Roberta Angelilli (UEN), por escrito. – (IT) La delegación de Alleanza Nazionale en el Parlamento Europeo se ha abstenido en la votación sobre el informe Brok porque considera que los siguientes puntos constituyen requisitos indispensables para la adhesión de Croacia a la Unión Europea:
1. Solicitar la suspensión de las negociaciones de adhesión a la UE mientras que las autoridades croatas mantengan la prohibición que impide a los ciudadanos comunitarios de nacionalidad italiana acceder al mercado inmobiliario, en evidente contradicción de los principios del acervo comunitario;
2. Solicitar, como condición para la adhesión de Croacia, la plena compensación por las propiedades confiscadas a miles de ciudadanos de origen italiano expulsados de territorio croata desde 1946;
3. Solicitar a las autoridades croatas que acepten su responsabilidad, actualmente demostrada y documentada históricamente, por las deportaciones, atrocidades, masacres y limpieza étnica perpetradas contra miles de personas de origen italiano por el régimen comunista desde 1946.
Glyn Ford (PSE), por escrito. (EN) Como ponente en la anterior legislatura sobre las relaciones con la República de Corea en el campo de la ciencia y la tecnología, reconozco la importancia que tienen para Europa las relaciones con esta pujante potencia económica en Asia. Por eso, acojo con satisfacción este informe y le doy mi apoyo, pues amplía nuestro acuerdo marco de comercio y cooperación a los nuevos Estados miembros de la UE. Ya contamos con un mecanismo para trabar lazos cada vez más fuertes entre la Unión Europea y la República de Corea. Lo importante ahora es usarlo.
Luís Queiró (PPE-DE), por escrito. (PT) He votado a favor de este informe que nos ocupa a la luz de las cuestiones que plantea, a saber, la verdadera magnitud financiera de las dificultades a las que se enfrentan las Maldivas tras la tragedia acontecida hace poco más de un año, que agravan los problemas anteriores del país, y a la luz de la responsabilidad del Parlamento Europeo en este terreno, en términos técnicos, que difiere de la responsabilidad de las instituciones financieras.
Alyn Smith (Verts/ALE), por escrito. Está claro, y espero que nadie lo discuta, que las Maldivas deben estar incluidas en la lista de países que pueden acogerse a nuestra ayuda tras la catástrofe del tsunami de 2004. He apoyado con satisfacción esta propuesta y espero que podamos ponernos en marcha lo antes posible para prestar una ayuda útil y práctica a ese país.
Frank Vanhecke (NI). – (NL) Señor Presidente, el informe Catania sobre la ciudadanía de la Unión, que acabamos de rechazar hace un momento, puede tener el privilegio de ser uno de los textos más incoherentes y precipitados que esta Cámara jamás haya elaborado, que ya es algo. En resumidas cuentas, este informe concede el derecho general de voto en todas las elecciones a cualquier persona que se encuentre en nuestro territorio de forma más o menos legal. No se tienen en cuenta la voluntad de integración ni el dominio lingüístico ni las condiciones de nacionalidad. Por decirlo en pocas palabras, a los extranjeros se les conceden todos los derechos, pero ninguna obligación.
Esto era realmente una locura. Este ha sido el trabajo de un puñado de ideólogos ciegos que se han negado a reconocer la realidad del modelo multicultural que ha fracasado por completo. Asimismo, la soberanía de nuestros Estados miembros ha salido muy mal parada en este informe. La ciudadanía nacional y todos sus derechos inherentes, incluido el derecho de voto, deben seguir siendo competencia exclusiva de los Estados miembros. Europa no debe meterse en esto. Tenemos todo el derecho y todas las razones para rechazar este absurdo informe.
Luciana Sbarbati (ALDE). – (IT) Señor Presidente, Señorías, me gustaría expresar mi más profunda decepción por el hecho de que el informe Catania no haya sido aprobado por el Parlamento. En ocasiones podemos ver tendencias progresistas en el Parlamento, aunque en otras ocasiones predominan tendencias decididamente conservadoras.
Lamento profundamente que mi propio Grupo se haya dividido en la votación sobre este informe, que debería haber sido aceptado según el espíritu más auténticamente liberal. Es cierto que la ciudadanía europea está «en progreso» y que es complementaria a la ciudadanía de los Estados miembros, pero se trata de un objetivo que deberíamos intentar conseguir mediante acciones políticas. De este modo, Europa debe dotarse de la dignidad que se merece, intentando interpretar del mejor modo posible las nuevas necesidades y los nuevos derechos de ciudadanía que emergen, en cualquier caso, incluso antes de que el derecho se haga cargo de ellos.
Por este motivo, al explicar mi decepción por el rechazo del informe, deseo expresar toda mi solidaridad al señor Catania, con el que he colaborado y cuyas enmiendas también he apoyado.
Agnes Schierhuber (PPE-DE). – (DE) Señor Presidente, doy la explicación de voto en nombre de la delegación del Partido Popular austriaco.
Creemos que el informe Catania sobre el cuarto informe de la Comisión relativo a la ciudadanía de la Unión es completamente desacertado. En un momento en el que la inmensa mayoría de la población mira con escepticismo gran parte de lo que pasa en la UE, la cuestión de la ciudadanía debe abordarse con más seriedad. Resulta lamentable que este informe no haga más que debatir la situación de los inmigrantes y no tenga nada que decir sobre las necesidades de los ciudadanos de Europa. Me gustaría dejar claro que los que aspiran a entrar en la Unión Europea procedentes de terceros países, a saber, inmigrantes o solicitantes de asilo, se merecen que se les tome más en serio y se les respete más que en este informe, y por ese motivo hemos votado en contra del mismo.
Bairbre de Brún (GUE/NGL), por escrito. (EN) Mi Partido apoya firmemente las medidas que contribuyan a armonizar al alza los derechos humanos y civiles de todos los ciudadanos de los Estados miembros. Respaldo plenamente los elementos del informe Catania que hacen hincapié en los derechos de los trabajadores inmigrantes, en particular sus derechos civiles y políticos en materia de ciudadanía y participación electoral.
El Sinn Féin cree firmemente que los trabajadores inmigrantes deben tener pleno acceso a los derechos civiles y humanos y que los Estados miembros deben aplicar un proceso justo e igualitario que permita naturalizar a los trabajadores inmigrantes que deseen utilizar estos mecanismos.
Me he abstenido en la votación final sobre el informe elaborado por el señor Catania sobre el Cuarto informe de la Comisión sobre la ciudadanía de la Unión (A6-0411/2005), porque la política del Sinn Féin considera que las cuestiones de ciudadanía, elecciones y participación política son asuntos que competen principalmente a las instituciones gubernamentales de cada Estado miembro.
Bruno Gollnisch (NI), por escrito. – (FR) Nada en el informe del señor Catania sobre la ciudadanía europea merece nuestro apoyo. Pero hay dos propuestas especialmente chocantes. En primer lugar, la petición de una ciudadanía de la Unión Europea que incluya el derecho de sufragio activo y pasivo en las elecciones locales, nacionales y europeas para todos los residentes en un país, independientemente de su nacionalidad. Después, la exigencia de una armonización de la legislación en materia de nacionalidad de los Estados miembros, con el pretexto de que las diferencias generan discriminaciones para los no europeos en el acceso a la ciudadanía europea, tal como se define hoy en los Tratados.
¿Hasta dónde llegará el delirio? El único acceso posible a la ciudadanía de un país es tener la nacionalidad de ese país. Las condiciones que deban reunirse para acceder a la nacionalidad de un Estado son competencia exclusiva del poder soberano de ese Estado. Conceder el derecho de voto a extranjeros independientemente de su nacionalidad equivale a conferirles un doble derecho, el que pueden ejercer en el país de acogida y el que pueden seguir ejerciendo en su país de origen. Por tanto, se trata en realidad de una medida injusta. Ser el huésped de alguien no da derecho a inmiscuirse en sus asuntos.
Por todas estas razones, es una suerte que este informe haya sido rechazado.
Hélène Goudin y Lars Wohlin (IND/DEM), por escrito. (SV) El informe tiene por objeto reforzar la ciudadanía de la Unión independizándola de la ciudadanía nacional y exigiendo normas armonizadas para la concesión de la ciudadanía nacional. Sin embargo, nosotros, por nuestra parte, consideramos que la ciudadanía es una de las piedras angulares de la soberanía de los Estados nacionales y que cada Estado miembro debe ser libre de tomar sus propias decisiones sobre la concesión de la ciudadanía.
Por supuesto, existen muchos argumentos a favor de reformar las normas relativas a la adquisición de la ciudadanía nacional tras un periodo bastante largo de residencia continua en un país y en relación con la oportunidad de votar y presentarse como candidato en elecciones locales, regionales y nacionales.
La cuestión de la ciudadanía de los Estados miembros es, sin embargo, exclusivamente competencia de los países afectados que aplican su propia legislación. Depende de cada Estado miembro crear las condiciones en las que se adquiere o se pierde la ciudadanía, así como el efecto que debe tener esta. La Unión Europea no tiene competencias a este respecto. La ciudadanía de la Unión está, por tanto, sometida a la ciudadanía nacional y, de este modo, debe ser definida por las leyes nacionales en esta materia.
Asimismo, el informe contiene una serie de formulaciones relativas a la introducción de un impuesto europeo, listas europeas uniformes de partidos para las elecciones al Parlamento Europeo, la importancia de una Constitución Europea en la consolidación de la solidaridad europea y unas bases comunes para la incorporación de la dimensión europea en los programas escolares.
Carl Lang (NI), por escrito. – (FR) El concepto de «ciudadanía de la Unión», que ni siquiera tiene el calificativo de europea, es una máquina de destruir nuestros derechos nacionales a la identidad y la soberanía. El informe del señor Catania nos ofrece una demostración de ello, pues quiere imponer un vasto conjunto del que habrán desaparecido los franceses, los polacos, los españoles, los italianos, los alemanes o los británicos, sustituidos por «ciudadanos de la Unión», que gozarían, en particular, de los mismos derechos políticos.
Así, el apartado 17 del informe, que pide a los Estados miembros que concedan el derecho a votar y presentarse candidato en las elecciones nacionales a todo residente «ciudadano de la Unión», «sin distinción de nacionalidad», permitiría a un checo establecido en Francia participar en la elección del Presidente de la República.
Este derecho de voto se extendería incluso a los inmigrantes extraeuropeos, puesto que el artículo 18 propone extender a «los nacionales de terceros países que residan en la UE los mismos derechos de los ciudadanos de la Unión.»
Los pueblos europeos, amenazados de inundación por una inmigración planetaria, no necesitan una ciudadanía europea, sino la reafirmación de sus derechos nacionales. En particular, son cada vez más los franceses que exigen una reforma del Código de la nacionalidad basada en el principio de «ser francés se hereda o se merece».
Marine Le Pen (NI), por escrito. – (FR) Justo cuando Europa atraviesa una crisis tanto de representación, concretada en particular en el rechazo francés y neerlandés a la Constitución europea, como de participación democrática, con una generalización creciente de la abstención en las elecciones europeas, no cesa, año tras año, y ello desde el Tratado de Maastricht de 1992, de querer hacernos tragar a la fuerza la píldora de la ciudadanía europea.
Se trata, una vez más, de una máquina de triturar naciones e identidades nacionales para acabar sustituyéndolas por una identidad europea. Este nuevo «paquete», directamente salido de las altas esferas burocráticas de los eurofederalistas, participa plenamente en el proceso de inundación y de inmigración-invasión deseado por la Comisión. Porque el derecho de todo ciudadano a circular y residir libremente en el territorio de los Estados miembros está concebido como el derecho central de la ciudadanía europea. Se comprenden, por tanto, los esfuerzos de Bruselas por simplificar y flexibilizar las modalidades de entrada y residencia en el territorio europeo, ya que condicionan la adquisición de esta nueva ciudadanía.
La dictadura de la estupidez destruye sistemáticamente los valores y las identidades nacionales. No hay duda de que hay que ser valientes hoy para declarar y defender una conciencia nacional.
Kartika Tamara Liotard, Esko Seppänen y Jonas Sjöstedt (GUE/NGL), por escrito. (EN) Hemos votado a favor del informe siendo conscientes de que algunos elementos del texto no deberían figurar en el mismo, como los que se refieren a la ciudadanía de la UE, la actitud favorable a la Constitución de la UE, la elección de algunos diputados al PE sobre la base de listas transnacionales, la propuesta sobre el impuesto europeo, etc.
Hemos votado en contra de estos elementos del texto, pero finalmente hemos dado nuestro voto favorable al informe en aras de la mejora de la situación de los inmigrantes en Europa. Recordamos que se trata de un informe de iniciativa propia sin consecuencias jurídicas.
David Martin (PSE), por escrito. (EN) Acojo con satisfacción el informe sobre la ciudadanía de la UE en relación con los nacionales de terceros países. La cuestión fundamental del informe es que los ciudadanos de la UE deben poder votar en las elecciones nacionales de un Estado miembro distinto del suyo, siempre que residan en el mismo.
Lamento que el informe haya sido rechazado, ya que era un buen informe. Sin embargo, me he abstenido de votar sobre las enmiendas a las partes 1 y 2 del apartado 11, a las partes 1 y 2 del apartado 12 y a los apartados 13, 21 y 28, al considerar que, hoy por hoy, iban demasiado lejos.
Andreas Mölzer (NI), por escrito. (DE) De la baja participación electoral, de los mensajes negativos emitidos por los referendos y de la creciente frustración con la UE se desprende que no nos vamos a ganar a los ciudadanos europeos ofreciéndoles un himno o una bandera comunes. Más allá de interesarse por cómo se presenta la UE a sí misma –por ejemplo, mediante un proyecto de constitución–, los ciudadanos están más preocupados por sus logros y sus fracasos.
La consolidación de la ciudadanía de la Unión no hará que los euroescépticos se conviertan en los entusiastas que algunos querrían; esto no será así mientras carezcamos de normas mínimas europeas para la concesión de la ciudadanía y mientras no consigamos frenar los abusos del sistema de asilo. Los atentados de Londres, el asesinato del director Theo van Gogh y las luchas callejeras en Francia son ejemplos del hecho de que debemos, en el futuro, examinar con detenimiento las solicitudes de ciudadanía en función de la capacidad de integración del solicitante en la cultura mayoritaria. La negativa de los musulmanes de Europa a aceptar el ordenamiento jurídico y cultural europeo es un hecho que la UE no puede pasar por alto con el pretexto del «multiculturalismo».
Asimismo, hay que poner fin a la práctica de las legalizaciones masivas, por las que millones de inmigrantes europeos se han convertido en «europeos», y es necesario que el sistema de información de Schengen pueda indicar en el futuro cuándo hay embajadas en las que se aplica un enfoque de concesión masiva de visados de entrada.
Mientras el Acuerdo de Schengen siga siendo ineficaz y no logremos hacer frente al problema de las sociedades paralelas, mientras no podamos garantizar la protección de nuestros ciudadanos europeos autóctonos, mientras se mantenga esta situación, el sueño de la ciudadanía de la Unión podrá seguir siendo prescindible.
Luís Queiró (PPE-DE), por escrito. (PT) Las cuestiones planteadas por este informe son muy interesantes y merecen un debate exhaustivo. Sin embargo, me gustaría señalar que no compete al Parlamento –ni a ninguna de las instituciones europeas– celebrar este debate en primera instancia. La adquisición de la ciudadanía es una cuestión exclusivamente nacional, una piedra angular de la soberanía de cada Estado miembro y, en mi opinión, no es negociable. No comparto buena parte de las premisas y conclusiones del informe y, por tanto, he votado en contra. Me gustaría por tanto que se rechazara el informe.
Carl Schlyter (Verts/ALE), por escrito. (SV) Es un derecho humano poder participar de forma activa en el proceso democrático y estamos trabajando con ahínco para crear una situación en la que todo el mundo tenga este derecho. Sin embargo, no se puede justificar el hecho de que la UE utilice este principio para lograr sus propias ambiciones y para apoderarse del control de las estructuras democráticas de los Estados miembros y aumentar así sus poderes.
Alyn Smith (Verts/ALE), por escrito. (EN) El presente informe trata de la ciudadanía, una cuestión muy controvertida. En general, considero que estas cuestiones deben ser competencia exclusiva de los Estados miembros y que todos los derechos de la UE emanan de la ciudadanía de los Estados miembros. Sin embargo, este informe, que no es vinculante, intenta buscar formas de animar a los Estados miembros a que fijen normas de equidad y justicia, ya que existen casos de algunos Estados miembros que dan un trato deplorable a las minorías. El rechazo final de este informe es reflejo, en mi opinión, de una decisión madurada por parte del Parlamento, aunque sigo pensando que es necesario examinar estas cuestiones, que no tardarán en volver a plantearse en esta Cámara.
Georgios Toussas (GUE/NGL), por escrito. – (EL) La «ciudadanía europea» es un engendro ideológico carente de valor práctico, dado que la ciudadanía la conceden los Estados miembros. El papel que el informe intenta conferir a la ciudadanía «europea» tiene meramente características ideológicas y crea la falsa impresión de un «ciudadano europeo» inexistente en un «territorio político y cultural» único, de modo que parece como si no hubiera vuelta atrás de una UE imperialista y reaccionaria.
Básicamente, el informe trata de introducir por la puerta de atrás aspectos de la reaccionaria Constitución europea rechazada por los ciudadanos de la UE, como el cobro directo de impuestos de los ciudadanos europeos por la UE, la consolidación de partidos europeos, papeletas de voto supranacionales y así sucesivamente. La suntuosidad europeísta que predomina en el informe es tal que se atreve –y esto no tiene precedentes en ninguna parte del mundo– a establecer el derecho a adquirir la inexistente ciudadanía «europea» de personas que han sido residentes «durante un periodo prolongado» y que, sin embargo, se verán privadas de ciudadanía y de derechos en los países en los que residen.
Nosotros apoyamos sin reservas a los inmigrantes y estamos luchando a favor de la salvaguarda y la ampliación de plenos derechos políticos y plenos, como el derecho a votar y a presentarse como candidato a las elecciones, el pleno empleo, el salario, los derechos de seguridad social y pensión, la concesión de la ciudadanía a personas que han sido residentes durante un periodo de tiempo prolongado y así sucesivamente. Sin embargo, la adquisición de estos derechos no tiene nada que ver con la capciosa ideología de la «ciudadanía europea»; este es el campo de batalla del movimiento popular en todos los Estados miembros y en Europa.
Hiltrud Breyer (Verts/ALE). – (DE) Hemos apoyado plenamente, por supuesto, el informe de la señora Prets y también estamos muy satisfechos con las mejoras considerables aportadas por las enmiendas.
En el Grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea nos preocupaba particularmente que quedara claro que los clientes de las prostitutas deben enfrentarse a sanciones sin son conscientes de que la prostitución es forzada. Nuestra intención a este respecto es que habría que poner de manifiesto que contra la prostitución forzada no solo hay que luchar con la ley en la mano, sino que la sociedad en su conjunto también debe considerarla un acto deleznable, y nos complace particularmente el hecho de que esta Cámara haya tomado nota de nuestra iniciativa del 8 de marzo contra la prostitución forzada durante la Copa del Mundo de fútbol, que se va a disputar en Alemania este año. Nuestra intención es dejar claro que hay que mostrar la tarjeta roja a la prostitución forzada y para jugar limpio tendremos que hacer todo lo que esté en nuestra mano por erradicarla.
Espero que esta Cámara envíe un mensaje claro en relación con los acontecimientos deportivos, ya que solo podemos luchar contra la prostitución forzada lanzando un mensaje claro a todos los estratos sociales y no solo mediante iniciativas legislativas, y el auge de la prostitución forzada nos debe animar a comprometernos en la lucha contra ella.
Andreas Mölzer (NI). – (DE) Señor Presidente, la trata de seres humanos, que es una práctica muchos más lucrativa que el tráfico de armas y de drogas, se ha visto beneficiada por la desintegración de las estructuras estatales en una sociedad multicultural, la transición a una economía de mercado en los Estados de Europa del Este, el consiguiente impulso de la corrupción y de las organizaciones criminales y la inmigración masiva provocada por la apertura de fronteras. Puesto que las víctimas se encuentran demasiado avergonzadas o atemorizadas para testificar y dado que la mitad de las mujeres y menores víctimas del tráfico que regresan a su hogar vuelven a ser objeto de estas prácticas, los autores generalmente salen impunes. De este modo, el tipo de acción preventiva que necesitamos conlleva la educación de las víctimas en una fase lo más temprana posible y la sensibilización de la sociedad frente a este problema.
No solo eso, sino que también, a largo plazo, deben aplicarse sanciones severas a los casos de pedofilia en la UE y la trata organizada de seres humanos debe ser castigada incluso con mayor dureza.
Gerard Batten (IND/DEM), por escrito. (EN) El Partido por la Independencia del Reino Unido ha votado en contra del informe Prets sobre la trata de mujeres y niños debido a la naturaleza de los artículos que contiene. Nos oponemos firmemente a la trata de personas y a la esclavitud, pero no creemos que sea competencia de la UE interferir en cuestiones internas de los Estados miembros y, en particular, no consideramos que la UE deba establecer una política en materia de prostitución.
Todos los puntos mencionados en el informe ya están regulados en la legislación británica y son estas leyes las que deberían aplicarse plenamente, en lugar de crear más legislación comunitaria, que tendría consecuencias negativas.
Godfrey Bloom (IND/DEM), por escrito. (EN) El Partido por la Independencia del Reino Unido ha votado en contra del informe Prets sobre la trata de mujeres y niños debido a la naturaleza de los artículos que contiene. Nos oponemos firmemente a la trata de personas y a la esclavitud, pero no creemos que sea competencia de la UE interferir en cuestiones internas de los Estados miembros y, en particular, no consideramos que la UE deba establecer una política en materia de prostitución.
Todos los puntos mencionados en el informe ya están regulados en la legislación británica y son estas leyes las que deberían aplicarse plenamente, en lugar de crear más legislación comunitaria, que tendría consecuencias negativas.
Maria Carlshamre (ALDE), por escrito. He votado en contra de la postura del Grupo de la Alianza de Demócratas y Liberales por Europa en relación con el apartado 46 relativo a la penalización de los clientes que deliberadamente explotan a personas en estado de necesidad. Aunque la línea del Grupo ALDE era votar NO a este apartado, yo considero que la compra deliberada de mujeres y niñas que se ven obligadas a prostituirse debe ser considerada un delito similar a la compra de objetos robados, es decir, al tráfico ilegal. Creo que incluso los Estados miembros que son contrarios a la tipificación de la compra de sexo podrían considerar esta práctica un delito penal.
Charlotte Cederschiöld, Christofer Fjellner, Gunnar Hökmark y Anna Ibrisagic (PPE-DE), por escrito. (SV) Hemos votado a favor del informe sobre la trata de mujeres y niños. Creemos que la mejor forma de garantizar la seguridad de los ciudadanos pasa por realizar esfuerzos comunes en la lucha contra la delincuencia transfronteriza, particularmente la delincuencia que viola las libertades y derechos básicos de las personas y su dignidad. Con vistas a dotar de efecto jurídico a las demandas planteadas y a destacar la importancia de esta cuestión, la delegación de los conservadores suecos también desea hacer hincapié en el hecho de que el asunto de la trata debe abordarse asimismo en la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento Europeo, más que en su Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género.
Sin embargo, nos oponemos a las propuestas del informe que interfieren en las competencias de los Estados miembros, por ejemplo las relativas a la organización de la policía.
Hélène Goudin y Lars Wohlin (IND/DEM), por escrito. (SV) El informe de propia iniciativa se refiere a cuestiones importantes y la Lista de Junio apoya muchas de las ideas básicas que evidencia el informe. Hay que luchar contra la explotación sexual y la trata de seres humanos. Tampoco debemos pasar por alto los delitos graves que a menudo son consecuencia de la trata transfronteriza de seres humanos. Por tanto, es extremadamente importante facilitar la cooperación y el intercambio de información en la UE.
La Lista de Junio considera, sin embargo, que, también en estas cuestiones, los Estados miembros deben tener libertad para elegir los métodos empleados y la forma de trabajar. La Lista de Junio, por tanto, decide votar en contra del informe de propia iniciativa.
Timothy Kirkhope (PPE-DE), por escrito. (EN) Mis colegas conservadores británicos y yo aplaudimos el hecho de que en esta resolución se reconozca que la lucha contra la trata de personas constituye un factor clave de la lucha contra la delincuencia organizada. Por tanto, cualquier medida adoptada a este respecto debería ser coherente con la estrategia general contra la delincuencia organizada. En consecuencia, esto no debería servir de pretexto para perseguir el objetivo de convertir este ámbito en una política plenamente comunitaria. Por el contrario, estamos a favor de políticas nacionales efectivas y de una sólida cooperación para erradicar este nefasto comercio.
Fernand le Rachinel (NI), por escrito. – (FR) Cada vez más, la trata de mujeres y la explotación sexual de los niños representan en Europa una importante economía paralela. Según la ONU, cerca de 4 millones de mujeres y niños son víctimas de abusos o actos violentos. Asistimos así a una inevitable diversificación de los modos de trata de seres humanos.
Aumento del turismo sexual y de la demanda de niños con fines de explotación económica (mendigos, carteristas, traficantes, trabajo negro, etc.), otras tantas formas de delincuencia y explotación que, en la mayoría de los casos, son asunto de grupos delictivos organizados. Debido a los peligrosos acuerdos de Schengen, que han suprimido todos los controles en las fronteras de la Unión, los niños son utilizados como contrabandistas de droga o ladrones. Por otra parte, en caso de detención por las autoridades, esos menores estarán exentos de diligencias judiciales.
Si se pretende actuar de forma preventiva contra todas las formas de trata de seres humanos, hay que atacar esas mafias, ese tráfico ilegal que no cesa de crecer en una Europa abierta a los cuatro vientos.
Seguir sumando programas comunitarios en la materia y votos piadosos de las múltiples ONG no servirá de nada. Solo si las personas y nuestras elites se alzan contra a la política ultraliberal y favorable a la inmigración practicada por Bruselas, podremos esperar que al fin podamos sentirnos seguros en Europa.
David Martin (PSE), por escrito. (EN) Acojo con satisfacción el informe en el que se destaca la importancia de introducir y fomentar la integración de la perspectiva de género y de un enfoque sensibilizado con respecto a la infancia en todas las políticas de la UE. La trata de seres humanos para su explotación sexual supone una violación de los derechos humanos y cada año de 600 000 a 800 000 hombres, mujeres y niños son víctimas del tráfico transfronterizo. Alrededor del 80 % de estos casos son mujeres y niñas, mientras que el 50 % son menores.
Estoy de acuerdo en que faltan datos sobre la trata y que es necesario un enfoque más armonizado entre los Estados miembros sobre la forma en que se recopilan los datos e, igualmente, sobre la necesidad de separar los datos relativos a menores de los datos sobre hombres y mujeres.
Es esencial que las estrategias de prevención apunten tanto a las víctimas como a los traficantes. Hay que prestar especial atención a los grupos más vulnerables, ante todo mejorando las oportunidades de educación y empleo, luchando contra el problema de la feminización de la pobreza, la discriminación y la desigualdad. Además, hay que poner en marcha más campañas, con un logotipo común para la UE y más líneas de ayuda internacionales, así como proporcionar más información sobre los derechos jurídicos a los servicios sanitarios para las víctimas en otros países.
Por último, estoy de acuerdo en que las fuerzas del orden deben perseguir y castigar severamente a los traficantes y luchar contra la corrupción.
Claude Moraes (PSE), por escrito. (EN) El informe Prets sobre la lucha contra la trata de mujeres y niños contribuye en buena medida a combatir uno de los problemas más acuciantes y penosos que afecta a mujeres y niños vulnerables enfrentados a este tipo de esclavitud moderna, en particular en el comercio sexual en Europa.
El problema debe abordarse con la máxima consideración por las víctimas de la trata para que no sufran un «doble castigo» en los sistemas judiciales de los países de la UE.
Sebastiano (Nello) Musumeci (UEN), por escrito. – (IT) La explotación sexual de mujeres y niños es una lacra para la humanidad que va empeorando conforme pasa el tiempo. Comparto plenamente la idea de castigar duramente a los clientes de los esclavos sexuales. Sin embargo, esto no es suficiente. También necesitamos una estrategia común y eficaz.
La trata de seres humanos, que está controlada por una auténtica multinacional de la delincuencia organizada similar a la mafia, se alimenta de la desesperación y de la pobreza de hombres y mujeres que huyen de sus países de origen en busca de trabajo y de una vida mejor en los países ricos del mundo.
Aunque la trata de mujeres y niños tiene principalmente fines de explotación sexual, por desgracia también se utiliza para otros fines que son igual de despreciables y degradantes para un ser humano: trabajo forzado, esclavitud y –algo que me parece más ignominioso– la exportación de órganos.
Se sabe que la explotación sexual forma parte de una actividad criminal más compleja, que incluye el turismo sexual, el tráfico de drogas y el contrabando de armas y residuos radioactivos. A fin de contribuir a la lucha contra la mafia y otras redes de delincuencia similares, vuelvo a proponer, como hice en marzo de 2004, la creación de un observatorio europeo para el control de la delincuencia organizada y la presentación de propuestas para armonizar las leyes que las sancionen en toda la Unión Europea.
Luís Queiró (PPE-DE), por escrito. (PT) No hay necesidad de repetir los argumentos que tan claramente se exponen en el informe que nos ocupa. Dicho esto, creo que la trata de seres humanos (y no solo de mujeres y niños, sino también de los grupos más vulnerables), sea con fines de explotación sexual o de cualquier otra forma de explotación, merece nuestra más firme condena. Sin embargo, no basta con mantenernos firmes en nuestras propuestas, sino que hay que mostrar la misma determinación en nuestras acciones y ser consecuentes con ellas. Como resulta obvio de tantos informes parlamentarios y de tantos reportajes periodísticos, sin una cooperación entre los Estados miembros la lucha contra la trata de seres humanos será poco eficaz. Entiendo, por tanto, que se impone la necesidad de una mayor cooperación, una mejor coordinación y más firmeza.
Lydia Schenardi (NI), por escrito. – (FR) Se estima que el número de mujeres y niños víctimas de la trata oscila entre 700 000 y 4 millones al año en todo el mundo. Según la ONU, 1,2 millones son niños.
El informe de mi colega parte de una dramática constatación: a pesar de las medidas adoptadas hasta ahora por los Estados miembros, así como por Europa, se considera que la trata de seres humanos es hoy la actividad delictiva que registra el crecimiento más rápido de todas las formas de delincuencia organizada. Y lamentablemente no le pondrá fin la acumulación de textos comunitarios, de resoluciones o de múltiples informes de las ONG sobre este fenómeno planetario.
En efecto, si bien se identifican las causas: pobreza, exclusión social, desempleo, ausencia de control en las fronteras, que permite el desarrollo de sectores clandestinos de delincuencia organizada de todo tipo, violencia contra las mujeres, educación, explosión de la pornografía o incluso desaparición de las referencias morales, las soluciones propuestas en este informe son muy vagas, generales y parciales.
Porque para luchar eficazmente contra todos estos tráficos organizados de seres humanos, lo primero que hay que hacer es restablecer los controles en las fronteras interiores de los Estados miembros. Su supresión, con los acuerdos de Schengen, ha hecho posible el desarrollo de toda esta industria del sexo en Europa.
Carl Schlyter (Verts/ALE), por escrito. (SV) Existe una relación entre la lucha contra la trata de seres humanos, por un lado, y la demanda de servicios relacionados por parte de los que compran sexo, por otro. Tipificar este tipo de delito en la UE podría, sin embargo, conducir a sanciones que no se adaptan a la lógica interna de los sistemas nacionales y podría desembocar también en una prohibición de la criminalización de los clientes del sexo.
Alyn Smith (Verts/ALE) , por escrito. (EN) Nadie puede negar el hecho de que la trata organizada de mujeres y niños es una cuestión acuciante a la que se enfrentan los países de la UE y que es necesaria una acción coordinada en el ámbito comunitario para luchar contra ella. Este informe muestra cómo la cooperación aportará mejores resultados que la acción individual de los Estados miembros y me complace apoyarlo. Aunque tengo algunas reservas sobre varias ideas contenidas en el informe, considero que la propia UE debe adoptar medidas para luchar contra este problema, en cooperación con los Estados miembros.
Thomas Wise (IND/DEM) , por escrito. (EN) El Partido por la Independencia del Reino Unido ha votado en contra del informe Prets sobre la trata de mujeres y niños debido a la naturaleza de los artículos que contiene. Nos oponemos firmemente a la trata de personas y a la esclavitud, pero no creemos que sea competencia de la UE interferir en cuestiones internas de los Estados miembros y, en particular, no consideramos que la UE deba establecer una política en materia de prostitución.
Todos los puntos mencionados en el informe ya están regulados en la legislación británica y son estas leyes las que deberían aplicarse plenamente, en lugar de crear más legislación comunitaria, que tendría consecuencias negativas.
Jaromír Kohlíček (GUE/NGL). – (CS) No se puede negar el hecho de que el futuro del transporte aéreo se encuentra actualmente en una encrucijada. El brusco aumento de los precios del petróleo el año pasado provocó problemas importantes a una serie de aerolíneas. Algunas de ellas se enfrentarán a pérdidas significativas y varias compañías estadounidenses están incluso recibiendo ayudas estatales otra vez. Las líneas aéreas de bajo coste constituyen otro problema al que debemos hacer frente y debemos preguntarnos hasta qué punto estas compañías, radicadas en países desarrollados, cumplen las normas de la Organización Internacional de la Aviación Civil y de la Organización Internacional del Trabajo y las directrices de la OCDE para empresas multinacionales. La cuestión fundamental es saber si somos capaces de garantizar que cumplan los requisitos previstos en las directivas de la CE a las que se hace referencia en los apartados 24 y 25 del informe en relación con el desarrollo de una política exterior comunitaria en el sector de la aviación, y si somos capaces de controlar que se cumplan realmente.
En la misma línea, soy consciente de los problemas que plantean las negociaciones, en particular las que llevamos a cabo con nuestros principales socios, es decir, Rusia y China. Esta cuestión se aborda en el informe sobre las relaciones con la Federación Rusa y China en el ámbito del transporte aéreo. Probablemente la situación es más compleja en lo que a las negociaciones con los Estados Unidos se refiere, donde las relaciones rayan constantemente la competencia desleal. Sin embargo, a pesar de los importantes problemas a los que la Comunidad se enfrenta a la hora de negociar con sus socios externos, me gustaría destacar que estas negociaciones son de extrema urgencia y muy importantes y que el transporte aéreo no evolucionará más sin ellas. Esto significa que debemos prestar una atención especial al comentario final del informe El Khadraoui. El lugar en el que se considera que una persona trabaja a la hora de llevar a cabo tareas de cabotaje en un Estado miembro es el Estado miembro en cuestión, lo que quiere decir que las condiciones de trabajo deben ser conformes con la normativa vigente. Asimismo, el cabotaje en el ámbito del transporte aéreo debería considerarse un trabajo realizado dentro de la Unión Europea.
Me gustaría aprovechar esta oportunidad para destacar que el planteamiento de ampliar el ámbito de aplicación a fin de cubrir todo un sector de servicios debería complementarse con métodos basados en las mejores prácticas. Entonces sería posible, tanto en este como en otros sectores, emprender negociaciones sobre la apertura del mercado y sobre la liberalización del cabotaje. Este enfoque también podría proporcionar nuevas oportunidades para las negociaciones sobre la directiva relativa a los servicios, incluidos los servicios de interés público. La aprobación de estos dos informes nos ofrece, por tanto, una nueva oportunidad para llevar a cabo las negociaciones sobre el transporte aéreo y otras cuestiones. Asimismo, las oportunidades para aplicar nuevos principios a las que me he referido podrían representar todo un hito y el Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea/Izquierda Verde Nórdica las acoge con satisfacción.
Luís Queiró (PPE-DE), por escrito. (PT) Creo que el establecimiento de una estrategia coherente de desarrollo para la política exterior de la Unión en materia de aviación tiene una importancia significativa.
Esta política exterior común puede crearse bien adaptando los acuerdos bilaterales en vigor a la legislación comunitaria, bien concluyendo nuevos acuerdos entre la Comunidad y países terceros.
En los distintos debates en comisión ha quedado claro, sin embargo, que esta estrategia no se puede sacar adelante sin acuerdos con los Estados Unidos, la Federación de Rusia y China.
En vista de las nuevas realidades a las que se enfrenta el mercado mundial y en el contexto de las distintas iniciativas emprendidas por la Comisión Europea y por la Comisión de Transportes y Turismo, este informe merece mi apoyo.
Luís Queiró (PPE-DE), por escrito. (PT) La Unión prosigue su estrategia general para la creación de un espacio aéreo común con sus vecinos.
La votación del informe del señor Zîle sobre las relaciones con China y Rusia en el sector del transporte aéreo forma parte de este contexto. Estos países comparten elevados niveles de crecimiento en el sector de la aviación y hacen frente a retos relacionados con la consolidación, la liberalización y la modernización.
Nunca perdemos de vista la naturaleza específica de estos dos países y plantea cuestiones como la supresión de las tasas de sobrevuelo y la necesidad de ampliar el ámbito del mandato a fin de incluir cuestiones relativas a las infraestructuras de los aeropuertos y de la seguridad aérea. Por tanto, considero que este informe constituye un paso muy importante que garantiza la claridad jurídica a través de un proceso de transición que no socava la estabilidad económica del sector.
He votado a favor de este informe, que forma parte de la cuestión más general del desarrollo de las relaciones externas de la UE en relación con la política de aviación.