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Acta literal de los debates
Martes 22 de febrero de 2005 - Estrasburgo Edición DO

20. Agencia Comunitaria de Control de la Pesca
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  El Presidente. – De conformidad con el orden del día, se procede al debate del informe de la señora Attwooll (A6-0022/2005) sobre la propuesta de Reglamento del Consejo por el que se crea la Agencia Comunitaria de Control de la Pesca y se modifica el Reglamento (CEE) nº 2847/93 por el que se establece un régimen de control aplicable a la política pesquera común.

 
  
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  Borg, miembro de la Comisión. (EN) Señor Presidente, en primer lugar quisiera dar las gracias a su Señoría por su informe sobre la propuesta de Reglamento del Consejo por el que se crea la Agencia Comunitaria de Control de la Pesca y que modifica el Reglamento (CEE) nº 2847/93 que establece un sistema de control aplicable a la política pesquera común.

La Comisión considera que la creación de la agencia es un elemento crucial para la aplicación de la reforma de la política pesquera común. Recordarán que la creación de esta agencia constituye una señal clara de que una aplicación más uniforme y efectiva de las normas es prioritaria para la política pesquera común reformada. Consideramos que una agencia que funcione bien será esencial no solo para mejorar la capacidad de control de los Estados miembros, sino también para comprometernos más en la lucha contra la pesca ilegal. Por otra parte, creemos que a medida que mejoren nuestras capacidades de control, también mejorará la fiabilidad de los datos de que disponen los científicos, contribuyendo así a un asesoramiento científico más sólido sobre el que basar nuestra política para una pesca sostenible. Por este motivo, la Comisión defiende una agencia efectiva y fiable.

Desde el punto de vista funcional, consideramos que la agencia es un medio para reforzar las herramientas y los métodos de control adoptados por los Estados miembros.

A la Comisión le complace la estrecha colaboración que ha mantenido con la ponente y los miembros de la Comisión de Pesca durante nuestro trabajo en torno a esta importante propuesta. Me complace informarles de que podemos aceptar más de la mitad de las enmiendas de la Comisión de Pesca, que refuerzan en gran medida nuestra propuesta y que defenderemos de buena gana en el Consejo.

Permítanme abordar ahora las enmiendas propuestas en el informe que tenemos ante nosotros.

La Comisión puede aceptar la enmienda 1.

La Comisión tiene dificultades para aceptar la enmienda 2. No es recomendable establecer prioridades en las labores de regulación, ya que estas pueden cambiar en el futuro debido a la realización de las tareas y la consecución de los objetivos. Sin embargo, la Comisión reconoce el mérito de incluir controles de pesca ilegal, no notificada y no regulada en el programa de trabajo de la agencia.

La Comisión puede aceptar la enmienda 3.

La Comisión no puede aceptar las enmiendas 4, 25 y 27. Los mecanismos de votación deben tener en cuenta las características específicas de este órgano, encargado de labores de control. La propuesta se basa en la necesidad de conseguir un equilibrio entre la parte que desempeñan los Estados miembros y la necesidad de la Comisión de garantizar que la agencia actúe conforme a los objetivos declarados de la política pesquera común.

La Comisión tiene dificultades para aceptar la enmienda 5. Implica una extensión de la competencia de la agencia en ámbitos que están fuera de sus atribuciones de inspección y control. La Comisión está convencida de que el ámbito de aplicación de su propuesta es adecuado en su forma actual y debería seguir centrándose en sus labores principales, a saber, el control y la inspección. Por supuesto, pueden considerarse las actividades de investigación directamente relacionadas con el control.

La Comisión puede aceptar la enmienda 6.

Respecto a la enmienda 7, la Comisión tiene dificultades para aceptar el contenido de esta enmienda tal como está redactada. Es demasiado restrictiva, dado que no todos los acuerdos pesqueros incluyen en la actualidad un acuerdo de aplicación.

Aunque la Comisión no puede aceptar la enmienda 8, el ámbito de competencias de la agencia, por supuesto, puede incluir el control de los buques implicados en la pesca ilegal, no declarada o no regulada siempre que esto se sitúe dentro del marco de programas adoptados por organizaciones pesqueras regionales.

La Comisión puede aceptar las enmiendas 9, 10, 11, 12 y 13.

Sin embargo, la Comisión tiene dificultades con la enmienda 14, relativa al suministro de información sobre la aplicabilidad y la rentabilidad de las normas de la política pesquera común con respecto al control y la inspección, ya que esto modificaría notablemente la misión y las tareas de la agencia.

La Comisión no puede aceptar la enmienda 15, ya que el artículo 7 solamente hace referencia a las obligaciones de los Estados miembros. Sin embargo, conviene señalar que la Comisión tiene derecho a solicitar que la agencia preste servicios relacionados con las obligaciones de la Comunidad conforme al artículo 5 de la propuesta.

Sin duda, puedo estar de acuerdo con el importante papel que desempeñará la agencia en materia de formación; sin embargo, tengo dificultades para aceptar la enmienda 16, ya que la agencia no debería estar obligada a crear un centro de formación. Es posible que por motivos prácticos y operativos los Estados miembros prefieran que los seminarios y cursos de formación se impartan localmente. El cometido de la agencia no debería impedir esta eventualidad.

La Comisión puede aceptar la enmienda 17.

Respecto a la enmienda 18, la Comisión tiene dificultades para aceptar el contenido de esta enmienda tal como está redactada. La función propuesta para el Comité Consultivo sobre Pesca y Acuicultura (ACFA) es inaceptable porque situaría a este órgano, de naturaleza exclusivamente consultiva, en una posición similar a la de instituciones comunitarias como el Parlamento Europeo, la Comisión y el Consejo. Por lo tanto, aunque la Comisión acoge con agrado las propuestas por las que el Parlamento podrá estar mejor informado del trabajo de la agencia, no está a favor de otorgar el mismo nivel a órganos consultivos como el Comité Consultivo sobre Pesca y Acuicultura y los consejos consultivos regionales. Por este mismo motivo, la Comisión no puede aceptar las enmiendas 22, 42 y 43.

Aunque la Comisión no puede aceptar la enmienda 19, admite que existe la necesidad de modificar el texto del segundo considerando de tal forma que haga referencia a las actividades dentro y fuera de las aguas comunitarias.

La Comisión no tiene nada que comentar respecto a la enmienda 20, ya que la ubicación de la agencia compete a las autoridades españolas.

La Comisión no puede aceptar la enmienda 21.

La Comisión tiene dificultades con las enmiendas 23 y 24. En primer lugar, el Comité Consultivo sobre Pesca y Acuicultura es un órgano consultivo y no debería participar en la gestión. En segundo lugar, respecto a la designación de los representantes del sector pesquero, la propuesta de la Comisión sigue el modelo de otras agencias en las que los representantes de las partes interesadas están presentes en los consejos de administración. En estos casos es normalmente la Comisión la que designa a los representantes del sector.

La Comisión tiene dificultades para aceptar la enmienda 26, ya que el consejo de administración debe poder examinar determinados puntos de su orden del día sin la presencia de los representantes del sector cuando se trate una cuestión confidencial o un conflicto de intereses.

La Comisión puede aceptar las enmiendas 28, 29, 30, y 31.

La Comisión tiene dificultades con la enmienda 32. La Comisión considera que en interés de la Comunidad es importante que retenga el poder de proponer la destitución del director ejecutivo y que esto debería hacerse por mayoría simple, pues de lo contrario la posición de la Comisión se vería debilitada.

La Comisión no puede aceptar la enmienda 33, ya que considera que tres años es un periodo demasiado corto para elaborar una evaluación externa.

La Comisión tiene dificultades para aceptar la enmienda 34, ya que el texto de la propuesta de la Comisión se ajusta a las normas acordadas de redacción, al contrario que la enmienda.

Aunque la Comisión comprende el principio de la enmienda 35, no puede aceptarla, ya que sería polémica y difícil de aplicar en la práctica.

La Comisión no puede aceptar las enmiendas 36, 38 39, 40 y 41, ya que tienen el efecto de debilitar la propuesta. Como he dicho al empezar, debemos conseguir establecer una agencia de control de la pesca eficaz y que pueda funcionar bien. En cualquier caso, comprendo que la Comisión de Pesca haya votado en contra de enmiendas similares en su reunión del 2 de febrero.

La Comisión no puede aceptar la enmienda 37; como he dicho antes, los consejos consultivos regionales tienen una labor consultiva y no deberían estar implicados en la gestión.

 
  
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  Attwooll (ALDE), ponente. – (EN) Señor Presidente, señor Comisario, la Comisión de Pesca celebra la propuesta de establecer una Agencia Comunitaria de Control de la Pesca. Creemos que puede contribuir de modo importante a la aplicación uniforme y eficiente de los programas de control e inspección. Desde el punto de vista de la comisión parlamentaria, la Agencia debería desempeñar también un papel importante en la lucha contra la pesca ilegal no declarada y no regulada, incluidos los casos que se produzcan fuera de aguas comunitarias en las debidas circunstancias.

Otras enmiendas pretenden establecer que la Agencia pueda proporcionar información y ayuda adecuada a la Comisión y a los Estados miembros, por ejemplo con respecto a seguridad e higiene en el trabajo, el desarrollo de soluciones de inspección técnica y la rentabilidad de las normas de la política pesquera común sobre el control y la inspección. Como ha mencionado el señor Comisario, la comisión también solicita que la Agencia pueda establecer un centro de formación para los inspectores, en lugar de limitarse a la redacción de un plan de estudios troncales.

El informe difiere sustancialmente de la propuesta de la Comisión en la idea de que el sector pesquero, y no la Comisión, debería nombrar a sus propios representantes en el consejo de administración y que estos deberían tener derecho a voto.

Paso ahora a hablar de las enmiendas presentadas por el Grupo ALDE. Dos de ellas tienen que ver con el papel de los consejos consultivos regionales. Creemos que es preciso consultarles en el curso de la redacción de los planes de despliegue conjuntos y que desde luego deben estar informados de la evaluación que haga la agencia de la eficacia de dichos planes. Las enmiendas restantes se centran en los planes de despliegue conjuntos. Esto, señor Comisario, no es un intento de debilitar la propuesta.

Parece haber distintas interpretaciones de lo que significa coordinación operativa. Conforme a una interpretación, a la agencia solamente le corresponderá asegurar el despliegue práctico de los recursos que ya han comprometido los Estados miembros y garantizar que estos se empleen de la forma que establece el plan. Este parece ser el modelo previsto por la Comisión en el organigrama que facilitó.

Lamentablemente, este modelo no se refleja adecuadamente en la redacción actual del artículo 12, ni se ajusta a la letra b) del apartado 1 del artículo 11 de la propuesta, que faculta a la agencia para identificar los medios de control e inspección que deben ser comunes conforme a los criterios del apartado 2 del artículo 11. Del mismo modo, el artículo 13 especifica que los Estados miembros deberán, y cito: «comprometer y aprestar los medios de control e inspección que el plan de despliegue conjunto reseñe por ser necesarios para su ejecución».

Esta es una interpretación mucho más extensa de las tareas implicadas en la coordinación operativa, y al leer el organigrama de la Comisión, aunque no el texto legal, parece comportar un considerable control sobre el compromiso actual de recursos que recae exclusivamente en manos del director ejecutivo de la agencia. Las enmiendas del Grupo ALDE están destinadas a reconciliar estas interpretaciones distintas y garantizar que las normas y su aplicación vayan de la mano.

Espero que el Parlamento acepte las enmiendas, pero lo haga o no, creo que la Comisión y el Consejo tendrán que buscar un modo de resolver estos problemas. Quisiera asegurar una vez más a mis colegas que no participo en ningún tipo de actividad subversiva. De hecho, estoy a favor de la más amplia interpretación de la coordinación operativa, conforme a las correspondientes salvaguardias.

Mi principal preocupación es que con una mala ley no conseguiremos una buena agencia. Por este motivo, recomendaré a mi Grupo que se abstenga sobre el informe si no se aceptan por lo menos las enmiendas 38 y 39, aunque por supuesto respaldaremos la resolución legislativa.

 
  
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  Maat (PPE-DE), en nombre del Grupo del PPE-DE. – (NL) Señor Presidente, le doy las gracias a usted y a la ponente por su esfuerzo. Quizá sea simbólico que tras el «sí» a la Constitución en España, la Agencia de Control de la Pesca tenga su sede en Vigo, lo cual me parece una recompensa justa, dados los grandes esfuerzos políticos de nuestros colegas diputados por alcanzar este resultado positivo respecto de la Constitución.

Al mismo tiempo, me siento un poco decepcionado con la respuesta del Comisario, que ha afirmado que muchas de las enmiendas aprobadas por la Comisión de Pesca resultan inaceptables o son poco prácticas. Creo que al Comisario le falta un poco de ambición en estos ámbitos. Si aplico esto a la Constitución, si este informe tuviera que debatirse dentro de cinco años, a la Comisión no le resultaría nada fácil escabullirse diciendo que es inaceptable o poco práctico. A este respecto, sería positivo que el Comisario mostrara un poco más de ambición, también respecto de la aplicación de las enmiendas, incluidas las que ha presentado mi grupo.

Una de las preocupaciones clave de mi grupo es que hemos observado que la política de pesca demuestra una creciente falta de confianza entre el sector pesquero y Bruselas. Tenemos que reducir esta diferencia, y el propio compromiso y contribución del sector, así como el de las organizaciones pesqueras en el consejo de esta Agencia de Control de la Pesca, pueden contribuir a reducir la diferencia entre la Unión Europea y el sector pesquero.

Hay ejemplos de buen funcionamiento fuera de la Unión Europea. Por ejemplo, en Islandia o en Noruega, donde el sector pesquero influye más en la política y se implica más en su aprobación y control eficaz. A este respecto, la Comisión podría ser un poco más ambiciosa y comprensiva, incluido el compromiso del Grupo PPE-DE por reducir esta diferencia.

De nuevo, insto al Comisario a actuar como si la nueva Constitución ya hubiera entrado en vigor, así como a tomarse más en serio el compromiso del Parlamento. Estoy convencido de que el nuevo Comisario y la nueva Agencia encontrarán su sitio.

 
  
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  Kindermann (PSE), en nombre del Grupo del PSE. – (DE) Señor Presidente, el control ya es un componente importante de la Política Pesquera Común, y lo será aún más en el futuro. Ha sido y sigue siendo una prioridad de esta Cámara hacer que los controles sean más eficaces en el sector pesquero. Por este motivo, apoyamos la propuesta de creación de una Agencia Comunitaria de Control de la Pesca.

Sin embargo, existen muchas diferencias entre las diversas zonas pesqueras de la Unión Europea. Por lo tanto, creemos que lo más inteligente sería asegurar que la estructura organizativa de la agencia tuviera en cuenta las diferencias regionales. La Política Pesquera Común ha experimentado un gran desarrollo en los últimos años, pero las obligaciones internacionales de la Unión Europea en relación con la pesca siguen siendo un elemento importante de la PPC. Todo ello exige unos procedimientos de control o unas actividades de coordinación del control, según el caso, eficaces y uniformes. La creación de una agencia europea de control debería garantizar que así fuera. El objetivo debería ser la mejora de las estructuras de control nacionales, y que los Estados miembros siguieran decidiendo cómo utilizar sus propios instrumentos de control. Suponemos que la creación de unas estructuras organizativas a escala comunitaria podría comportar un cumplimiento más coherente de las disposiciones legales vigentes.

En nuestra opinión, algunas de las enmiendas de la ponente no contribuyen a la consecución de esos objetivos y su alcance es demasiado amplio. La competencia de la agencia debe seguir siendo claramente visible. Por este motivo nos oponemos a la inclusión de los consejos consultivos regionales en la estructura organizativa. Aunque la ponente ha realizado un excelente trabajo, no podemos apoyar unas enmiendas que nos harían retroceder.

 
  
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  Booth (IND/DEM), en nombre del Grupo IND/DEM. – (EN) Señor Presidente, en todo el mundo la conservación de la pesca solamente es eficaz si está bajo control nacional. He hablado con docenas de pescadores de Devon y Cornualles que saben exactamente cómo conservar las poblaciones de peces, pero nadie les pide consejo. Sugiero que la actual política pesquera común, con su sistema de cuotas totalmente inviable, diseñado por burócratas de oficina, se descarte inmediatamente y se sustituya por una nueva política pesquera concebida por los propios pescadores.

El problema de Gran Bretaña ha sido la estricta aplicación de la política pesquera común hasta decir basta, en primer lugar por parte del MAFF y posteriormente del Defra. Un ejemplo fue su insistencia en que un pescador llamado Ken Bagley, a quien conozco muy bien, debería frotar con su pulgar los vientres de cinco toneladas de espadines para garantizar que no había arenques inmaduros en la captura. En el Reino Unido decimos que «hace falta un espadín para pescar una caballa». Quizás deberíamos decir «hace falta un espadín para pescar un arenque». A pocos les sorprende que el PIB de Gran Bretaña derivado de la pesca se haya reducido de 561 millones de libras esterlinas en 1964 a 520 millones de libras esterlinas en 2003, pese a la inflación. En Noruega, que controla su propia política pesquera, las cifras han aumentado de 7 500 millones de coronas noruegas a 10 100 millones de coronas noruegas durante el mismo periodo.

La crisis medioambiental del Mar del Norte ha sido provocada por el hombre. Explotar dicha crisis a favor de una mayor integración europea es una estratagema clásica. Esto se denomina crisis beneficiosa. La solución de Europa ante algo que no funciona es imponer más Europa, con lo que se crea una nueva agencia para la pesca con sede en Vigo, España. ¡Sorpresa, sorpresa! En el futuro, los buques pesqueros estarán controlados en nuestras propias aguas territoriales por buques patrulla que operan bajo el control de esta nueva agencia conforme a la autoridad de la inspección de la UE con sede en Madrid. El pobre viejo Francis Drake debe estar revolviéndose en su tumba. Quizás deberíamos prepararnos para encender los faros.

(Aplausos)

 
  
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  Allister (NI).(EN) Señor Presidente, para creer en una Agencia Comunitaria de Control de la Pesca, es necesario creer en la política pesquera común. La experiencia de Irlanda del Norte con esa política ha sido nefasta. Hemos visto cómo, gracias a la política pesquera común, nuestra flota pesquera quedaba drásticamente reducida debido al exceso de regulación y los cierres punitivos. No puedo apoyar la política pesquera común, así que no voy a apoyar la creación de una Agencia Comunitaria de Control de la Pesca. A mi juicio, la pesca es una actividad que debe quedar bajo control nacional, no bajo el control de la UE. Por lo tanto, todos los mecanismos de inspección deben ponerse en marcha y llevarse a cabo a escala nacional. Esta agencia no es más que otra faceta de las ansias imperiales que Bruselas está siempre dispuesta a asumir.

Ante la probabilidad de que la Agencia Comunitaria de Control de la Pesca llegue a ser una realidad, utilizaré mi voto en esta Cámara, como hice en la comisión, para tratar de restringir su alcance y reforzar las competencias nacionales.

 
  
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  Fraga Estévez (PPE-DE). (ES) Señor Comisario, yo, en cambio, sí que apoyo y aplaudo la creación de la Agencia Comunitaria de Control Pesquero y, en este sentido, solo me queda pedir su entrada en funcionamiento cuanto antes.

Además, las enmiendas introducidas por la Comisión de Pesca mejoran y completan considerablemente tanto la propuesta inicial de la Comisión como el informe de la ponente con respecto a las verdaderas responsabilidades que deben competer a la Agencia y sin menoscabo de las competencias actualmente depositadas en los Estados miembros.

Este informe ratifica mi convicción de que no es posible contar con unos recursos sostenibles y unas prácticas pesqueras saneadas si no se aborda la política de control sin hipocresías y sin desconfianzas y, desgraciadamente, esta propuesta ha vuelto a poner de relieve que algunos de los países que más hablan de control son luego los más recalcitrantes, al rechazar propuestas serias y eficaces.

Esta Agencia es un paso para que estas actitudes queden cada vez más en evidencia y, aunque queda mucho por hacer, en particular, en el camino de la transparencia en los criterios de inspección por parte de los Estados miembros y en la armonización europea sobre legislación y sanciones, contar con ella es la mejor garantía de que esto puede resolverse en un futuro próximo.

La Comisión de Pesca ha mejorado también el tratamiento que la propuesta daba al sector y, ahí, señor Comisario, no estoy de acuerdo con que la Comisión no acepte las propuestas, porque al sector se le dota de voz auténtica y representatividad en una materia que tanto le afecta y en la que resultaría descabellado tenerle en contra y se han incrementado las responsabilidades de la Agencia para intentar que la Comisión se tome de una vez en serio sus responsabilidades en materia de pesca ilegal no declarada y no reglamentada.

Quiero reconocer también el trabajo de la ponente por sus esfuerzos para encontrar vías de compromiso, y quiero terminar expresando mi satisfacción por que esta Agencia tenga su sede en España, en una ciudad tan emblemática para la pesca mundial como es la ciudad de Vigo.

 
  
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  Miguélez Ramos (PSE). (ES) Señor Presidente, entre la larga lista de enmiendas que nos ha relatado el Comisario espero que figure la que fija la sede en Vigo, ya que una de las personas que presentó esta sede es esta que les habla.

Señor Comisario, creo que el papel de la Comisión de Pesca ha quedado muy en evidencia en lo que se refiere al trabajo relativo a este informe, tanto el de la ponente, la señora Attwooll, que se ha esforzado muchísimo y ha hecho un trabajo encomiable desde mi punto de vista y, desde luego, desde un punto de vista, yo lo sé, absolutamente europeísta, como el de los y las que hemos tratado de enmendar con la mejor voluntad su informe desde dos puntos de vista.

Nuestra comisión ha trabajado, por un lado, con rapidez, para que la Agencia se constituya cuanto antes y cuanto antes se ponga a funcionar y, además, intentando mejorar el texto de la propuesta de la Comisión, porque es verdad que siempre hemos opinado que la propuesta inicial, que no era suya aunque sí era de la Comisión Europea, era demasiado modesta y en ese sentido han ido nuestras enmiendas.

Es verdad que esta Agencia es la primera que se crea con cometidos exclusivamente pesqueros y, en ese sentido nos hemos mirado, señor Comisario, en el espejo de otras agencias que quizá nacieron también con una vocación modesta pero, sin embargo, vieron en un corto espacio de tiempo cómo se les exigían cometidos más y más amplios. Estoy pensando, por ejemplo, en la Agencia Europea de Seguridad Marítima.

La ampliación de sus cometidos ayudaría, señor Comisario, y no lo olvide usted, a hacerla más querida por parte del sector pesquero. Porque es verdad que la propuesta para crearla parte de los debates de la reforma de la política pesquera común como un método para mejorar la coordinación entre Estados miembros en unos aspectos muy concretos de vigilancia y control, pero tampoco deja de ser verdad que nosotros lo que intentamos es ampliar esas competencias para que, además, puedan recibir los Estados miembros y la Comisión asistencia técnica y científica para ayudarles en la correcta aplicación de las normas de la política pesquera común.

 
  
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  Stevenson (PPE-DE).(EN) Señor Presidente, estoy seguro de que el Comisario Borg ya habrá experimentado el incierto placer de dirigirse a una Cámara vacía para hablar de la pesca a última hora de un martes, pero por lo menos él tiene el privilegio de hablar durante más de dos minutos. También resulta reconfortante oír al Comisario Borg decir que está en condiciones de aceptar casi la mitad de las enmiendas de la comisión. Esa declaración no debe de tener precedentes en las declaraciones de los Comisarios de pesca de los últimos diez años.

Mi partido, el Partido Conservador del Reino Unido, tiene el compromiso electoral de retirar al Reino Unido de la política pesquera común y devolver la gestión de la pesca al control nacional y local. No obstante, reconozco que, incluso si el Reino Unido deja de participar en la política pesquera común, seguiremos teniendo muchos barcos pescando fuera del límite de las 200 millas de las aguas jurisdiccionales del Reino Unido y en aguas de la UE e internacionales. Por lo tanto, y aceptando que esta propuesta es un hecho consumado, es importante que apoyemos una propuesta viable para la creación de una Agencia Comunitaria de Control de la Pesca. Quisiera felicitar a la señora Attwooll por el excelente trabajo que ha realizado con este informe.

No hay duda de que la existencia de distintos puntos de vista sobre el control de la pesca en los diversos Estados miembros ha causado un malestar generalizado en el pasado. A menudo, he oído decir a pescadores escoceses que los pescadores españoles salen demasiado bien parados. Luego, si vas a España, lo que dicen los pescadores de allí es que los pescadores escoceses salen demasiado bien librados, así que está claro que necesitamos que haya igualdad de condiciones.

También es necesario que las normas se apliquen de forma equitativa. Ese es el objetivo de las propuestas de la Comisión. Sin embargo, creo que no debemos pasarnos de listos mejorando los planes de la Comisión con enmiendas que otorgan aún más poder a la nueva agencia. En relación con eso, me inquieta que la Comisión haya rechazado la consulta a los consejos consultivos regionales, que constituyen un pilar muy importante de la reforma de la política pesquera común y que permiten participar de forma significativa a pescadores, científicos y otras personas relacionadas con el sector. Espero que la Comisión reconsidere esta decisión.

 
  
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  Casaca (PSE).(PT) Señor Presidente, Comisario, quiero unirme a las palabras de felicitación a la señora Attwooll por su excelente informe. Como ha dicho el señor Kindermann, tenemos nuestras diferencias de opinión, pero sin duda hay que resaltar la calidad del informe.

Quiero empezar señalando que ahora existen dispositivos electrónicos que permiten controlar con eficacia toda la flota de la Comunidad y proporcionan un acceso rápido a datos científicos que son muy importantes para una pesca sostenible. Precisamente por este motivo considero del todo incomprensible que aunque tengamos un poder exclusivo, que la Comisión de Pesca calificó con razón de anómalo e injustificado, la Comunidad no consiga ejercer ningún poder concreto, en especial en los ámbitos donde más necesario es y donde más eficaz sería, que es en este terreno del control remoto.

En relación con esto, quiero plantear las siguientes cuestiones. En primer lugar, evidentemente hay que acogerlo con satisfacción, como ya han dicho mucho diputados a esta Cámara, pero hacerlo desde un punto de vista operativo; en otras palabras, debería convertirse en un instrumento operativo y no en una simple fábrica de papel y una forma de mantener en vida el mundo de la burocracia, sin resolver nada ni hacer nada. Mi segunda preocupación importante es que esta agencia no debería significar que las políticas de la Comunidad están a merced del juego de poder y de intereses creados, porque en esas situaciones los que más salen perdiendo suelen ser las regiones más pequeñas, además de la propia pesca sostenible.

 
  
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  Varela Suanzes-Carpegna (PPE-DE). (ES) Señor Presidente, señor Comisario, queridos Colegas, fue el Consejo Europeo de diciembre de 2003 quien, a propuesta del Partido Popular, tomó la iniciativa de crear una Agencia Europea de Pesca. Ha sido una buena idea.

La Comisión Europea presentó una propuesta que era manifiestamente mejorable. Nuestra Comisión de Pesca redactó un proyecto de informe que era, también, manifiestamente mejorable. Por ello, podemos decir que el proyecto que ahora se presenta al Pleno es bastante mejor que los iniciales.

Destacaría como mejoras sustanciales la inclusión del sector con voz y voto, la extensión de las competencias a la pesca IUU y la inclusión de las tareas de formación.

Lamento, de todas formas, que solamente se hayan incluido entre las competencias las de investigar y desarrollar soluciones técnicas en relación con el control e inspección, y que el Grupo Socialista se haya opuesto a nuestras enmiendas para dotar a la Agencia de verdaderas competencias en materia de investigación científica pesquera que pudieran contribuir a mejorar los informes en los que se basa la Comisión para hacer sus propuestas legislativas sobre medidas técnicas, conservación de recursos, TACs y cuotas, pues ello haría que la Agencia y sus técnicos participasen más activamente en la política pesquera común dotándola así de mayor credibilidad para el propio sector pesquero.

La Agencia salió reforzada de la reunión de la Comisión de Pesca y espero que lo salga mañana del Pleno, aunque no como a mí me hubiera gustado. Confío en que el Consejo pueda mejorar la situación.

 
  
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  Stihler (PSE).(EN) Señor Presidente, estoy segura de que todos estamos de acuerdo en que, en principio, la creación de una Agencia Comunitaria de Control de la Pesca es una buena noticia. Con frecuencia se habla de la importancia del principio de igualdad de condiciones para la aplicación de las normas aprobadas en virtud de la política pesquera común. La creación de la agencia en Vigo puede ayudar a establecer procedimientos de control e inspección más uniformes y eficaces, incrementando así el cumplimiento de las normas. También podría reducir el gasto total en medidas de control e inspección.

Un estudio de viabilidad publicado tras la redacción de la propuesta de reglamento sugirió que ese potencial solo se hará realidad si se cumplen determinados criterios organizativos y operativos. A raíz de esa advertencia, la ponente, la señora Attwooll, propuso una serie de enmiendas para aclarar el texto. Muchos miembros de la Comisión de Pesca sostuvieron que las enmiendas de la ponente diluían el papel de la agencia. Yo no estuve de acuerdo y apoyé el proyecto de informe en la comisión. A mi juicio, el proyecto de informe aclaraba la función y la responsabilidad de los Estados miembros, la Comisión y la agencia y mejoraba la participación regional.

Los planes de despliegue conjunto, que incluían la unificación, por parte de los Estados miembros, de sus recursos de inspección y control, son cruciales para el éxito de la labor de la agencia. La enmienda que volvió a presentar la ponente tenía por objeto garantizar que quedara claro el papel de la agencia como facilitador.

Siempre he apoyado que los consejos consultivos regionales desempeñen un papel significativo en la gestión de la pesca. Por eso, creo que también sería bueno consultar a dichos consejos durante la elaboración de los planes de despliegue conjunto. Eso contribuiría a asegurar el cumplimiento.

Asimismo, la información sobre las actividades de la agencia debe divulgarse ampliamente y es preciso presentar una evaluación anual al Parlamento Europeo, la Comisión, los Estados miembros, el Comité Consultivo sobre Pesca y Acuicultura y los consejos consultivos regionales. He tenido algunas diferencias con algunos colegas del Grupo del PSE a la hora de definir la función de la agencia, pero todos acogemos con sumo agrado su creación, que espero dé lugar a un cumplimiento más efectivo de las normas en nuestras pesquerías.

 
  
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  Borg, miembro de la Comisión. (EN) Señor Presidente, en mis conclusiones voy a intentar responder muy brevemente a todas las intervenciones.

En respuesta a la ponente, la señora Attwooll, repito que, en lo que respecta a la pesca ilegal, no regulada y no declarada, es importante incluir estas actividades en el programa de trabajo, pero la Comisión no está de acuerdo en que deban señalarse como tareas prioritarias, dado que las prioridades pueden cambiar y, por lo tanto, sería una innecesaria restricción de las prioridades con respecto a las funciones de la agencia.

En lo que respecta a la competencia de la agencia para crear un centro de formación, tampoco en este caso considera la Comisión que esta función deba estar centralizada en la agencia, sino que se requiere flexibilidad y conviene que permanezca como hasta ahora. Creemos que los cambios de redacción –me refiero a las enmiendas 36, 38, 39, 40 y 41, que reemplazan «preparar», por ejemplo, por «redactar», actuando «a través de su director ejecutivo» o la necesidad de «la aprobación de los Estados miembros» y el cambio de «instrucciones» por «orientación operativa»– debilitan el texto, a pesar de las buenas intenciones de la señora Attwooll. La aceptación de la enmienda 39, por ejemplo, daría lugar a un proceso intergubernamental.

Quisiera responder ahora a los comentarios del señor Maat. El plazo de cinco años es necesario porque la Comisión considera que tres años es un plazo excesivamente corto para llevar a cabo la necesaria evaluación. Sobre la falta de confianza entre los representantes del sector pesquero y la Comisión, quiero decir que la Agencia Comunitaria de Control de la Pesca es un primer paso. En lo que respecta a la composición del consejo de administración y sus funciones –estamos hablando de control y no únicamente de administración–, el sector pesquero es parte interesada y, por lo tanto, concederle el derecho a voto lo convertiría, por decirlo así, en juez y parte.

Sobre el comentario realizado por el señor Kindermann –si le he entendido correctamente– en el sentido de que la competencia de la agencia debe seguir estando clara y que, por lo tanto, no deben incluirse los consejos consultivos regionales, la Comisión está de acuerdo con esa posición.

En lo que respecta a los comentarios del señor Booth y del señor Allister sobre la actual política pesquera común, que, según ellos, deberíamos desechar para sustituirla con una nueva política concebida por los pescadores, es decir, la nacionalización de la política de pesca, quisiera decir que ese es un debate mucho más amplio que supera el ámbito de esta propuesta. El señor Allister ha hecho los mismos comentarios que el señor Booth.

Sobre los comentarios de la señora Fraga Estévez y la señora Miguélez Ramos, que afirman que las enmiendas mejoran el espíritu de la propuesta, es cierto que algunas lo hacen, como he dicho, y de hecho podemos aceptar más de la mitad. En lo que respecta a las demás, la Comisión piensa que no mejoran la propuesta, puesto que tienden a ir más lejos del ámbito de la propuesta y de la agencia, o porque destruyen el necesario equilibrio del mecanismo de control.

En lo que respecta a los comentarios sobre el sector, me remito a lo que acabo de decir sobre los comentarios del señor Maat.

Sobre lo dicho por el señor Stevenson, que está dispuesto a apoyar una propuesta viable, la Comisión, con las enmiendas que ha aceptado, consigue exactamente eso. La Comisión rechaza la consulta obligatoria a los consejos consultivos regionales, porque esos organismos desempeñan, al menos hasta la fecha, una función consultiva y no de gestión.

Sobre la afirmación del señor Casaca de que esta tiene que ser una verdadera agencia de control y no otro órgano burocrático, debo decir que la Comisión está de acuerdo y que la propuesta trata de dotar de una función eficaz a la agencia.

El señor Varela Suanzes-Carpegna ha afirmado que una lista de competencias no es suficiente: tomamos nota. En este punto, puedo decir que no mencionar un avance tecnológico concreto, por ejemplo, que pueda usarse con fines de control, no significa que eso no vaya a ser posible.

En lo que respecta a la afirmación de la señora Stihler sobre la dilución o no, solo puedo repetir lo que he dicho a la señora Attwooll. Sobre los consejos consultivos regionales, no excluiría la consulta voluntaria a los mismos y la redefinición de los planes de despliegue, pero no recomendaría la obligatoriedad de la consulta a los consejos consultivos regionales, por lo menos en este momento.

 
  
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  El Presidente. – El debate queda cerrado.

La votación tendrá lugar mañana miércoles a las 11.30 horas.

 
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