Presidente. – El siguiente punto del orden del día es el debate sobre la pregunta oral presentada por el señor Karas y la señora Bowles, en nombre de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios, acerca de la calidad de los datos estadísticos en la Unión Europea y competencias de auditoría reforzadas por parte de la Comisión (Eurostat) (O-0080/2010 – B7-0314/2010).
Othmar Karas , autor. – (DE) Señor Presidente, Comisario Rehn, Señorías, el debate de hoy constituye un importante mensaje político que el Parlamento Europeo quiere transmitir en estos momentos. El planteamiento de esta pregunta oral en pleno proceso de remodelación de Eurostat y de elaboración de la declaración del Parlamento Europeo a la Comisión constituye también una señal de nuestra determinación.
Al presentar una resolución por separado, estamos poniendo de manifiesto que el Parlamento Europeo necesita y desea que Eurostat funcione con independencia y amplias competencias. Esta es la primera respuesta directa del legislador ante la experiencia adquirida en y con Grecia. Al mismo tiempo, no hay que olvidar que, en 2005, el Consejo rechazó el plan de cinco puntos del Comisario Almunia y que, al hacerlo, impidió que la Comisión se dotara de los instrumentos necesarios. Estamos subsanando algo que podíamos y debíamos haber hecho hace mucho tiempo. Por consiguiente, quisiera recordar tanto a la Comisión como al Consejo que existe la voluntad política de desarrollar todos los instrumentos necesarios para garantizar que el euro reciba apoyo no sólo del pilar de la unión monetaria, sino también del pilar de la unión económica. Hago un llamamiento al Consejo para que no bloquee, para que no retrase ni impida, sino que brinde a la Comisión esta oportunidad.
Asimismo, queremos saber si se están llevando a cabo investigaciones sobre casos en los que Eurostat o los Estados miembros hayan actuado de un modo inapropiado en los último años, ya que sólo cuando tengamos un análisis claro podremos saber qué rectificaciones o adiciones habrá que realizar.
¿Qué quiere el Parlamento Europeo? Queremos independencia, queremos comparabilidad y, por tanto, unas normas mínimas para la recopilación de estadísticas, normas mínimas para la estructura institucional de las autoridades y cooperación con el Banco Central Europeo. Queremos que sea posible supervisar todas las acciones, para lo cual Eurostat debe ser posible efectuar controles inopinados en cualquier momento. Queremos que se amplíen sus competencias, porque queremos comprender todos los datos, incluidos los de ámbito regional y municipal y los datos sobre seguridad social. Queremos una cooperación sin fisuras, queremos fortalecer la función de coordinación y queremos que la Comisión nos diga, antes de que terminemos nuestro informe, si todo lo que se ha decidido en cooperación con el Consejo hasta el momento es suficiente. Nosotros creemos que no lo es. Estamos hablando de una declaración mínima, subsanando lo que no se ha hecho, dando el siguiente paso hacia una mayor independencia y unas competencias más amplias.
Sharon Bowles, autora. – Señor Presidente, la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios mantiene una opinión coherente y unánime de que es necesario reforzar Eurostat y que llevamos largo tiempo buscando el modo de producir datos estadísticos de mayor calidad.
Ya conocemos la historia, puesto que el señor Karas la ha mencionado. En 2005, el Consejo se cubrió de deshonor y propició el surgimiento de los actuales problemas de deuda soberana, al debilitar el Pacto de Estabilidad y Crecimiento y, al mismo tiempo, al denegar a Eurostat competencias de auditoría. Con esos antecedentes, requiere mucho tiempo recuperar la confianza, y la falta de confianza contribuyó a que, durante los recientes problemas, los Estados miembros tuvieran que poner sobre la mesa una gran cantidad de dinero en efectivo. Las palabras y las promesas políticas del Consejo de Economía y Finanzas (Ecofin) no fueron suficientes.
En breve, Eurostat contará por fin con competencias de auditoría, lo cual es hoy fundamental, y esta es la clave que puede hacer efectivos los otros planes en materia de vigilancia económica. Una herramienta para controlar resultados es mucho más eficaz que un puñado de simples promesas.
Queremos que mejore la calidad de los datos, que estos lleguen a tiempo, y queremos poder examinar cómo se transmiten esos datos a las cuentas nacionales, y preguntamos: ¿es suficiente la nueva competencia acordada a Eurostat? Incluso ahora, el Consejo de Economía y Finanzas ha añadido algún grado de condicionalidad a la nueva competencia de auditoría, que en realidad es menos restrictiva de lo que muchos nos temíamos, pero ¿realmente ha debilitado la capacidad de investigación y de intervención temprana?
El informe del Parlamento Europeo favorece los derechos incondicionales de Eurostat para realizar las llamadas visitas metodológicas. Por supuesto, los recursos deben centrarse en las necesidades, pero es necesario que la investigación se realice en el momento en que surgen las sospechas, no a toro pasado.
Por último, ¿cuándo estableceremos elementos comparables? ¿Qué avances se están realizando para asegurar que los procedimientos contables estén normalizados y sean lo bastante transparentes como para registrar la actividad realizada fuera de balance y otras prácticas innovadoras?
Olli Rehn, Miembro de la Comisión. – Señor Presidente, en primer lugar quisiera dar las gracias al señor Karas, a la señora Bowles y a todos los demás por plantear estas cuestiones tan sumamente importantes relativas a la calidad de los datos estadísticos de Eurostat. Quisiera, asimismo, acoger con agrado el apoyo expresado en su proyecto de dictamen sobre la propuesta de la Comisión de modificar el Reglamento relativo a la aplicación del Protocolo sobre el procedimiento aplicable en caso de déficit excesivo.
Me gustaría señalar que esta es la primera propuesta legislativa de la segunda Comisión del señor Barroso en febrero. Me complace que —espero— pronto vaya a aprobarse y que luego contemos con ella en nuestro arsenal. Como ha dicho la señora Bowles, hace mucho tiempo que la necesitábamos.
La propuesta original a este respecto se presentó en 2005, pero en esa época los Estados miembros la rechazaron. Los tiempos han cambiado y hoy contamos con un amplio apoyo del Consejo.
Por lo que atañe a esta propuesta, el enfoque general adoptado por el Consejo de Economía y Finanzas el 8 de junio —la semana pasada— corrobora lo importante que es asegurar que haya estadísticas de alta calidad en materia de deuda y de déficit de los gobiernos, y reconoce el papel de la Comisión y de Eurostat a este respecto.
El reglamento que se está finalizando preserva el objetivo primordial de la propuesta presentada por la Comisión, a saber, la concesión de competencias más amplias de auditoría a Eurostat cuando se detecte un riesgo o un problema importante en relación con la calidad de los datos. Por tanto, la Comisión puede aceptar el texto de compromiso.
La Comisión se propone adoptar diversas medidas tendentes a reforzar la calidad de las estadísticas europeas en relación con el procedimiento aplicable en caso de déficit excesivo. Se reforzarán con carácter inmediato los recursos del personal que desempeñe esta labor, principalmente mediante una reasignación interna dentro de Eurostat. Se visitará a los Estados miembros con mayor frecuencia que hasta ahora, en el marco de las denominadas visitas de diálogo.
La Comisión asegurará la integración de más información sobre los datos de origen para recopilar estadísticas en inventarios previstos en el Reglamento sobre el procedimiento aplicable en caso de déficit excesivo. Si se produjera un caso excepcional en el que se observasen claramente riesgos o problemas significativos con respecto a la calidad de los datos, Eurostat recurriría a las competencias de que dispone en virtud de las nuevas normas, entre ellas, por supuesto, las competencias de auditoría.
Antes de terminar, quisiera decir unas palabras sobre Grecia en relación con algunos temas. Quiero aprovechar esta oportunidad y robar tal vez un minuto más de su tiempo. Como saben, la Comisión lleva varios años realizando una intensa labor en relación con las estadísticas griegas. El Reglamento modificado debería, en adelante, mitigar el riesgo de fraude o de manipulación de las estadísticas, o de cualquier otra clase de irregularidad.
Ayer, se produjo un nuevo acontecimiento en relación con Grecia. Como sabrán, ayer Moody’s decidió rebajar la categoría de las obligaciones del Estado griegas. He debatido esta cuestión también con mi colega Michel Barnier y con el Presidente de la Comisión. He de decir que el momento en que interviene la decisión de Moody’s resulta sorprendente y muy poco afortunado, pues llega después de que Grecia, la Comisión, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional hayan alcanzado un acuerdo para establecer un programa de ajuste macroeconómico.
Las medidas adoptadas por el Gobierno de Grecia ilustran su compromiso de aplicar la estrategia de reforma del sistema estadístico, tendente a estabilizar sus finanzas públicas y restaurar el crecimiento económico a largo plazo. Esta decisión de Moody’s parece incoherente con la evolución de las obligaciones del Estado griegas y los diferenciales de permutas financieras por impago crediticio, que se han reducido considerablemente desde que se estableció el programa. Una vez más, esto plantea cuestiones en relación con el papel que cumplen las agencias de calificación crediticia en el sistema financiero y la normativa prudencial.
La Comisión tendrá en cuenta estas y otras cuestiones a la hora de plantearse el futuro de las agencias de calificación crediticia. En particular, durante los próximos meses, la Comisión estudiará las cuestiones del nivel de competencia en este sector —que de momento se encuentra muy concentrado—, así como la transparencia en cuanto a la metodología y el conflicto de intereses, ya que el sistema sigue basándose en el modelo de pagador-emisor.
Voy a terminar diciendo que es absolutamente fundamental que contemos con datos exactos y fiables en las cuentas nacionales. Es una de las piedras angulares del funcionamiento adecuado y eficaz de la unión económica y monetaria, como ha subrayado, por ejemplo, el señor Karas. Por consiguiente, esta modificación de las competencias de Eurostat forma parte del fortalecimiento de la gobernanza económica en Europa, que constituye, de hecho, un objetivo necesario.
Edward Scicluna, en nombre del Grupo S&D. – Señor Presidente, me complace que la Comisión haya presentado propuestas legislativas para reforzar Eurostat que actualmente se están votando en la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios.
La calidad de la gobernanza estadística reside en el núcleo de la crisis de la zona del euro. No cabe duda de que Eurostat debería contar con amplias competencias, en particular, para realizar inspecciones in situ en los Estados miembros. Pero esas inspecciones no deberían ser sólo con funcionarios del Ministerio de Economía del Estado miembro o con las autoridades estadísticas nacionales o incluso con empresas públicas: deberían incluir, si la labor los considera relevantes, economistas académicos, sindicatos, organizaciones no gubernamentales, entre otros. Es algo que, en la práctica, ya hacen las agencias de calificación crediticia, o incluso las delegaciones del Fondo Monetario Internacional.
En segundo lugar, debemos contar con un sistema contable —utilizado en todos los Estados miembros— basado en un método contable normalizado y aceptado internacionalmente, y acordado entre los Estados miembros, la Comisión y el Parlamento. Esto no debería aplicarse sólo a los informes financieros facilitados a la Comisión, sino que debería usarse en los propios sectores públicos de los Estados miembros.
Más de diez años después de la creación de la zona del euro y de la introducción del euro, hemos descubierto en el sistema deficiencias básicas que están causando daños. Irónicamente, hemos ignorado estas deficiencias por el falso sentido de seguridad creado por el éxito del euro. Debemos asegurar que, en el futuro, los mercados confíen en las previsiones económicas y las estadísticas de los gobiernos. Es necesario corregir esas deficiencias, y es necesario hacerlo ya.
Por tanto, insto a la Comisión a que prosiga su labor en estrecha cooperación con el Parlamento y el Consejo con el fin de solucionar urgentemente estos problemas.
Sylvie Goulard, en nombre del Grupo ALDE. – (FR) Señor Presidente, señor Comisario, la actual crisis de la zona del euro no puede atribuirse, obviamente, a los fallos del sistema estadístico comunitario. Sin embargo, estos fallos han tenido graves consecuencias. Hay consecuencias económicas, ya se ha hablado largo y tendido sobre ellas, pero también hay consecuencias que afectan a la credibilidad de la Unión Europea. Y aquí llegamos a uno de los principales problemas, en mi opinión, que afecta al modo de funcionamiento actual de la Unión Europea. Algunos gobiernos hacen promesas a sus ciudadanos, y con razón, diciendo que vamos a ser muy estrictos en la supervisión de los compromisos mutuos, que los criterios se examinarán hasta la última coma —en versión original se diría drei komma null—, pero, durante años, esos mismos gobiernos, se han negado a conceder a Eurostat los recursos necesarios para realizar su trabajo. Y todo ello en perjuicio del interés general, ya que todo lo que debilita a la Comisión nos debilita a todos.
Por este motivo, sostenemos plenamente esta resolución, que pide que se concedan competencias de investigación a la Comisión, a Eurostat, así como un refuerzo de las normas comunes. Sin este esfuerzo necesario en la explotación y la recopilación de los datos, no se cumplirán las promesas. Los europeos se encontrarán cada vez más desorientados, y será la Unión Europea la que caiga en descrédito.
Franz Obermayr (NI). – (DE) Señor Presidente, el debate sobre las competencias reforzadas de Eurostat no aborda realmente el problema. No debemos volver a encontrarnos nunca más en una situación en la que un Estado miembro haga trampas con su presupuesto y durante años viva por encima de sus posibilidades a costa de los demás; cuando existan razones para dudar de los datos, estos deben comprobarse. Sin embargo, la Unión Europea no debe utilizar a Grecia ni la actual crisis del euro como pretexto para retirar por completo las competencias de la soberanía presupuestaria de los Estados miembros. Al contrario, el problema debe arrancarse de raíz.
Las estructuras socioeconómicas de los Estados miembros varían considerablemente en algunos casos. Incluso Eurostat, que maneja las cifras de la Unión Europea, debe darse cuenta de esto. Un parado de Londres no es lo mismo que un parado de Paris, porque se aplican criterios diferentes. Las diferentes realidades socioeconómicas entre los países con divisa tradicionalmente fuerte y moneda tradicionalmente débil se hacen incluso más llamativas.
Eurostat no debe alimentar este mito de comparabilidad a cualquier precio; al contrario, es necesario remodelar básicamente la comparabilidad de los países de la zona del euro.
Anni Podimata (S&D). – (EL) Señor Presidente, señor Comisario, quisiera comenzar expresando mi total satisfacción por la observación que ha realizado antes referente a la decisión repentina e injustificada de la agencia Moody’s de rebajar la calificación crediticia de Grecia, una decisión que usted califica de desafortunada y errónea, confirmando, por consiguiente, que nuestra decisión de proceder a una revisión radical del marco operativo de estas empresas en el territorio europeo y de examinar seriamente la posibilidad de crear una agencia de calificación crediticia europea era un acierto.
En cuanto al debate de hoy y a la propuesta de revisar el Reglamento sobre la calidad de los datos estadísticos en el marco del procedimiento aplicable en caso de déficit excesivo, todos sabemos que esto es consecuencia del llamado «asunto griego» relativo a las falsas estadísticas.
En mi calidad de diputada al Parlamento griego, evidentemente no estoy muy contenta de que en un debate de este tipo se utilice a Grecia como un ejemplo de lo que hay que evitar. Pero quisiera recordar a esta Cámara —como ha hecho usted, señor Comisario— que Grecia, el actual Gobierno griego, ha sido la primera en reconocer el problema, y ha tomado inmediatamente dos decisiones drásticas para solucionarlo: primero, convertir la Oficina Nacional de Estadística en una autoridad totalmente independiente supervisada por el Parlamento y, segundo, adoptar medidas para establecer una comisión de examen para investigar y repartir la culpa entre las personas implicadas en este procedimiento inaceptable.
No obstante, hay que reconocer que este debate se celebra tarde a nivel europeo, ya que ha habido estadísticas adecuadas que deberían habernos movido a tomar medidas desde 2005.
Dimitar Stoyanov (NI). – (BG) Me gustaría orientar el debate en una dirección más pragmática, porque la semana pasada el Comisario declaró que Eurostat realizaría una auditoría especial sobre los datos que la Comisión ha recibido de Bulgaria.
Pero, lamentablemente, la declaración del señor Rehn no dejó claro por qué era necesario realizar una auditoría. Por eso, ahora quisiera aprovechar esta oportunidad para formularle la pregunta.
¿En qué criterios se ha basado la elección del Estado miembro más estable de los Balcanes, cuando todos los demás Estados miembros de la región están atravesando graves dificultades? ¿Cuáles han sido los criterios que han determinado que debía llevarse a cabo una auditoría en Bulgaria concretamente? ¿No denota esto una relativa inercia por su parte, al venir de su anterior ámbito de responsabilidad, que era la ampliación?
También acaba de decir que es muy poco oportuno que Moody’s haya rebajado la calificación crediticia de Grecia. Pero ¿se da cuenta de que, de tanto repetir esas declaraciones una y otra vez en el espacio público, podría verse rebajada también la calificación crediticia de Bulgaria? Si eso ocurre, no la tome con Moody’s. Sólo podrá enfadarse con usted mismo.
Olle Ludvigsson (S&D). – (SV) Señor Presidente, es necesario adoptar una serie de sencillas medidas con el fin de crear estabilidad económica dentro de la Unión Europea. Una de las medidas más sencillas pero, al mismo tiempo, más importantes es mejorar la calidad de los datos estadísticos. En este ámbito, es perfectamente posible alcanzar importantes mejoras en un plazo relativamente breve. Por tanto, acojo con agrado las señales positivas que han enviado tanto la Comisión como el Consejo. Lo que espero es que pueda llegarse pronto a un acuerdo sobre paquetes de medidas eficaces que suban el listón de la calidad de las estadísticas.
Creo que es necesario reforzar las competencias de Eurostat. Eurostat debe seguir cooperando con las entidades nacionales que publican estadísticas, pero la jerarquía y los niveles de toma de decisiones deben ser más claros. Eurostat debe ser capaz de exigir datos nacionales correctos y debe ser capaz de aplicar tanto sanciones como inspecciones especiales si la calidad no alcanza un nivel suficiente.
Si se quieren mejorar las estadísticas, son necesarios mayores recursos. Es importante que nos demos cuenta de que, a este respecto, una mayor calidad requiere una mayor inversión. Es necesario establecer un plan para Eurostat. Debe aumentarse su capacidad, y tenemos que asegurar que el presupuesto proporcione margen para una mayor capacidad. Me preocupa que, hasta el momento, las estadísticas no hayan ocupado un lugar prioritario en este ámbito en los debates sobre la toma de decisiones. Espero que presenciemos este aumento de la inversión.
Andreas Mölzer (NI). – (DE) Señor Presidente, todos somos conscientes de que la modificación del Reglamento sobre la calidad de los datos estadísticos en el contexto del procedimiento de déficit excesivo es una medida especialmente importante y acuciante, habida cuenta de los problemas que afectan a la mayor parte de los presupuestos nacionales de los Estados miembros. Si no disponemos de datos exactos y claros, resultará difícil decidir o establecer más medidas. A este respecto, debe ponerse en marcha un mecanismo de supervisión que permita comprobar a su debido tiempo los datos facilitados por las autoridades nacionales. En cualquier caso, nunca más debemos colocarnos en una situación —como hemos hecho con Grecia— en la que sólo mirando atrás queda patente que, sobre la base de datos incorrectos o falseados, se han tomado decisiones que acarrean consecuencias de gran envergadura. Asimismo, debemos estudiar la posibilidad de aplicar sanciones a aquellos Estados que de forma deliberada han transmitido datos o estadísticas incorrectos. Por consiguiente, debería estudiarse la mejora de Eurostat y su expansión para convertirla en una autoridad independiente. Ello no interfiere en absoluto con la soberanía presupuestaria de los Estados miembros, sino que se trata más bien de contar con controles eficaces de los datos.
Liisa Jaakonsaari (S&D). – (FI) Señor Presidente, en mi opinión, deberíamos dar las gracias a la Comisión por los avances realizados tan rápidamente en relación con estas cuestiones. Hace tan solo unos meses, por ejemplo, examinar los datos estadísticos de un país se percibía como una intrusión en la soberanía nacional. En esa época, se consideraba prácticamente imposible, y ahora es evidente que hemos recorrido un largo trecho. Es un dato sumamente positivo que se hayan aumentado las competencias de Eurostat. Europa habría sucumbido a una especie de crisis moral si los ciudadanos hubieran, por así decirlo, notado por el rabillo del ojo que se habían falseado las estadísticas.
Coincido con mi colega, la señora Podimata, en que deberíamos dejar de ridiculizar a Grecia de este modo. Grecia merece respeto por tomar algunas decisiones muy duras. Sus ciudadanos también deberían tener un mayor acceso a los datos estadísticos y a la información de carácter general sobre la economía.
Olli Rehn, Miembro de la Comisión. – Señor Presidente, quiero darle las gracias por este sustancioso debate y por su apoyo a esta propuesta de reforzar las competencias de Eurostat. He de decir que coincido con la señora Jaakonsaari en que, en los últimos meses, hemos sido testigos de un espectacular cambio espectacular de actitud —un verdadero cambio cultural—en cuanto a la coordinación en materia de política económica en Europa.
La aprobación de esta propuesta constituye una de las piedras angulares de nuestros esfuerzos por fortalecer la unión económica y monetaria. Se han planteado varios puntos en relación con Grecia y Bulgaria, y quisiera aclararlos y responder a algunas de las cuestiones que se han debatido hoy. En cuanto a Grecia, no entraré en todos los pormenores de esta saga. Estoy de acuerdo con quienes dicen que no es justo seguir propinando esta «somanta de críticas» a Grecia, porque Grecia ya va por el buen camino y su programa se está aplicando con eficacia. Grecia merece que le concedamos crédito y apoyo, no que le propinemos una «somanta». En lo que atañe a las reformas estadísticas, estamos cooperando con las autoridades griegas. Hemos realizado numerosas visitas durante el invierno y la primera pasados, y hace poco hemos acordado un plan de acción destinado a mejorar la capacidad del sistema estadístico griego y mejorar las estadísticas sobre las finanzas públicas de Grecia.
Con respecto a Bulgaria, nuestras preocupaciones se refieren sobre todo a dos aspectos de previsiones financieras. Confío en que, al menos, los diputados búlgaros del Parlamento Europeo estén escuchando mis aclaraciones en relación con el procedimiento de déficit excesivo y los problemas estadísticos de Bulgaria.
En primer lugar, Bulgaria informó tarde a la Comisión recibió de las importantes revisiones de la perspectiva presupuestaria, en incumplimiento de las obligaciones del Tratado. En segundo lugar, nos falta información sobre las razones por las que Bulgaria revisó su previsión de presupuesto para 2010, que pasó de un presupuesto equilibrado a un déficit del 3,8 % en tan solo unas semanas, pese a que el escenario macroeconómico permanecía intacto o incluso registró una mejora. Por tanto, actualmente la Comisión no se encuentra en posición de llevar a cabo una evaluación de los planes presupuestarios de Bulgaria para este año.
La misión en Bulgaria prevista por Eurostat para la segunda mitad de este año no abordará las diferencias ni las cuestiones relativas a la perspectiva para 2010. No es una cuestión de estadísticas. En cambio, Eurostat se centrará en los posibles riesgos para los datos históricos sobre el procedimiento de déficit excesivo para el año 2009 en relación con los compromisos contractuales no declarados contraídos anteriormente por el gobierno.
Les agradezco enormemente la atención prestada a estas cuestiones tan importantes, que probablemente también habrán tenido algunas implicaciones en cuanto a la posición de Bulgaria en los mercados. Con arreglo a la información facilitada por las autoridades búlgaras, sus auditorías presupuestarias internas no finalizarán hasta mediados de verano. Eurostat utilizará el resultado de estas auditorías en el marco de la visita contemplada en el Reglamento relativo a la aceleración y clarificación del procedimiento de déficit excesivo que está previsto realizar en Bulgaria. En función de la rapidez con la que se apruebe el Reglamento modificado, que concede a Eurostat competencias más sólidas, Eurostat podrá, en caso necesario, hacer uso de sus competencias durante el desempeño de su labor.
Señorías, una vez más, gracias por su atención y, en especial, por el amplio y sólido apoyo que han brindado a nuestra propuesta, que es la primera propuesta legislativa de la segunda Comisión Barroso. Su aprobación es, ciertamente, fundamental para el eficaz funcionamiento de la unión económica y monetaria.
Presidente. – Gracias, señor Comisario, y gracias también por las generosas observaciones que nos ha dedicado; me temo que no las hemos escuchado con la debida atención. Me parece lamentable que, cuando un orador interviene ante el Pleno, se hagan demostraciones, como interrupciones de aplausos, que no tienen nada que ver con el asunto que nos ocupa ni con la intervención que se está realizando durante el debate.
Se cierra el debate.
La votación tendrá lugar el miércoles 16 de junio de 2010.
Declaraciones por escrito (artículo 149 del Reglamento)
Enikő Győri (PPE) , por escrito. – (HU) El Parlamento Europeo debe adoptar una postura firme ante una cuestión de suma importancia abordada en el debate de hoy, a saber, el rumbo que debe tomar el sistema de información estadística que actualmente funciona bajo la dirección de Eurostat a fin de evitar que en el futuro se reproduzcan situaciones similares al escándalo del caso de Grecia. Quisiera recordarles que el fraude cometido por las autoridades griegas salió a la luz ya en 2004, y por esa misma época las finanzas del Gobierno socialista de Hungría eran también bastante turbias. Pese a todo, la Unión Europea no ha adoptado todavía ninguna medida para reformar el sistema de información estadística. Aunque considero que el plan de la Comisión para conceder a Eurostat competencias de auditoría constituye una medida en la buena dirección, estoy convencida de que será necesario hacer más, ya que el futuro de la moneda común está hoy en peligro. ¿Qué es, en mi opinión, lo próximo que habría que hacer? Creo que, en los procedimientos aplicables en caso de déficit excesivo, no sólo deberían imponerse sanciones a los Estados miembros que incumplan repetidamente su obligación de atenerse a los criterios de déficit presupuestario del 3 % establecido en el Tratado de Maastricht, sino, además, a aquellos que, durante años, hayan facilitado datos estadísticos falsos, engañando a los inversores engañosos y a la Unión Europea y poniendo en peligro la estabilidad de la zona del euro. Coincido con el enfoque de imponer una responsabilidad personal a los funcionarios de las oficinas nacionales de estadística de la calidad de los datos facilitados a Eurostat. Por tanto, propongo que, teniendo en cuenta el trabajo que están realizando el grupo de trabajo del Consejo bajo la dirección de Herman Van Rompuy, pidamos a la Comisión que elabore un sistema más estricto de sanciones que sustituya al sistema actualmente vigente.