo que queda aún más evidenciado por su reticencia a proceder a investigaciones exhaustivas y auténticas y por sus empeños en proteger a los responsables de estos crímenes frente a la justicia;
2. Reitera que el atentado contra la vida de Alexéi Navalny forma parte de un empeño sistémico de intimidar y silenciar a todas las voces disidentes en Rusia; señala que existen muy fundadas razones para creer que este caso concreto se planificó de antemano y desde las más altas instancias gubernamentales, que tenían un claro motivo para querer librarse de un exitoso líder opositor declarado que le supone una grave amenaza al régimen;
3. Reitera que el caso de Alexéi Navalny es uno de los elementos de una política rusa deliberadamente centrada en el engaño, la propagación de la inestabilidad y el caos, la reestabilización de su esfera de influencia y dominio y el debilitamiento del orden internacional basado en normas;
4. Pide que se inicie de inmediato una investigación internacional —con la participación de la UE, las Naciones Unidas, el Consejo de Europa, sus aliados y la OPAQ— sobre el envenenamiento de Alexéi Navalny —junto con una investigación sobre las fuerzas especiales de policía bielorrusas (OMON)— y se cree dentro de las estructuras existentes del Parlamento Europeo una plataforma para facilitar este proceso, y pide a la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas que acometa una investigación detallada de los incumplimientos de los compromisos internacionales de Rusia en la materia;
5. Pide a los dirigentes y autoridades rusas que afronten las consecuencias de esta acción criminal y cooperen con cualquier posible investigación internacional;
6. Pide a los Estados miembros y a la comunidad internacional que reaccionen enérgicamente frente a esta tentativa de asesinato a manos del sistema, y destaca que la inacción se percibirá como una debilidad y generará más violencia, intimidaciones y agresiones por parte del Kremlin contra los valores y principios de las democracias occidentales; subraya que la comunidad internacional debe estar atenta al cinismo calculado del Kremlin, que adopta un disfraz de imprevisibilidad;
7. Exige que la UE elabore lo antes posible una lista de medidas restrictivas de amplio alcance contra Rusia y refuerce sus actuales sanciones contra este país;
8. Pide al Gobierno ruso que ponga fin a las frecuentes tácticas de represión judicial y política y que libere inmediatamente a los dirigentes y demás miembros de la oposición, a los presos políticos, a los periodistas independientes, a los representantes de la sociedad civil y a los ciudadanos extranjeros;
9. Pide a los Estados miembros que coordinen sus posiciones con respecto a Rusia y que hablen con una sola voz en los diálogos bilaterales y multilaterales con las autoridades rusas;
10. Reitera que reviste la máxima urgencia iniciar una reevaluación exhaustiva y estratégica de las relaciones de la UE con Rusia, que incluiría los siguientes principios:
a. pedir al VP/AR que prepare la revisión de los cinco principios de la UE para las relaciones con Rusia y que acometa una revisión en profundidad de la política estratégica de la UE con respecto a Rusia, que deberá estar supeditada a la evolución de la democracia, el Estado de Derecho y el respeto de los derechos humanos por parte de las autoridades y dirigentes rusos;
b. pedir a los Estados miembros que sigan aislando a Rusia en los foros internacionales —como por ejemplo el G-7 y otros— y reformulen de forma crítica la cooperación de la UE con Rusia a través de diversas plataformas de política exterior;
c. pedir al Consejo que dé prioridad a la aprobación de un mecanismo de sanciones en materia de derechos humanos de la UE sobre el modelo de la Ley Magnitski y a la aplicación de dicho mecanismo en un futuro próximo, con una lista de personas y podría también posibles sanciones sectoriales contra el régimen ruso;
d. pedir a los Estados miembros y a las instituciones de la UE que suspendan inmediatamente el proyecto Nord Stream 2 mientras Rusia no modifique sus políticas agresivas en la escena internacional y que abandonen por completo el proyecto si tal cosa no se produce;
e. pedir al Consejo que adopte una estrategia de la UE para apoyar a los disidentes, a las organizaciones no gubernamentales y a las organizaciones de la sociedad civil rusas, así como a los medios de comunicación/periodistas independientes rusos, haciendo pleno uso de los mecanismos de defensa de los derechos humanos, creando oportunidades adicionales para que los jóvenes rusos estudien en la UE y ayudando a poner en marcha una universidad rusa en el exilio en alguno de los Estados miembros;
f. pedir al Consejo que inicie inmediatamente los preparativos y adopte una estrategia de la UE para las futuras relaciones con una Rusia democrática, incluida una amplia oferta de incentivos y condiciones para reforzar los movimientos nacionales favorables a la libertad y a la democracia;
11. Encarga a su presidente que transmita la presente Resolución al vicepresidente de la Comisión/ alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, al Consejo, a la Comisión, a los Gobiernos y Parlamentos de los Estados miembros, al Consejo de Europa, a la OSCE y al presidente, al Gobierno y al Parlamento de la Federación de Rusia.