El Presidente. De conformidad con el orden del día, se procede al debate del informe (A6-0036/2006) del señor Paasilinna, en nombre de la Comisión de Industria, Investigación y Energía, sobre una sociedad de la información europea para el crecimiento y el empleo (2005/2167(INI)).
Reino Paasilinna (PSE), ponente. – (FI) Señor Presidente, Señorías, cuando empecé a elaborar el informe, el sector de las telecomunicaciones se hallaba en un estado bastante lamentable. La mayoría de los Estados miembros no habían emitido sus comunicaciones nacionales sobre los avances realizados en su aplicación. La situación ahora es mejor: la Comisión ha recibido todas las comunicaciones nacionales y en casi todos los Estados miembros han entrado en vigor cinco Directivas de una forma u otra. Mientras tanto, sin embargo, muchos Estados miembros llevan años protegiendo sus monopolios y, por ello, han tenido el dinero suficiente para penetrar en los mercados de los Estados miembros que habían abierto sus mercados.
No obstante, estas directivas ya son obsoletas. La industria está avanzando a un ritmo tal que son necesarias nuevas leyes para garantizar la viabilidad y el desarrollo del mercado y de su potencial para crear empleo. Por este motivo, es positivo que la Comisión ha decidido proponer la estrategia i2010, que aspira a crear un especio común viable basado en el conocimiento. Tenemos que salvaguardar las inversiones y los créditos destinados a la investigación y todos los europeos necesitan acceder a este sistema, incluidos los pobres.
La tecnología cambia con más rapidez que la legislación y, por este motivo, me atengo a la premisa básica de que la estrategia propuesta en mi informe debería ser tan transparente como sea posible y que la tecnología debería ser neutral. De este modo, podremos incentivar el acceso al mercado para todo tipo de nuevas invenciones y alternativas, y también de competidores. Cambiaremos el mundo más con tecnología que con política. ¿Pero quién debe liderar este cambio? Deberíamos estar hablando de la omnipresente sociedad de la información. La tecnología de la información y de la comunicación ya no es sinónimo de tecnología audiovisual. La información se transmite, por ejemplo, entre un neumático y un coche, entre un frigorífico y un equipo terminal portátil, un monedero y un anillo, el aire acondicionado de casa y un navegador. Por lo tanto, estamos hablando de tecnología digital, que está presente en todas partes y todo el tiempo.
¿Cuánto más lista es una persona en un traje inteligente? Esta persona es una fuente móvil de información y un objetivo de esta. Me pregunto cuándo empezaremos a controlarla como si se tratara de un robot. La tecnología digital también facilita a muchos la vida, con el resultado de que estamos empezando a buscar estímulos fuera de este entorno. Se calcula que el 80 % de nuestra riqueza nacional es intangible, lo que quiere decir que la educación, el conocimiento, la administración y solo un 3 % está formado por recursos naturales. Por lo tanto, resulta alarmante que en esa franja del 80 % nos estemos quedando rezagados con respecto a nuestros competidores. No estamos invirtiendo, ni investigando, ni aplicando debidamente las directivas y nuestro ritmo no es el adecuado. Solo los países nórdicos y uno o dos más constituyen una excepción a esta tendencia.
La tecnología de la información y la comunicación es el sector de la industria que crece con más rapidez. Crea la mayor parte de los trabajos en la industria. A menos que nos pongamos manos a la obra, nos espera el desastre. Los que invierten en el sector buscarán a sus socios en países como China e India, y dejarán de lado a las viejas economías en Europa, es decir, a nosotros en Europa. Ya hay personas muy bien formadas de China e India que están entrando en este sector, muchas más que de Europa. Anteayer, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico advirtió a Europa de este cambio. Señorías, ¿no será hora de que nos pongamos manos a la obra, como sugiere la Comisión?
Se han presentado algunas enmiendas a mi informe. La señora Riera Madurell y yo hemos elaborado tres de ellas, que pueden mantenerse en la forma de estas versiones resumidas, como enmiendas de transacción. Su objetivo es tener debidamente en cuenta la igualdad entre mujeres y hombres y la opinión de la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género, pero hay que acortar ligeramente esta opinión. Espero que pronto este enfoque reciba el visto bueno. Asimismo, mi colega el señor Guidoni ha elaborado varias enmiendas contra las que votamos en comisión, principalmente por un error de traducción. Creo que puedo apoyarlas.
Viviane Reding, miembro de la Comisión. (EN) Señor Presidente, antes que nada deseo dar las gracias al Parlamento y en particular a su ponente, el señor Paasilinna, por su informe tan detallado. Ha colaborado estrechamente con los demás ponentes y ha recabado sus opiniones. A todos ellos les doy las gracias.
Resulta muy alentador ver que el Parlamento comparte las principales inquietudes de la Comisión, así como las prioridades políticas con respecto a la Sociedad de la Información para los próximos cinco años. Como han señalado las distintas comisiones parlamentarias y ponentes, actualmente es muy difícil predecir cómo será la Sociedad de la Información del futuro, y por eso preferimos un marco estratégico amplio y ambicioso, en lugar de un plan de acción pormenorizado, ya que este marco estratégico nos permite llevar a cabo revisiones y ajustes cuando así lo exijan las circunstancias. Así pues, el marco i-2010 pretende ser un marco político preparado para el futuro.
Me complace que el Parlamento y la Comisión tengan la misma posición sobre elementos clave del i-2010, a saber, el compromiso de hacer que la legislación en materia de TIC esté orientada al futuro y responda a los cambios que genere la convergencia. De este modo, debe ser tecnológicamente neutral y fomentar la competencia y, al mismo tiempo, los Estados miembros deben aplicar plenamente el marco reglamentario vigente, cosa que, por desgracia, no siempre es así, pero sus Señorías saben que lucho por hacer que se cumpla.
Consideramos de forma similar que es necesario enfocar la gestión del espectro de modo que permita responder rápidamente a la evolución tecnológica y a las variaciones de la demanda, y que cuente con el apoyo de las autoridades reguladoras, los operadores y otras partes interesadas. Tendremos mucho trabajo en este aspecto en los próximos meses.
Nuestras prioridades comunes incluyen igualmente apoyar la creación y distribución del contenido europeo por parte de la UE, la protección de la propiedad intelectual, la promoción de la seguridad y la protección de los usuarios frente a los contenidos perjudiciales. La Comisión y el Parlamento coinciden igualmente en invitar a los Estados miembros y a las empresas a invertir más en la investigación sobre las TIC, y ambos consideramos necesario asegurar los recursos financieros necesarios para las TIC en el Séptimo Programa Marco y el Programa de Competitividad e Innovación.
También estamos de acuerdo en que es necesario promover y proteger los derechos de los ciudadanos en la Sociedad de la Información y que por ello debemos enseñarles cómo pueden ejercer sus derechos, la libertad de expresión, la intimidad, la protección de datos personales y el derecho a recibir o comunicar información en la Sociedad de la Información.
Junto con el Parlamento, insto a los Estados miembros a que aprovechen sus planes nacionales de reforma para incluir sus prioridades en materia de TIC, para mejorar sus servicios públicos, como las iniciativas de administración electrónica, en las que observo grandes progresos en el camino hacia una mayor inversión en el aprovechamiento de las TIC para servicios del sector público.
Me preocupa la brecha digital tanto como al Parlamento. Debemos asegurarnos de que todos puedan participar, no solo las personas que viven en las ciudades, no solo las personas con un determinado nivel de educación y no solo los jóvenes. Se trata de una meta muy importante y debemos aprovechar la oportunidad. Trabajaremos juntos para superar esta brecha digital.
Cuando hablo de «brecha digital» me refiero igualmente a la promoción de los conocimientos básicos digitales para todos, lo que implica la participación de la mujer en todos los ámbitos relacionados con las TIC en el mundo académico y en las empresas. Tengo buenas noticias, pues nuestras estadísticas señalan que el género no es el principal factor de la brecha digital y que además disminuye con gran rapidez. Me parece alentador, pero esto no significa que no tengamos que hacer nada para resolver el problema que queda. Tenemos que colaborar y seguir trabajando para fomentar una mayor igualdad de género en los ámbitos relacionados con las TIC, como la ciencia. Muchos Gobiernos están tomando iniciativas en este sentido.
Estoy de acuerdo con sus Señorías en la crucial importancia que reviste Internet para una economía basada en la información. De ahí que la UE desempeñara un papel activo en la negociación de un acuerdo sobre la progresiva internacionalización de la gestión de Internet en la Cumbre Mundial sobre la Sociedad de la Información que tuvo lugar en Túnez el año pasado. En mi opinión, ese es el mejor enfoque de la gestión de Internet. La Comisión, junto con el Parlamento, continuarán por esta vía y para ello organizarán un foro este mismo año.
Asimismo he intensificado las actividades de supervisión en el ámbito del pluralismo de los medios de comunicación y en breve publicaré un documento de trabajo al respecto. Este documento de trabajo servirá de inventario de la amplia gama de circunstancias existentes en los Estados miembros, pero al mismo tiempo –como vengo repitiendo– mis opiniones sobre la propiedad y el pluralismo de los medios de comunicación no han cambiado. Las cuestiones relativas a la propiedad son competencia de los Estados miembros y son ellos los que deben asumir sus responsabilidades y ejercerlas efectivamente de conformidad con el principio de subsidiariedad. De ahí que la Comisión se limite a apoyar a los Estados miembros, pero no les da instrucciones en esta importante esfera de la vida nacional.
Ahora bien, prometí a sus Señorías que seguiría atenta a esta cuestión y que colaboraría con ustedes al respecto. En breve presentaré a esta Cámara medidas en este sentido.
En cuanto a su petición de acelerar la iniciativa «e-inclusión» –prevista para 2008–, les pido que no solo vean la fecha de 2008, ya que en ese año habremos alcanzado nuestro objetivo. Y ahora estamos haciendo los preparativos para alcanzarlo. He hablado con las futuras Presidencias finlandesa, alemana y portuguesa y tomaremos medidas prácticas hasta llegar a la iniciativa «e-inclusión» en 2008.
Desde la publicación del Plan de acción i-2010 hemos realizado una amplia campaña de sensibilización acerca de las cuestiones relacionadas con las TIC. Hemos comenzado a avanzar en la consecución de nuestros principales objetivos gracias a la adopción de varias propuestas, a otras propuestas en fase de preparación y a iniciativas que no formaban parte de la iniciativa i-2010. La flexibilidad de este plan de acción nos permite agregar iniciativas siempre que sea necesario. La última de ellas contempla una consulta sobre identificaciones de radiofrecuencia para conciliar las necesidades económicas con el imperativo de proteger la intimidad de nuestros ciudadanos.
Sin embargo, la consecución de un objetivo ambicioso exige recursos financieros suficientes. Apenas se llegue a un acuerdo interinstitucional sobre las perspectivas financieras, deberemos examinar las importantes decisiones y ajustes que figuran en el Séptimo Programa Marco y en el Programa de Competitividad e Innovación. Por ello pido a Sus Señoría que asignen a estos dos programas los recursos financieros necesarios para que las TIC puedan impulsar la competitividad y el crecimiento. Me complace que compartamos esta opinión y este objetivo, no solo con esta Cámara, sino también con las tres instituciones, lo que es una garantía de éxito.
(Aplausos)
Teresa Riera Madurell (PSE), ponente de opinión de la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género. – (ES) Señor Presidente, en efecto, voy a hablar en nombre de la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género y, tras felicitar al ponente por su magnífico trabajo, tengo que unirme a las palabras de la Comisaria y decir que, para alcanzar los objetivos de Lisboa, es indispensable construir una sociedad de la información plenamente integradora, donde todas las personas tengan acceso a las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones y puedan beneficiarse de ellas en igualdad de condiciones.
En este contexto, la escasa presencia de mujeres en los ámbitos relacionados con estas tecnologías, pone de relieve, dentro de la Unión Europea, la existencia real de una brecha digital por razón de género, que tiene clara repercusiones en el ámbito laboral y que necesita ser tratada mediante acciones específicas.
Hay que incidir en las causas de esta fractura, por lo que es necesario promover acciones de formación que permitan incrementar el número de mujeres bien formadas en este ámbito y a todos los niveles, y obtener una mayor presencia y participación de las mujeres en todos los organismos donde se toman las decisiones y donde se marcan las políticas en relación con las tecnologías de la información y la comunicación. Su presencia es hoy todavía extremadamente baja.
Pedimos especial atención para las mujeres que viven en las zonas rurales, aisladas y geográficamente remotas, que pueden encontrar en las tecnologías de la información y las comunicaciones un medio eficaz de participación en la vida económica, política y social.
Para todo ello, es fundamental disponer de datos fiables, segregados por géneros, y de un marco legal que contemple la perspectiva de género y que permita conocer e incidir sobre las causas de la discriminación. En este aspecto, el papel del nuevo Instituto Europeo de la Igualdad de Género puede ser fundamental.
Hacemos también referencia en nuestro informe al uso sexista de la imagen de las mujeres en los medios de comunicación y, en particular, en los medios digitales, por lo que pedimos a la Comisión que impulse la elaboración de un código para la igualdad de género en los medios de comunicación, que ayude a impulsar la igualdad de género, tanto desde los medios de comunicación en relación con la información que transmiten, como también dentro de los propios medios.
Y no quiero terminar sin pedir a la Comisión que preste especial atención al uso criminal de las nuevas tecnologías de la información y las comunicaciones, como, por ejemplo, el uso de internet para el tráfico de mujeres, niños y niñas. En este sentido, pedimos que se promuevan todas las iniciativas legales y tecnológicas que sean necesarias para acabar con ello.
Giulietto Chiesa (ALDE), ponente de opinión de la Comisión de Cultura y Educación. – (IT) Señor Presidente, Señorías, este informe representa un importante paso adelante en la comprensión del concepto de «sociedad de la información». Quisiera reseñar en especial un aspecto del informe: el hecho de que indica con claridad la estrechísima relación existente entre los impresionantes avances tecnológicos en curso y la suerte de la democracia.
Es un acierto mostrar los efectos que tiene la sociedad de la información sobre el crecimiento y el empleo y exponer las ventajas, problemas y las soluciones. Pero las implicaciones son mucho más vastas: los medios de comunicación se han convertido en un factor clave que condiciona las ideas y actitudes de miles de millones de personas. Su papel es, pues, socialmente relevante y a menudo decisivo. La propiedad de los mismos no puede separarse de su responsabilidad ante la sociedad, sus efectos no pueden contemplarse solo desde el punto de vista del mercado.
En torno a este problema están en juego todos nuestros valores y derechos, incluida la suerte de la paz y la supervivencia del hombre. No nos encontramos tan solo ante una serie de problemas económicos y técnicos, sino que están en juego derechos fundamentales como del derecho a ser informado, a poder expresarse y comunicarse, sin olvidar que la sociedad de la información será cada vez más la sociedad de la imagen en movimiento. Este será el lenguaje dominante en el futuro.
Quien no sepa descifrar las imágenes y defenderse de su manipulación no será libre: ayudar a nuestros hijos a aprender este lenguaje es el único modo de convertirlos en en ciudadanos conscientes.
Pilar del Castillo Vera, en nombre del Grupo del PPE-DE. – (ES) Señor Presidente, en primer lugar, quiero agradecer a la Comisaria el informe que ha elaborado la Comisión. Gracias a ese informe, creo que hemos podido tener un debate extraordinariamente interesante, porque vuelve a subrayar lo que, para mí, es absolutamente esencial en la Agenda de Lisboa.
Si hay un área decisiva para el desarrollo de la Agenda de Lisboa es la de las tecnologías de la información y la comunicación, que es un asunto prioritario para esta Cámara y para las instituciones europeas.
Querría aprovechar la ocasión para referirme a los temas presupuestarios, que están todavía por acabar de definir. Por ejemplo, en relación al Séptimo programa marco, no se puede olvidar el papel esencial, determinante, que tienen las tecnologías de la información y la comunicación en la Agenda de Lisboa.
Voy a señalar solo dos aspectos del debate que hemos tenido en mi comisión, en el que hemos llegado a un acuerdo respecto a este informe. En primer lugar, en relación con el artículo 66, que fue aprobado en la Comisión de Industria, Investigación y Energía y que hace referencia a la necesidad de no olvidar la desregulación, que es necesaria para el sector, que solo era necesario regular coyunturalmente y durante un tiempo.
Yo creo que es muy importante no olvidar esto, porque, de lo contrario, también vamos a ir contra la Agenda de Lisboa, si esto no lo tenemos en cuenta y no lo votamos hoy favorablemente.
Por último, respecto al tema de las mujeres, todos los Grupos llegamos a una enmienda de compromiso y la votamos favorablemente, pero, a continuación, aparecieron ocho enmiendas que hacían referencia al tema de las mujeres, que hoy nos anuncia el señor Paasilinna que se reducen a tres.
Las mujeres no necesitan repetición. Las mujeres necesitan acciones decididas. No necesitan, allí donde hay problemas, que se repita veinte veces lo mismo, sino que de una vez por todas se haga algo con seriedad y con decisión. Por eso, nosotros estamos a favor de la enmienda de compromiso, pero no a favor de la retórica —una y otra vez—, como recogen esas enmiendas añadidas.
Catherine Trautmann, en nombre del Grupo del PSE. – (FR) No se puede alcanzar la sociedad del conocimiento si no se supera la brecha digital en todas sus formas. La brecha digital existe entre países ricos y pobres, pero también en la propia UE. Para luchar eficazmente contra este problema hay que atacar todos sus distintos aspectos, tanto tecnológicos como socioeconómicos. En efecto, el conocimiento de las TIC es la mejor respuesta que podemos dar a este problema. La estrategia i2010 tiene por objetivo promover un buen uso de los bienes y servicios ofrecidos por las TIC, así como una participación activa y crítica en la sociedad de la información para todos y en beneficio de todos. Este plan de acción, por tanto, debe ser particularmente bien acogido.
Con nuestras enmiendas hemos querido que no se olvide a los ciudadanos vulnerables, como las personas de edad avanzada, discapacitadas, las que viven solas o tienen dificultades sociales. Considero también que merecería la pena emprender un análisis de los efectos económicos, culturales y sociales del paso a la sociedad de la información para mejorar nuestra comprensión y el seguimiento del plan, porque creo que no podemos ser competitivos si no compartimos conocimientos y competencias.
Anne Laperrouze, en nombre del Grupo ALDE. – (FR) Señor Presidente, la innovación en el ámbito de las TIC avanza tan rápidamente que corremos el riesgo de que la Unión Europea, que solo invierte 80 euros por habitante, frente al equivalente a 350 euros en Japón y 400 euros en los Estados Unidos, quedará pronto a la zaga. Por consiguiente, la UE debe incrementar sus inversiones en investigación y exhortar a los Estados miembros a que hagan lo mismo.
Por otra parte, el ritmo trepidante de la innovación significa que hay un riesgo de ampliación de la brecha digital y, por consiguiente, de las diferencias sociales, en detrimento de la cohesión social y territorial que buscamos. Es, pues, esencial construir una sociedad de la información basada en la inclusión y en un uso amplio de las tecnologías de la información y de la comunicación en los servicios públicos, las PYME y las familias.
El éxito de la estrategia i2010 exige que la Comisión Europea formule propuestas para que las tecnologías sean accesibles a todos los ciudadanos, teniendo en cuenta el papel crucial que deben desempeñar las regiones, para garantizar los principios de libertad y pluralismo de los medios de comunicación y definir acciones claras en materia de protección contra los contenidos ilegales y perjudiciales y de protección de los menores y de la dignidad del ser humano, velando al mismo tiempo por proteger la intimidad. La Comisión deberá hacer hincapié asimismo en el buen uso de las TIC en los servicios públicos, particularmente en la sanidad y la educación.
Por último, si bien apruebo, a medio plazo, la apertura de los mercados tras un período de transición hacia la aplicación de las reglas generales de la competencia, les recuerdo que los Tratados definen las normas de la libre competencia, pero reclaman al mismo tiempo la cohesión económica y social y la cohesión territorial.
La libre competencia en el ámbito de las TIC no debe comportar la negativa por parte del sector privado a invertir en infraestructuras no rentables. El papel de los Estados y de las regiones será pues un factor decisivo para alentar el desarrollo de las infraestructuras necesarias.
Nos corresponde a todos hacer de las TIC verdaderos instrumentos para el desarrollo económico y para la cohesión social y territorial de la Unión Europea. Agradezco al señor Paasilinna la alta calidad de su trabajo, así como a mis colegas diputados su contribución al debate.
Umberto Guidoni, en nombre del Grupo GUE/NGL. – (IT) Señor Presidente, Señorías, las tecnologías de la información son un elemento fundamental para construir una sociedad culturalmente más rica y más cohesionada. La sociedad de la información ha de estar abierta a todos, ser un instrumento democrático que tenga en cuenta la diversidad cultural y favorezca la participación de los ciudadanos, como protagonistas y no como meros consumidores.
Hay que afrontar el tema de la superación de la brecha digital, un problema de desarrollo equilibrado, pero sobre todo de justicia social. Para salvaguardar el carácter abierto de las TIC es fundamental el papel de la inversión pública, de modo que se garantice el desarrollo de medios técnicos e instrumentos culturales que permitan a todos los ciudadanos gozar de un volumen cada vez mayor de servicios de comunicación e información. Para conseguir una buena gobernanza y garantizar a todos los europeos una ciudadanía plena, hay que aprobar una Carta europea de los derechos de los consumidores del mundo digital –los llamados derechos electrónicos– con principios y orientaciones comunes que definan un marco de derechos de los ciudadanos. En la Carta ha de inscribirse, en particular, el derecho al acceso libre y gratuito (que por tanto sería no discriminatorio) a una información trasparente, pluralista y completa, en un entorno seguro, a través de servicios y plataformas de telecomunicación basados en normas abiertas e interoperativas, por ejemplo la portabilidad de la dirección de correo electrónico.
Con la Directiva I-2010, Europa asume la función esencial de garantizar el cumplimiento del objetivo de que la sociedad de la información sea accesible a todos.
Mieczysław Edmund Janowski, en nombre del Grupo UEN. – (PL) Señor Presidente, acojo con satisfacción estos dos documentos, el informe que tenemos ante nosotros y la comunicación de la Comisión.
Me referiré brevemente a varias cuestiones. En su sentido más amplio, los servicios de TIC, especialmente Internet, deben entenderse por el impacto que tienen en la conciencia de los seres humanos y, de hecho, también en su subconsciente. Por tanto, es esencial poner en práctica salvaguardas tecnológicas, de distribución y jurídicas para garantizar que no se usan para transmitir contenido dañino. Me refiero a contenidos para pervertir, incitar al odio o fomentar comportamientos delictivos. También es necesario proporcionar una protección eficaz de los servicios financieros y administrativos, para evitar que personas no autorizadas accedan a ellos. Deberíamos tener un cuidado particular con el material destinado a niños y jóvenes. El fomento de las redes de información de banda ancha debe ser una prioridad. Habría que fomentar un uso más generalizado de las redes eléctricas domésticas para la transmisión de datos. Educar e informar a la sociedad sobre esta cuestión reviste una gran importancia. Al determinar las tareas que tenemos que llevar a cabo en esta área deberíamos tener en mente que este no solo es un problema para la Unión, sino también para el mundo entero. Hagamos todo lo que podamos para garantizar que el acceso a la red de información sea una realidad para todos nuestros ciudadanos y para que ellos obtengan los máximos beneficios.
Nikolaos Vakalis (PPE-DE). – (EL) Señor Presidente, señora Comisaria, Señorías, los avances tecnológicos y los cambios que están teniendo lugar hoy en día en el sector de las TIC se están produciendo a un ritmo de vértigo y nos resulta difícil seguir su paso. Así pues, se está produciendo una brecha digital entre los Estados miembros, una brecha digital entre regiones y, lo que es más importante, una brecha digital está apareciendo también incluso entre personas con poca diferencia de edad. Comentaré dos puntos que considero cruciales para el logro de los objetivos de i2010. El primer punto es el marco institucional y el segundo es el marco de financiación.
En lo que respecta al primer punto, con la estrategia i2010 que estamos debatiendo hoy, se hace patente la necesidad de planificar la revisión del marco institucional en vigor sobre la base de la nueva situación en lo que respecta a la convergencia digital. Esto constituye un gran reto, dado que el nuevo marco institucional debe: a) ser flexible, para que pueda adaptarse a los rápidos avances tecnológicos y a las necesidades del mercado sin restringir las ideas innovadoras, b) proteger el desarrollo y la producción de contenidos y garantizar que todos los ciudadanos pueden acceder sin limitaciones a la información. Algunos de estos son parámetros contradictorios; no obstante, es necesario actuar para solucionar los problemas de los cuellos de botella a fin de que Europa pueda ser competitiva y estar a la cabeza.
En lo que respecta al segundo punto, la nueva estrategia establece objetivos ambiciosos. Sin embargo, en lo que respecta a la financiación de la investigación y la innovación en los sectores TIC, incluso con el aumento del 80 % de los recursos propuestos por la nueva estrategia, Europa sigue rezagada; para ser preciosos, diría que se encuentra muy atrasada con respecto a sus competidores. Esto me hace sentir pesimista y considero que es uno de los puntos más básicos sobre los que tenemos que centrarnos.
Señor Presidente, Comisaria, Señorías, objetivos sin recursos para lograrlos no son objetivos.
Eluned Morgan (PSE). – (EN) Señor Presidente, me complace este informe. Esta era sin duda una de las diez prioridades de la Presidencia británica y es esencial para alcanzar los objetivos de Lisboa. En estos momentos, el 40 % del aumento de la productividad europea y el 25 % del crecimiento del PIB de la UE son achacables a las TIC. Para mí –como para la Comisaria y el ponente–, una de las cuestiones clave no radica tan solo en los objetivos económicos de Lisboa, sino en que dichos objetivos deben abarcar todo. Por supuesto, la inclusión social es un factor clave.
Conozco familias monoparentales en Ely, en Cardiff, donde me crié, que no tienen coche. Si quieren hacer sus compras semanales no pueden tomar un autobús, pues tienen que cargar con un gran número de bolsas y deben llevar consigo a sus hijos pequeños, por lo que tienen que coger un taxi que les cuesta unas diez libras esterlinas. Ahora bien, si pudieran hacer sus compras a través de Internet, no tendrían que pagar esas diez libras, lo que supondría una diferencia enorme para muchas familias pobres. Es importante demostrar las ventajas prácticas de la TIC para que los miembros más pobres de nuestra sociedad comiencen a utilizar las nuevas tecnologías.
Por último, debemos adoptar una posición realista en relación con las TIC. El grueso de la inversión en este sector debe proceder del sector privado. El sector público no puede responder con suficiente agilidad al cambio tecnológico. Nuestra responsabilidad consiste en adoptar un marco legislativo estable para este tipo de inversiones.
Angelika Niebler (PPE-DE). – (DE) Señor Presidente, señora Comisaria, Señorías, me gustaría comenzar dando las gracias a nuestro ponente por su buen informe y por su actitud de cooperación constructiva.
La digitalización está generando grandes cambios en el panorama de medios de comunicación y de las comunicaciones en general; en el futuro, la distinción entre infraestructuras y contenidos será menos importante, ya que será posible acceder a todo tipo de contenidos en cualquier plataforma. Será posible acceder a cualquier tipo de contenidos utilizando todo tipo de tecnologías, ya sea la televisión, el ordenador o el teléfono móvil, y otro aspecto revolucionario es, por supuesto, que todos estos contenidos ya están disponibles actualmente con gran calidad en todas las plataformas y a través de todas las tecnologías. Cada vez son más los prestadores de servicios que compiten entre sí en un mercado que incluye a empresas de telecomunicaciones, operadores por cable, operadores por satélite, empresas de telefonía móvil, proveedores de contenidos, proveedores de servicios de Internet, etc. Todos están ideando sus modelos empresariales y ninguno sabe –no más que nosotros– cuál de estos modelos acabará prevaleciendo y a qué quieren acceder realmente, a fin de cuentas, los espectadores, qué quieren ver o qué tipo de contenido les gustaría recibir.
Por supuesto, esto nos plantea a los legisladores europeos una serie de problemas, ya que tenemos que elaborar el marco jurídico y, para ello, debemos predecir estas cuestiones imponderables y el modo en que todo evolucionará, cuestión sobre la que no hay nada seguro. En las próximas semanas y meses tendremos que responder a un buen número de preguntas.
Estoy muy agradecido al señor Paasilinna y a todos los diputados que han contribuido en la elaboración de este informe por reformular cuestiones esenciales y por resumirlas. Mencionaré unas cuantas. ¿Qué grado de regulación seguiremos necesitando en el futuro en el campo de las telecomunicaciones? ¿Cuánto debería influir la Unión Europea? ¿Cómo queremos dar forma a la política sobre frecuencias? Un problema que resulta extremadamente irritante para los ciudadanos es el de la itinerancia internacional, ya que tienen que seguir pagando unas tarifas elevadas cuando realizan llamadas transfronterizas por móvil. En las próximas semanas y meses nos ocuparemos de estas cuestiones. Estoy deseando iniciar un diálogo interesante con ustedes y creo que el mundo digital, que plantea a legisladores como nosotros tantos retos, nos mantendrá ocupados en las próximas semanas y meses.
Reino Paasilinna (PSE), ponente. – (FI) Señor Presidente, Comisaria, me gustaría destacar en este minuto de intervención la importancia de obtener información relevante. Si los ciudadanos no reciben información que es esencial para sus vidas, el desarrollo no será sostenible. La información esencial es el núcleo de la sociedad de la información: es su aspecto más importante. Todo esto se está viendo oscurecido por juegos y por un mundo de ocio irreal, un mundo en el que resulta complicado encontrar y espigar información esencial que la gente puede utilizar para controlar su vida y para participar en democracia. Por tanto, se trata de una cuestión esencial, en lo que a la democracia se refiere. Supongo que la Comisaria ha ponderado este asunto y me gustaría oír su opinión sobre la cuestión de la información relevante.
Viviane Reding, miembro de la Comisión. (FR) Señor Presidente, permítame dar las gracias a los ponentes de opinión y a todos los diputados que han participado en esta cuestión, que es extremadamente importante no solo para el desarrollo económico e industrial, sino también para el bienestar de nuestras sociedades.
Para empezar, quisiera responder brevemente a la pregunta del señor Paasilinna sobre la información. Hay dos niveles de información: el primero es la evaluación comparativa, que se efectúa sobre una base anual. Soy consciente, señor Paasilinna, de que se podría mejorar esta evaluación comparativa y estas cifras. También a mí me decepciona a veces no disponer de cifras que reflejen mejor la importancia del sector y su desarrollo. Una de las dificultades reside en que no es un sector estable, sino al contrario, un sector que evoluciona rápidamente, por lo que es necesario que revisemos nuestra información prácticamente cada dos o tres meses.
El segundo nivel es la información que reciben los consumidores. A este respecto es muy importante que nos hagamos cargo de esta cuestión. Por ejemplo, acabo de lanzar una encuesta y consultas sobre los sistemas RFID, porque me parece que hay que desarrollar la economía y la industria de los RFID, pero también hablar con las asociaciones de consumidores y los organismos de protección de la intimidad sobre la influencia de las nuevas tecnologías en los ciudadanos, así como, quizás, sobre las medidas que debemos tomar para proteger mejor a los ciudadanos. Por tanto, no se escatiman esfuerzos y cuento con el Parlamento Europeo para ser el portavoz de estos debates sobre la ciudadanía.
Permítame, señor Presidente, responder brevemente a algunas preguntas que se han formulado.
Casi todos los oradores han hablado, con razón, de la seguridad de Internet. Internet es algo formidable, pero como todo lo que es formidable presenta también aspectos negativos, entre ellos el abuso de Internet. Por esta razón, presentaremos, en las próximas semanas, una comunicación sobre el correo basura, el spyware y el malware. Este fue el tema del seminario sobre «Confianza en la red», organizado en febrero de este año bajo la Presidencia austriaca. Por la misma razón, colaboramos con los organismos de protección de la infancia y de protección de la mujer. En la red operan delincuentes y hay que poner barreras para pararles los pies. Con esta perspectiva, presentaremos en 2007, en el ámbito de la investigación, el Programa Europeo de Investigación sobre Seguridad, que abarca todos los aspectos –criptografía, datos biométricos, tarjetas inteligentes, autenticación, RFID, etc.–, en los que siempre hay que prestar una atención primordial a los problemas de seguridad.
Un segundo tema recurrente, que todos los oradores han citado con razón, es el de la brecha digital y el desarrollo regional. En efecto, si damos rienda suelta a la competencia, sin duda se desarrollará allí donde haya inversiones rentables, es decir, en nuestras ciudades. Es preciso, por tanto, que nuestra política ofrezca a las nuevas tecnologías la posibilidad de desarrollarse también fuera de las ciudades. En este contexto, la Comisión presentará a finales de este mes una iniciativa que abarcará el desarrollo regional y el desarrollo rural.
Un tercer tema que han planteado algunos diputados es el de los niveles de competencias, y en particular la necesidad de medidas específicas para las mujeres. Por lo que respecta a las competencias, sabemos ya que, en el ámbito de las tecnologías, el desarrollo económico acusa un déficit del 15 % debido a la falta de técnicos e ingenieros. Es, por tanto, sumamente importante que reforcemos la enseñanza en este terreno. Tenemos también las estadísticas relativas a la baja presencia de mujeres en este campo. Debo reconocer que las estadísticas son menos malas de lo que pensaba inicialmente: las mujeres lo hacen mejor de lo que se piensa en general. Por tanto, no hay que alarmarse demasiado, pero hay que actuar. Por ello, junto con el Comisario responsable de Educación y el Comisario responsable de Investigación, vamos a elaborar un programa de trabajo para integrar mejor a las mujeres tanto en el aprendizaje de las ciencias como en la investigación. Animamos también a las mujeres investigadoras a dedicarse más a la investigación tecnológica.
En 2007 presentaremos también una guía europea de las mejores prácticas en la materia. Suscribo plenamente la petición de financiar la investigación en el ámbito de las TIC. Deben saber, Señorías, que los éxitos tecnológicos de hoy −el GSM, por ejemplo, que se ha convertido en una norma mundial, basada la investigación europea− se apoyan en la investigación de la década de 1980. Si también queremos estar mañana a la vanguardia del progreso tecnológico mundial, la investigación de hoy será la que nos dé los resultados del futuro. Por tanto, si no se invierte en investigación, podemos estar seguros de que mañana ningún sector económico crecerá a este respecto.
Así pues, cuando pido una financiación suficiente de la investigación tecnológica, no lo hago por darme gusto, sino para desarrollar la economía y por tanto crear puestos de trabajo en el futuro, aquí en Europa, y para evitar que las empresas se trasladen fuera de Europa.
Algunos de ustedes han mencionado el marco reglamentario. Seré muy clara a este respecto: el reglamento de telecomunicaciones −que es un ejemplo muy positivo que pensamos tomar como base para reformar el mercado y el marco reglamentario en los ámbitos del transporte y de la energía− no estaba pensado para regular, sino para desregular, para abrir los mercados a la competencia.
Las estadísticas nos muestran una cosa: allí donde los mercados están abiertos a la competencia, los precios bajan y la penetración de las tecnologías entre los ciudadanos es mucho más alto. En cambio, allí donde los mercados están cerrados, donde hay monopolios, esta penetración es nula, porque no hay posibilidad de elección en el mercado y porque los precios son demasiado altos. Consulten las estadísticas sobre la banda ancha, por ejemplo, y comprenderán que solo la competencia puede hacer que funcione este mercado, pero –y repito lo que he dicho antes− la competencia en los mercados que pueden ser competitivos. Necesitamos correctivos en los mercados que son demasiado caros para la economía industrial; en otras palabras, la política regional debe prestar atención por las regiones alejadas de los centros urbanos.
Dicho esto, el marco reglamentario está en fase de revisión. He lanzado los primeros debates y antes del verano les presentaré una revisión de los mercados y un primer proyecto de reforma del paquete de telecomunicaciones. Las consultas comenzarán en el segundo semestre y a finales de año les presentaré un nuevo paquete de telecomunicaciones, que será mucho más simple que el paquete que está sobre la mesa o en vigor. Ahora bien –y quiero que esto quede muy claro−, este nuevo paquete no permitirá que se establezcan nuevos monopolios: mi decisión es firme en este punto.
Algunos de ustedes han hablado también de la itinerancia. Como probablemente sepan, el verano del año pasado anuncié que no toleraría por más tiempo unos precios excesivos; como recordarán, el pasado mes de octubre presenté una comparación de precios en un sitio en la red. Estoy elaborando una comparación de la evolución de los precios desde octubre. Decepcionada por la evolución de los precios, anuncié un reglamento para reducirlos y, milagro de los milagros, desde que anuncié el reglamento los precios de la itinerancia internacional han bajado, lo cual es bueno.
Dentro de unas semanas les anunciaré lo que haré al respecto y les diré si hay que reglamentar o no. Creo que habrá que reglamentar: les presentaré, pues, un reglamento para que los precios de la itinerancia internacional se basen en los costes reales y no en precios fantasiosos que gravan los presupuestos familiares.
El Presidente. El debate queda cerrado.
La votación tendrá lugar a las 11.30 horas.
Declaración por escrito (artículo 142 del Reglamento)
Edit Herczog (PSE). – (HU) Hace ciento veinte años, Thomas Edison dijo: «La luz eléctrica será tan barata que solo los más ricos utilizarán velas para alumbrarse.» Hoy en día solo los muy ricos pueden permitirse no tener un teléfono móvil o una dirección de correo electrónico. Sin ellos, hoy en día sería muy difícil solicitar un trabajo y sería imposible montar un negocio.
La creación de la sociedad de la información no es solo un medio, sino también una condición indispensable para el crecimiento y el empleo. Debemos garantizar el desarrollo en todas las áreas el mismo tiempo, de forma rápida y flexible:
Debemos construir redes incluso en áreas donde no sería rentable meramente en términos de mercado. Esto debe incluirse en nuestra política de cohesión.
Debemos ofrecer a la población un acceso asequible a las redes. El mercado se encargará de ello, si no construimos obstáculos innecesarios en su camino.
Debemos proporcionar contenidos seguros de gran calidad. Para ello, es necesario facilitar formación, innovación, investigación y desarrollo actualizado y, sin lugar a dudas, una protección más eficaz de los derechos intelectuales.
Si hubiéramos esperado demasiado para encender la electricidad, la cera de las velas nos habría quemado los dedos. Si nos demoramos en las cuestiones relacionadas con la sociedad de la información mucho más, la economía de las TIC globalizada no tendrá problemas en adelantarnos. Debemos actuar urgentemente.