Presidente. – De conformidad con el orden del día, se procede a la Declaración de la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y Vicepresidenta de la Comisión sobre la situación en Irán.
Catherine Ashton, Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad yVicepresidenta de la Comisión. – Señor Presidente, Señorías, esta es una oportunidad importante para plantear la situación en Irán.
La Unión Europea desea unas relaciones normales con Irán y nuestros esfuerzos en lo referente a la cuestión nuclear forman parte de ello. En este contexto, en mi calidad de Alta Representante, continuaré con el papel desempeñado por mi predecesor, Javier Solana, en las conversaciones internacionales mantenidas con Irán.
Irán es un país importante con una historia arraigada y una rica cultura, y con una población de extraordinario talento. Las películas y las obras literarias procedentes de Irán son admirables, el nivel de educación de la mujer es elevado, tienen capacidad de debate público y su población joven es efervescente y activa. En muchos aspectos, la sociedad iraní posee los distintivos y la capacidad propios de una sociedad libre. La amenaza que representa para la sociedad ha quedado reflejada en el caos posterior a lo que muchos en Irán consideraron como un proceso electoral fraudulento el año pasado. Sin duda, esa es una cuestión de los iraníes. Nuestra preocupación radica en que deben respetarse las normas y los estándares internacionales en materia de derechos civiles y políticos.
En este sentido, estoy sumamente preocupada por los informes de la violenta supresión de manifestaciones y las detenciones arbitrarias en Teherán y otras ciudades iraníes durante la reciente conmemoración del Ashura a finales de diciembre. El empleo de la violencia en contra de manifestantes que pretendían ejercer su derecho a la libertad de expresión y su derecho de reunión es inaceptable. Se trata de derechos humanos universales que deben respetarse y debe liberarse a aquellas personas que hayan sido arrestadas por ejercer pacíficamente estos derechos.
También he comprobado con gran preocupación que muchos de los arrestos parecen haberse dirigido a defensores de los derechos humanos y periodistas, y que a muchos de los detenidos se les ha negado el acceso a la representación legal y el contacto con sus familias. Irán debe estar a la altura de sus obligaciones internacionales y tratar a las personas detenidas con arreglo a las normas internacionales en materia de derechos humanos.
Otro asunto reciente es la detención de otros 12 miembros de la comunidad religiosa de Baha’i. Se debe garantizar a estas personas un juicio justo, público e imparcial conforme a las normas internacionales.
La UE no ha escatimado esfuerzos a la hora de pedir al Gobierno iraní que respete esas obligaciones internacionales a las que se adhirieron libre y voluntariamente. Hemos realizado declaraciones públicas y empleado otros medios diplomáticos. Trabajamos a través de las Naciones Unidas: la Asamblea General aprobó una resolución condenando la situación tan solo el mes pasado. Sacaremos el máximo provecho de la próxima revisión de Irán que se celebrará en el Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas en Ginebra a principios de febrero.
En cuanto a la cuestión nuclear, lamentamos que Teherán no haya hecho un seguimiento de la reunión entre Javier Solana y el señor Jalili, el jefe de negociaciones, el 1 de octubre en Ginebra. Todos valoramos positivamente la reunión. Pero, en efecto, Irán acaba de rechazar un proyecto de acuerdo propuesto por el OIEA y se ha negado a reanudar las conversaciones sobre la cuestión nuclear.
Tanto la UE como sus socios en la negociación están comprometidos a encontrar una solución diplomática para la cuestión nuclear iraní, y con ese fin, debemos continuar aplicando el enfoque doble. Necesitamos un compromiso serio de conversaciones significativas del lado de Teherán.
Nuestro objetivo sigue siendo aumentar la confianza en que los fines del programa nuclear son exclusivamente pacíficos. El déficit de confianza se vio más incrementado por la revelación de que Irán ha estado construyendo otra planta de enriquecimiento sin informar a la OIEA en su debido momento. Además, Irán sigue sin cooperar plenamente con la OIEA y sin respetar sus obligaciones internacionales.
Es vital que la UE y la comunidad internacional permanezcan unidas tras este esfuerzo de negociación, lo que incluye apoyar dicho esfuerzo con las medidas apropiadas. La clave para conseguir nuestro objetivo reside en lograr la más amplia unidad posible.
Si Irán se propone un progreso constructivo en la cuestión nuclear y en la estabilidad regional en general, podría desempeñar un importante papel en Oriente Próximo y en la región del Golfo, lo que reflejaría su lugar legítimo y su orgullosa historia.
En conclusión, los retos planteados por Irán constituyen un gran peso para mi cartera. Este es un país que posee un enorme potencial, y nuestra disposición para comprometernos de una manera constructiva con Irán ha quedado demostrada una y otra vez. Continuaré planteando ese caso. Espero sinceramente que, durante el periodo de mi mandato, pueda volver a esta Cámara con una panorámica más positiva de las relaciones con Irán.
José Ignacio Salafranca Sánchez-Neyra, en nombre del Grupo PPE. – Señora Ashton, tiene usted razón para estar preocupada, porque la situación en Afganistán es gravísima, sobre todo desde el punto de vista de los derechos humanos, especialmente en lo que se refiere a los derechos civiles y las libertades políticas, donde se asiste a una degradación realmente increíble: ejercicio arbitrario de la violencia, detenciones masivas de miembros de la oposición, asesinatos, ejecuciones, imposibilidad de ejercicio de las actividades de organizaciones no gubernamentales, imposibilidad de ejercicio de la libertad de prensa, y hasta se ha llegado incluso a prohibir la entrada de una delegación del Parlamento Europeo.
Señor Presidente, ante las presentes circunstancias, me pregunto si vale la pena visitar en estos momentos el país.
Y, en el tablero nuclear, señora Ashton, usted lo ha dicho con toda claridad y también con toda contundencia: Irán sigue produciendo uranio enriquecido, pese a las advertencias de la comunidad internacional. Ha rechazado la mano tendida que le ha propuesto el Presidente Obama y ha rechazado el último plan, propuesto por los Seis, que implicaba a Rusia y a Francia.
La pregunta, señora Ashton, es muy sencilla: ¿cree usted que hemos colmado ya el vaso de la paciencia con este país? ¿Piensa usted que debemos pasar, en este momento, a la adopción de medidas más contundentes o, por el contrario, considera que la complacencia es el mejor instrumento de negociación con el régimen iraní?
Quiero decirle que aprecio sinceramente su pronunciamiento en favor de la defensa de los derechos humanos en ese país. Las violaciones son gravísimas y creo, señor Presidente, que este Parlamento tiene que expresar una condena sin paliativos –y espero que lo pueda hacer mediante la aprobación de la correspondiente resolución– sobre la situación de los derechos humanos en este país. Y tiene que seguir permaneciendo firme, muy firme, en la defensa ineludible de la libertad.
Roberto Gualtieri, en nombre del Grupo S&D. – (IT) Señor Presidente, Señorías, ante la evolución de la situación en Irán, uno no puede evitar expresar una gran preocupación. Esta preocupación está relacionada con el aumento de las violaciones de los derechos civiles y políticos, que condenamos enérgicamente, y con el fracaso a la hora de hacer cumplir las obligaciones que se derivan de la participación de Irán en el Tratado de No Proliferación, sobre el cual el propio país declara que no desea arrojar ninguna duda.
No cuestionamos el derecho de Irán al desarrollo pacífico de energía nuclear, ni tratamos de subestimar el importante papel que Irán puede desempeñar a escala regional, sus legítimos requisitos de seguridad o la necesidad de crear un verdadero sistema de seguridad regional que incluya a todas las potencias nucleares de la zona. No obstante, precisamente por este motivo no comprendemos las razones por las que no accede a la petición del Organismo Internacional de la Energía Atómica de que el uranio sea enriquecido en el extranjero, y lamentamos esta decisión.
Frente a esta situación, le corresponde al Consejo de Seguridad determinar la respuesta de la comunidad internacional y la posibilidad de nuevas sanciones, que deberían centrarse en la no proliferación y deberían diseñarse como instrumento de apoyo para el difícil e inevitable sendero del diálogo y no para ser utilizadas con el fin de derribar a un régimen.
Con respecto a estas medidas, la Unión Europea debe desempeñar su papel pensando en la posibilidad, en el momento adecuado y de la forma oportuna, de medidas de carácter técnico que complementen las sanciones de la ONU y, al mismo tiempo, confirmando su disposición para el debate y el diálogo, que nunca debe perderse, incluso en los momentos difíciles.
Apoyaremos plenamente la acción de la Unión Europea y la Alta Representante de acuerdo con el enfoque claramente expuesto en el discurso de la Alta Representante.
Marietje Schaake, en nombre del Grupo ALDE. – Señor Presidente, el verano pasado resulté elegida para el Parlamento Europeo por manifestar mis críticas hacia mi propio gobierno. Una mujer joven en Irán que hubiese hecho lo mismo, probablemente a estas alturas habría sido asesinada, detenida, torturada y violada.
Gracias a los nuevos medios de comunicación, todos hemos podido ver en vídeos la forma brutal en que el régimen iraní aplica enérgicas medidas contra los ciudadanos que se expresan pacíficamente en favor de la democracia y la libertad. Las últimas detenciones de periodistas defensores de los derechos humanos que ha llevado a cabo la oficina de inteligencia de la Guardia Revolucionaria, demuestran que el régimen iraní posee un interés cada vez mayor por clausurar el país. Sus informes recibieron una gran confianza por parte de los periodistas internacionales.
Ayer fue el Día de Martin Luther King. En él conmemoramos a un hombre que también marchaba por las calles de forma pacífica y que decía: «llega un momento en que el silencio es traición». Alta Representante, hace mucho que llegó ese momento.
El Presidente Barack Obama interrumpió sus vacaciones durante las navidades para manifestarse en contra de más ataques brutales sobre los ciudadanos después del día del Ashura. En el doble enfoque propuesto para Irán, que equilibra la cuestión nuclear y los derechos humanos, los Estados Unidos ponen cada vez más de relieve los derechos humanos. Europa debe adoptar una postura de liderazgo en este asunto, no solo cuando sea políticamente seguro hacerlo.
El desastre de Haití fue una tragedia terrible, y estoy contenta de que se estén tomando medidas. Sin embargo, el desastre a manos del hombre que está teniendo lugar en Irán no ha sido recibido con el liderazgo y la coordinación europea hasta el momento. El mes pasado se suponía que una delegación de este Parlamento debía visitar Irán, pero el régimen no quería que viésemos con nuestros propios ojos sus propias debilidades y su división. Ya es hora de que Europa adopte una postura en cuanto a Irán, y el mundo está esperando.
¿Constituye el actual régimen de Irán, que ha perdido su legitimidad y se encuentra internamente dividido, un interlocutor fiable en las negociaciones? ¿Qué medidas propone usted en la cuestión nuclear que apunten al gobierno sin perjudicar a la población? ¿Está dispuesta a convocar un debate de emergencia en Europa acerca de Irán?
¿Cómo empleará el instrumento europeo para los derechos humanos con el propósito de garantizar que los derechos humanos sigan siendo una prioridad para Europa? Considero que necesitamos apoyar a los ciudadanos, a la sociedad civil y a los periodistas. El programa «Ciudad refugio» propuesto por la Presidencia checa podría ser una herramienta útil para apoyar a los iraníes que estén bajo amenaza en Europa.
En las comparecencias con la Comisaria Kroes, le pregunté si estaba dispuesta a trabajar con usted para convertir el libre discurso de Internet en una parte integrada de la política exterior europea.
Barbara Lochbihler, en nombre del Grupo Verts/ALE. – (DE) Señor Presidente, Baronesa Ashton, el Parlamento Europeo ha prestado mucha atención a los avances en materia de política exterior e interior de Irán. La delegación de Irán se ha comprometido al diálogo con representantes del gobierno y de la sociedad civil y había realizado preparativos para que la delegación se desplazara a Irán a comienzos de este mes, aunque, desgraciadamente, este viaje se canceló con un breve preaviso.
El propio descontento con las elecciones fraudulentas y el aumento constante de la represión y de la violencia por parte del Estado han provocado que representantes de la sociedad civil iraní se hayan dirigido al Parlamento. Al dar este valiente paso, ellos buscan nuestro apoyo a la hora de respetar y defender las libertades democráticas, y nos instan a que nos tomemos en serio nuestros propios valores fundamentales. Son muchas las protestas y aún se siguen sucediendo. Se ha hecho un llamamiento al Gobierno iraní para que dé respuestas políticas a estas cuestiones sin resolver, pero en lugar de ello, lo que vemos es cómo aumentan las peores violaciones de los derechos humanos, como la tortura y las agresiones a detenidos, y nos llegan noticias de las muertes de manifestantes durante la celebración de juicios injustos.
Lo que muchos iraníes esperan es que no vigilemos únicamente la política exterior y el programa nuclear, sino que también observemos y emprendamos acciones con respecto a la situación política dentro de Irán. Se acoge con satisfacción que países como España e Irlanda estén dispuestos a expedir visados de forma no burocrática a los defensores de los derechos humanos que estén perseguidos, rescatándoles también así de un grave peligro. Otros Estados miembros deberían seguir este ejemplo, y también solicitamos a la Comisión que procure ayuda rápida para aquellas personas víctimas de persecución política.
Desde el exterior, lo que podemos hacer es limitado. Los cambios esenciales deben proceder del interior del propio país. No obstante, debemos mantener abiertos los canales de comunicación con el mundo exterior. En ese contexto, debemos ser muy críticos con compañías extranjeras como Siemens y Nokia, cuya tecnología está ayudando a hacer posible la censura, e incluso más efectiva.
Dado que no se ha alcanzado ningún acuerdo en las negociaciones sobre la cuestión nuclear, cada vez se habla más de imponer sanciones. Sin embargo, no está claro que las sanciones puedan tener la influencia deseada en la autoridad política. Si las sanciones conducen al detrimento de los estándares de vida para muchas personas, como por ejemplo, las sanciones impuestas sobre la gasolina, no conseguirán su objetivo y concederán al régimen la oportunidad de culpar a lo que denominarían como el hostil mundo exterior por el deterioro de la situación económica.
En consecuencia, es muy importante desarrollar sanciones inteligentes y bien dirigidas, incluyendo las que se aplican a individuos. De esta manera, por ejemplo, el Consejo puede poner en la lista negra a los individuos responsables de las medidas represivas de los últimos meses. En la política de la UE sobre Irán lo que es fundamental es que podamos crear y ceñirnos a una política de doble vertiente. A pesar de los desaires, necesitamos buscar un diálogo político. Aislar a Irán no ayudaría ni a su pueblo ni a sus vecinos en la región.
Charles Tannock, en nombre del Grupo ECR. – Señor Presidente, la despiadada ambición del Presidente Ahmadinejad de desarrollar armas nucleares representa, desde mi punto de vista, la amenaza más grave a la paz mundial en la actualidad.
Al fin y al cabo, la diplomacia de la UE solo podrá triunfar a través de un enfoque unido y coordinado. Ahora debemos concentrar nuestros esfuerzos en las sanciones renovadas, que han de ser sumamente perjudiciales para el régimen de Teherán. Pero, igualmente, deberíamos reconocer que el pueblo de Irán y el régimen de Irán no son lo mismo.
Desde que el señor Ahmadinejad robó las elecciones presidenciales el año pasado, hemos visto como muchos disidentes y jóvenes y valientes manifestantes se han echado a la calle. Estas personas necesitan nuestro apoyo porque se identifican con nuestros valores de libertad, democracia y Estado de Derecho. De hecho, tal es la desesperación en Irán que el líder de la oposición, Mir Hossain Musavi, muy poco conocido por su fama de demócrata en el pasado, ha afirmado que está dispuesto a sacrificar su propia vida por el bien futuro de su propio país. Mientras tanto, los atroces abusos de los derechos humanos se suceden sin cesar y se ejecuta a delincuentes juveniles y a homosexuales de forma rutinaria.
Nosotros, los diputados al Parlamento Europeo de esta Cámara, anhelamos ver un Irán libre y democrático, que deje de exportar terrorismo a través de Hamás y Hezbolá y que ocupe su lugar legítimo entre la comunidad internacional. La UE debería redoblar sus esfuerzos para acelerar ese proceso en todos los frentes posibles.
Bastiaan Belder, en nombre del Grupo EFD. – (NL) Señor Presidente, los medios de comunicación me obsequiaron con una extraña propuesta la semana pasada: Israel, según afirman, va a atacar a su archienemigo Irán tarde o temprano. Mientras se mantenía este debate en Europa, los medios en Irán también estaban debatiendo acaloradamente sobre el empleo de la opción militar contra el controvertido proyecto nuclear de Teherán. El veredicto del diario conservador Kayhan acerca de la supuesta amenaza nuclear fue que todo eran mentiras y exageraciones sionistas. Mientras tanto, no cabe duda de que el programa nuclear de la República Islámica representa una seria amenaza a la seguridad; ante todo para Israel, pero también para un radio más amplio en la región. Aún conservo la esperanza, por tanto, de que la comunidad internacional deje de limitarse a reconocer esto y que realmente emprenda acciones en este sentido. Desde mi perspectiva, todas las opciones relacionadas con este tema deben ponerse sobre la mesa. Un régimen de sanciones efectivas, como el que seguía pidiendo ayer la Canciller alemana, la señora Merkel, significará, en cualquier caso, que el Estado judío no tendrá en absoluto que emprender ninguna acción unilateral.
Esto me lleva a formular una pregunta crucial al Consejo, a usted, Alta Representante. ¿Existe, de hecho, una base europea para el riguroso endurecimiento de las sanciones contra el régimen iraní? Los estrechos vínculos comerciales existentes entre una serie de destacados Estados miembros de la UE —no necesito mencionar ningún nombre, dado que ustedes también sabrán quiénes son— y la República Islámica siempre podrían suponer importantes obstáculos a la hora de hacer frente de forma firme a la cuestión nuclear. Durante las últimas semanas, el diario The Wall Street Journal ha publicado una serie de artículos de opinión muy incisivos sobre ello que prácticamente constituyen acusaciones contra Europa. Brevemente, Baronesa Ashton, ¿existe una base para el endurecimiento de las sanciones efectivas impuestas contra la República Islámica de Irán? Espero su respuesta.
Franz Obermayr (NI). – (DE) Señor Presidente, los últimos acontecimientos, en concreto, han dejado patente que el tratamiento de las libertades civiles en Irán posee fallos evidentes desde el punto de vista europeo. La sentencia de muerte comunicada a los manifestantes sentenciados hace poco constituye una prueba de lo diferente que es la gestión de ese país en lo referente a los derechos humanos y a su cumplimiento. No obstante, también es importante resaltar que la política exterior de la UE no debe parcializarse, pues a menudo hacemos la vista gorda alegremente con socios económica y geoestratégicamente importantes como China o quizá Arabia Saudí —a pesar del hecho de que estas graves desviaciones de nuestras ideas europeas de la democracia y del Estado de Derecho se producen también en estos países.
Como miembro de la delegación iraní, me interesa especialmente que el viaje retrasado a Irán se reincorpore a la agenda tan pronto como sea posible, con el fin de mejorar las comunicaciones bilaterales con la UE, y para que de esa manera se realice posiblemente una contribución, mediante el diálogo, a calmar la dramática situación de Irán.
Lena Kolarska-Bobińska (PPE). – (PL) Señor Presidente, Baronesa Ashton, la situación interna de Irán está empeorando día tras día y semana tras semana. Se están violando de forma brutal los derechos humanos ante nuestros ojos, y estamos siendo testigos de un terror al que no nos hemos enfrentada desde hace décadas. Una ola de represión estatal sin precedentes está tratando de silenciar a aquellos que están luchando por reformas democráticas en Irán. En esta lucha contra sus ciudadanos, el gobierno también está utilizando a jóvenes de la milicia Basij, armados y especialmente entrenados.
El Parlamento Europeo debe condenar el uso excesivo de la fuerza y las crecientes violaciones de los derechos humanos por parte del gobierno. También es inaceptable utilizar la pena de muerte contra la oposición, incluidas aquellas que argumentan con el pretexto de crimen de moharebeh, ofensa a dios. Por tanto, la Unión Europea necesita un nuevo enfoque para la situación de Irán. La Alta Representante de la Unión Europa, Catherine Ashton, debería enviar un mensaje claro y contundente a los ciudadanos de Irán, confirmando nuestro deseo de defender los derechos humanos.
La cuestión del arma nuclear es sumamente importante. Sin embargo, no debemos dejar de defender valores fundamentales simplemente para ganar una ventaja táctica en las negociaciones. En las conversaciones con Irán, no debemos dejar al margen el Estado de Derecho, la libertad de expresión o el derecho a la información. Estos valores no deben tratarse como de menor relevancia.
Procedo de Polonia, país en el que hace 20 años, en 1989, la tiranía dio paso a la democracia. Esto sucedió gracias a la acción no violenta del Movimiento de Solidaridad de la oposición y el diálogo pacífico entre el gobierno y el pueblo. No veo otra forma mejor de progresar para los residentes en Irán.
Ana Gomes (S&D). – (PT) La cuestión iraní constituye uno de los asuntos más importantes en la política moderna internacional. Se debe hacer todo lo posible por impedir que el régimen iraní, que ha sido tan perjudicial para la paz y seguridad en Oriente Próximo, tenga acceso a armas nucleares.
Sin embargo, el papel de la Unión Europea en sus relaciones con Irán no debe perderse en la cuestión nuclear. Desde las elecciones manipuladas de junio, hemos sido testigos de un movimiento popular que ha actuado contra la naturaleza represiva, oscurantista y antidemocrática del régimen iraní.
Europa debe ser consecuente a la hora de fomentar el valor universal de los derechos humanos por el que muchas personas están arriesgando sus vidas en las calles de Teherán. Sin entrar a cuestionar el derecho soberano de las personas a decidir su propio destino, es imperativo que la Unión Europea tome decisiones encaminadas a alentar a aquellos que están luchando por la libertad y la democracia en Irán. No existe nada más efectivo que los canales libres y alternativos de información para combatir la censura, que constituye el dominio de todos los regímenes opresivos.
Teniendo esto en cuenta, esperamos que el canal de televisión en Farsi, concedido a Euronews por la Comisión Europea, esté en marcha muy pronto.
Asimismo, esperamos que la Baronesa Ashton, como nueva Alta Representante, siga adelante con iniciativas creativas que contribuyan a una mayor transparencia política en Irán y aceptando las recomendaciones realizadas por todos aquellos que han estado luchando por un Irán libre, lo que incluye a los iraníes exiliados.
Además, esta inquietud por el futuro político de Irán debería guiar cualquier nueva sanción que se decida imponer dentro del contexto de la cuestión nuclear. Tal como explicó el intelectual iraní, Akbar Ganji, aquí en el Parlamento, es imperativo que evitemos las sanciones económicas que puedan vulnerar a las personas, y especialmente a la clase media iraní, que conforma las filas de la oposición.
Nada puede hacer más en favor de la seguridad en Oriente Próximo, en Europa y en el mundo que una democracia iraní construida por los iraníes. La Unión Europea debe hacer de este uno de sus objetivos.
Frédérique Ries (ALDE). – (FR) Señor Presidente, sin duda Irán está atravesando la crisis más grave de su historia desde 1979 debido a este régimen, que es insensible a cualquier tipo de cambio y que ha incrementado el número de asesinatos selectivos de oponentes, el número de ataques y el de detenciones de manifestantes pacíficos, así como de periodistas, desde la farsa electoral del 12 de junio de 2009.
Al comienzo del debate, la señora Ashton mencionó los informes de las ONG, unos informes desastrosos en este sentido, que ni tan siquiera mencionan la parodia de justicia que se impuso a la mujer francesa, Clotilde Reiss, y a la minoría bahaí, siete de los cuales llevan de juicio en Teherán desde el pasado lunes. Se arriesgan a una cadena perpetua o algo peor, simplemente porque su religión es diferente a la del poder gobernante.
El informe es duro, las elecciones presidenciales no han cambiado nada, más bien han radicalizado el régimen iraní aún más, si eso fuera posible. También existe una radicalización con respecto al mundo exterior con el giro de ciento ochenta grados de las autoridades iraníes en lo relativo al proyecto de acuerdo nuclear negociado en Viena en octubre de 2009.
¿Cuándo vamos a considerar mencionar —me refiero a mencionar aquí— sanciones específicas e inteligentes, como aquellas a las que hacía referencia la señora Lochbihler, sanciones, por tanto, en contra de este régimen, claramente antioccidental y antisemita? Sé que representa una pequeña ventana a la oportunidad, señora Ashton, pero ¿no opina usted que en este asunto debemos actuar más y mejor, que debemos ayudar a los jóvenes de Irán, que están proclamando su indignación a través de Internet, que debemos denunciar los recurrentes llamamientos a la destrucción del Estado de Israel y, sobre todo, que debemos apoyar a esta sociedad civil y a la oposición, ese movimiento democrático que está desafiando a este presidente ladrón de votos y a sus milicias?
Debemos evitar una intensificación, soy muy consciente de ello, pero también debemos evitar la evasión y no debemos repetir el error que cometimos en Afganistán, donde Europa fue incapaz de proteger al comandante Massoud. Es nuestro deber respaldar a los líderes de la oposición iraní para que puedan evitar un destino similar.
Fiorello Provera (EFD). – (IT) Señor Presidente, Señorías, la situación en Irán continua deteriorándose.
Al menos ocho personas han sido asesinadas recientemente, el régimen ha incrementado los arrestos a mujeres —mujeres periodistas, sindicalistas e intelectuales— 30 madres que piden noticias de sus hijos desaparecidos han sido arrestadas, y la tumba de la joven mártir por la libertad, Neda Agha-Soltan, ha sido repetidamente profanada por balas procedentes de armas de fuego. Es evidente que el régimen trata de aumentar la represión y establecer un clima de terror.
Además de esta situación interna, Irán demuestra la falta de cooperación internacional rechazando el acceso del Organismo Internacional de la Energía Atómica a los emplazamientos iraníes donde se realiza el enriquecimiento de uranio. Esto demuestra claramente las verdaderas intenciones del programa atómico iraní; si fueran exclusivamente pacíficas, no necesitarían esconder estos lugares.
En consecuencia, Europa debe expresar convincentemente sus preocupaciones, ya que una potencia militar y nuclear podría poner en peligro la seguridad del continente y tener importantes consecuencias políticas para todos los países de la región.
Martin Ehrenhauser (NI). – (DE) Señor Presidente, incluso si el conflicto en Irán puede aparentar a menudo ser una lucha de poder entre la vieja y la nueva clase dirigente, aún se puede apreciar claramente que este sistema social tan cerrado posee grietas muy evidentes. La situación en Irán es, en efecto, una prueba de la importancia de la democracia, concretamente de la habilidad de cada uno de los ciudadanos, ya sea hombre o mujer, de dar expresión a su voluntad política.
Aquellos que poseen responsabilidad política en Irán en este momento están respondiendo a esta voluntad legítima de la sociedad por medio de una represión estatal que llega a alcanzar la aplicación de la pena de muerte. Estas agresiones a los ciudadanos deben detenerse inmediatamente, puesto que la represión estatal no conseguirá de ninguna manera poner fin a esta voluntad social. La larga historia de Irán nos demuestra lo contrario.
En cuanto al asunto del viaje planificado de la delegación del Parlamento Europeo a Teherán que fue cancelado por el Gobierno iraní con escasa anticipación, me gustaría manifestar que, en este momento concreto, este viaje era verdaderamente importante sobre todo para establecer conversaciones y diálogos con todas las partes, incluidas, especialmente, con los ciudadanos locales y la sociedad civil.
Philippe Juvin (PPE). – (FR) Señor Presidente, los iraníes afirmaron que estaban listos para un intercambio gradual de uranio poco enriquecido por petróleo. Este tipo de producción ha sido rechazada por el Grupo de los Seis, incluso a pesar de que no era tan diferente de la propuesta que este mismo grupo había preparado poco antes.
No subestimo en absoluto las cualidades de negociación de los iraníes, en especial con respecto a la definición del carácter progresivo del intercambio que ellos estaban proponiendo, pero dada la situación, señora Ashton, ¿no considera que este rechazo del Grupo de los Seis quizá podría haber sido objeto de una posición común precisa de la Unión Europea? ¿Por qué no aprovechamos esta oportunidad?
Me gustaría que nos expresaran ustedes sus opiniones sobre este asunto. Yo admito que estoy perplejo ante la discreción de Europa en este debate. Europa posee una legitimidad. Utilicémosla para contribuir a alcanzar un acuerdo.
María Muñiz De Urquiza (S&D). – (ES) Mi primera intervención en este Parlamento, en junio del año pasado, se refirió a Irán, a raíz de una nueva serie de ejecuciones capitales. Entonces, pedí la activación de todos los instrumentos con los que contaba la Unión Europea para la protección de los derechos humanos.
Hoy nos encontramos con que la represión continúa contra la minoría religiosa bahai, contra los homosexuales –y quiero pedir especialmente la liberación de los homosexuales detenidos y, en varios casos, condenados a muerte–, contra la oposición –con más de dos mil quinientos opositores encarcelados–, contra la libertad de prensa –el lunes mismo se cerró el periódico Farhang-e-Ashti por publicar una declaración del líder opositor Musavi– y contra la minoría kurda.
Irán, sin embargo, figura en la agenda europea como un gran desafío, no solamente nuclear, a cuyo respecto la comunidad internacional ya está movilizada, sino porque Irán tiene una capacidad de influencia en prácticamente todos los ámbitos en que se está trabajando para encontrar una solución pacífica y diplomática en Oriente Próximo, así como en Iraq y en Afganistán.
Irán esta pulverizando, a golpe de represión, la oportunidad para normalizar sus relaciones exteriores, para ser acogido en la comunidad de naciones y para jugar un papel constructivo en las relaciones internacionales.
Ésta sería la situación que desearíamos los socialistas, pero solamente puede alcanzarse si Irán cumple sus compromisos internacionales, empezando por el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, en cuyo marco debe reconocerse a los partidos políticos, a los sindicatos, a las organizaciones no gubernamentales, el derecho de asociación, la libertad de expresión, etc.
El apoyo y la solidaridad de la Unión Europea, que pido desde aquí, para quienes reclaman más derechos y para los represaliados por el régimen no deben confundirse con ningún tipo de injerencia occidental, sino con la voluntad de que Irán reúna las condiciones mínimas para negociar con el resto del mundo.
Marco Scurria (PPE). – (IT) Señor Presidente, Señorías, en las publicaciones de la Unión Europea y en las páginas web de la UE, afirmamos con frecuencia que los derechos humanos constituyen el núcleo del proceso de la integración europea y la pieza clave de sus relaciones exteriores.
Los países que han celebrado acuerdos políticos o acuerdos comerciales con la Unión Europea tienen el deber de respetar estos derechos. Baronesa Ashton, deberíamos preguntarnos si estos requisitos todavía existen en nuestras relaciones con Irán y si para nosotros tiene sentido enviar una delegación a Teherán sin acordar un programa con el Gobierno iraní aprobado por ambas partes, un programa que nos permita también escuchar los argumentos y las voces de la oposición.
Sin embargo, en cuanto a lo que podemos hacer, tenemos que tener cuidado incluso al hablar de sanciones, porque la historia nos demuestra que las sanciones comerciales y económicas con frecuencia han fortalecido los regímenes en lugar de debilitarlos y que, de hecho, han dejado en una situación más vulnerable a las personas, sobre todo a los más pobres. Cuando escuchamos el testimonio de algunas personas como las de la delegación sobre los derechos de las mujeres y las minorías en Irán, nos contaron que quizá sería mejor imponer sanciones simbólicas, como por ejemplo sanciones de tipo cultural.
Durante los últimos días, muchos representantes e intelectuales en toda Europa han dirigido escritos pidiendo a la UNESCO que no celebre el Día Mundial de la Filosofía en Teherán. Considero que el Parlamento también podría aceptar este compromiso, recordando que Neda Agha-Soltan era una estudiante licenciada en filosofía y que este símbolo podría unir al Parlamento Europeo, puesto que insta a la UNESCO a que tome esta decisión.
Sergio Gaetano Cofferati (S&D). – (IT) Señor Presidente, Señorías, durante las últimas semanas hemos visto cometer al Gobierno o régimen iraní graves violaciones de los derechos humanos y de las libertades democráticas más esenciales.
Por consiguiente, para este Parlamento y para Europa, la cuestión ya no trata simplemente de las relaciones mantenidas con un país que está pensando en una política nuclear fuera de las normas aceptadas y de los dispositivos específicos de control que, por regla general, establece la comunidad internacional para estas cuestiones. Existe un componente nuevo, o más bien se trata de un viejo componente que se está agudizando, en relación con un tema mucho más preocupante: los derechos humanos.
Estoy convencido de que Irán podría desempeñar un papel mucho más importante en su región. Sin embargo, esta nueva ola de violaciones de derechos debe, en mi opinión, constituir una prioridad para nosotros y para la Alta Representante. La restricción del gobierno no ha acallado las voces de discrepancia democrática. En este momento lo adecuado es que la comunidad desempeñe un papel activo y proporcione asistencia a aquellos que se oponen al régimen, y considero que se deben respetar sus derechos fundamentales
Por tanto, deberíamos disponer de una presencia permanente allí. La delegación del Parlamento Europeo puede, mediante la identificación de objetivos muy precisos, desplazarse a Irán a demostrar su solidaridad con los demócratas iraníes y por supuesto no dar la espalda, ni siquiera de forma involuntaria, a la restricción del gobierno iraní. Considero que deberíamos debatir acerca de esto más adelante y conseguir nuestro objetivo.
Monica Luisa Macovei (PPE). – He decidido dedicar la mayor parte de mi tiempo de intervención a destacar los nombres de las personas que, de acuerdo con las informaciones, se hallan bajo arresto en Irán, algunas de ellas condenadas a muerte, por criticar el régimen político o defender derechos civiles.
Ali Mehrnia, Parviz Varmazyari, Majid Rezaii, Alireza Nabavi, Ali Massoumi y Shirin Alavi Holi, se hallan, según nos informan, detenidos y sometidos a pena de muerte por Mohareb, que significa enemistad contra dios.
Treinta y tres mujeres pertenecientes a las Madres de Luto iraníes, cuyos hijos han sido asesinados, se encuentran desaparecidos o han sido detenidos durante los incidentes violentos posteriores a las elecciones, han sido víctimas de amenazas.
Otras mujeres activistas han sido detenidas junto a sus familias: Atefeh Nabavi, Shabnam Madadzadeh, Mahsa Naderi, Fatemeh Ziaee Azad y Nazila Dashti.
Ocho activistas del Comité de reporteros de derechos humanos se hallan detenidos: Saeed Kalanaki, Saeed Jalalifar, Shiva Nazar-Ahari, Kouhyar Goudarzi, Saeed Haeri, Parisa Kakayi y Mehrdad Rahimi. Otros cuatro se ocultaron tras haber sido convocados a comparecer ante el Ministerio de Inteligencia: Hesam Misaghi, Saeed Habibi, Navid Khanjani y Sepeher Atefi.
Otros, miembros de la Asociación Liberal de Alumnos y Estudiantes: Mehrdad Bozorg, Ehsan Dolatshah y Sina Shokohi.
¿Qué es lo que van a hacer la Comisión y el Consejo para liberar a los detenidos por motivos políticos? ¿Qué financiación destina la Comisión a las ONG defensoras de los derechos humanos que trabajan en Irán?
George Sabin Cutaş (S&D). – (RO) Personalmente considero que existe un gran potencial para establecer vínculos de carácter político, cultural y económico entre Irán y la Unión Europea. Sin embargo, se trata de un potencial que todavía no se ha aprovechado. Las relaciones entre Irán y la Unión Europea se tropiezan con importantes dificultades cuando se abordan cuestiones tan delicadas como el programa nuclear de Irán o los derechos humanos.
Creo que la parte iraní necesita responder al deseo de diálogo expresado por la Unión Europea. Su rechazo a establecer un diálogo tan solo puede limitar la transferencia de ideas y conocimientos sobre asuntos de interés mutuo. Debo recordarles que la Unión Europea es el socio comercial número uno de Irán y dado que el objetivo de Irán es convertirse en miembro de la Organización Mundial del Comercio, una mayor colaboración a nivel comercial con la Unión Europea ayudaría a Irán en su intento por cumplir las normas de la organización.
Sin embargo, mientras los iraníes continúen demostrando su falta de transparencia en la cooperación, el diálogo constructivo entre Irán y la Unión Europea no será posible.
Salvatore Tatarella (PPE). – (IT) Señor Presidente, Baronesa Ashton, Señorías, usted, Baronesa, nos ha descrito una dramática panorámica de la situación que atraviesa este gran país que posee una gran historia, una gran cultura y una gran civilización.
Se están suprimiendo las voces discrepantes de la oposición, se producen graves restricciones de los derechos civiles e incumplimientos de libertades, se está llevando a cabo un preocupante programa nuclear y existe una amenaza hacia Israel y hacia la paz.
Desgraciadamente, no he entendido qué iniciativas pretende poner en marcha Europa para poner fin a esta situación, para defender la paz, la libertad y los derechos humanos. Espero que en las conclusiones del debate nos pueda enumerar algunos hechos y algunas iniciativas o posturas a adoptar, y quizá también pueda responder a la sugerencia realizada por el señor Scurria.
Señor Presidente, en lo que al Parlamento se refiere, formo parte de una delegación que luchó por obtener permiso del Gobierno iraní para visitar Irán, que cuando tuvo que cancelar el viaje a modo de protesta no pudo hacerlo, y que también padeció la vergüenza de que Irán le prohibiera la visita.
Estoy a favor del diálogo con Irán, pero el Parlamento italiano y la delegación deben establecer de modo convincente nuestra posición en lo referente a la defensa de la libertad y de los derechos que se encuentran amenazados.
Sari Essayah (PPE). – (FI) Señor Presidente, Comisario, la actual administración de Irán viola descaradamente los derechos humanos y pisotea los derechos fundamentales de sus ciudadanos. La prueba más evidente de ello es el asesinato de ocho personas relacionadas con el incidente del Ashura y el hecho de que cinco miembros de la oposición se encuentran en este momento esperando su sentencia de muerte.
El actual régimen de Irán representa la mayor amenaza a la paz mundial. Es bastante incomprensible que la comunidad internacional deba estar contemplando esto desde la distancia mientras se permite que el Gobierno iraní desarrolle tranquilamente un programa militar nuclear y que no tenga en cuenta la opinión del Organismo Internacional de la Energía Atómica. Se permite que el dirigente actual del país amenace con destruir a otro Estado, miembro de las Naciones Unidas: Israel. También respalda al grupo terrorista Hezbolá, que se encuentra activo en el Líbano y en Siria.
De alguna manera, estos acontecimientos recuerdan a momentos de hace 60 años. No debemos pensar en qué podríamos haber hecho de forma distinta para poder impedir este odio. Sin embargo ahora, si actuamos eficazmente, podemos impedir que ocurra lo mismo.
Tenemos que empezar a imponer sanciones económicas contra la administración iraní tan pronto como sea posible. Tal como está la situación, sería mejor que se impidiera realizar la visita de la delegación para las relaciones con Irán de la UE, dado que los mulás explotarían el viaje con fines propagandísticos. Recordemos: el problema en este caso no reside tanto en que la situación sea mala, sino que se trata más bien de que la parte buena permanece callada.
Bogusław Sonik (PPE). – (PL) Señor Presidente, a finales del pasado año se vivieron las mayores protestas de la oposición en Irán desde las manifestaciones posteriores a las elecciones de junio, cuando se anunció como vencedor al presidente que ocupa el cargo. Ocho personas murieron en enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, cientos de personas resultaron heridas y cientos de personas fueron detenidas. Los estudiantes que apoyaban a la oposición fueron atacados en el campus universitario, lo que provocó una reacción por parte de 88 profesores de la universidad, quienes hicieron un llamamiento al Ayatolá Alí Jamenei, para que detuviera el empleo la violencia contra los manifestantes.
La situación en Irán está provocando una alarma creciente, también a escala internacional. Los alemanes están considerando la imposición de sanciones en contra del Gobierno de Teherán. Su Canciller, la señora Merkel, ha afirmado que Irán no ha respondido a la propuesta occidental de cooperación para finalizar su programa nuclear. El Primer Ministro de Israel también ha hecho un llamamiento a la introducción de sanciones internacionales severas contra Irán. En su opinión, un régimen que tiraniza a su propio pueblo podría pronto convertirse en una amenaza para el mundo entero.
Manteniendo el respeto a la soberanía de Irán, deberíamos subrayar enormemente la responsabilidad que recae en las autoridades del país de respetar los derechos humanos, políticos y los derechos de los ciudadanos, y también deberíamos destacar el hecho de que, al ejercer su derecho a desarrollar su propio programa nuclear, Irán no debe representar al mismo tiempo una amenaza para la seguridad internacional. La paciencia de la que ha hecho gala la comunidad internacional al mantener el diálogo con Teherán ya está llegando a su fin. El mundo no debe convertirse en rehén de la política agresiva y provocativa del poder político actual en Irán. La Presidencia española y la jefa de la diplomacia, la señora Ashton, deberían iniciar conversaciones con Rusia sobre esta materia con el fin de incluir a Moscú en una política común de presión sobre Irán.
Arnaud Danjean (PPE). – (FR) Señor Presidente, señora Ashton, los sucesos del día del Ashura y la represión sangrienta de las últimas manifestaciones en Irán han dejado patente que era totalmente erróneo realizar una distinción tan artificial entre el endurecimiento del régimen a nivel interno y la política inflexible que persigue en el exterior, en especial, en la cuestión nuclear iraní.
Como consecuencia, la perspectiva de más sanciones parece inevitable, o incluso deseable. Me gustaría conocer su punto de vista sobre el calendario y la naturaleza de las posibles sanciones, precisamente para que podamos establecer una clara conexión entre los acontecimientos internos en Irán y la cuestión nuclear.
Potito Salatto (PPE). – (IT) Señor Presidente, Señorías, no deseo seguir enumerando las razones de nuestra disconformidad con el Gobierno iraní.
Dado que no se ha hecho aquí referencia a ello, me limitaré a poner de relieve una de las más serias violaciones de los derechos civiles, la relacionada con los más jóvenes. El Gobierno iraní, a pesar de haber firmado la Convención sobre los Derechos del Niño de las Naciones Unidas, continúa imponiendo la pena de muerte a menores.
Después de este debate, me gustaría, en primer lugar, Baronesa Ashton, asumir la tarea de presentar un enfoque común para toda Europa y todo el Parlamento Europeo de cara a los acontecimientos en Irán y, en segundo lugar, me gustaría que la delegación parlamentaria para las relaciones con Irán tomara nota de que debe cambiar su línea de actuación.
Mis amigos, el señor Scurria y el señor Tatarella, y yo protestamos a la delegación: en una declaración oficial se afirmaba que la delegación quería visitar Irán en cualquier caso, aunque había realizado una petición imperiosa de tener una oportunidad de reunirse y hablar con la oposición. De ahora en adelante, me gustaría que la delegación comenzara a entonar otra canción nueva y que conservaran las relaciones de asistencia, apoyo y debate con los representantes de la oposición exiliados, sobre todo con la señora Myriam Rajavi, que es representativa de esta situación. Esto es lo que la Unión Europea debería estar haciendo, más que imponiendo sanciones.
Tunne Kelam (PPE). – Señor Presidente, debo decir a la señora Ashton que me temo que nuestras esperanzas de convencer al régimen iraní serán en vano.
En efecto, estamos tratando con una dictadura de ayer y lo que se necesita ahora es concentrarse en la oportunidad de realizar un cambio. El régimen está haciendo aguas y el pueblo iraní ha demostrado con un gran coraje desde el pasado mes de junio que ellos no confían en esta dictadura agresiva y engañosa y tampoco la apoyan. ¿Por qué deberíamos seguir haciéndolo nosotros?
Tenemos que apoyar seriamente a la sociedad civil y a la oposición democrática, incluido el Consejo Nacional de la Resistencia, ya que es la única organización que ha presentado un programa democrático muy claro para un Irán libre de energía nuclear.
Alexander Alvaro (ALDE). – (DE) Señor Presidente, el diario alemán Süddeutsche Zeitung informaba hoy de que ayer, lunes, la oficina de la fiscalía general en Teherán pidió la pena de muerte para cinco miembros de la oposición. Según Amnistía Internacional, estos cinco miembros de la oposición son: Ali Mehrnia, de 17 años, Parviz Varmazyari, de 54 años, Majid Rezaii, Alireza Mabavi y Ali Massoumi. Si nosotros, la Unión Europea, ante un régimen como el de Teherán, que no solo resulta anacrónico sino que también aplica duras medidas sobre su propia población como la pena de muerte, los lapidaciones y otros métodos, no damos los pasos necesarios, nos convertimos en culpables sobre todo por los niños que crecen en condiciones que no tienen en absoluto que ver con las que nosotros —y aquí estoy de acuerdo con mi colega, que, desgraciadamente, ya no se encuentra presente— desearíamos para una futura sociedad. Me gustaría poder escuchar palabras firmes y claras por parte de la Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad en este aspecto, y me gustaría no solo ver cómo se piden sanciones contra Irán, sino también ver cómo se aplican dichas sanciones.
Ulrike Lunacek (Verts/ALE). – Señor Presidente, creo que para todos los presentes hoy en esta Cámara es evidente que el régimen iraní es un régimen dictatorial y criminal. La cuestión es: ¿cómo abordar esta situación?
Me gustaría manifestar de forma muy clara mi apoyo hacia la delegación de este Parlamento que habría ido a Irán. La delegación habría conocido, durante un día entero, a miembros de la oposición y disidentes. Les habría fortalecido. Ellos lo deseaban. Así que siento de veras que esta visita de la delegación no pudiera realizarse.
Tengo una pregunta muy concreta para usted, Baronesa Ashton. Varios diputados presentes aquí han hablando de sanciones. Según la experiencia que poseo como diputado al parlamento nacional y por las conversaciones mantenidas con muchas personas durante mucho tiempo, yo estaría realmente a favor de sanciones inteligentes dirigidas, por ejemplo, a miembros específicos de la Guardia Revolucionaria, colocándoles en una lista de visitas vetadas o dirigidas a otras personas concretas.
Estoy muy en contra de imponer sanciones en todo el país, puesto que es probable que refuercen al gobierno, ya que la pobreza aumentaría —ellos no tienen acceso, por ejemplo, a la gasolina— y eso serviría de apoyo al régimen en lugar de debilitarlo.
Struan Stevenson (ECR). – Señor Presidente, quiero mostrar mi conformidad con las intervenciones de Tunne Kelam y el señor Alvaro. El momento para el diálogo y el compromiso con Irán ya quedó atrás hace mucho tiempo.
La gente está muriendo en las calles casi a diario en medio de las protestas realizadas en contra de este régimen fascista. Tan solo ayer, como han oído, un tribunal irregular y arbitrario en Teherán pidió la pena de muerte para cinco manifestantes arrestados durante los disturbios del 27 de diciembre.
Es más que suficiente. No más conversaciones; no más política contemporizadora. Necesitamos sanciones contundentes. Es la única manera de demostrar a las personas corrientes de Irán que respaldamos sus protestas.
Niki Tavela (EFD). – (EL) Baronesa Ashton, me ha complacido comprobar su sobria postura de respeto hacia un país con la historia y el orgullo de Irán. Irán constituye un caso especial y me alegra que esté aplicando el enfoque diplomático conocido como «poder inteligente», es decir, sanciones por un lado y diálogo por el otro. Querría instarle a continuar con el diálogo.
Por regla general, aquellos países que condenan a este tipo de países se encuentran muy ajenos a la cultura y la mentalidad que poseen países como Irán, Iraq y Afganistán. Querría sugerirle que amplíe el grupo que ha creado para continuar el diálogo abierto con Irán, incorporando a países que tradicionalmente hayan mantenido buenas relaciones con Irán, como mi país, Grecia, especialmente ahora que dispone de un gobierno socialista. La región no será capaz de resistir otra guerra. Deseo transmitir aquí la inquietud que sienten, no solo Israel, sino también los Emiratos, ante el programa nuclear de Irán. Continúe con el diálogo y creo que llegaremos a algún sitio.
Krisztina Morvai (NI). – (HU) Tres breves preguntas. En primer lugar, el más destacado científico nuclear iraní fue recientemente asesinado en un brutal ataque terrorista. ¿Qué opina la Unión Europea sobre este caso? Curiosamente esto no se ha mencionado hoy. Lamento mucho este hecho. En segundo lugar, simplemente ¿por qué constituye el potencial nuclear iraní un mayor problema, un mayor peligro para la paz que, por ejemplo, Israel? ¿Por qué la UE no está abordando ese asunto también? En tercer lugar, en 2006, el gobierno liberal socialista de Hungría que ostentaba el poder en ese momento ordenó que se abriera fuego contra multitudes de manifestantes pacíficos. Catorce personas sufrieron heridas oculares, entre otras. Se dejó ciegas a muchas de ellas. A pesar de nuestras reiteradas peticiones, la UE se negó entonces y se sigue negando ahora, abordar este suceso. ¿Cuál es la diferencia? De modo similar, tampoco aborda el tema de los cientos de prisioneros políticos que han permanecido encarcelados en Hungría. Incluso hoy, existen docenas de prisioneros políticos encarcelados en Hungría. Muchas gracias y aguardo con impaciencia su respuesta.
Mariya Nedelcheva (PPE). – (FR) Señor Presidente, señora Ashton, la muerte y la desaparición del cuerpo de Seyed Ali Mousavi, el sobrino del líder de la oposición iraní, representa uno de los muchos ejemplos trágicos que demuestran el actual malestar de la República Islámica de Irán.
La legitimidad del régimen iraní tras las dudosas elecciones del pasado junio es, cuando menos, cuestionable. Por consiguiente, nuestra tarea es apoyar tanto como sea posible a la sociedad civil iraní en su movimiento de resistencia. Señora Ashton, puede estar usted segura del pleno apoyo que obtendrá del Parlamento en el rechazo a este tipo de comportamiento.
Deseo poner de relieve que, al seguir negando el papel de la oposición, el régimen iraní será incapaz de convencernos de su voluntad de trabajar por el bien del pueblo iraní. El derecho de la oposición a existir y su derecho a ejercer la libre competencia entre partidos, permitiendo así que quede representada la pluralidad de opiniones en la sociedad iraní, constituyen indicios positivos de lo que llevamos mucho tiempo esperando. Sin embargo, estamos lejos de ver eso en Irán.
Por supuesto, en la actualidad muchos consideran que corresponde únicamente al régimen iraní prestar a atención a las peticiones de los manifestantes y los deseos de la comunidad internacional con el fin de llevar a cabo una transición democrática. Europa debe ser testigo principal de lo que constituye el Estado de Derecho.
Piotr Borys (PPE). – (PL) Señor Presidente, señora Ashton, Irán es un país clave que afecta a la estabilidad de la paz en todo el mundo y en parte a la de Oriente Próximo. Desde luego, está fuera de dudas que debemos defender los derechos humanos y expresar con contundencia nuestra preocupación por las violaciones de los derechos de la oposición que se han venido sucediendo durante varios meses. Sin embargo, deseo manifestar que la Unión Europea debería, sobre todo, implementar de forma activa un programa antinuclear, ya que Irán con un arma nuclear constituiría una enorme amenaza para una parte considerable de Oriente Próximo.
Además, somos conscientes de que la instigación de revolución existente en Yemen y el apoyo a Hamás en la Franja de Gaza y de Al Qaeda en Afganistán también constituyen, probablemente, la inspiración tras la que se esconde parte de la política iraní. En relación con este asunto, lo que se necesita más que nada es un cierto equilibrio, y considero que Arabia Saudí también debería desempeñar un papel importante. Creo que la señora Ashton debería hacer gala de un compromiso y un diálogo muy activos en esta cuestión.
Paul Rübig (PPE). – (DE) Señor Presidente, en este contexto, como siempre, me gustaría señalar que aquí en Europa, de hecho, únicamente reconocemos la responsabilidad individual y rechazamos en principio la sospecha global. Estoy seguro de que, como británica, la Baronesa Ashton perfectamente podría tener gran simpatía por la idea de dirigir sus acciones a las partes culpables en situaciones como esta, pero no al pueblo entero, que se ha visto involucrado en esta situación más o menos inocentemente. Deberíamos perseguir mantener conversaciones. Mi pregunta es la siguiente. ¿Ve usted posibles contactos para el diálogo en Irán, con quienes pueda establecer contacto para mantener un debate objetivo y serio en una forma política adecuada?
Andrew Henry William Brons (NI). – No abogo por el régimen de los ayatolás en Irán ni por sus posturas antidemocráticas. Pero quiero manifestar dos cosas: una es que existe represión de la libertad de expresión no violenta incluso en Europa e incluso entre los miembros de la UE. Además, los Estados Unidos y sus aliados están utilizando las actividades en Irán y los acontecimientos en Irán con bastante cinismo, con el propósito de fomentar un movimiento belicista contra Irán, y considero que esa respuesta sería totalmente desproporcionada.
Catherine Ashton, Alta Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y Vicepresidenta de la Comisión. – Señor Presidente, considero que este ha sido un debate oportuno y sumamente importante, en primer lugar, porque hemos reiterado el compromiso que mantiene la Unión Europea con la importancia de los valores de los derechos humanos.
Y, efectivamente, en nuestro diálogo con Irán no pedimos nada más que estén a la altura de los acuerdos internacionales que firmaron libre y voluntariamente, y ello constituye una parte fundamental del modo en el que debemos abordar estas cuestiones, y los diputados, mediante la mención de los nombres de las personas y la descripción de los sucesos acontecidos en Irán, han puesto de relieve las cuestiones de mayor preocupación para nosotros.
Asimismo, los diputados han señalado que finalmente, como usted afirmó, señor Gualtieri, el diálogo debe ser inevitable. Es muy importante que sigamos ofreciendo ese enfoque de «diálogo positivo». Pero lo hago reconociendo que mi predecesor, Javier Solana, pasó seis años con el diálogo, seis años ofreciendo años ofreciendo continuar ese debate; así que, diálogo será, pero no como excusa para la ausencia de medidas en lo referente a Irán, sino más bien como una forma de asegurarnos de que vamos fortaleciendo esa relación y de que conseguimos lo que consideramos importante.
Y como parte de esto, las conversaciones sobre la pertenencia a la Organización Mundial del Comercio que hace tiempo que no llegan a ningún sitio, podrían constituir la forma de encontrar el tipo de debate, de discusión y de apoyo que permitan avanzar al régimen.
Muchos diputados han hablado sobre la importancia de las sanciones, pero pienso específicamente en sanciones inteligentes y astutas: la importancia fundamental que tiene para todos nosotros asegurarnos, cuando empezamos a pensar qué es lo siguiente y, si lo hacemos, como es el caso, considerar la posibilidad de imponer sanciones, de que lo hacemos reconociendo que deben estar dirigidas y orientadas específicamente a conseguir lo que deseamos y que nadie en esta Cámara desea ver el sufrimiento como consecuencia de ello del ciudadano de a pie en Irán.
Eso convierte ese debate en muy importante y también requiere que invirtamos energía y tiempo en él. Los altos funcionarios del E3+3 se reunieron en Nueva York el sábado y pudieron mantener un diálogo, incluida Rusia, por supuesto, sobre esa cuestión.
No cabe duda, como ya he dicho, de que, aunque deseamos hacer avanzar la significativa relación con Irán mediante el diálogo, finalmente, si Irán lo rechaza, entonces, al amparo de nuestra política de enfoque doble, surgirá la cuestión de las sanciones y, efectivamente, como consecuencia de esa reunión, ya se han comenzado a considerar otras medidas oportunas.
Esto también será objeto de debate en el Consejo de Asuntos Exteriores del lunes, y constituye en parte el motivo por el que tenía tanto interés en escuchar las perspectivas de sus Señorías, puesto que yo también me preparo para esos debates.
En lo referente a la delegación que viaja al país, señora Lochbihler, usted es precisamente la presidenta de la delegación. Es muy importante que aún no se haya cancelado oficialmente. Creo que sería importante considerar si deberíamos seguir persiguiendo esa visita. Espero que se celebre pronto otra reunión, de nuevo con el ánimo de intentar mantener el diálogo abierto.
Como resultado directo de la acción de este Parlamento, Euronews va a comenzar sus emisiones en farsi a mediados de 2010. Esto también es importante en lo que respecta al ámbito de la comunicación y para estudiar cómo emplear comunicación y tecnología eficazmente.
Es complicado pensar en el modo de bloquear el acceso si, al mismo tiempo, bloqueamos el acceso a la información que la gente desea conseguir y eso creo que es algo de lo que debemos ser conscientes.
Sobre qué vamos a hacer en el futuro, sus Señorías han dejado claro aquello que desean que tomemos en consideración. Como ya he indicado, el E3+3 ya está considerando esas opciones. Tenemos el Consejo de Asuntos Exteriores. He indicado que queremos contemplar sanciones inteligentes a raíz de este enfoque doble. He dejado claro, y sigo haciéndolo, que estoy abierta y dispuesta a mantener el diálogo —y he descrito en mis observaciones iniciales el potencial de este gran país— pero lo hacemos con la certeza de que no podemos seguir utilizando el diálogo como forma de impedir la acción.
Debo finalizar manifestando que me impactó mucho la frase que empleó el Presidente Obama en su discurso de recepción del Premio Nobel cuando dijo que, cuando examinamos el valor de continuar con el compromiso «el compromiso con regímenes represivos carece de la satisfactoria purificación de la indignación. Pero [...] ningún régimen puede emprender un nuevo sendero a menos que tenga la opción de una puerta abierta».
La puerta está abierta para ese diálogo positivo para poder avanzar pero, al decir eso, estoy absolutamente comprometida a reconocer el doble enfoque que mis predecesores establecieron, y lo perseguiré como algo necesario.
Presidente. – Estimados colegas, estos debates van a durar desde las 15.00 horas hasta las 20.00 horas, lo que significa cinco horas. Sugiero que nos tomemos un descanso de cinco minutos para que la Alta Representante y todos aquellos que hayan comparecido en la Cámara y vayan a continuar en ella puedan recuperar el aliento, y reanudaremos la sesión a las 17:35 horas: cinco minutos desde ahora.
Geoffrey Van Orden (ECR). – Señor Presidente, antes del receso, me gustaría simplemente ofrecer un punto de información. Baronesa Ashton, usted ha hablado sobre la delegación de Irán. La delegación tenía programado ir a Irán desde el día 8 al 10 de enero, pero se canceló esa visita de la delegación. De hecho, fueron las autoridades iraníes quienes la cancelaron.
Muchos de nosotros ejercimos presión para que la visita de la delegación se cancelara antes —aunque, de hecho, la Presidenta de la delegación nos hizo caso omiso— debido a las pruebas de misiles de largo alcance, el tiroteo de los manifestantes y el resto de disturbios que se produjeron durantes las Navidades. Como punto de información, pues, señalo que la visita de la delegación ha sido cancelada y que se debía haber cancelado dicho viaje en el Parlamento con anterioridad.
Presidente. – Desconocía que existiera ese procedimiento de «punto de información». Señor Van Orden. Le he permitido seguir, pero siendo justo con los demás, esta no era una cuestión de procedimiento.
Se cierra el debate.
La votación tendrá lugar durante el periodo parcial de sesiones de febrero I en Estrasburgo.
(La sesión, suspendida a las 17.30 horas, se reanuda a las 17.35 horas)