El Presidente. De conformidad con el orden del día, se procede al debate del informe (A6-0290/2006) de la señora Jeggle, en nombre de la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural, sobre protección y bienestar de los animales en el período 2006 a 2010 (2006/2046(INI)).
Elisabeth Jeggle (PPE-DE), ponente. – (DE) Señor Presidente, señora Comisaria, el 23 de enero de 2006, la Comisión presentó su Comunicación relativa a un plan de acción comunitario sobre protección y bienestar de los animales 2006-2010.
El informe que yo elaboré sobre dicha Comunicación como ponente de esta Cámara fue aprobado por unanimidad por la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural el 12 de septiembre. El objetivo del plan de acción comunitario sobre protección y bienestar de los animales es reunir las actividades comunitarias hasta entonces repartidas entre diferentes servicios de la Comisión, consejos y ámbitos de la política, y estructurarlas de acuerdo con unas directrices uniformes.
La protección de los animales es una cuestión emocional y extremadamente delicada desde el punto de vista político. Esa protección –adecuada para atender las necesidades y los requisitos específicos de cada animal– debería ser automática en nuestra sociedad civil. Partiendo de ahí, a mí me parece importante, como ponente, que establezcamos un nivel uniforme de protección de los animales en la UE. La Comisión ha insistido una y otra vez en que los niveles de protección de los animales en la UE, que ya son elevados, pero que deben serlo todavía más, sirvan de ejemplo para el resto del mundo. La comisión apoyó por una amplia mayoría mi hincapié en la necesidad de realizar evaluaciones precisas de impacto siempre que se adopten medidas legislativas para la protección de los animales. Además, para ser coherentes debemos exigir esos altos niveles de protección de los animales en las negociaciones con la OMC y en los acuerdos bilaterales.
La verdadera protección de los animales no puede limitarse a los animales domésticos o a los animales utilizados en experimentos, sino que debe abarcar a todos los animales. Además, se debe tener también en cuenta el progreso realizado. Muchos de mis colegas diputados y muchas personas que me han escrito se muestran especialmente preocupadas por los animales utilizados en experimentos. No obstante, el sector de la investigación científica ha intensificado considerablemente sus esfuerzos para proteger a los animales en los últimos años. Se han desarrollado numerosas alternativas a los experimentos con animales, para poner así en práctica el principio de las tres erres. Aunque queda mucho camino por recorrer en esto, pienso que estamos avanzando en la dirección correcta. El informe apoya las iniciativas para sustituir los experimentos con animales por métodos alternativos sobre la base de investigación adicional. Por eso hemos solicitado reiteradamente que se destinen recursos también como parte del Séptimo Programa Marco de Investigación. Los indicadores de protección animal con unos criterios científicamente precisos constituyen la base más fiable para el futuro desarrollo de una protección viable de los animales.
Este informe inicial para el periodo 2006-2100 no pretende describir con detalle medidas concretas. Nosotros no apoyamos ninguna enmienda que contemple la aplicación no vinculante de las normas voluntarias de protección de los animales a escala nacional. En el informe se insiste en la necesidad de una buena aplicación y vigilancia de la normativa vigente sobre protección de los animales, por ejemplo en el ámbito del transporte de animales. Acogemos con satisfacción la propuesta de prohibir las importaciones de pieles de gato y perro y exigimos una acción decisiva para restringir el comercio de productos obtenidos de la foca. Se ha insistido en la necesidad de que los países candidatos adapten con urgencia su legislación. Además, apoyamos firmemente una «etiqueta comunitaria» sencilla y obligatoria para la protección de los animales.
Se han presentado 14 enmiendas. Apoyamos la enmiendas 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 12 y 14, pero no podemos apoyar las enmiendas 1, 9, 10 y 13. Hemos solicitado la votación por partes de los apartados 5, 7a, 29, 54 y 71.
A la Comisaria le diría que el Comisario Kyprianou está actualmente en Brasil, donde estoy segura de que elogiará las normas europeas de protección de los animales. Espero que hable también sobre las deficiencias en los productos agrícolas importados a la UE desde Brasil que han sido detectadas una vez más por la Oficina Alimentaria y Veterinaria de la UE. La agricultura europea y los consumidores europeos se ven perjudicados por las distorsiones de la competencia. Las normas europeas de protección de los animales que se están demandando deben influir también positivamente en nuestra competitividad. Quiero dar las gracias a la señora Comisaria, y también a mis colegas diputados, por su constructiva cooperación.
Neelie Kroes, miembro de la Comisión. (EN) Señor Presidente, con respecto al plan de acción comunitario sobre protección y bienestar de los animales, agradezco el gran trabajo realizado por los diputados de las comisiones implicadas. Permítanme reconocer, en particular, los esfuerzos realizados por la señora Jeggle en esta importante iniciativa.
El bienestar de los animales es objeto de gran preocupación para los ciudadanos de la UE, las partes interesadas y los diputados al Parlamento. Todos ellos han sido muy claros al pedir unos mayores niveles de protección de los animales, no solamente en la UE, sino en todo el mundo. La Comisión está trabajando mucho y con cierto éxito para alcanzar un mayor consenso internacional con respecto al bienestar de los animales. Por ejemplo, hemos desempeñado un papel fundamental en el desarrollo de normas relativas al bienestar de los animales por parte de la Organización Mundial de Sanidad Animal. Deberíamos recordar que la cuestión no se limita a los animales de granja, sino que también abarca a los animales utilizados en experimentos, los de los zoos y los circos y los animales salvajes.
El plan de acción pretende promover un planteamiento amplio con respecto al bienestar de los animales, que implique a todas las partes interesadas, de forma que cada uno haga su parte. No se trata de una cuestión que afecte solamente a los agricultores o a quienes trabajan con animales: los científicos, la industria, los ciudadanos y los Gobiernos tienen también un papel que desempeñar. Asimismo, se trata de un ámbito que puede potenciar la competitividad de sectores de la economía europea y el establecimiento propuesto de una plataforma informativa europea facilitaría un diálogo abierto y un intercambio de conocimientos técnicos y experiencias.
También existen sólidos vínculos con otras políticas comunitarias, por ejemplo la Estrategia de Lisboa para el crecimiento y el empleo, el principio de una mejor regulación y prestar la atención apropiada a los principios científicos, sociales y económicos que sustentan las políticas comunitarias. Como se subraya en el informe del Parlamento y en las conclusiones de la Presidencia austriaca, se necesita más investigación para hacer frente a las actuales carencias de conocimiento y reforzar la base científica de nuestras políticas. En particular, el desarrollo y la validación de indicadores científicos y objetivos del bienestar de los animales son fundamentales para la aplicación con éxito del plan de acción. Este trabajo podría mejorarse mediante el establecimiento de un centro comunitario para la protección y el bienestar de los animales. La Comisión necesita y pretende realizar una amplia consulta durante los próximos meses, incluyendo a los Estados miembros y las partes interesadas, acerca de las expectativas para este centro.
Al aplicar el plan de acción, la Comisión quiere garantizar que las políticas se desarrollen y apliquen de forma más coherente y consecuente, respetando nuestras claras obligaciones en virtud del protocolo anejo al Tratado CE.
El bienestar de los animales es una cuestión de gran importancia para los ciudadanos de la Unión Europea y acojo con gran satisfacción la actitud positiva del Parlamento con respecto a nuestra iniciativa. La Comisión prestará gran atención a los aspectos señalados en el informe del Parlamento y no me cabe duda de que regresaremos sobre el plan de acción en numerosas ocasiones en el curso de su aplicación. Espero contar en el futuro con el apoyo del Parlamento a las iniciativas necesarias para seguir la estrategia recogida en el plan.
Jens Holm (GUE/NGL), ponente de opinión de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria. – (SV) Señor Presidente, señora Comisaria, Señorías, todos los días millones de animales sufren, ya sea en las fábricas de animales de la industria cárnica, en los mataderos europeos, durante su transporte o en experimentos dolorosos con animales. Ahora tenemos la oportunidad de realizar mejoras prácticas en las condiciones de tenencia de estos animales.
Intervengo en representación de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria. Fue mi predecesor, señor Sjöstedt, el responsable de la cuestión que hoy nos ocupa. En el dictamen que hemos emitido, exigimos, por ejemplo, que los animales tengan derecho a una conducta natural, que se evite la sobreproducción de carne, que todas las gallinas puedan criarse al aire libre a partir de 2016 como muy tarde, que las cerdas de cría puedan moverse libremente durante todo su ciclo de vida y que se introduzca una duración máxima total de ocho horas para el transporte de animales. Así pues, lamentablemente me veo obligado con decepción a decir que el informe de la señora Jeggle no tiene en cuenta ninguna de estas demandas.
Por eso es importante que influyamos lo más posible en este informe. El Grupo Confederal de la Izquierda Unida Europea/Izquierda Verde Nórdica ha solicitado la votación por partes de las cuestiones que pensamos que hacen que el valor de los animales dependa de consideraciones comerciales. Si se aprueba el informe de la señora Jeggle, la protección de los animales se convertirá en un objetivo de interés siempre que no esté en conflicto con la OMC y con intereses comerciales. Así es como están las cosas actualmente, pero no podemos dejar que sigan así. Los animales tienen valor con independencia de cambios en la competitividad.
Lo importante es que en Europa tomemos la iniciativa y nos hagamos competitivos con normas más estrictas y una mejor protección de los animales. Les pido, por tanto, que rechacen con su voto el texto del considerando G y de los apartados 51, 52, 53 y 59. Les pido también que voten a favor de, por ejemplo, las enmiendas 11 y 12, apoyadas ahora también afortunadamente por la señora Jeggle. Si votan de esta forma, podremos obtener por fin un plan de acción que permita a cientos de millones de animales en la UE una vida mucho mejor. Eso es algo que los animales se merecen.
Agnes Schierhuber, en nombre del Grupo PPE-DE. – (DE) Señor Presidente, señor Presidente de la Comisión, señora Comisaria, Señorías, quiero empezar dando las gracias a la ponente, señora Jeggle, por un informe sensato, objetivo y profesional. Es bien sabido que Austria, mi país natal, tiene una ley nacional de protección de los animales que está entre las más modernas de Europa. Celebro que este informe se haya inspirado mucho en la Ley federal austriaca sobre la protección de los animales, que es realmente muy práctica y que se ocupa de mantener a los animales en unas condiciones adecuadas a cada especie.
Toda esta cuestión ha sido muy difícil, puesto que los ciudadanos europeos están preocupados por ella. Al fin y al cabo, debemos procurar el bienestar de todos los animales. Por eso, me decepciona mucho que el anterior orador se siga refiriendo únicamente a los animales destinados a cría y producción, y no a todos los animales. Todos los animales son seres vivos y todos ellos tienen derecho a vivir en unas condiciones adecuadas a su especie, ya sea en zoológicos, en hogares o como animales de compañía. Como responsable de la administración de una finca con animales desde hace más de 30 años, soy una de las personas que mejor sabe lo importante que es que los animales se mantengan en unas condiciones adecuadas a su especie. Las condiciones de tenencia y cebado de los animales tienen una influencia especialmente grande en la calidad del producto, de los alimentos que van a producir. En consecuencia, por mi conocimiento y las experiencias de la vida cotidiana, tengo una opinión muy buena sobre este informe.
Me complace también que en el informe se mencione la protección de los animales con respecto a la OMC, y en particular con respecto a las importaciones de terceros países. Después de todo, tiene que dejarse claro que, salvo que consigamos que la cría y tenencia de todos los animales –ya sean procedentes de la UE o importados de terceros países– se sometan a las mismas normas, no habrá beneficio alguno ni para los agricultores europeos, ni para los animales europeos, ni siquiera para los consumidores europeos, puesto que simplemente los métodos de producción no serán los deseados.
Todos los animales son seres vivos, como ya he dicho, y por eso quiero manifestar en retrospectiva, a la señora Jeggle, mi más sincero agradecimiento una vez más por su informe.
Marc Tarabella, en nombre del Grupo del PSE. – (FR) Señor Presidente, Señora Comisaria, Señorías, antes de nada quiero dar las gracias a la señora Jeggle por su excelente informe. Mañana vamos a votar este informe, que es el resultado de un largo trabajo y me alegro de la posición común que hemos alcanzado. Pero quiero recordarles tres cuestiones fundamentales, que están, de hecho, en el informe y sobre las que quiero llamar su atención.
En primer lugar, quiero insistir en la necesidad de acelerar el desarrollo, la validación y la aprobación de alternativas a los experimentos con animales. Tenemos que dotarnos a nosotros mismos de medios económicos y logísticos para encontrar otros métodos que nos permitan evitar esos experimentos. Tenemos también que limitar y regular estrictamente esos experimentos en aquellos casos en los que todavía no existan alternativas.
En segundo lugar, no podemos olvidarnos de que la mejora del bienestar de los animales se traduce sobre todo en mayores costes de producción para los productores europeos. Por tanto, quiero insistir en la necesidad de validar sus esfuerzos a través del etiquetado y de campañas de información para explicar la razón de una diferencia de precios. Los productores europeos no pueden ser penalizados por respetar las exigencias de la Unión Europea y mejorar nuestros alimentos, y los consumidores, por su parte, tienen que saber que los incrementos de precio son el resultado de una mejora del alimento en cuestión. Gracias a la creación de una etiqueta europea y a la organización de las correspondientes campañas de marketing e información, los consumidores podrán identificar los productos particularmente respetuosos con el bienestar de los animales.
En tercer lugar, el bienestar de los animales no debe ser un valor exclusivamente europeo. Las medidas que estamos adoptando en la Unión Europea tienen que ser también respetadas en todos los países desde los que importemos carne. Esto es fundamental tanto por motivos económicos como de calidad. La Comisión Europea tiene que hacer todo lo posible, con la ayuda de organizaciones internacionales como el Consejo de Europa o la Organización Mundial de Sanidad Animal, para conseguir que la OMC preste una mayor atención al bienestar de los animales y proceda a una armonización al alza de las medidas relacionadas con dicho bienestar. A la larga, está claro que el objetivo debe ser el logro de un nivel de protección de los animales lo más alto y uniforme posible en todo el mundo.
Karin Resetarits, en nombre del Grupo ALDE. – (DE) Señor Presidente, señora Comisaria, señora Jeggle, Señorías, el informe Jeggle contiene muchos aspectos necesarios y urgentes para mejorar la protección de los animales en toda Europa. Nosotros, en el Grupo de la Alianza de los Demócratas y Liberales por Europa, damos prioridad a todas las iniciativas encaminadas a promover decisiones de compra informadas por los consumidores. Al fin y al cabo, en las sociedades de consumo del libre mercado, el consumidor es el rey. Él o ella deciden si nuestros pollos duermen en camas de paja o encadenados a barras de hierro antes de desaparecer en nuestras gargantas como McNuggets de pollo; si atiborramos de medicinas a nuestros cerdos para que puedan sobrevivir a los tormentos de sus cortas vidas; o si despellejamos a los perros y gatos extraviados para obtener elegantes pieles para abrigos de invierno.
Los consumidores tienen el poder de decidir si incentivan y apoyan a los productores europeos que consideran importante la protección de los animales, su tenencia en unas condiciones adecuadas a su especie y unos alimentos saludables, o si obligan a nuestros productores a participar en el dúmping mundial, con normas y precios cada vez más bajos. Estoy convencida de que la mayoría de los consumidores inteligentes y bien informados no compraría nunca un producto obtenido de un animal que hubiera sufrido un tormento agonizante antes de acabar en las estanterías. El ser humano tiene tendencia a esconder la cabeza debajo del ala. Prefiere no admitir la realidad de cosas tan tristes como el sufrimiento de los animales cuando prepara un asado en el horno.
Nuestra obligación política es asegurar que los consumidores estén informados de las condiciones reales de producción. Nosotros los políticos tenemos que divulgar lo que sabemos. El poder de la información que aparece en los envases queda demostrado por las advertencias de los paquetes de cigarrillos. El informe Jeggle propone un programa de etiquetado que resuelva las dificultades que tienen los consumidores para reconocer los productos particularmente respetuosos con la protección de los animales. Quiero pedirles que actuemos con valentía en esto. El consumidor debe saber también qué productos se han obtenido a costa de un terrible sufrimiento de los animales. Si lo sabe, seguramente no optará por los productos más baratos, sino por productos algo más caros pero que demuestren su amor por los animales. Nosotros los europeos estamos demasiado a la defensiva en esto.
No nos dejemos intimidar por la competencia barata de terceros países: es posible que en ningún caso podamos producir tan barato como ellos. Confiemos en la comunidad cada vez mayor de consumidores que toman decisiones conscientes cuando deciden qué comprar y optan por productos que garantizan un trato respetuoso hacia los animales.
Friedrich-Wilhelm Graefe zu Baringdorf, en nombre del Grupo Verts/ALE. – (DE) Señor Presidente, quiero manifestar mi respeto a la señora Jeggle por su trabajo. No ha sido un trabajo fácil y sigue habiendo algunas incoherencias, pero en conjunto la línea adoptada es la correcta y no podemos culpar a la señora Jeggle de esas incoherencias. Estoy de acuerdo con ella en que nuestros altos niveles de protección de los animales tienen que ser un ejemplo para el resto del mundo. Eso es particularmente necesario porque en los últimos años no hemos dado una imagen demasiado buena como espacio cultural. Estoy pensando en la EEB, las dioxinas o las matanzas selectivas como resultado de la fiebre aftosa, de los millones de animales destruidos y quemados en piras, un capítulo poco glorioso para enseñar al resto del mundo. Por eso es importante que adoptemos aquí una nueva línea.
Existe también un argumento comercial que debe tenerse en cuenta en la relación directa con los consumidores. Si hay alguien que se oponga a que los pollos vivan en jaulas, se le podrá decir todo lo que uno quiera, pero lo que esa persona querrá son huevos de corral; la alternativa le quitará el apetito al pensar en los pollos. Tiene que haber, por tanto, una orientación comercial acorde con las consideraciones de la protección de los animales; pero tenemos que ser también conscientes de que la protección de los animales conlleva costes. Cuando nos ocupamos de mercados anónimos –como suele ocurrir con las importaciones de terceros países– debemos tener una buena protección externa para asegurar el cumplimiento de nuestras normas, puesto que eso se reflejará en el precio. Le recuerdo a la señora Jeggle que eso mismo se aplica a Europa, por supuesto. Si no garantizamos la aplicación de las normas de protección de los animales en la producción, aparecerán también en Europa distorsiones de la competencia. En consecuencia, tenemos que considerar la inclusión de los requisitos de protección de los animales en el principio del cumplimiento mutuo, de manera que existan desincentivos para las empresas a la hora de incumplir las normas de protección animal, no solo en forma de sanciones, sino también de pérdidas económicas, por ejemplo, deducciones de las primas.
Kartika Tamara Liotard, en nombre del Grupo GUE/NGL. – (NL) Señor Presidente, en primer lugar, permítame decir que acojo con gran satisfacción el plan de acción sobre el bienestar de los animales. No obstante, lo que lamento mucho es de entrada que este tipo de cosas sean necesarias. La forma en la que la gente trata a los animales revela a menudo su verdadera naturaleza, una imagen que no es siempre muy agradable. Todavía se trata a los animales con demasiada frecuencia como si fuesen mercancías, siendo el beneficio económico más importante que su bienestar. Creo que este informe puede poner fin por lo menos a una serie de prácticas diabólicas a las que se somete a los animales. El informe incluye algo que llevo defendiendo mucho tiempo, concretamente la prohibición de la práctica de castrar sin anestesia a los cochinillos, que no gusta a los animales ni a los ganaderos. El hecho de que se pida un apoyo más activo para que la investigación sustituya la experimentación con animales por métodos de ensayo alternativos supone una gran mejora para muchos animales. Huelga decir que tengo otras muchas ideas acerca de la protección de los animales que van más allá, como un aumento notable del ganado de corral, la prohibición de las corridas de toros, de la práctica de alimentar a las ocas para aumentar el tamaño de sus hígados, de las jaulas de batería, la reducción drástica de los tiempos de transporte de los animales y otras muchas cosas. Es lamentable que algunas enmiendas correctas presentadas por la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria hayan sido rechazadas por la Comisión de Agricultura y Desarrollo Rural. Quisiera señalar que, indudablemente, el bienestar de los animales no se limita al ganado; las mascotas y los animales salvajes también deben estar incluidos en el ámbito de aplicación del plan de acción. Quiero pedir a todos que dejen que sus compasivos corazones hablen mañana con respecto a nuestras queridas criaturas y que presten todo su apoyo a las enmiendas de mayor alcance a favor de los animales. Debemos demostrar que en esta Cámara no nos comportamos nosotros mismos como animales y votar teniendo en cuenta sus intereses.
Janusz Wojciechowski, en nombre del Grupo UEN. – (PL) Señor Presidente, la protección y el bienestar de los animales es un desafío para la cultura humana y para la civilización del siglo XXI. Me satisface mucho que mi enmienda que expresa esta idea haya sido aprobada para el proyecto de resolución.
Mahatma Gandhi dijo en una ocasión que la civilización de una sociedad se puede medir por la forma en la que trata a sus animales. En el siglo XXI, en Europa no hay lugar para la crueldad con los animales. Degrada nuestra humanidad y eso está fuera de lugar. Entre la crueldad con los animales y la crueldad con los humanos no hay más que un paso. La protección de los animales no debería expresarse en términos monetarios, porque nuestra civilización no se puede expresar en estos términos. Los animales deben ser protegidos frente a la crueldad, independiente del coste, aunque con una condición: que apliquemos las condiciones de la Unión Europea a todos aquellos que exportan sus productos de origen animal al mercado europeo.
Andrzej Tomasz Zapałowski, en nombre del Grupo IND/DEM. – (PL) Señor Presidente, la cuestión del respeto de unos niveles adecuados de protección de los animales en los Estados miembros de la Unión Europea y la consiguiente producción de alimentos adecuados para los consumidores revisten gran importancia. Por esta razón, hay que hacer todo lo posible por garantizar que en el mercado común solamente entren alimentos de alta calidad. Hay que tomar medidas estrictas para limitar la importación de productos cuando exista cualquier sospecha de que no se les han aplicado las normas europeas para la cría de ganado. Limitarse a subir los impuestos a los exportadores que no cumplen las normas no servirá de nada.
Quiero señalar que hasta la fecha la Comunidad no ha logrado hacer respetar los derechos humanos, por no hablar de los derechos de los animales. Desde esos países se exportan grandes cantidades de alimentos al mercado europeo. Quiero decir que las explotaciones agrícolas pequeñas y familiares han tratado tradicionalmente a sus animales de una forma humana y que son las grandes explotaciones industriales las que se apartan de esas normas. También se han producido distorsiones con respecto a la cuestión de las directrices para el sacrificio de animales. Es un grave error prohibir el sacrificio de animales para consumo propio en las explotaciones familiares. Se trata de una tradición que se remonta siglos atrás y los agricultores se aseguran de que los animales sean sacrificados en condiciones apropiadas.
Andreas Mölzer (NI). – (DE) Señor Presidente, como sabemos han pasado muchas cosas desde la aparición de la noción de protección de los animales a raíz de la cría cada vez más mecanizada de animales a lo largo del siglo XIX. El plan de acción que debatimos ahora es sin duda un paso importante en la buena dirección.
Como sabemos, la UE ya expresó en 2003 su preocupación por las peleas de gallos y perros y por las corridas de toros, y me complace que esto también se refleje en el documento presente. No obstante, por extraño que parezca, se pasa por alto la caza del zorro. En mi opinión, también es necesario actuar en el ámbito de las aves silvestres, dado que la Unión Europea todavía permite la caza de especies cuyas poblaciones están menguando desde hace siglos.
En mi opinión, también es particularmente importante cambiar de una vez nuestro sistema de subsidios agrícolas, para que en lugar de beneficiar principalmente a los grandes terratenientes, recompensen la práctica de mantener a los animales en condiciones apropiadas para cada especie, una práctica en la que los innumerables minifundistas dan ejemplo.
Finalmente, la abolición de los subsidios a la exportación para el transporte de animales no solamente demostraría más compasión por los animales, sino que también protegería el medio ambiente y ayudaría a las personas que sufren debido al tráfico de tránsito.
María del Pilar Ayuso González (PPE-DE). – (ES) Señor Presidente, señora Comisaria, tengo que felicitar a la Comisión por esta propuesta, y tengo que felicitar muy especialmente a la señora Jeggle por este magnífico informe y el gran trabajo que ha hecho.
Yo solamente quería llamar la atención sobre el punto 71. En este punto se pide que se ponga fin a la lucha de perros, toros y gallos. Cuando habla de lucha de toros, obviamente se refiere a las corridas de toros. Equiparar las corridas de toros con la lucha de perros y gallos realmente no tiene ningún sentido. En primer lugar, porque los toros no luchan entre sí, no es una lucha de animal con animal, es una lucha muy noble del hombre contra el toro, y a veces el que muere es el hombre, y muchas veces resulta herido. Es, además, una tradición y una cultura dentro de nuestro país. Quizás algunos no lo entiendan, pero el toro es algo muy importante para nosotros, los españoles, para la corrida de toros. Y yo soy tan respetuosa con las tradiciones de otros países como pido que sean respetuosos con las del mío. Muchas gracias.
El toro contribuye al mantenimiento de las dehesas, contribuye a la protección del medio ambiente, contribuye al desarrollo rural. Además, el toro, dentro de los animales vacunos, es el que mejor vive; si hablamos de bienestar animal, cabe señalar que el toro vive muy bien alimentado, vive al aire libre, vive corriendo como le gusta vivir a un animal, y al final muere luchando con sus propias defensas. La corrida es mucho más noble que la caza, en la que, al fin y al cabo, se mata al animal sin que el animal pueda defenderse.
Yo quiero agradecer a la señora Jeggel y a todo mi Grupo político que hayan comprendido esto y que se vaya a pedir que se saque esta palabra de este punto.
Rosa Miguélez Ramos (PSE). – (ES) Señor Presidente, el bienestar animal, incluido en la PAC desde la última reforma, es ya un logro de la agricultura europea, aunque, a tenor de los resultados del Eurobarómetro especial que se realizó en el año 2005 sobre esta cuestión, los europeos desconocen el esfuerzo que están realizando nuestros productores y, por lo tanto, no lo valoran, a pesar de que nuestra normativa es la más protectora. La Comisión Europea ya admitió la necesidad de informar mejor a los consumidores sobre este asunto si queremos que se valoren los esfuerzos realizados por nuestros agricultores.
Pero este elevado nivel de protección tiene un coste económico que puede conducir a la pérdida de competitividad de nuestra industria agroalimentaria. Son necesarios estudios de impacto sistemáticos que analicen las repercusiones sociales y económicas de cualquier nueva norma, análisis científicos sólidos que reflejen la variedad de situaciones que existen en la Unión Europea y proporcionen indicadores objetivos de bienestar animal y coherencia con el resto de las políticas de la Unión y, más particularmente, con la Estrategia de Lisboa, la competitividad y el empleo.
Cinco aspectos fundamentales, pues: mejora de la comunicación hacia la sociedad, análisis socioeconómico riguroso, bases científicas sólidas, mayor coherencia con otras políticas comunes y promoción de los estándares europeos en los foros internacionales.
Y con relación al apartado 71, yo quisiera decir que mi Grupo, desde luego, va a votar en contra de ese apartado, entre otras cosas y sobre todo porque contiene una serie de incorrecciones técnicas y trae aquí un debate que está totalmente fuera de lugar, un debate que está empañando los aspectos más importantes de este informe y, sobre todo —tengo que decirlo así—, el excelente trabajo realizado por la ponente, por la señora Jeggle, que ha sido una ponente ágil, trabajadora y muy ponderada.
Mojca Drčar Murko (ALDE). – (EN) Señor Presidente, acojo con satisfacción el plan de acción y quiero dar las gracias a la señora Jeggle por su trabajo.
El conocimiento de que muchos animales de la Unión Europea reciben un trato inapropiado y de que hay que continuar trabajando tiene gran importancia, no solamente por caridad, sino también porque, para el desarrollo de un planteamiento de mercado, el trato humano de los animales supone una oportunidad para los productores europeos, si se desarrolla convenientemente. Las protección de los animales mediante la legislación es valorada positivamente por un número creciente de europeos y el etiquetado de los productos alimenticios fabricados con animales que reciben un trato humano podría finalmente aportar beneficios económicos a los productores y pasar a formar parte del modelo social europeo. Por otra parte, la competencia mundial impone la tendencia de que los productores busquen beneficios con el mínimo nivel de protección de los animales posible.
Esa es la razón por la que el plan de acción representa también un sólido mensaje político para el mundo. Al definir nuestras intenciones de establecer unas normas obligatorias mínimas contra los peores abusos, ponemos de manifiesto la necesidad de un debate a nivel mundial, a nivel de la OMC. Estableciendo prioridades para un mejor trato de los animales de granja, evitando el sufrimiento innecesario causado por pruebas que podrían ser sustituidas, prohibiendo la importación de productos derivados de animales sometidos a un trato cruel y mejorando el trato de los animales durante el transporte, etc., impulsamos por soluciones globales.
Nos gustaría hacer más, como demuestran las enmiendas, pero el plan es, sin embargo, un buen punto de partida para una política comunitaria íntegra en este ámbito.
David Hammerstein Mintz (Verts/ALE). – (ES) Señor Presidente, la crueldad no es cultura; causar sufrimiento no puede considerarse una diversión. El padecimiento industrial masivo no es un negocio lícito. La exigencia de justicia en nuestras relaciones con los animales cuestiona y amplía la moral humana dominante. La consecución del bienestar animal nos obliga a reorientar nuestras habituales prácticas humanas de responsabilidad moral otorgando protección y derechos a los individuos animales no humanos, que tienen capacidades sensoriales, emocionales e intelectuales.
El reconocimiento y la ampliación de los derechos de los animales nos han de llevar a abstenernos de causarles crueldad y sufrimientos innecesarios: de esto se trata en este informe.
Los Verdes apoyaremos la propuesta, con una serie de enmiendas, y exigiremos al Consejo que no siga ignorando la opinión mayoritaria de los europeos y de las europeas a favor de medidas más estrictas de protección animal; no es posible.
Nosotros pensamos que nuestra preocupación es un esfuerzo ético y altruista, pero también responde a la preocupación por las necesidades e intereses de las personas. Defendemos la mejora del bienestar animal porque solo con esta mejora se puede favorecer a la salud humana, el medio ambiente y la justicia social.
Jeffrey Titford (IND/DEM). – (EN) Señor Presidente, la variedad de iniciativas propuestas en este documento es tan amplia que debería mantener a los burócratas de la Unión Europea perfectamente ocupados durante los próximos 20 años.
No obstante, examinemos uno de los puntos más destacados del historial de la Unión Europea en materia de bienestar de los animales: en 2001, durante el infame brote de fiebre aftosa, siete millones de animales fueron sacrificados en Gran Bretaña, siguiendo instrucciones de la Unión Europea; la mayoría de ellos estaban sanos. Recuerdo bien las enormes piras funerarias de animales ardiendo. La UE se negó obstinadamente a permitir la vacunación que tanto habría beneficiado al bienestar de los animales y de la agricultura británica. En vez de esto, prefirió un planteamiento de tierra quemada, jurídicamente dudoso y moralmente injustificable. Por lo tanto, no creo que la Unión Europea esté es condiciones de afirmar que moralmente tiene la razón en el ámbito del bienestar de los animales ni de dar lecciones a los Estados miembros al respecto, sin importarle el resto del mundo, como este noble documento afirma que hará.
Tenemos todo en este informe, incluida la creación de un foro informativo sobre protección animal. Sin duda se tratará de otra agencia ejecutiva sumamente cara. ¿Quién va a pagar esto? Los contribuyentes. ¿Quién va a tener que encargarse de todos los trámites? Los agricultores, que apenas pueden hacer frente al papeleo actual.
Este documento está obsesionado con la normalización y la uniformidad. Parece no tener en cuenta las amplias diferencias existentes entre los climas y las culturas agrícolas de países tan distintos como Portugal y Suecia. No tiene en cuenta las normas ya de por sí estrictas sobre el bienestar de los animales que rigen en Gran Bretaña. Se basa en la tesis central de que la Unión Europea puede hacerlo mejor, pero eso no es así.
Albert Jan Maat (PPE-DE). – (NL) Señor Presidente, antes de exponer mi postura quiero dar las gracias a la ponente por su excelente informe y por el buen equilibrio que ha conseguido entre lo que es y no es posible y lo que queremos para el bienestar de los animales en Europa. También me gustaría responder al comentario del señor Titford con respecto a que la burocracia europea fue la responsable del sacrificio de siete millones de animales en Gran Bretaña durante la crisis de la fiebre aftosa. Me gustaría corregirle en este punto: Cuando Gran Bretaña se unió a la Unión Europea, Europa se vio obligada a cambiar su legislación. Ya no se nos permitía vacunar como medida preventiva. Ya no se nos permitía vacunar de fiebre aftosa. Esto se lo debemos al Gobierno británico del momento, así que, por favor, no me intente decir que Europa es la culpable del sacrificio de siete millones de vacas en Gran Bretaña, puesto que la única explicación es la postura británica de entonces. Solamente quería desahogarme. También digo esto porque el informe de la señora Jeggle afirma muy claramente que la vacunación debería ser un instrumento válido para mejorar el bienestar de los animales en la Unión Europea. En vista de los brotes de enfermedades infecciosas en los animales, es positivo que hagamos ciertos progresos y que utilicemos en todo caso técnicas científicas para combatirlas. Esa es la mejor forma de bienestar animal en Europa.
El segundo punto que quería plantear se refiere al transporte de los animales. En esta Cámara hemos pedido una reducción de la duración del transporte de animales destinados al sacrificio. Lamentablemente, el Consejo no lo ha aceptado, pero la posición del Parlamento es clara. En ese sentido, quiero pedir al señor Titford, si realmente quiere proteger el bienestar de los animales también en su país, que vote a favor del informe Jeggle. Eso es esencial, porque entonces realmente hará un favor a los ciudadanos de Gran Bretaña y a los de toda Europa.
La tercera razón por la que acojo con satisfacción este informe es que llama especialmente la atención sobre la importación de productos de fuera de la Unión Europea. Después de todo, puede que tengamos normas y reglamentos adecuados, pero si no podemos llevar a cabo ningún control sobre las fronteras exteriores de Europa, entonces serán irrelevantes; es fundamental que esta Cámara utilice el informe Jeggle para volver a incluir esto en su plan de trabajo.
Wiesław Stefan Kuc (PSE). – (PL) Señor Presidente, si los animales pudiesen hablar, sin duda darían las gracias a la ponente, la señora Jeggle, por defenderlos. En ella tienen a una guardiana y portavoz apasionada. El informe merece un gran aplauso. Aborda todas las cuestiones más importantes, incluida la protección de los animales de granja y de los animales salvajes. La ponente también ha tratado el tema del transporte, la economía productiva, aspectos internacionales, el etiquetado de productos, el uso de animales en la investigación, métodos humanos de sacrificio, etc. Creo que, con toda nuestra ayuda, los objetivos señalados en el informe, que son muchos, se pueden conseguir. No obstante, deberíamos prestar particular atención a la sensibilización de la sociedad con respecto a esta cuestión, a la implicación continuada de organizaciones internacionales y a la difusión de información, lo que nos permitirá conseguir los mismos resultados que con la caza de focas. No hay nada que añadir a este informe. Quiero felicitar sinceramente a la ponente, como hacen todos los animales.
Carl Schlyter (Verts/ALE). – (SV) Señor Presidente, una sociedad civilizada nunca puede competir sobre la base de los precios más bajos, criando a los animales en condiciones rayanas en la tortura. Solo aplicando requisitos estrictos de protección de los animales sobrevivirá la cría de animales en la UE. El futuro reside en la producción local y en las distancias cortas para el transporte de animales, así como en la protección del consumidor, criando a los animales en condiciones naturales. Tenemos una política agrícola que provoca sufrimiento a los pollos de cría, que obliga a transportar a los animales a largas distancias y a castrar a los cerdos y que administra más medicinas a los animales que a las personas. No son los cerdos, sino una política agrícola como esta la que debería ser castrada.
Una plazo máximo de ocho horas para el transporte de animales es una exigencia razonable. Se necesitan normas mínimas de protección de los animales conforme a la enmienda 11. En los últimos 40 años hemos conseguido ser cuatro veces más ricos. Si no podemos permitirnos sacrificar un porcentaje de esta riqueza para proteger a animales indefensos, no podemos decir de nosotros mismos que somos civilizados.
A mis amigos españoles quiero decirles lo siguiente: una lucha noble sería un matador desarmado frente a un toro desarmado y al que no se le haya administrado ningún tratamiento, que no tenga la espalda partida, que no esté drogado y que no haya sido torturado. Eso sí sería una lucha noble. No obstante, del modo en que se llevan a cabo actualmente las corridas de toros suponen una absoluta crueldad para los animales, y eso no merece subsidio alguno.
PRESIDENCIA DEL SR. MAURO Vicepresidente
Neil Parish (PPE-DE). – (EN) Gracias, señor Presidente, gracias, señora Comisaria, y gracias, señora Jeggle, por este gran informe, dado que es fundamental que cuidemos a los animales en Europa.
De hecho, nuestro historial es excelente en este terreno, porque tenemos estrictas normas de producción, aunque hemos de centrarnos particularmente en el consumidor. Estoy de acuerdo con uno de los oradores anteriores, que ha dicho que el consumidor debe poder elegir, poder ver las etiquetas y estar absolutamente seguro de esa producción. Cuando uno entra en un supermercado y busca un pollo de corral o un pollo de producción ecológica o un pollo para asar procedente de la avicultura intensiva, realmente no ve ninguna diferencia entre ellos. Tiene que confiar absolutamente en que la etiqueta sea correcta. No solamente tiene que ser correcta para la producción que tenemos aquí en Europa, sino también para la producción que procede de fuera de Europa. Por lo tanto, los consumidores tienen que confiar plenamente en el etiquetado.
También debemos reducir el número de animales utilizados en ensayos y en este pinto debemos tener asimismo mucho cuidado con la legislación europea, porque si no tenemos cuidado, REACH puede realmente aumentar el número de animales utilizados para este fin innecesariamente.
¿Puedo dirigirme al señor Titford y aclararle una o dos cosas? En primer lugar, ve burócratas europeos en todas partes, creo, pero, por lo que se refiere a la fiebre aftosa, fue el Gobierno del Reino Unido el que estaba totalmente decidido a llevar a cabo los sacrificios. Fue el Gobierno del Reino Unido el que estaba tan preocupado por que las elecciones generales se retrasasen que organizó el denominado «contiguous cull» (o retirada de animales cercanos), que provocó el sacrificio de millones de animales innecesariamente. De hecho, en los Países Bajos se llevaron a cabo vacunaciones para intentar evitar las piras funerarias masivas. Por lo tanto, señor Titford, no fue la Unión Europea la que tuvo un problema con la fiebre aftosa: fue el Gobierno del Reino Unido.
Ioannis Gklavakis (PPE-DE). – (EL) Señor Presidente, quiero felicitar a la ponente por su informe. La señora Jeggle es una diputada al Parlamento Europeo sensible, capaz y excelente.
El gran líder indio, Ghandi, afirmó que cuando los hombres tratan bien a los animales demuestran su humanidad y sus nobles sentimientos. Por lo tanto, estoy de acuerdo con la ponente, la señora Jeggle, sin duda alguna. No obstante, quiero señalar un punto delicado e importante, que tiene que ver con la cría del ganado, que tiene que ver con el hombre. No me refiero a los animales domésticos, a las peleas de gallos ni de perros, con respecto a lo que coincido con la ponente; me refiero a los animales de cría. Si se aplican las medidas del informe, que –repito– apruebo y apoyo, entonces nuestros agricultores tendrán mayores costes de producción, lo que significará que tendremos que apoyarles económicamente o que tendremos que encontrar formas de controlar las condiciones de vida de los animales criados en terceros países cuya carne sea importada a la Unión Europea. De lo contrario no conseguiremos nada. La cría de ganado en Europa retrocederá debido a la competencia desleal y demostraremos que somos hipócritas y no amantes de los animales y que no tenemos ningún sentido de la solidaridad con los ganaderos.
Aparte de eso, quiero señalar otra cuestión. Me gustaría que existiesen controles más estrictos sobre la caza de animales silvestres. Muchas de nuestras montañas y bosques ya no tienen ningún animal silvestre porque se produce una matanza incontrolada y depredadora de los animales, y esto no solamente afecta a los animales. Altera todo el ecosistema de las montañas y los bosques de Europa y del resto del mundo.
Esther Herranz García (PPE-DE). – (ES) Señor Presidente, gracias señora ponente, señora Jeggle, por su trabajo. Esta iniciativa responde a una preocupación social que yo creo que es importante que se tenga en cuenta, no solamente en la Unión Europea, sino en todo el mundo.
Es importante el bienestar animal y es importante que tengamos un estándar único europeo y que en todos los países de la Unión Europea, desde luego, se respete; que se respeten estas normas en las que somos pioneros en todo el mundo, porque pocos Estados del mundo pueden decir que cumplen unos estándares como los que aplica la Unión Europea.
Recientemente hemos hablado, por ejemplo, de la cría del pollo para carne y del transporte de animales; y en este informe de la señora Jeggle no solamente estamos hablando de las granjas de producción, sino también, por ejemplo, de la exhibición de los animales, de los zoos, de los circos, de la investigación y el desarrollo, en los que también se utilizan animales. Y también tenemos que hablar de los animales domésticos que nos acompañan en nuestras casas y a los que tenemos que prestar atención; desde luego, no tenemos que ser tolerantes con quienes los abandonan, los matan de hambre o abusan de ellos.
Hay que aplicar criterios serios y criterios científicos que nos permitan decir que los animales que nos acompañan en nuestra vida diaria en la Unión Europea son felices. Para eso, quiero recordar que en este Parlamento hemos celebrado audiencias en las que hemos escuchado a expertos internacionales, como el doctor Gonsálvez, de España, que nos han dicho que tenemos que evitar las epizootias e invertir en ello, que tenemos que invertir en respetar las densidades de los animales en las granjas, que tenemos que formar a los niños en el respeto de los animales.
Y tenemos, desde luego, que evitar casos como el que se ha mencionado hoy aquí en relación con el apartado 71, introducido por la ignorancia y el desconocimiento de algún miembro del Grupo Socialista de esta Cámara, que, como se dice en español, ha confundido churras con merinas, porque no ha respetado ni el arte, ni la tradición, ni la cultura de las demás personas que no piensan como él y que son ejemplos de libertad y de respeto a la diversidad.
Por eso, desde el más absoluto respeto a los que no piensan como nosotros, votaremos en contra de ese apartado 71.
Christa Klaß (PPE-DE). – (DE) Señor Presidente, señora Comisaria, Señorías, todo lo que los humanos hacen a los animales repercute después en ellos: Pitágoras se dio cuenta de esto hace ya dos mil quinientos años.
Al observar la interacción entre la protección y la salud de los animales, la sostenibilidad y la seguridad ambiental y alimentaria, hoy puedo comprobar que esto sigue siendo cierto. Afortunadamente, la protección de los animales desempeña ahora un papel importante en nuestra sociedad. El deseo del público de contar con productos que respondan a criterios ética y socialmente correctos es cada vez mayor y hace poco hemos abordado con frecuencia cuestiones delicadas, como la protección de los animales en relación con la cría, el transporte y el sacrificio.
Acojo con satisfacción el plan de acción sobre protección y bienestar de los animales y quiero felicitar a la señora Jeggle por su informe, en el que especifica claramente lo que hay que hacer. Necesitamos medidas para mantener al público mejor informado acerca de los métodos modernos de protección de los animales y sobre la protección efectivamente aplicada. Debemos mejorar las estrategias de comercialización, así como las de etiquetado y comunicación, para informar a los consumidores, ayudándoles así en sus decisiones de compra.
Una «etiqueta UE» sencilla y precisa de protección de los animales podría ayudarnos a armonizar los sistemas de etiquetado actualmente divergentes y establecer normas mínimas aplicables en toda la UE, y espero que también más allá de sus fronteras en un futuro cercano. Sin embargo, no debemos olvidarnos de incluir a los criadores y cuidadores de animales, además de la opinión pública, en esta política de protección de los animales.
¿Por qué esa política comunitaria de protección de los animales ha estado limitada hasta ahora al ganado? ¿No merecen protección los gatos y los perros, solo porque no nos los comemos? Esta es una pregunta legítima, al igual que la de si las mascotas se mantienen siempre en condiciones apropiadas para cada especie. Oímos que ocurren todo tipo de cosas, como pájaros que encerrados en jaulas y serpientes y otros reptiles en pisos de las ciudades. Esa es la razón por la que este punto de vista aparece como es debido en el informe.
Hemos venido defendiendo una reducción del uso de animales en la investigación, la ciencia y la aprobación de productos. La experimentación con animales deben realizarse únicamente si no hay ninguna alternativa.
Neelie Kroes, miembro de la Comisión. (EN) Señor Presidente, gracias por lo que ha sido, en general, un debate muy útil e interesante. Informaré a mi colega, el señor Kyprianou, de sus comentarios.
Me gustaría hacer referencia a un par de comentarios que han hecho. El señor Holm ha hecho hincapié en las cuestiones comerciales y ha sugerido que la competencia es incompatible con el bienestar de los animales. No estoy de acuerdo. Será muy difícil que los productores de la Unión Europea compitan en el mercado mundial únicamente sobre la base del precio. Esto está claro si se tiene en cuenta la ventaja competitiva de algunos países terceros por sus menores costes del suelo, de la mano de obra o de la infraestructura. Por nuestra parte, creo que habría que promover normas estrictas de bienestar animal como una de nuestras ventajas competitivas. También deberíamos recordar que, como ha dicho el señor Tarabella, es necesario que los consumidores tengan realmente la posibilidad de elegir.
Recientes estudios y proyectos de investigación han demostrado un interés activo de los consumidores por el bienestar de los animales de granja. Está claro que los consumidores creen que pueden mejorar el bienestar de los animales mediante su poder adquisitivo y que gran parte de ellos estarían dispuestos a pagar más por esos productos. La señora Resetarits también ha insistido en este punto.
La Comisión considera que el etiquetado hará finalmente que estos productos sean más competitivos, en beneficio de la industria y, en particular, de quienes producen respetando el bienestar de los animales. Creemos que las estrictas normas europeas en materia de bienestar de los animales deben considerarse una oportunidad de mercado y una ventaja competitiva, en lugar de una carga o responsabilidad. La política de vacunación para evitar la propagación de epizootias ha sido examinada a fondo por la Comisión y ya está integrada en la legislación comunitaria específica relativa a la prevención de la fiebre aftosa. Los mismos principios están presentes en las medidas contra la gripe aviar que se acaban de aprobar.
Debo recordar a la señora Ayuso González que el Tratado no permite a la Comunidad actuar en relación con el uso de animales en actos culturales y tradicionales, como las corridas de toros. Por lo tanto, el plan de acción no prevé ninguna medida a este respecto.
El Presidente. El debate queda cerrado.
La votación tendrá lugar mañana a las 11.00 horas.
Declaraciones por escrito (artículo 142 del Reglamento)
David Martin (PSE). – (EN) Acojo con satisfacción este debate. La Unión Europea ha mejorado, de forma lenta pero segura, el bienestar de los animales a través de una serie de medidas relativas a las explotaciones y el transporte de animales. Ahora debemos continuar avanzando y desarrollar indicadores cuantificables de bienestar animal, además de crear un marco formal para las evaluaciones del impacto del bienestar de los animales para futuras políticas comunitarias. Deberíamos plantearnos también la introducción de un programa de etiquetado de la Unión Europea para identificar los productos fabricados con los sistemas que cumplen las normas más exigentes en materia de bienestar de los animales, con el fin de permitir a los consumidores elegir de manera informada. Finalmente, como miembro de la Comisión de Comercio Internacional, quiero insistir particularmente en el establecimiento de normas comerciales internacionalmente reconocidas en materia de bienestar de los animales.
Hélène Goudin (IND/DEM). – (SV) Una protección adecuada de los animales es una necesidad en una sociedad moderna.
Existen grandes diferencias entre los Estados miembros de la Unión Europea con respecto a protección de los animales. Por lo tanto, puede resultar apropiado establecer ciertas normas comunes, por ejemplo con respecto al transporte de animales.
La Lista de Julio considera que la Unión Europea es una unión de valores, donde las cuestiones éticas relacionadas con los animales son importantes. No obstante, tenemos dudas y, en efecto, nos oponemos a crear una autoridad de protección de los animales bajo los auspicios de la UE. Las estructuras existentes en los Estados miembros de la UE deberían ser suficientes. Si existiese una legislación comunitaria, los Estados miembros se verían obligados a aplicarla. Si no lo hicieran, la Comisión, en primer lugar, y en última instancia el Tribunal de Justicia Europeo tendría que tomar medidas contra el o los Estados que no cumpliesen la legislación.
Como suele ocurrir, es muy difícil alcanzar un equilibrio entre la toma de decisiones a nivel de la UE y la toma de decisiones en el plano local, regional o nacional. No obstante, hay ciertos valores que deben protegerse a toda costa, como los derechos humanos y una protección básica de los animales. Preferiblemente eso debería hacerse a en un plano internacional.