Presidente. − El próximo punto del orden del día es un debate conjunto sobre:
- el informe (A6-0436/2008) elaborado por la señora De Keyser en nombre de la Comisión de Asuntos Exteriores sobre la propuesta de Decisión del Consejo relativa a la celebración de un Protocolo del Acuerdo Euromediterráneo por el que se establece una asociación entre las Comunidades Europeas y sus Estados miembros, por una parte, y el Estado de Israel, por otra, relativo a un acuerdo marco entre la Comunidad Europea y el Estado de Israel sobre los principios generales que rigen la participación del Estado de Israel en los programas comunitarios [05471/2008 – C6-0180/2008 – 2007/0241(AVC)] y
- las declaraciones del Consejo y de la Comisión: Participación del Estado de Israel en los programas comunitarios.
Véronique De Keyser, ponente. – (FR) Señor Presidente, en la sesión plenaria solicitamos un aplazamiento del voto, decisión con la que estoy bastante satisfecha, pero, no obstante, como ponente quiero dar algunas explicaciones.
Tal y como señaló anteriormente el Señor Salafranca, es totalmente correcto que el pasado 6 de noviembre la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamente adoptó dos propuestas en cuanto a la participación de Israel en los programas comunitarios, de los cuales una dio lugar a un dictamen conforme, mientras que la otra dio lugar a una resolución. Ambas propuestas fueron ratificadas por una amplia mayoría, de hecho, el voto de la resolución fue unánime.
¿Cuál es el contenido de estos textos y cuál es el mensaje que la Comisión sobre Asuntos Exteriores desea transmitir a Israel? Este dictamen conforme resultó ser positivo, ya que se acordó la participación de Israel en el programa comunitario, basándose en que Israel ya estaba participando en el Séptimo Programa Marco para acciones de investigación y en que su solicitud tan solo se centraba en el programa de innovación y tecnología. Este programa lo pueden solicitar para su participación todos los países miembros de la política de vecindad; por tanto, esta ratificación no constituía ni ningún favor especial a Israel ni una reafirmación de su condición política.
Los acuerdos de asociación se basan en el respeto por los derechos humanos. Por lo tanto, los miembros esperaban poder aportar un marco político para este dictamen conforme mediante una resolución decisiva que exigiese un reconocimiento del acuerdo interino de asociación entre la Unión Europea y la Organización para la Liberación Palestina (OLP) y, así, lograr un control más férreo y sanciones contra la importación de productos israelíes desde los territorios ocupados bajo el plan de importación preferencial, además de poder conseguir resultados a partir de la cooperación científica que puedan ser útiles para fines civiles. La Comisión debería realizar un informe anual que permita al Parlamento valorar la conformidad con estas condiciones. En resumen, esta resolución representaba un instrumento real a la par que firme y fue el resultado de unas largas negociaciones entre las partes implicadas, que han demostrado una entrega ejemplar con el compromiso alcanzado, razones por las cuales les estoy muy agradecida.
Así que, ¿por qué mostramos ciertas dudas, hacemos surgir nuestros miedos y, en última instancia, aplazamos la votación? Señor Presidente, básicamente porque la situación humanitaria en Gaza se ha vuelto intolerable. Cuando la delegación del Parlamento Europeo de la que era parte acudió a Gaza a principios de verano las condiciones de vida de sus habitantes ya resultaban alarmantes, entonces otra delegación acudió a los territorios ocupados en noviembre, y volvieron con un informe exactamente idéntico. No hay ningún movimiento, la situación sigue siendo catastrófica, y el bloqueo, lejos de debilitar a Hamás, ha radicalizado a esta organización.
Louis Michel señaló hace tres días que el cierre continuado de los pasos fronterizos era una forma de castigo colectivo a los civiles palestinos, contrario, por tanto, a toda legalidad humanitaria internacional, de hecho uno de nuestros Comisarios fue el que afirmó estos datos. La Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), es decir, la agencia que trabaja para los refugiados de Gaza, ha hecho un llamamiento para lograr ayudas en esta región, al igual que Oxfam, Amnistía Internacional, Médicos sin fronteras y otras ONG que no pueden usar el paso de Erez en estos momentos.
Hoy mismo he sabido que el proyecto Pegaso ha dejado de funcionar completamente en Gaza, lo cual implica que el suministro energético en la zona no se puede garantizar, los salarios y pensiones de los oficiales de la Autoridad Palestina no se pueden sufragar y se han suspendido los pagos a aquellos habitantes más necesitados de la región. Además, UNRWA ha suspendido su programa de ayuda a los más pobres de Gaza, lo cual es inaceptable. Señor Presidente, la razón por la que apoyo el aplazamiento de la votación contra mi voluntad es que no podemos tolerar estos hechos.
En la actualidad, el Consejo está discutiendo a toda velocidad y en total secretismo el fortalecimiento político de Israel; precisamente en el contexto político de la región lo que se destaca es esta oportunidad con la que contamos para efectuar esta mejora, y lo que, por tanto, ha provocado que cientos y cientos de ciudadanos nos envíen diversos correos electrónicos. Consecuentemente, es imperioso que el Consejo mejore la transparencia en cuanto a los debates que están actualmente en marcha y que responda ante los ciudadanos europeos.
La cuestión está muy clara para el Parlamento, y es que necesitamos condiciones de vida humanas para los palestinos y el final del bloqueo de Gaza. Y es que esta situación no solo está debilitando a la organización Hamás, sino que está provocando un padecimiento intolerable para los habitantes inocentes de la región, la mitad de los cuales, por cierto, votaron a Fatah en las elecciones celebradas en 2006, resultado que aun está en vigor. Le estamos ofreciendo nuestra mano a Israel, no obstante, no vamos a ceder ni un ápice de los valores básicos sobre los que se constituyó la Unión Europea, y es que esa pelota se encuentra sobre el tejado israelí.
Voy a aprovechar esta oportunidad, y me disculpo de antemano, Señor Presidente, puede, de hecho, descontar más tarde este tiempo de los dos minutos de los que dispondré. Quiero aprovechar esta oportunidad para condenar la presión política y las campañas y acusaciones difamatorias de antisemitismo que se han lanzado contra miembros del Parlamento que sencillamente están luchando en pro de la paz y la justicia. También me gustaría honrar a aquellos amigos judíos, hombres honrados y rectos, que tanto en Israel como en cualquier otra parte del mundo y, por tanto, bajo condiciones extremadamente difíciles también luchan por la paz y exigen el cumplimiento de la legalidad internacional. Es necesaria una colaboración unísona para lograr el cumplimiento de este objetivo. Lo que precisamos es la eliminación del cerco a Gaza y, desde luego, sería totalmente irracional llevar a cabo acciones militares, que son recomendaciones que he escuchado.
Jean-Pierre Jouyet, Presidente en ejercicio del Consejo. − (FR) Señor Presidente, señor Verheugen, señora De Keyser, Señorías, me gustaría comenzar agradeciendo a la señora De Keyser el excelente informe que ha presentado. Al igual que ella, también he podido observar que anteriormente se acordó en el Parlamento un aplazamiento en las votaciones por las razones que ella misma ha expuesto.
Desde el punto de vista del Consejo, es necesario que la participación de Israel en el programa comunitario se observe desde la perspectiva del fortalecimiento de las relaciones bilaterales de la Unión con Israel, razón por la cual el Consejo lanzó una señal el pasado 16 de junio durante el 8º Consejo de Asociación con Israel. De hecho, esta mejora de las relaciones encaja perfectamente con el reforzamiento de la Política Europea de Vecindad.
El Consejo está convencido de que el fortalecimiento de las relaciones beneficia no solo a ambas partes, sino también a los intereses del país al que estamos acercando a la familia europea. Esta consolidación también beneficia a Europa, en el sentido de que nos permite forjar vínculos más fuertes y una mayor confianza con los nuevos sectores de la población israelí, ya sean estudiantes, investigadores, empresarios o técnicos.
Por tanto, Europa se encontrará en una posición privilegiada para poder demostrar fehacientemente los beneficios que conllevan una cooperación multilateral por medio de la paz y la prosperidad. Me gustaría trasmitir a la señora De Keyser que para llegar a estas conclusiones se ha pagado un precio muy alto en una región como la de Oriente Próximo. Es por ello por lo que Europa será capaz de transmitir la verdad de una manera más contundente y creíble, algo que suscitará más confianza.
En este sentido, he escuchado atentamente las expectativas que según la señora De Keyser se han manifestado dentro de la Comisión de Asuntos Exteriores. Naturalmente, me estoy refiriendo al mensaje que ha mencionado en cuanto a la paralización inmediata y completa de los asentamientos, la necesidad de avanzar en el proceso de paz con la Autoridad Palestina, el levantamiento de las restricciones sobre la vida de los habitantes de la franja de Gaza y Cisjordania y la necesidad capital de mejorar el destino de los habitantes de Gaza cuyas vidas se ven afectadas por el bloqueo, tal y como pudo observar una delegación del Parlamento Europeo.
Señorías, tengan por seguro que tanto el Consejo como la Comisión comparten estas esperanzas. En este sentido, la Declaración de 16 de junio de 2008 incluye algunas afirmaciones bastante claras tanto en el contexto político que rodea al fortalecimiento de las relaciones como a los mensajes que Europa intenta trasmitir a Israel por este motivo.
Es cierto que tal y como saben, Israel ha sido consciente de estos mensajes durante años. Estoy entre aquellos que consideran lamentable que no le hayan prestado la debida atención a estos mensajes. No obstante, la apuesta realizada por el Consejo el pasado junio era la de aprovechar este fortalecimiento de las relaciones bilaterales para transmitir estos mensajes con más ímpetu, a un nivel más alto y dirigido a un abanico más amplio de contactos. Y esto es lo que está llevando a cabo el Consejo.
Así mismo está la cuestión de que la invitación europea para participar en determinados programas Comunitarios no solo se dirige a Israel sino que se ha ampliado a todos los países dentro de la política de vecindad, entre los que se encuentran los de esta región.
Señor Presidente, señor Verheugen, Señorías, el Parlamento Europeo cuenta con una oportunidad de oro para contribuir sustancialmente al proceso de cooperación regional que ha lanzado Europa en una región crítica para su propia seguridad y prosperidad.
Espero que cuando llegue el momento, en vista del resultado de la votación de hoy, se sigan las recomendaciones propuestas por el ponente. Así mismo, espero que en la resolución que desean adoptar en relación con las posiciones expuestas en esta materia al margen del consejo de asociación, apoyarán las posiciones de las que la presidencia está convencida y que reflejan un equilibrio adecuado que se ha estado postergando durante mucho tiempo por parte de los gobiernos de los Estados miembros y que contribuyen a la paz y estabilidad en la región.
Günter Verheugen, Vicepresidente de la Comisión. − (DE) Señor Presidente, señor Presidente en ejercicio del Consejo, Señorías, en diciembre de 2006 la Comisión propuso la integración total de los socios, dentro del marco de la Política Europea de Vecindad, en la aplicación de ciertas políticas y en una serie de programas comunitarios. Por nombrar unos cuantos, nuestras prioridades se centraban en ámbitos como la investigación y el desarrollo, innovación, competitividad, la protección al consumidor y la sociedad de la información.
El Consejo ha abordado esta propuesta en varias ocasiones. En marzo de 2007 apoyó la propuesta de la Comisión por la cual se debería siempre permitir a los países socios participar en determinados programas comunitarios.
Israel es el primero de los países socios dentro de la Política Europea de Vecindad que este año firmó formalmente un protocolo sobre un acuerdo marco con la Comunidad Europea basándose en los principios generales de su participación en los programas comunitarios.
La Comisión se alegra del resultado obtenido ya que lo que manifiesta es la existencia de esta estrecha y antigua colaboración con nuestro socio Israel. Desde 1995 este país ha disfrutado de una condición de asociado total en el Programa Marco para acciones de investigación y desarrollo. En los últimos años, esta estrecha colaboración ha llevado a la finalización de numerosos proyectos comunes, por cierto, con resultados importantes de los que fui testigo in situ el año pasado en Israel.
La alta calidad de los investigadores israelíes y de sus universidades hace de este país un socio de gran valor y con gran interés. Así mismo, la contribución de Israel en el ámbito de la innovación puede ser muy valiosa, lo cual resulta beneficioso para ambas partes ya que a medio plazo esta vía dará lugar a una cooperación industrial mucho más estrecha. Mientras tanto, el diálogo que en aquel momento iniciamos el Primer Ministro Olmert y un servidor entre empresas de la Unión Europea e Israel han tenido un buen comienzo y está dando sus frutos.
Además, Israel está participando en el Programa para la Iniciativa Empresarial y la Innovación, que es uno de los tres pilares de nuestro programa para la integración y la competitividad. Se trata de un programa fundamental para las PYME. Ambas partes están combinando unas esperanzas y expectativas importantes basándose en una cooperación más intensa. Por lo tanto, el último Consejo de Asociación entre Israel y la Unión Europea que se celebró el año pasado puso de manifiesto que su intención era intensificar las relaciones con Israel basándose en un plan de acción común.
Huelga decir que nuestras relaciones son muy susceptibles a la ampliación. Merece la pena facilitar nuestro apoyo incondicional a todo aquello que contribuya al encuentro de las personas; reuniendo a periodistas, artistas, investigadores y empresarios; todo aquello que coadyuve al diálogo y promueva el entendimiento mutuo. Todo esto enriquecerá el diálogo existente sobre los derechos humanos.
El fortalecimiento de nuestra relación con Israel, situado en el centro de la Política Europea de Vecindad, forma parte de los intereses estratégicos de la Unión Europea. Por tanto, la decisión del Consejo que se está debatiendo hoy aquí se ajusta a este contexto, lo cual contribuye valiosamente a la consolidación de nuestra cooperación con Israel. Es por ello por lo que les pido, Señorías, que apoyen el proyecto de resolución y que voten a favor de la propuesta de la Comisión.
Jana Hybášková, en nombre del Grupo del PPE-DE. – (CS) Señor Presidente, señor Comisario, señor Presidente en ejercicio del Consejo, creo que hoy ha tenido lugar un uso sin precedentes del procedimiento parlamentario. El grupo al que represento, el Grupo del Partido Popular Europeo (Demócrata-Cristiano) y de los Demócratas Europeos estaba preparado para apoyar completamente el informe presentado por los socialistas, incluyendo las propuestas de la enmienda presentada por los mismos. De hecho, fueron los miembros de este partido quienes rechazaron votar a favor de su propio informe. No obstante, este ha sido aprobado por la Comisión de Asuntos Exteriores y, por tanto, está sobre la Mesa y resulta fundamental realizar las votaciones pertinentes en torno a este informe en el transcurso de esta legislatura. La determinación de nuestro Grupo es debatir y adoptar este informe.
Los acontecimientos de los que hemos sido testigos hoy aquí dañan la imagen de Europa. Esta buscaba garantizar el rendimiento sobre sus donaciones financieras, asegurar su influencia en Oriente Próximo, además de garantizar una oportunidad para contribuir al proceso de paz. Hoy hemos desaprovechado un instrumento que habría apuntalado nuestra posición en compensación por nuestro dinero. Además, Europa ha desperdiciado un mayor apoyo en el sector de la investigación y el desarrollo, un apoyo vinculado con el desarrollo de la ciencia, la investigación y la tecnología, la lucha contra el terrorismo y la mejora de los derechos humanos en la región del Mediterráneo. Creo que los debates en torno al plan de acción, siguiendo la proposición de la Comisión y del Consejo, continuarán en el futuro. Así mismo, considero que bajo la Presidencia de mi propio país, se dará una mejora en las relaciones entre Europa e Israel. No obstante, es cierto que nuestro Parlamento ha desperdiciado su influencia debido a que hoy ha sido el campo de batalla donde han triunfado fuerzas oscuras y no europeas, fuerzas que no desean una mejora en la situación de Oriente Próximo. Además, creo que es insensato que el Parlamento Europeo se erija contra las intenciones defendidas por nuestros propios estados y por nosotros mismos. Por lo tanto, esta batalla continuará.
Hannes Swoboda, en nombre del Grupo del PSE. – (DE) Señor Presidente, señor Presidente en ejercicio del Consejo, señor Vicepresidente de la Comisión, señora Hybášková, seamos sensatos. Ustedes también han considerado que hoy no votaríamos, así que realmente deberíamos ceñirnos a los hechos. Como miembros del Grupo Socialista, apoyamos totalmente al ponente y, puesto que estamos convencidos, también votamos a favor en el Comité. De hecho, también lo han afirmado el señor Vicepresidente de la Comisión y usted misma.
No obstante, no vivimos en un espacio cerrado herméticamente, vivimos en una situación política. ¿Se imagina que nosotros no estuviéramos de acuerdo con nada de lo que usted o yo dijéramos respecto a esta situación catastrófica e inhumana en Gaza y nos comportáramos como si allí no estuviera sucediendo nada? Sin embargo, esta no es la realidad de la situación. Señor Presidente en funciones del Consejo, usted ha declarado que esto es una contribución a la paz. ¿Cree realmente que en la situación actual es una contribución a la paz? Es posible que, desgraciadamente, la situación no cambie. Votaremos en algún momento, aunque la situación no es grave. Pero, debemos al menos enviar una señal.
Señor Presidente en funciones del Consejo, todavía queda por responder la siguiente cuestión: ¿cómo piensa la gente que se recibirá en la región en su totalidad? ¿Cómo piensa la gente que se recibirá en Palestina y en otros países si precisamente en este momento llegamos a un acuerdo con Israel como primer país, mientras que, por otro lado, se están violando los derechos humanos brutalmente, y no solo a causa de Israel. Está bastante claro – nuestro Grupo siempre lo ha mantenido – que se debe condenar cualquier tipo de terrorismo, ya sea con misiles o con otro tipo de ataques.
Nuestro Grupo ha apoyado esta moción del Grupo de los Verdes/Alianza Libre Europea y del Grupo Confederal de la Izquierda Unitaria Europea porque queremos dar una señal al menos en algún momento para que se sepa que no podemos aceptar esta situación en el Oriente Medio. Sí, tendrá lugar esta cooperación y no es el final de un proceso, sino una señal clara. Sí, queremos esta cooperación con Israel, pero también queremos por fin la paz en esta región y no aceptamos la represión contra el pueblo.
Annemie Neyts-Uyttebroeck, en nombre del Grupo ALDE. – (NL) Señor Comisario, señor Jouyet, como corresponde a un grupo responsable, hemos debatido extensamente la pregunta de si deberíamos votar para aplazar el voto sobre el proyecto de resolución y la aprobación del protocolo; hubo división de opiniones en nuestro grupo. Estábamos en un 50/50, con una pequeña mayoría a favor de votar después de todo y, por lo tanto, mi Grupo se mostró dividido cuando votó este asunto.
Esta postura dividida se explica, en parte, por nuestra gran preocupación en torno a la situación en Oriente Medio y al conflicto entre Israel y Palestina. No conozco a nadie, y me incluyo a mí mismo, que haya visitado el territorio ocupado y que no haya vuelto con una gran preocupación, una gran compasión y rabia en relación con la situación que ahí existe.
Lo más desconcertante y alarmante es que, desde los Acuerdos de Anápolis, la política israelí no ha hecho sino que empeorar y volverse más estricta y más dura. No es necesario ser malintencionado para cuestionarse si Israel, o algunas fuerzas dentro de ese país, que cuentan con el apoyo del ejército israelí, están en el proceso de crear situaciones irreversibles dentro de los territorios ocupados hasta llegar a una situación en la que la solución de los dos estados deje de ser viable.
Por lo tanto, puedo entender que queramos enviar un mensaje a Israel al aplazar el voto porque no queremos dar la impresión de que estamos recompensando a un país en un momento en el que la situación diaria se deteriora para más de un millón de palestinos que viven en Gaza. Espero que en las próximas semanas y meses haya cambios que nos permitan aprobar ambos textos con una mayor seguridad.
David Hammerstein, en nombre del Grupo Verts/ALE. – (ES) Señor Presidente, lo que valen son los hechos, no las palabras. Los hechos valen mil veces más que las palabras. Hemos adoptado muchas resoluciones en este Parlamento. Sí había críticas y buenas intenciones en muchas de las resoluciones que hemos adoptado, pero los hechos son más importantes.
Y el hecho es que un año de negociaciones del proceso de Annapolis ha fracasado; el hecho es que el proceso de asentamientos sigue; el hecho es que la situación en Gaza es peor que nunca y el hecho es que hoy, mientras hablamos, hay enfrentamientos entre colonos y el mismísimo ejército israelí.
Yo quiero poder votar esa resolución dentro de unos meses; quiero que podamos profundizar las relaciones con el Estado de Israel. Porque los verdaderos amigos de Israel, los que amamos a Israel, nos atrevemos a decir la verdad. La verdad es que la ocupación, tal y como es hoy en día, no puede seguir más. No puede seguir más.
Y tenemos que enviar un mensaje; el mensaje de que los actos de la Unión Europea están condicionados por un proceso de paz; de que están condicionados por un respeto mínimo de los derechos humanos. Y así podremos movernos hacia delante. Nosotros sí queremos más y mejores relaciones con Israel y con los palestinos, y esto lo tenemos que demostrar con unas condiciones claras y con hechos claros, y no solo con palabras.
Luisa Morgantini, en nombre del Grupo GUE/NGL. – (IT) Señor Presidente, Señorías, no ha sido fácil pedir que se aplace el voto pero pienso que ha sido una medida necesaria que sinceramente creo que honrará al Parlamento Europeo.
Israel no puede estar siempre por encima de la legislación internacional. Me gustaría decirle a la señora Hybášková que no se dan por terminados en este punto la cooperación con Israel y los diferentes proyectos. Simplemente, es la profundización de las relaciones lo que se ha bloqueado y suspendido, no la cooperación, que sigue adelante. Solo espero que pueda continuar porque es importante; incluso puedo reconocer sus beneficios. Sin embargo, me gustaría reiterar que Israel tiene que entender que debe cumplir la legislación internacional. Nuestro honor y dignidad también están en juego.
Por eso, confío en que el Consejo de Ministros escuche al Parlamento Europeo y, por una vez, actúe coherentemente y le diga a Israel que debe mostrar signos concretos que indiquen que quiere la paz y que debe levantar el bloqueo contra los asentamientos en Cisjordania que está afectando las condiciones de vida de los ciudadanos de Gaza.
Se han bloqueado los proyectos de la Unión Europea. Por ejemplo, se ha parado el proyecto Pegaso. Se ve dificultado por los bloqueos que impiden que los bienes entren en la zona. Mañana no se pagarán los sueldos. La UNRRA (Administración de Socorro y Rehabilitación de las Naciones Unidas) está obligada a bloquear ayuda destinada las familias más pobres. ¡Esto que está pasando es una vergüenza! Sin embargo, no estoy criticando a Israel específicamente; ¡nada más lejos de mi intención! La amistad con Israel también significa hacer que cumpla con sus responsabilidades y con las nuestras. Por lo tanto, espero que podamos de nuevo pero el mensaje que hemos dado hoy es importante. Se lo hemos dado a los palestinos y a todos aquellos israelíes que creen firmemente en la paz, pero en la paz que viene con la justicia de acuerdo con la ley.
Bastiaan Belder, en nombre del Grupo IND/DEM. – (NL) Señor Presidente, me alegra poder apoyar todos los esfuerzos del Consejo y de la Comisión para intensificar las relaciones con el Estado judío de Israel en beneficio mutuo; aplazar el voto supone, en mi opinión, hacerles llegar el mensaje totalmente equivocado.
Pese a ello, me dirijo al Presidente en funciones del Consejo con sentimientos enfrentados por la filtración de un documento del Consejo al periódico israelí Ha'aretz (véase la edición del pasado lunes). En base al documento filtrado, desearía formularle tres preguntas.
¿Está usted de acuerdo con que el título de ese documento: «Una estrategia de acción para la paz en Oriente Medio», es el camino a seguir? En caso afirmativo, ¿obligaría usted a Israel a reabrir las instituciones palestinas, incluida la Orient House en Jerusalén? Finalmente, me gustaría preguntarle, si esa es la estrategia, ¿cómo piensa combinarla con la mejora de las relaciones con el gobierno israelí recientemente elegido, independientemente de la forma que adopte? Espero sus respuestas.
Luca Romagnoli (NI). – (IT) Señor Presidente, señora Vicepresidenta, Señorías, en esta ocasión no estoy de acuerdo porque considero que hoy el Parlamento ha dado una mala impresión al devolver el informe de la señora De Keyser a la comisión; y sin duda todos ustedes coincidirán, especialmente con la convocatoria del debate y, a continuación, el voto a tal increíble velocidad. Eso me hace pensar que la izquierda ha intentado, como una pequeña excusa, bloquear el acceso de Israel al programa de asociación para la innovación y la investigación. Me gustaría hacer hincapié aquí en el hecho de que estamos hablando de uno de los pocos estados, si no el único, donde ofrecer apoyo no es únicamente una señal de solidaridad sino que también conlleva crecimiento y desarrollo para las empresas de la propia Europa.
Nadie ha sido capaz aún de preguntar a la Autoridad Palestina cuánto apoyo recibe de la Liga Árabe y cómo lo utiliza ni que parte de dicho apoyo contribuye al diálogo, al mutuo entendimiento, así como al desarrollo cultural y científico. Debo decir, dado que han sido pocos los diputados de entre los grupos demasiado numerosos de centro-derecha que se han movilizado, que la izquierda hizo un buen trabajo, con el pretexto de proteger los derechos humanos, a la hora de ganar la votación. Sin embargo, tengo la impresión que todo esto está dificultando el desarrollo regional y quizás incluso el proceso de paz. En todo caso, pone en cuestión el derecho de un Estado a la seguridad, un derecho que nosotros deberíamos salvaguardar.
PRESIDE: Edward McMILLAN-SCOTT Vicepresidente
Pasqualina Napoletano (PSE). – (IT) Señor Presidente, Señorías, los ponentes que me han precedido han proporcionado ofrecido una buena explicación del propósito del paquete cuya votación hemos decidido posponer esta mañana. Sin embargo, me gustaría recordarles que hay aspectos adicionales de estas relaciones, en particular, aspectos políticos, que el Consejo está examinando en este punto de las relaciones entre la Unión Europea e Israel.
También están aquellos que afectan al mercado interno. Por tanto, creo que todos estamos básicamente a favor de este desarrollo de las relaciones entre Israel y la Unión Europea, del mismo modo que lo estamos respecto a las relaciones con la Autoridad Palestina. No obstante, este informe debe aportar claridad y compromisos por ambas partes. Tal y como están actualmente las cosas, no podemos decir que se hayan cumplido esos criterios. Me gustaría recordarles no solo la trágica situación en Gaza, sino los permanentes asentamientos ilegales en los territorios. Se trata de una cuestión que afecta a la comercialización de productos de los territorios ocupados y a otras cuestiones con las que estamos muy familiarizados.
En mi opinión, lo que el Consejo tiene que hacer es dejar clara su posición, aunque solo sea porque me parece que la Presidencia francesa se ha comprometido a presentar en la próxima reunión del Consejo un documento sobre las perspectivas de paz en Oriente Medio. Ello puede resultarnos muy interesante, incluso como oportunidad para desarrollar relaciones constructivas. Por ese motivo, creo que ha sido una sabia decisión solicitar este aplazamiento, siempre que seamos capaces de usar ese tiempo para aliviar el sufrimiento de la población palestina, en especial en Gaza. Me gustaría añadir que deberíamos usar ese periodo para reconstruir las relaciones entre Europa y los Estados Unidos sobre la base de una iniciativa conjunta para solucionar la situación en Oriente Medio.
No olvidemos que 2008 fue declarado, o lo habría sido, el año de la constitución del Estado palestino. Pero 2008 ha concluido, y la situación es todavía espantosa.
Ioannis Kasoulides (PPE-DE). - Señor Presidente, si el debate de hoy hubiese tenido como objeto la situación en la Franja de Gaza, me habría unido a la señora De Keyser y al resto de los diputados reivindicando su misma posición política. Sin embargo, me temo que esa vinculación política con la mejora de la participación de uno de los países de la PEV, y en particular de los países del Mediterráneo, ha creado un precedente que no sé adónde va a llevarnos. No hemos incluido la dependencia política entre los temas de relaciones bilaterales en el marco de las políticas de la PEV. En el caso de Marruecos, por ejemplo, nunca hemos mencionado el Sáhara Occidental o los derechos humanos. Lo mismo sucede en el caso de Egipto o cualquier otro país del Mediterráneo. No logro entender por qué esta vez hemos elegido esa vinculación política.
En segundo lugar, considero que cuanto más nos impliquemos en el diálogo, en la cooperación y en la confianza con cualquiera de los socios de los países, como ha dicho el señor Jouyet, mayor será la influencia que se tendrá sobre ellos. Hoy hemos cerrado una puerta y desconozco cómo vamos a abrirla.
En tercer lugar, estoy seguro de que hoy hemos fijado una condición en nuestro debate. Hemos dicho que se trata únicamente de un aplazamiento y que volveremos a tratar el tema. ¿Pero cómo vamos a hacerlo? ¿Cuándo va a ser la situación en la Franja de Gaza lo suficientemente satisfactoria como para decidir volver a ella? Como la señora Napoletano ha dicho en referencia a los asentamientos, como pasa también en tantas otras cuestiones sobre las que queremos tener una influencia positiva sobre Israel, ¿cuándo vamos a sentirnos suficientemente satisfechos desde el punto de vista político como para replantear esta excelente resolución preparada en la Comisión de Asuntos Exteriores?
Proinsias De Rossa (PSE). - Señor Presidente, Europa no va a poder mejorar sus relaciones con Israel hasta que su gobierno demuestre de forma convincente un cambio de rumbo. Debe poner término al castigo colectivo de la población palestina levantado el bloqueo de Gaza y demostrando su compromiso en una búsqueda seria, junto con la Autoridad Palestina, de una solución factible y sostenible de ambos Estados.
Todos nosotros deseamos tener unas relaciones normales con Israel, pero es imposible en las circunstancias actuales. Apoyo sin reservas el derecho de Israel a defenderse, pero esa defensa debe ser conforme al Derecho internacional y a las responsabilidades que una potencia ocupante asume cuando invade otro país.
Se ha constatado en tantas ocasiones la vulneración del Derecho internacional por parte del Estado de Israel, que presume de su sistema democrático, por su modo de tratar a los palestinos, que ha llegado a su límite la paciencia de la mayoría de la gente. En una reciente visita oficial a Gaza, Jerusalén y Cisjordania, pude ver con mis propios ojos un serio deterioro de las condiciones de la vida diaria del pueblo palestino.
Se ha arruinado su economía. Hay 210 asentamientos ilegales. Se invaden constantemente las tierras y los hogares de los palestinos. Hay 11 000 palestinos prisioneros y 40 miembros electos del Consejo Legislativo Palestino detenidos. Más de 300 jóvenes menores de 18 años, algunos de ellos de 12 años, están detenidos. Gaza está en estado de sitio y amenazada con una invasión militar y cerca del 50 % de su población depende de la ayuda alimentaria. Y la lista sigue. Este brutal castigo colectivo y secuestro del territorio que lleva a cabo Israel es una grave vulneración del Derecho internacional y está destruyendo la posibilidad de alcanzar la paz.
Por consiguiente, no ha llegado todavía la hora de que este Parlamento apruebe una mejora de las relaciones. De hecho, considero que ello debería postergarse hasta que se celebren las elecciones israelíes y palestinas a comienzos de 2009. Mientras tanto, la comunidad internacional debe hacer todos los esfuerzos para lograr una distensión de la situación y crear las condiciones para que israelíes y palestinos puedan vivir en paz.
Elmar Brok (PPE-DE). – (DE) Señor Presidente, señor Presidente en ejercicio del Consejo, señor Vicepresidente de la Comisión, el propósito de acuerdos tales como la mejora de las relaciones con Israel supone asegurar a las partes implicadas en el conflicto, que se encuentran en un proceso razonable, que se les garantice su estabilidad interna y les asegura la cooperación internacional y su existencia en el futuro. Hoy hemos echado a perder esa oportunidad al conceder tal garantía. La hemos malgastado y, por tanto, en mi opinión, hemos avivado aún más las llamas.
Soy muy crítico con Israel en demasiadas materias y, en particular, a modo de ejemplo, en la cuestión de la política de asentamientos. No obstante, cuando hoy escucho aquí que la razón clave es la situación en la Franja de Gaza, me quedo totalmente desconcertado, en particular, porque solo se presenta la mitad o un cuarto de la argumentación. Y es que tenemos que ver que si se utiliza ese razonamiento, se encontrará en tres meses una nueva coartada y luego otra para evitar que se alcance la decisión. Pues si no recuerdo mal, Israel abandonó Gaza. Y si no recuerdo mal, Hamás derrocó a las autoridades electas del Presidente Abbas y destruyó el gobierno con un golpe de Estado violento, infringiendo así todos los derechos. Si no recuerdo mal, son precisamente las circunstancias provocadas por Hamás las que determinan la situación en Gaza. Si no recuerdo mal, a diario y de forma regular se efectúan disparos a las ciudades israelíes desde Gaza. Y si este hecho no resulta relevante en este debate y se culpa de forma unilateral a Israel, mi impresión es que esta no es la forma en que la política europea gane confianza en Jerusalén.
Por ese motivo, creo que hoy hemos cometido un gran error. Solo conseguiremos convertirnos en una fuerza de paz en la región si buscamos plenamente la verdad y no nos limitamos solo a hacer política. Mi convencimiento es que esta política tampoco va ayudar al Presidente Abbas, pero sí va a hacerlo a la radicalización que tanto éxito tiene ya en Gaza. Por ese motivo, creo que la decisión de hoy es equivocada.
Zbigniew Zaleski (PPE-DE). – (PL) Señor Presidente, un conflicto de larga duración da la oportunidad de reflexionar y analizar sus causas y el porqué de sus comportamientos agresivos y de buscar soluciones. Puedo comprender la desesperación de los palestinos a cargo las lanzaderas de cohetes, como si fuesen ratas forzadas a guarecerse en una esquina de su jaula, pero también puedo comprender el temor de los israelíes a que sus hijos nunca más vuelvan de sus escuelas, dado que se presupone que casi cada palestino es un terrorista. Aquí no se trata de una cuestión de blanco o negro.
Entre los palestinos hay personas transigentes y extremistas obcecados, como hay palomas y halcones entre los israelíes, tal y como Tzipi Livni ha demostrado. Tales divisiones internas no son de poca importancia en este conflicto, y cuanto más importante es el papel que desempeñan, más poderosa se hace una de las partes del conflicto. Desde mi punto de vista, los israelíes son los más fuertes porque tienen un Estado, al cual, por supuesto, tienen un absoluto derecho, y yo esto lo apoyo. Por ese motivo, gozan de todos los atributos propios de un Estado.
Este hecho acarrea una gran responsabilidad, a la vez que una obligación de adoptar medidas que puedan ser arriesgadas, pero puedan abrir la esperanza de una futura paz. Por esa razón, la exigencia de Israel de que cesen los ataques de cohetes palestinos antes de que pueda progresar el proyecto de los dos Estados es como afirmar que estaríamos dispuestos a tener hijos siempre que estos resultasen inteligentes y consiguiesen doctorados o se iniciasen con éxito en el mundo de los negocios.
Las situaciones poco convencionales exigen el coraje de adoptar decisiones también poco convencionales, y eso es lo que espero que haga Israel. Nosotros, la Unión Europea, debemos ayudarles a adoptar esas decisiones. En otras palabras, necesitamos un mapa de ruta para dos Estados.
El fortalecimiento de las relaciones entre la UE e Israel me parece que es una buena estrategia porque nos daría mayor influencia y, a largo plazo, nos posibilitaría desempeñar un papel constructivo en el apaciguamiento de este trágico conflicto. Estoy a favor de ese fortalecimiento de relaciones.
Charles Tannock (PPE-DE). - Señor Presidente, como ponente de los informes sobre la PEV, apoyo desde hace tiempo la creciente implicación israelí en las agencias y programas comunitarios, lo que supone un beneficio mutuo dado el avanzado estatus de Israel como país en sectores tales como la investigación científica y, en particular, medio ambiental. Recibí hace pocas semanas muchos correos electrónicos en los que se me pedía que votase en contra de este acuerdo de mejora de la cooperación entre la UE e Israel. Sin embargo, considero que la UE e Israel son socios naturales porque comparten los mismos valores: democracia, Estado de derecho y libertades fundamentales y, en particular, la libertad de prensa y la independencia del poder judicial.
No todos los socios estratégicos de la UE pueden decir lo mismo. China, por ejemplo, que un país muy apreciado por el Presidente, rechaza esos valores, pero paradójicamente no recibo muchas quejas para reducir el nivel de relaciones con Beijing. Ello se explica, lamentablemente, porque el componente anti-israelí sigue fuerte entre la gente y en este Parlamento. Cuando ese sentimiento se basa en la razón, puedo respetarlo, incluso sin estar de acuerdo con él. Pero, con frecuencia, se basa en el antisemitismo y el antiamericanismo, dado que los Estados Unidos son el aliado más próximo a Israel.
La semana pasada, en la India, los terroristas yihadistas buscaron específicamente el asesinato de judíos en Bombay. Eso demuestra la necesidad de que Occidente camine codo con codo en solidaridad con el Estado hebreo, ya que Israel constituye la primera línea de una batalla por la existencia con grupos terroristas como Hamás, Hezbollah y la Yihad Islámica, que han demostrado su determinación de destruir Israel y nuestro modelo de vida.
Por desgracia, el Parlamento Europeo ha votado hoy por estrecho margen en el sentido de no expresar su opinión sobre este acuerdo, importante para la entrante Presidencia checa, lo que, a mi parecer, es desastroso y va a emitir todas las señales equivocadas a la población israelí durante un crítico periodo electoral y va a fortalecer, inevitablemente, las manos de los defensores de la línea dura de Israel.
Presidente. − Para mí, lo importante no es China, sino la democracia y los derechos humanos en China, del mismo modo que en Israel y Palestina.
Jim Allister (NI). - Señor Presidente, algunos quieren que creamos que este Parlamento ha actuado hoy debido a una crisis de conciencia. Debo decir que lo encuentro extraño teniendo en cuenta cuántas veces este Parlamento ha aprobado acuerdos sin la menor queja respecto a países que, ciertamente, tienen pavorosos registros de incumplimiento de los derechos humanos y que poseen estructuras gubernamentales lejos de ser democráticas.
Me parece que este Parlamento se ha desviado hoy de su curso por una campaña orquestada desde el exterior y el interior, con una carga considerable de veneno contra el Estado de Israel, y que nos hemos permitido vernos influenciados en exceso por ella. La ciega intolerancia que algunos muestran contra Israel es totalmente atroz. Israel es una democracia en una región donde esta es un fenómeno raro. Israel acepta la solución de los dos Estados. Se ha visto sometido al terrorismo externo e interno más espantoso y, por tanto, tiene sin duda el derecho a defenderse.
Algunos de los presentes en este Parlamento parecen tan preocupados con su angustia y odio a Israel que están ansiosos por disculpar los atentados terroristas y, ciertamente, los excesos de Hamás en Gaza, al echar la culpa solo al Estado que está viéndose atacado. Creo que eso es un error.
Proinsias De Rossa (PSE). - Señor Presidente, aquellos de nosotros que se han manifestado a favor de aplazar una decisión sobre este asunto han sido acusados varias veces durante este debate de ser antisemitas.
Algo totalmente inoportuno. Ninguno de los que nos hemos posicionado a este lado del debate hemos acusado a nadie del otro lado de mala fe o de tener motivos que no sean la preocupación por el futuro del pueblo de Israel y del pueblo palestino.
Sería conveniente para todos nosotros aquí que se reconociese que estamos preocupados por la gente, y que es por ello por lo que hemos adoptado la posición conocida. Una posición que no está basada en ninguna forma de ideología antisemita.
Presidente. − Señor De Rossa, la Presidencia reconoce plenamente y comparte su posición.
Hannes Swoboda (PSE). - (DE) Señor Presidente, sí, ha habido una serie de correo electrónicos, pero también ha habido presión política ejercida por la embajada israelí. Pero esa no es la razón por la que no hemos adoptado ninguna decisión concreta. El motivo ha sido nuestra firme convicción de que esta votación no habría sido adecuada en este momento.
Muchos de los argumentos expuestos por los colegas diputados, entre ellos el señor Kasoulides, el señor Brok y el señor Zaleski, son argumentos totalmente válidos. Tras la divergencia de pareceres que hemos tenido, considero que ya es hora de retomar una posición común que implique el apoyo a Israel, pero al mismo tiempo suponga un apoyo al proceso de paz, al derecho de los palestinos a existir. Eso es lo que nos preocupa, ni más ni menos.
Jean-Pierre Jouyet, Presidente en ejercicio del Consejo. – (FR) Señor Verheugen, Señorías, no es competencia del Consejo hacer comentarios sobre asuntos de procedimiento relativos a las decisiones adoptadas por este Parlamento en esta materia.
Le diría al señor Swoboda que es evidente que el Consejo comparte esos objetivos y está de acuerdo con lo que usted ha dicho en su última intervención, en particular en relación con la estabilización. La UE y el Consejo condenan todo acto de violencia, en especial, el lanzamiento de cohetes contra la población civil, algo que debe parar. La lucha contra el terrorismo debe continuar sin descanso, y el destino del cabo Shalit constituye una especial preocupación de la UE y, debo decirlo, en particular, de la Presidencia francesa.
Una vez dicho eso, la Unión Europea sigue profundamente preocupada y condena la reciente aceleración del proceso de expansión de los asentamientos. Es necesario detener, como una cuestión urgente, ese continuo proceso de asentamientos, incluyendo la expansión natural y también en el Este de Jerusalén, porque es contrario al Derecho internacional y compromete el establecimiento de un Estado palestino viable; hay que levantar las barreras a la libertad de movimiento hacia el interior y dentro de los territorios palestinos ocupados para así fomentar el desarrollo económico. Es necesario mejorar de forma urgente la situación humanitaria en Gaza persiguiendo un alto el fuego, reabriendo los pasos fronterizos y proporcionando bienes y servicios para ayudar a la población y a las agencias de ayuda humanitaria, en concreto a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA), para que puedan hacer su trabajo; es igualmente importante una liberación a mayor escala de los prisioneros palestinos, dando prioridad a los menores de edad.
Compartimos, por lo tanto, los mismos objetivos, algo que me gustaría poner de manifiesto en este Parlamento claramente. El problema es saber cómo ejercer presión de la forma más eficaz para lograr el resultado perseguido: la creación de dos Estados que coexistan con seguridad dentro del contexto de un proceso de paz estable, un contexto en el cual la UE ocupa un lugar importante. Necesitamos averiguar si vamos a ser capaces de mantenernos firmes en los principios que acabo de perfilar y que Israel debe respetar, a través del diálogo y la confianza, o si, efectivamente, es por medio del diálogo, tal y como el Consejo cree y sigue creyendo tras haber seguido este debate, como podremos mantener un sabio equilibrio.
Para concluir, me gustaría recordarles que es necesario contemplar la mejora del nivel de relaciones en el contexto más general del establecimiento de la Unión para el Mediterráneo y el desarrollo de una Política Europea de Vecindad. No hay que olvidar que la mejora propuesta fue precedida por un fortalecimiento de nuestra cooperación con Marruecos, lo que envió un potente mensaje político a nuestros vecinos árabes de la cuenca sur del Mediterráneo; desearía también recordarles que nuestras negociaciones con Israel no han descuidado a la Autoridad Palestina, y que la Unión Europea y dicha Autoridad celebraron una reunión en el verano de 2008 para establecer nuevos grupos de trabajo con el fin de acelerar la puesta en práctica del plan de acción ultimado en 2005. Querría reiterar que en nuestro papel como Presidencia estamos comprometidos en un avance en todas las áreas, incluyendo la política, que constituyen una parte indispensable de nuestras relaciones con el Estado de Israel.
Es este enfoque global el que da sentido a la mejora de las relaciones comunitarias con Israel, y es este diálogo político lo que, desde nuestro punto de vista, va a hacer posible que se respeten y defiendan mejor los principios que varios de ustedes han planteado, y que la UE tenga un papel que desempeñar en la búsqueda de una solución al conflicto palestino-israelí.
Günter Verheugen, Vicepresidente de la Comisión. − (DE) Me gustaría proponerles que tengan en cuenta brevemente tres asuntos al final de este debate.
En primer lugar, en un debate acerca de nuestra cooperación con Israel, en el cual se discute con razón sobre los derechos humanos y los problemas humanitarios de los palestinos, no debería olvidarse que tenemos una responsabilidad especial hacia Israel. Nuestra política hacia Israel no solo está determinada por intereses, está determinada por el hecho de que la simple existencia del Estado de Israel tiene que ver con la historia europea, de lo que se deriva una especial responsabilidad.
Y una segunda consecuencia de ello es que la cooperación a la que aspiramos con Israel, o la que quizás ya hayamos alcanzado, debe ser fiable. Exigimos fiabilidad a nuestros socios israelíes, e Israel tiene derecho a exigir lo mismo de nosotros. Se le ha ofrecido a Israel cooperación en esos proyectos y políticas. Es interesante que sepan que hay buenas razones por las que Israel fue el primer país, el primero de todos, al que se le ofreció un plan de acción en el marco de la Política Europea de Vecindad. Fue en 2003 y lo hice yo mismo.
El último aspecto que querría comentar es que esos programas y políticas sobre los que estamos hablando no suponen un fin en sí mismos. Tienen una motivación política más profunda. Esa motivación política es la de mostrar a Israel que existe la perspectiva de una cooperación a largo plazo con Europa, una perspectiva que Israel necesita para el periodo tras el término del conflicto. Además, Israel necesita eso para, ante todo, poder poner fin al conflicto. Otra cuestión es que por muy modestas que sean esas iniciativas, haya una serie de aspectos en ellas que nos permitan fomentar los proyectos bilaterales y a tres bandas. Hace poco estuve en Jordania, Israel y Palestina para debatir una iniciativa que nos permitiera desarrollar una política para las PYME en un marco a tres bandas. También tenemos proyectos de investigación bilaterales. Eso significa que aquí disponemos de un instrumento marco que nos permite traspasar las fronteras y alcanzar justamente lo que queremos: cooperación y normalidad en esa región en crisis.
Me abstendré de extraer conclusiones sobre lo que acabo de exponer. Solo les pediré que lo tengan en cuenta de cara a sus próximas decisiones.
Véronique De Keyser, ponente. – (FR) Señor Presidente, en primer lugar, me gustaría responder al señor Verheugen. Usted ha dicho, con bastante razón, que tenemos una especial responsabilidad hacia Israel.
Hemos asumido esa responsabilidad de forma colectiva y eso es importante. Además, es precisamente porque tenemos esa responsabilidad hacia Israel por lo que tenemos, como mínimo, idéntica responsabilidad con respecto a la situación de los palestinos en la actualidad, algo con lo que usted estará de acuerdo.
Señor Jouyet, compartimos los mismos objetivos, y usted ha hecho, con razón, una lista completa de asuntos importantes que hay que resolver a corto, medio y largo plazo. Ha utilizado una palabra importante cuando dijo «la situación en Gaza, como asunto urgente…». Utilizó la palabra «urgente». Hemos solicitados un aplazamiento y estamos concediéndonos tiempo para ver si, de hecho, se está teniendo en cuenta esa urgencia. Usted considera, y puede sostener perfectamente esa opinión, que una mejora del estatus de Israel facilitará la negociación con ellos. Ojalá que así fuese, pero no logro ver ninguna prueba de ello, y resulta que, en cualquier caso, llevamos más de un año de negociaciones desde Annapolis. Como usted sabe, los recursos del Parlamento son muy escasos.
Estamos usando los medios que tenemos para enviar a Israel una señal amistosa, que diga: «Por favor, moveos». Por desgracia, ayer no pude escuchar la menor indicación por parte de la señora Livni de que esto vaya a ocurrir. Sigo a la espera y con esperanzas.
También querría darle las gracias a usted, señora Hybášková: usted no estaba presente cuando comencé a hablar. Me gustaría decirle que ha sido usted una colaboradora ejemplar, fiel a sus compromisos, como nosotros lo seremos con los nuestros, y no permitiré a aquellos diputados que han puesto en duda la relevancia de los derechos humanos, como fundamento de la decisión de hoy, que nos convenzan de que tienen razón. ¡Eso es inaceptable! Y en cuanto a los reproches sobre antisemitismo y otras críticas que he escuchado hoy y que, ya les advierto, que continuaremos escuchando, insisto una vez más en ello, ¡se trata de algo indigno del Parlamento Europeo!
¿Por qué deberíamos ser sospechosos, en este Parlamento Europeo, de jugar a la estrategia cuando hablamos de derechos humanos? Si es cierto que se están vulnerando tales derechos, se trata de una cuestión urgente.
Apoyo los compromisos que hemos contraído con nuestros socios políticos respecto a los asuntos exteriores. A mi entender, todavía son válidos, pero creo que, desde un punto de vista realista, no estamos en el momento oportuno. Hemos hecho gestos amistosos hacia Israel y, por supuesto, continuaremos haciéndolos, pero nuestra preocupación por el destino de los palestinos sigue candente.
(Aplausos)
Presidente. − Se cierra el debate.
He recibido una propuesta de resolución presentada de conformidad con el apartado 2 del artículo 103 del Reglamento para cerrar el debate.
La votación del informe de la señora De Keyser y la votación sobre la propuesta de resolución tendrán lugar durante el siguiente periodo parcial de sesiones.
Declaraciones por escrito (artículo 142 del Reglamento)
Bairbre de Brún (GUE/NGL), por escrito. – (GA) – Sería una mala señal el que la UE mejorase actualmente las relaciones con Israel. Demostraría que la UE desea ignorar las enormes, continuas y persistentes vulneraciones de los derechos humanos y del Derecho internacional.
Eso sería casi como decir que la UE le concede a Israel la libertad de continuar con las actividades represivas e ilegales, con el traslado forzoso de personas, con asesinatos extrajudiciales, con la ocupación de Palestina y con un muro y unos asentamientos ilegales.
Deberíamos presionar a Israel todo lo posible para que tenga que cumplir sus obligaciones de conformidad con el Derecho internacional y las resoluciones de las Naciones Unidas. Hoy, como diputados de toda Europa, debemos enviar un mensaje firme a Israel para que sepa que ya basta.
En 2002 el Parlamento Europeo votó suspender el Acuerdo de Asociación UE-Israel debido a las graves vulneraciones de los derechos humanos por parte de Israel. A pesar de eso, ahora hay un diálogo sobre la posibilidad de que Israel intervenga en un programa de la UE relacionado con la competitividad y con la innovación económica, incluso cuando Israel está destruyendo de forma deliberada la economía y la infraestructura de Gaza.
Agradezco la decisión de cancelar la votación sobre la mejora de las relaciones entre la UE e Israel.
Athanasios Pafilis (GUE/NGL), por escrito. – (EL) La proposición del Consejo de darle un trato preferencial y mejorar la ya estrecha cooperación entre la UE e Israel (independientemente de que la votación del Parlamento se haya suspendido) es, se mire como se mire, un desafío a los europeos y a todas las naciones del mundo, un insulto para todas las víctimas de la barbarie.
Esta propuesta perpetúa de forma eficaz el apartheid israelí y renueva las vulneraciones masivas por Israel del Derecho internacional y de los derechos humanos de los palestinos, la ocupación de la Franja de Gaza, Cisjordania y el Este de Jerusalén y la continuación de la construcción del Muro de la Vergüenza y de los asentamientos básicos e ignora las resoluciones de las Naciones Unidas que condenan a Israel y la resolución aprobada en 2002 por el Parlamento Europeo sobre las suspensión del Acuerdo de Asociación UE-Israel.
Aunque Israel ha mantenido la misma política con el pueblo palestino durante los últimos sesenta años, que los Estados y las Naciones Unidas la han condenado, se ha presentado una propuesta provocadora que sugiere que ignoremos las flagrantes vulneraciones de los derechos humanos por parte de las fuerzas de ocupación israelíes.
Lo que demuestra una vez más que, en su hipocresía para con los derechos humanos, la UE está utilizando un doble rasero en su política, dependiendo de sus intereses en cada caso.
Marian Zlotea (PPE-DE), por escrito. – La aprobación del Acuerdo de Vecindad con el Estado de Israel incorporaría a Israel en determinados programas comunitarios dentro de la Política Europea de Vecindad (PEV), una política diseñada para promover la reforma y la estabilidad en los alrededores de la Unión Europea. Diseñado para entrar en vigor de forma inmediata, este acuerdo requerirá que Israel haga contribuciones financieras al presupuesto de la Unión Europea a cambio de la participación en determinados programas comunitarios. Este acuerdo estará sujeto a revisión cada tres años después de su aprobación por ambas partes. El apoyo a este Acuerdo de Vecindad se construiría sobre el existente Acuerdo de Asociación y representaría un paso hacia delante en la cooperación en comercio y el progreso en la resolución del proceso de paz israelo-palestino.
A la luz de la reciente visita al Parlamento Europeo del Ministro israelí de Asuntos Exteriores, quien aboga por estrechar las relaciones políticas entre Israel y la UE, y el actual Plan de acción recién completado por el Alto Representante, la aprobación de este Acuerdo de Vecindad beneficiaría a ambas partes mejorando la comprensión que cada parte tiene de la otra y adelantando la llegada de la paz y la estabilidad a Oriente Medio y al Mediterráneo.