El Presidente. De conformidad con el orden del día, se procede al debate del informe (A6-0021/2007) de la señora Brepoels, en nombre de la delegación del Parlamento Europeo en el Comité de Conciliación, por el que se establece una infraestructura de información espacial en la Comunidad (INSPIRE) (PE-CONS 3685/2006 – C6-0445/2006 – 2004/0175(COD)).
Frieda Brepoels (PPE-DE), ponente. – (NL) Señor Presidente, señor Comisario, Señorías, por fin estamos a punto de cosechar los frutos de más de dos años y medio de compromiso sostenido por parte de un gran número de personas, tanto de la Comisión como del Parlamento, que creen firmemente en el valor añadido de la Directiva INSPIRE para la política ambiental de la Unión Europea. Sé a ciencia cierta que no se trata del asunto más interesante jamás debatido en esta Cámara y que, dado el marcado carácter técnico de su contenido, todo el mundo suponía que se produciría un acuerdo en primera lectura. No obstante, no se tuvo en cuenta el hecho de que algunos Estados miembros se oponían por completo a cualquier tipo de armonización de la información espacial en materia ambiental y que, sobre todo, se mostraban preocupados por la compensación y las licencias, y veían en esta iniciativa una amenaza a los monopolios nacionales. No menos de cinco Presidencias del Consejo incluyeron INSPIRE entre sus prioridades. Sin embargo, fue la Presidencia finlandesa la que, en la noche del 21 de noviembre de 2006, se las ingenió para convencer a los Estados miembros de que depusieran su resistencia. Aprovecho esta oportunidad para dar las gracias de todo corazón a quienes han contribuido a este éxito, empezando por el Comisario y su personal. Ellos han realizado gran parte del trabajo fundamental, en colaboración con un equipo internacional de expertos que ha respondido con especial entusiasmo, por lo que el tiempo se ha aprovechado al máximo. Asimismo, quiero dar las gracias a los ponentes alternativos y a su personal, a la Oficina Jurídica del Parlamento, a la Secretaría de la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria, a la Secretaría del Comité de Conciliación, a la Presidencia del Consejo y a toda su plantilla.
Tras comentar el procedimiento, paso ahora a abordar el contenido. Como saben, el objetivo de INSPIRE es crear una infraestructura de información espacial en Europa con el fin de reforzar la política ambiental en todos los niveles. Todos estarán de acuerdo en que solo es posible aprobar una buena política si se parte de información fidedigna y de máxima calidad. A la hora de elaborar nuevas medidas políticas, los responsables deben tener en cuenta el hecho de que los problemas que afectan a la calidad de vida actual están cada vez más entrelazados y son cada vez más complejos. Los ámbitos en los que se centra el Sexto Programa de Acción Comunitario en Materia de Medio Ambiente son este conocimiento fidedigno y la participación informada del público. La Directiva que esperamos aprobar mañana establece los objetivos, y los Estados miembros tendrán ahora dos años para ajustar sus respectivas legislaciones y procedimientos administrativos nacionales. En otras palabras, cuando se celebren las próximas elecciones europeas, INSPIRE será un hecho consumado y se basará en las infraestructuras existentes de información espacial de los diferentes Estados miembros. Después de todo, a través de un geoportal, INSPIRE ofrecerá a los Estados miembros la posibilidad de facilitar el acceso a todas las bases de datos geográficos como primer paso hacia la armonización. Esta idea, evidentemente bien recibida por todos, se convirtió, no obstante, en motivo de acalorados debates en algunos Estados miembros deseosos de proteger sus ingresos obtenidos por la venta de información geográfica, pero también con respecto al acceso a la información, pretendiendo imponer restricciones más estrictas que las contempladas en el Tratado de Aarhus. Precisamente estos dos escollos fueron los impidieron que el Parlamento llegara a un acuerdo con el Consejo en segunda lectura. Quisiera repetir a la Cámara que me complace que durante el procedimiento de conciliación hayamos logrado garantizar que, en general, los servicios de búsqueda y consulta de información espacial deban estar disponibles a título gratuito. Solo si las condiciones están claramente formuladas podrá pedirse una compensación para no poner en peligro la viabilidad económica de algunos servicios gubernamentales.
En lo que respecta a los derechos de propiedad intelectual, el Parlamento ha decidido imponer al pie de la letra las disposiciones del Tratado de Aarhus relativas al acceso a la información en asuntos ambientales. Por tanto, no se admitirá la aplicación de medidas más estrictas por motivos de confidencialidad, de acuerdo con la solicitud del Consejo. Creo que hemos alcanzado un compromiso respetable y espero que mañana el Parlamento apoye este acuerdo por unanimidad, de manera que pueda comenzar efectivamente su implementación en los Estados miembros.
Añadiré un breve comentario sobre el alcance de las aplicaciones. Este será prácticamente ilimitado una vez eliminadas las lagunas y resueltas las incoherencias entre las diferentes bases de datos geográficos europeas, que de momento impiden en muchos casos toda planificación y en ocasiones incluso llevan al caos. El sistema, tal como está configurado ahora, es esencial para la mejora y la gestión de la calidad del agua en Europa. Asimismo, la información recogida puede ayudar a prevenir y controlar las inundaciones.
En general, me atrevería a decir que INSPIRE supone un complemento valioso de la legislación vigente en materia ambiental en la Unión Europea. Seguiremos de cerca y con sumo interés el proceso de transposición en los Estados miembros.
Stavros Dimas, miembro de la Comisión. (EL) Señor Presidente, aprovecho esta oportunidad para felicitarle por su elección para el cargo presidencial; estoy seguro de que colmará todas las expectativas de los ciudadanos europeos y de quienes lo han elegido.
Seré muy breve.
Señor Presidente, Señorías, en primer lugar quiero dar las gracias de todo corazón a la delegación parlamentaria que participó en el procedimiento de conciliación con el Consejo el 21 de noviembre de 2006. En particular, doy las gracias y felicito al señor Vidal-Quadras, quien encabezó dicha delegación, y por supuesto, a la ponente, la señora Brepoels, a quien quisiera elogiar y dar las gracias en particular por su excepcional contribución al debate durante las negociaciones.
Hemos establecido una base sólida sobre la que construir una infraestructura integrada para la información espacial en Europa.
Esta infraestructura es necesaria por las siguientes razones:
en primer lugar, los buenos mecanismos legislativos se basan en buena información. Buena información quiere decir análisis integrados de los problemas ambientales que afrontamos, sus causas y las posibles repercusiones de diferentes soluciones.
Estos análisis dependen de los datos geográficos. Por el momento, nuestra elaboración política se ve obstaculizada por el hecho de que estos datos se encuentran repartidos entre distintas bases de datos de difícil acceso. Además se aplican normas diferentes para el almacenamiento de datos, de forma que es imposible combinarlos entre sí, lo cual facilitaría la formulación de políticas.
Me complace que se hayan logrado superar las últimas dificultades y que se haya obtenido un resultado satisfactorio. La Comisión aprueba el texto de compromiso sin reservas. Insto al Parlamento a que ratifique el buen resultado alcanzado por su equipo negociador.
El Presidente. Muchas gracias, Comisario Dimas. Permítame decir, a título personal, que aprecio enormemente sus buenos deseos y que seguiremos manteniendo una fructífera colaboración.
Eija-Riitta Korhola, en nombre del Grupo del PPE-DE. – (FI) Señor Presidente, en primer lugar, como miembro del Comité de Conciliación, doy las gracias a la ponente, la señora Brepoels, y al Presidente de la delegación, el señor Vidal-Quadras, por su excelente labor. Asimismo, la Presidencia finlandesa también merece elogios por el proceso de conciliación.
El éxito de la política comunitaria en materia de medio ambiente depende en gran medida de la disponibilidad de información científica y del libre flujo de la misma. Por tanto, esta propuesta de directiva, fruto de un procedimiento de conciliación y por la que se establecerá un marco jurídico para la creación de una infraestructura de información espacial en Europa, es una condición imprescindible para las evaluaciones científicas realizadas sobre la base de la legislación ambiental.
En las distintas fases del debate sobre INSPIRE, el principal objetivo consistió siempre en eliminar algunas de las barreras que dificultaban en particular el uso compartido de los datos ambientales por las autoridades. En la conciliación se llegó a un acuerdo general sobre los principios que permiten a las autoridades y otros organismos comunitarios utilizar la información cartográfica y otros datos especiales contemplados en esta directiva que obran ahora en poder de otras autoridades.
Del mismo modo, se obtuvo un buen resultado final en relación con el acceso del público a la información. En el futuro se podrá consultar un amplio abanico de servicios de Internet relacionados con el medio ambiente. La mayoría de estos servicios, destinados al público en general, serán gratuitos.
Se permitirá cobrar la información que varía rápidamente, como determinados servicios de información meteorológica. Antes incluso de INSPIRE, la Comunidad recurría a ciertos instrumentos, primero para facilitar el acceso a información fiable, ante todo sobre el sector público, y después para armonizar la información a fin de posibilitar las comparaciones a escala comunitaria. Uno de estos instrumentos es la Directiva relativa al acceso público a la información ambiental, de la cual fui ponente. Los problemas detectados durante el debate correspondiente se han tenido en cuenta a la hora de elaborar INSPIRE, por lo cual doy sinceramente las gracias a todos. En general, la directiva proporcionará una base sólida y viable para el desarrollo de infraestructuras de información espacial en la Comunidad Europea, al tiempo que permitirá mantener servicios y datos de calidad en los Estados miembros.
PRESIDENCIA DE LA SRA. WALLIS Vicepresidenta
Inés Ayala Sender, en nombre del Grupo PSE. – (ES) En primer lugar quisiera felicitar a la señora Brepoels y al resto de los colegas por su esfuerzo en la tramitación de este informe, cuyo resultado considero positivo gracias al trabajo de esta Cámara, que lo ha mejorado en gran medida, a los esfuerzos que ha hecho la Comisión ayudándonos —hablo en nombre de la señora Sornosa— y también, en última instancia, a la comprensión del Consejo en el Comité de Conciliación.
No tengo ninguna duda de la utilidad de esta propuesta como herramienta básica para la formulación, la aplicación, el seguimiento y la evaluación de las políticas ambientales a todos los niveles y de las políticas o actividades que de forma directa o indirecta pueden incidir en el medio ambiente.
Asimismo, creemos que es adecuado basar esta infraestructura de la Comunidad en las infraestructuras de datos espaciales establecidas y gestionadas ya por los Estados miembros, aplicando plenamente el principio de subsidiariedad, especialmente cuando los Estados miembros tienen varios niveles de administraciones públicas, como sucede en muchos casos, concretamente en el mío, España.
Los servicios de red son necesarios para compartir los datos espaciales entre los diferentes niveles de la autoridad pública en la Comunidad. Dichos servicios deben hacer posible localizar, transformar, visualizar y descargar datos espaciales, así como acceder a datos espaciales y servicios de comercio electrónico.
Esta herramienta debe servir para explotar al máximo los beneficios y las posibilidades que la globalización de datos y servicios ofrece a los Gobiernos, a la empresa privada, a la universidad, a la sociedad en su conjunto y, de modo muy importante, a los ciudadanos. Yo creo que es esencial porque nos pone al día en algo que ya es común gracias a Internet y a la información que está disponible a través de este medio.
También considero que es crucial el hecho de que se haya concebido como herramienta para el suministro de información pública, y en este sentido esperamos que INSPIRE sea un complemento de información del sector público y de las directivas sobre el acceso a la información ambiental, adoptadas en aplicación del Convenio de Aarhus que aprobamos no hace mucho, y que aborda una serie de cuestiones que no se contemplan en dichas directivas, como la puesta en común de datos entre autoridades públicas y las cuestiones de interoperabilidad.
Para terminar, he de mostrar mi satisfacción por el acuerdo logrado por el Consejo en cuanto a la gratuidad, en la mayoría de los casos, del acceso al servicio, así como en el capítulo referido a la confidencialidad de los datos, que finalmente coincidirán con las disposiciones establecidas en el Convenio de Aarhus, sobre el acceso a la información del público en el medio ambiente.