Presidente. – De conformidad con el orden del día, se procede al debate sobre:
– la declaración de la Comisión sobre Kosovo, y
– la declaración de la Comisión sobre Albania.
Štefan Füle, Miembro de la Comisión. – (EN) Señor Presidente, aprecio esta oportunidad de debatir la perspectiva europea de los Balcanes Occidentales.
La Unión Europea ha desempeñado un papel importante al promover la estabilidad, la seguridad, la democracia y las libertades fundamentales en los Balcanes Occidentales, que ahora están firmemente anclados al proceso de ampliación. En la actualidad hay avances positivos en los que podemos basarnos. Las negociaciones de adhesión con Croacia han acelerado el ritmo y ahora están entrando en una fase crucial. Se están desarrollando y aplicando amplios acuerdos de estabilización y asociación por toda la región y continúa el proceso de reforma política y económica.
No obstante, las reformas deben consolidarse. Los fundamentos democráticos en algunos de los países siguen siendo frágiles. Los líderes políticos asumen una responsabilidad enorme en este sentido a la hora de superar las diferencias y conducir a sus países y la región hacia una mejor gobernanza y alejarlos del riesgo de la desestabilización.
Los dos proyectos de resolución muy bien fundamentados y valiosos en el orden del día de hoy confirman esta tendencia y demuestran que el Parlamento Europeo sigue siendo un defensor clave del proceso de estabilización y asociación con los Balcanes Occidentales, que llevará a la región a conseguir finalmente su adhesión a la UE.
Deseo dar las gracias al Parlamento Europeo —y al señor Chountis, en particular— por la calidad y el equilibrio que reviste el informe sobre Albania. Acojo con satisfacción esta oportunidad de discutir hoy el tema de Albania con ustedes, en este momento clave para el país.
Comparto plenamente la opinión del Parlamento respecto a la situación política de Albania. La carencia de un diálogo político constructivo y de una solución de diferencias, a raíz de las elecciones de junio de 2009, entre el Gobierno y la oposición es motivo de preocupación. Es necesario que ambas partes vuelvan al diálogo político constructivo y encuentren una solución basada en el respeto por la Constitución y la transparencia. Es necesario atender a las recomendaciones formuladas por la OSCE/OIDDH en vistas de las elecciones locales de primavera de 2011.
El actual punto muerto político está obstaculizando importantes avances de reforma, los cuales también son necesarios para que el país progrese hacia la integración en la Unión Europea.
Aprecio el papel constructivo que los dos principios del Parlamento desempeñaron en la iniciativa de mediación para hallar una solución al punto muerto y saludo el llamamiento del Parlamento para que se llegue a un consenso de todos los partidos en cuanto a reformas fundamentales.
Lo bueno es que, respecto al diálogo sobre los visados, el país ha realizado progresos importantes. Así lo refleja la propuesta de la Comisión del 27 de mayo relativa a la exención de visados para estancias de corta duración.
Coincido por completo con la opinión de que se necesitan más esfuerzos para asegurar que el sistema de justicia de Albania pueda funcionar de manera eficaz y apropiada. Albania necesita aplicar rigurosamente la legislación y los planes de acción de lucha contra la corrupción y contra la delincuencia organizada y garantizar la suficiente capacidad judicial y de investigación.
La Comisión ha hecho de la ayuda financiera del IPA (Instrumento de Ayuda de Preadhesión) en el ámbito de la judicatura y las fuerzas de seguridad una de sus prioridades principales, asignando unos 55 millones de euros durante el período de 2007 a 2010.
En cuanto a la libertad y la independencia de los medios de comunicación, queda trabajo por hacer. Es necesario completar el marco jurídico. Se tratará la transparencia de la propiedad de los medios de comunicación. Es motivo de preocupación que se intimide a periodistas y se ejerza influencia sobre ellos.
Otras cuestiones son la aplicación eficaz de la estrategia de reforma de la administración pública y asegurar una administración pública independiente, profesional y basada en los méritos. Asimismo, se necesita tomar más medidas para hacer frente a la violencia doméstica y la trata de mujeres y niños.
Ahora, pasemos a Kosovo, que sigue siendo una prioridad. Estoy especialmente agradecido con la señora Lunacek por la excelente labor que ha realizado en esta resolución sobre Kosovo. Su apoyo es crucial, en especial ahora, justo antes de que se emita el dictamen de la Tribunal Internacional de Justicia.
Los Estados miembros de la Unión Europea tienen opiniones diferentes sobre el estatuto de Kosovo. Sin embargo, los Estados miembros están todos de acuerdo en su deseo de cooperación con Kosovo, al igual que la Comisión. Las discusiones sobre la resolución de la señora Lunacek confirman que el Parlamento está igualmente comprometido en su apoyo a la perspectiva europea de Kosovo, como parte de la región en general.
Este año he visitado Kosovo dos veces. Durante mi segunda visita también estuve en el norte y tuve debates provechosos con la comunidad local, inauguré el punto de información de la Unión Europea y visité la recién creada Casa de la Unión Europea. Confirmé mis garantías del apoyo constante de la Unión Europea a la comunidad local e hice un llamamiento en favor de la cooperación y el diálogo.
Estamos logrando progresos positivos en las propuestas formuladas en nuestra comunicación sobre Kosovo del pasado octubre. El Consejo nos invitó a respaldar los avances de Kosovo hacia la Unión Europea, en consonancia con la perspectiva europea de la región. El calendario y el alcance de los progresos de Kosovo dependen del propio Kosovo.
En enero iniciamos el diálogo del Proceso de Estabilización y Asociación con Kosovo. Se ha completado todo un ciclo de reuniones de sectores.
También estamos progresando en lo que concierne a los visados. El Consejo acordó que Kosovo debería avanzar con la perspectiva de conseguir finalmente la liberalización del régimen de visados, una vez que se cumplan todas las condiciones. En este contexto, la Comisión sigue trabajando con las autoridades de Kosovo para asegurar que se cumplen todos los requisitos para iniciar un diálogo sobre el régimen de visados. El 25 de junio Kosovo adoptó una ley de readmisión.
Mientras hablamos, los servicios de la Comisaria Malmström están verificando su compatibilidad con la Unión Europea. Kosovo todavía debe garantizar que los acuerdos de reintegración son adecuados para atender satisfactoriamente a las personas repatriadas. Estamos muy en contacto con Pristina para ofrecer orientación y apoyo.
También estamos avanzando en materia de comercio. En febrero, la Comisión adoptó su propuesta de ampliar las actuales preferencias comerciales autónomas para Kosovo hasta 2015. La responsabilidad ahora recae en ustedes.
Mientras hablamos, una amplia misión de información sobre comercio se encuentra de nuevo en Pristina con objeto de evaluar la posibilidad de que la Unión Europea y Kosovo se preparen para iniciar negociaciones sobre un acuerdo de comercio. Consideramos que este tipo de acuerdo es fundamental para fomentar el desarrollo socioeconómico de Kosovo, lo cual se destaca correctamente en el proyecto de resolución.
Finalmente, por primera vez este año, Kosovo participará en programas de cooperación transfronteriza del IPA con la Antigua República Yugoslava de Macedonia y Albania. Los programas con Montenegro seguirán el año próximo.
En conclusión, el año que viene comprenderá una fase importante para Albania, Kosovo y la región en general.
En lo que respecta a Kosovo, diga lo que diga la Tribunal Internacional de Justicia, confío en que la Unión Europea continúe colaborando de forma activa con Kosovo para asegurar que sigue conectado a la evolución de los acontecimientos en el resto de los Balcanes Occidentales.
En cuanto a Albania, espero que el panorama político, así como los avances prácticos sobre el terreno —de los cuales tanto las autoridades en el poder como la oposición comparten la responsabilidad— nos permitan establecer una ruta clara hacia delante en el dictamen que la Comisión presentará en otoño.
En ambos casos, me alegro de poder contar con el apoyo conjunto del Parlamento Europeo y la Comisión en el fomento de las iniciativas de los países y las regiones.
Bernd Posselt, en nombre del Grupo del PPE. – (DE) Señor Presidente, el Parlamento Europeo ha apoyado la lucha por la libertad en un Kosovo devastado por la guerra durante veinte años. Quisiera recordarles al señor Rugova y el señor Demaçi, ganadores de nuestro Premio Sájarov. El Parlamento ha trabajado por la independencia de Kosovo durante los últimos seis años, más recientemente en su resolución de 2007, a la que después le siguió la declaración de independencia de la República de Kosovo en 2008. Si se consideran los acontecimientos de los últimos dos años, entonces se puede decir que la democracia kosovar es una experiencia positiva. Se están consolidando los principios democráticos y una gran parte de la minoría serbia —el 6 % de la población— empieza a integrarse en las estructuras del nuevo Estado con las disposiciones para la protección de las minorías.
Por eso necesitamos hacer cuanto podamos para evitar que este país acabe desestabilizándose a causa de fuerzas externas, como por ejemplo los planes de dividir el país. Cualquiera que intente dividir a Kosovo también estaría interfiriendo en la unidad de Serbia, basta con mencionar el valle de Preševo, el Sandzak de Novi Pazar y Voivodina. Quienes cuestionen la unidad del país amenazan la estabilidad de Macedonia, Montenegro y Bosnia y Herzegovina. Cualquiera que intente instalar una estructura política delictiva o zona rebelde en el norte de Mitrovica está intentando empujar a Transnistria a las fronteras de Europa Central. Eso sería sumamente peligroso. Queremos un Kosovo democrático, un Kosovo libre como país democrático basado en el Estado de Derecho, no una región rebelde; nuestro objetivo es que este país consiga el reconocimiento diplomático de todos los Estados miembros de la UE lo antes posible y que EULEX se extienda a todo el territorio inmediatamente con respecto a la eficacia de la libertad y la democracia.
Libor Rouček, en nombre del Grupo S&D. – (CS) Me gustaría decir unas palabras sobre el tema de Albania. Este país ha logrado progresos considerables en su avance hacia la integración europea. Esto se refleja finalmente en el informe de Nikolaos Chountis, a quien me gustaría dar las gracias por este excelente informe. Sin embargo, queda mucho por hacer. A estas alturas, me gustaría mencionar la cuestión del fortalecimiento de la democracia y el funcionamiento del Estado de Derecho. Albania está malgastando demasiada energía y un tiempo muy valioso por la incapacidad del Gobierno y la oposición de alcanzar un acuerdo y cooperar en las prioridades fundamentales. Entre estas prioridades se encuentra el logro de un consenso en relación con las elecciones de 2009. Es necesario que todos los partidos políticos asuman responsabilidades, inicien el diálogo y apliquen la decisión de establecer una comisión parlamentaria de investigación con el objetivo de introducir las enmiendas necesarias de la ley electoral antes de que se celebren las próximas elecciones locales el año próximo.
El consenso entre los principales partidos políticos también es necesario en los asuntos de reforma económica. Hasta ahora sólo se ha conseguido avanzar un poco, por ejemplo, en la consolidación de los derechos de propiedad, el registro de la propiedad inmobiliaria, la elaboración de un inventario de las tierras que son propiedad del Gobierno, la legalización de edificios no autorizados, etc. La proporción de la economía sumergida en la economía de Albania sigue siendo muy elevada, al igual que el nivel de corrupción, por supuesto.
Por otra parte, el año pasado se lograron progresos importantes en el cumplimiento de las condiciones y los criterios para alcanzar la supresión de la obligación de visado. Por lo tanto, quisiera saludar la reciente adopción de la propuesta legislativa de la Comisión sobre la relajación del régimen de visados y espero que en los próximos meses, también se cumplan las demás condiciones, de tal manera que el Consejo y este Parlamento puedan aprobar la introducción de un régimen sin visado para los ciudadanos albaneses este año.
Marietje Schaake, en nombre del Grupo ALDE. – (EN) Señor Presidente, en el Grupo Liberal de este Parlamento creemos que los Balcanes Occidentales forman parte de Europa, pero este no siempre es un mensaje fácil de transmitir a los votantes hoy en día. No obstante, consideramos que la UE no es sólo un mercado común sino, lo que es más importante, una comunidad de valores. El Parlamento Europeo, en todos sus niveles, está preparado para trabajar con Albania para que logre estos valores, pero ¿esta disposición a ayudar es correspondida? Espero que sí.
Durante los últimos meses, las Presidencias de los Demócratas Cristianos y los Socialdemócratas del Parlamento Europeo han realizado grandes esfuerzos por solucionar la crisis política de Albania mediante visitas y trabajando con sus partidos hermanos. Pero ni siquiera estos esfuerzos de alto nivel han tenido éxito. En mayo, tuvimos la primera reunión de la Comisión Parlamentaria Mixta. La mayoría de nosotros en el Parlamento Europeo comenzamos esta reunión con muy buena voluntad, pero al final, nos sentimos desalentados en la misma medida por la forma en que nuestros homólogos de Albania dedicaron el tiempo en Bruselas a disputas internas, lo cual perjudica a la imagen de Albania.
La reunión de la Comisión Parlamentaria Mixta destacó algunas cosas importantes. El clima político sumamente dividido no ayuda a la población albanesa a acercarse a Europa. La democracia significa más que el resultado de las elecciones, colocar a la población en el poder. Significa la representación responsable de los ciudadanos; no que el ganador se lo lleva todo, sino la búsqueda de un acuerdo constructivo entre la participación de la mayoría y la minoría. Deberíamos haber hablado sobre los temas más urgentes, como garantizar la libertad de prensa y una sociedad civil independiente y dinámica, así como la protección de los derechos de las minorías, como el colectivo LGTB, las personas con discapacidad y las minorías étnicas. Deberíamos haber discutido la necesidad de acabar con la corrupción y garantizar la transparencia, luchar contra la pobreza y la delincuencia organizada y todo esto con arreglo a las debidas garantías procesales y el Estado de Derecho.
También es necesario abordar con transparencia las preocupaciones por los resultados de las elecciones y resolverlas de forma consensuada antes de que se celebren las próximas elecciones, para que la población albanesa pueda avanzar hacia la democracia y hacia Europa.
Ulrike Lunacek, en nombre del Grupo Verts/ALE. – (DE) Señor Presidente, señor Comisario, Señorías, me gustaría empezar agradeciendo a todos mis colegas diputados de los demás grupos políticos que han trabajado conmigo en este informe sobre Kosovo y a la señora Mahr, que ha realizado un trabajo muy valioso aquí en la Secretaría.
También me gustaría darle las gracias, señor Comisario, por su cooperación positiva y por hacer algo que comprendió que era importante, a saber, viajar al norte de Kosovo e incluso pasar allí la noche para dejar claro a la población que usted les apoya. Ofreció una conferencia en la universidad e inauguró las oficinas de la UE allí. Creo que esta fue una señal importante para dejar claro lo que el Parlamento Europeo expresó en el pasado y repite ahora, es decir, su apoyo a la independencia de Kosovo en el camino hacia su integración en la Unión Europea.
De nuevo nos encontramos ante una situación en la que Kosovo está en una encrucijada, en particular, respecto a los miembros de todos los grupos étnicos de Kosovo. En unas semanasel Tribunal Internacional de Justicia decidirá y emitirá su dictamen sobre la posición con respecto a la declaración de independencia de hace poco más de dos años. Espero que este dictamen ofrezca la oportunidad de situar la cooperación regional sobre una nueva base, pero que parta de la premisa de la condición de Estado y la independencia de Kosovo, dejando claro que el futuro común para todos los Estados de la región —Serbia, Kosovo y todos los demás— es su adhesión a la Unión Europea y que los problemas que todavía existen tendrán que resolverse conforme avancen en esta dirección.
La redacción de la resolución lo deja claro: el futuro de Kosovo reside en la Unión Europea. Me complace que tengamos una mayoría en favor de instar a los cinco Estados miembros que todavía no han reconocido la independencia de Kosovo a que lo hagan pronto y pedir que la Comisión empiece el proceso de liberalización del régimen de visados lo antes posible. Es importante que a los ciudadanos del país, en particular, a las generaciones más jóvenes, no se les haga sentir que viven en un Estado aislado, mientras que todas las personas de las regiones circundantes pronto se beneficiarán de los cambios futuros. Creo que este es el reto. Espero recibir también una amplia mayoría a favor en la sesión plenaria de mañana.
Además, he presentado una nueva enmienda que expresa el profundo pesar por el brote de violencia acontecido durante los últimos días y la esperanza de que este asunto se investigue con rapidez e imparcialidad y no siente las bases para una escalada de emociones durante los próximos días y semanas.
PRESIDE: Libor ROUČEK Vicepresidente
Charles Tannock, en nombre del Grupo ECR. – (EN) Señor Presidente, el planteamiento precipitado e incoherente de la comunidad internacional respecto a Kosovo —y espero la resolución de la CIG con gran interés— durante la última década ha creado un problema que costará mucho dinero a los contribuyentes europeos en apuros. Kosovo no puede unirse a la UE porque cinco Estados miembros de la UE se niegan a reconocer su soberanía.
La corrupción sigue siendo un gran problema en Kosovo, que es también un importante centro de tránsito de narcóticos ilegales y trata de personas. La economía es demasiado dependiente de la ayuda de la Unión Europea y Occidente y parece ser que no hay ninguna solución sencilla para salir de este estancamiento. Hace diez años, a título personal, defendía la división como solución al problema. Esta es una solución que apoyan muchos políticos serbios pero que pocos políticos occidentales aceptarían por ahora.
Sin embargo, mi grupo, el ERC, respalda por completo la adhesión de Albania a la UE una vez que cumplan todos los criterios de Copenhague y, en particular, mejoren su deficiente historial en la lucha contra la corrupción y la delincuencia organizada. También se necesita urgentemente resolver el boicot de la oposición socialista del Parlamento.
Personalmente, me parece difícil que Albania pueda hacer compatible su condición de miembro de pleno derecho de la Organización de la Conferencia Islámica con las futuras posiciones de la PESC si llega a ser miembro de la Unión Europea, aunque en parte me reconforta el hecho de que ya sea miembro de pleno derecho de la OTAN.
Nikolaos Chountis, en nombre del Grupo GUE/NGL. – (EL) Señor Presidente, deseo dar las gracias a todos mis colegas diputados de todos los grupos políticos porque creo que, juntos, hemos logrado ponernos de acuerdo en lo que yo diría que es la correcta propuesta de resolución sobre los progresos para la adhesión de Albania.
Gracias, señor Comisario, por sus observaciones. Me satisface que, en la mayoría de los recuentos, la percepción de la Comisión esté en consonancia con la del Parlamento Europeo que espero que mañana vote a favor de la resolución. Me gustaría añadir que, mientras debatimos el caso de Albania y Kosovo en general, y puesto que estamos debatiendo la cuestión de la ampliación, estoy convencido —y la propuesta defiende esto— de que las perspectivas de los Balcanes Occidentales residen en su adhesión a la Unión Europea que, en relación con ciertos términos y condiciones en una zona que ha sufrido mucho, puede salvaguardar la estabilidad, la prosperidad y las relaciones amistosas entre pueblos y Estados.
¿Cuáles son estos términos y condiciones? Que el procedimiento en general respete el Derecho internacional, la Carta de las Naciones Unidas y los acuerdos y convenciones internacionales, dado que una serie de cuestiones en este ámbito trata sobre aquellas a las que me he referido. En segundo lugar, los progresos hacia la adhesión por parte de Albania y otros países (en este caso, Albania) pueden, sujetos a ciertos términos y condiciones, actuar también como incentivo para solucionar numerosos problemas que afectan a Albania desde el punto de vista de la cohesión democrática.
La identificación de estos problemas fue quizás la parte fácil del ejercicio. La parte difícil, como ya han dicho el señor Füle y otros diputados, es cómo persuadir y motivar a las autoridades políticas de Albania y a la sociedad albanesa para que adopten medidas que resuelvan estos problemas. Aquí es donde hallamos dificultades; se han tomado medidas, todavía hay problemas, se han aprobado leyes, hay problemas con su aplicación (este nivel de soborno y corrupción no puede continuar) y, por supuesto, está el gran problema político.
Mi comentario al respecto (todos sabemos del estancamiento) es el siguiente: no creo que podamos resolverlo con excesiva intervención exterior, a menudo quizás con afiliaciones políticas, a menos que se persuada a las propias autoridades políticas (y en esto fue en lo que centramos todos nuestros esfuerzos) de que una solución a estos problemas les daría la oportunidad de centrar su atención en los problemas existentes y en los criterios necesarios para avanzar hacia la adhesión de su país.
Bastiaan Belder, en nombre del Grupo EFD. – (NL) Señor Presidente, hemos recibido informes de una ONG de Albania, Committee of Nationwide Reconciliation, la cual combate de forma activa las rencillas violentas entre familias, en los que se afirma que 750 niños se encuentran bajo arresto domiciliario debido al derecho consuetudinario del Kanun que está completamente fuera de control. La misma organización contabilizó más de 30 asesinatos por vendetta el año pasado. En cambio, el Gobierno albanés ha informado de cifras bastante inferiores. En cualquier caso, el Estado de Derecho democrático y la adhesión de Albania a la Unión Europea a más largo plazo no son compatibles de ninguna manera con la práctica cruel de venganza de sangre.
Señor Comisario, eso me lleva a dos preguntas que me gustaría formularle. ¿El Gobierno albanés está tomando las medidas suficientes para luchar contra las grotescas perversiones del Kanun? En cuanto a perversiones grotescas, debería decir que otra práctica que destaca actualmente es la de contratar asesinos a sueldo para permitir que las rencillas violentas entre familias continúen sin límites. Mi segunda pregunta es la siguiente: ¿cómo está ayudando la Comisión a las autoridades albanesas a reducir de forma eficaz las rencillas violentas entre familias? Estoy pensando, por ejemplo, en un programa educativo, una opción de refuerzo que no estaría exenta de dificultades. Gracias por su respuesta.
Béla Kovács (NI) . – (HU) Señorías, puesto que estamos discutiendo la cuestión de Kosovo, siento que como diputado húngaro al Parlamento Europeo tengo la obligación de hablar por los húngaros que viven en Voivodina. Me gustaría señalar a la atención de los grupos parlamentarios húngaros, y a la de sus Señorías, el hecho de que por desgracia día tras día se infringen los derechos de la relativa mayoría húngara que vive en Voivodina. Los actos de violencia contra la población húngara se han convertido en una práctica que ocurre casi a diario. La población húngara incluso tiene miedo de acudir a la policía por temor a que se repitan los acontecimientos del caso de los jóvenes de Temerin. El uso de su lengua materna está restringido y las autoridades públicas no ofrecen servicios en lengua húngara. Las autoridades serbias ahora están planeando prohibir el campo juvenil húngaro (Egyesült Magyar Ifjúsági Tábor) que se organiza anualmente desde hace unos años. Es posible que esta situación dé lugar a la extinción total de los sentimientos nacionales húngaros y de la población húngara en esta zona. Para resolver este grave problema, es indiscutible que se debe permitir una autonomía territorial bastante general en la región de Bačka.
Presidente. – Señor Kovács, simplemente quisiera recordarle que este es un debate conjunto sobre Kosovo y Albania. No es un debate sobre la población húngara ni sobre Voivodina, así que la próxima vez, por favor limítese al tema que figura en la orden del día.
Doris Pack (PPE). – (DE) Señor Presidente, señor Comisario, como usted mismo ha dicho, Albania ha progresado mucho en los últimos cuatro años y ha logrado avanzar en el camino hacia la adhesión a la UE. Se han cumplido las condiciones para la liberalización del régimen de visados, como usted ha señalado, y esperamos que esto suceda este año. Naturalmente, todavía quedan numerosas reformas por hacer. El señor Chountis ha elaborado un buen informe, en el cual se indican tanto las deficiencias como las esferas en las que se ha progresado. Se debe seguir luchando contra la corrupción y la delincuencia con todos los recursos disponibles. La coalición de demócratas y socialdemócratas que gobierna ha identificado claramente este objetivo. En esto nos basaremos para juzgarles.
Lamentablemente, el clima político del país se encuentra envenenado por las payasadas irresponsables de una pequeña minoría entre la oposición socialista. No pretendo hablar por mí misma en este momento, pero citaré a varios socialistas albaneses bien considerados, como por ejemplo el señor Agolli, antiguo Presidente del Parlamento, el señor Belumbi y el Presidente del país, el señor Maldani, todos ellos rechazan el nuevo boicot impuesto por sus representantes en el parlamento. Dicen que las acciones del señor Rama son poco realistas, que la estrategia es infructuosa y que el Partido Socialista no puede esperar que sus 65 representantes parlamentarios no hagan nunca nada. El señor Agolli también declara que repetir constantemente la apertura de las urnas es inconstitucional. Otro socialista, el señor Manani, ha declarado abiertamente que las acciones del líder de su partido, el señor Rama, pretenden anular la constitución albanesa.
Albania necesita un parlamento totalmente operativo, que incluya a un grupo de la oposición que funcione, un parlamento que acepte la tarea confiada por la población seriamente y que no corrompa el sistema democrático. Los ciudadanos de Albania ya han tenido suficientes disputas de este tipo. Quieren que sus hijos tengan un futuro, que se defienda el orden público en el país y que las empresas se establezcan allí para crear puestos de trabajo. Quieren que sus políticos sirvan a la población, en lugar de seguir una línea de partido comprendida de forma equivocada.
Albania es un país hermoso cuya imagen no debería socavarse deliberadamente.
Pier Antonio Panzeri (S&D). – (IT) Señor Presidente, señor Comisario, Señorías, ya se ha dicho que mañana, votaremos la propuesta de resolución sobre Kosovo elaborada por la señora Lunacek. El debate de hoy y la votación de mañana son muy importantes y representan una contribución provechosa para el proceso de estabilización de Kosovo y de los Balcanes Occidentales en su conjunto.
Europa, si desea respetar los compromisos que ha asumido, debe trabajar para asegurar que se cumplen totalmente los tres objetivos principales en Kosovo: una integración más sólida y más completa de las comunidades albanesa y serbia, la plena aplicación del Estado de Derecho y el fortalecimiento de las instituciones democráticas de Kosovo. Además, estas condiciones son fundamentales si Kosovo debe avanzar con más decisión en el proceso de integración europea.
En este sentido, la Unión Europea debe ser muy exigente consigo misma y con las autoridades de Kosovo, mediante su presencia allí, para que el proceso de democratización pueda seguir adelante en el país y pueda emprender el camino hacia la integración europea. Es necesario que seamos conscientes de que todavía queda mucho por hacer. La Unión Europea debe desempeñar un papel activo, lo cual significa también seguir las directrices formuladas por el Parlamento Europeo.
Por lo tanto, creo que este proceso tan esperado —y espero que el Parlamento Europeo apruebe esta propuesta y que todos los grupos se unan de alguna manera— tiene un papel muy importante, que creo que es la negociación, el diálogo y la apertura de una relación honesta entre Serbia y Kosovo por dos razones: estabilizar la relación entre los dos países y preparar a toda la región de la mejor manera posible para un futuro europeo; y esperamos que esto suceda en un futuro no muy lejano.
Como Parlamento y como Unión Europea, debemos asumir esta responsabilidad con la determinación necesaria.
Jelko Kacin (ALDE). – (EN) Señor Presidente, el lunes por la mañana, se produjo un intento de asesinato de nuestro colega, Petar Miletić, miembro de la Asamblea de Kosovo. El líder del partido liberal de la minoría serbia, Samostalna Liberalna Stranka, el señor Miletić, se ha convertido en el símbolo de la cooperación y el diálogo entre la mayoría albanesa y la comunidad serbia en Kosovo. Él es uno de nosotros: un diputado. Él es uno de los líderes de los serbios en Kosovo que participan activamente en la vida política.
Esta parece ser la única razón por la que han intentado asesinarle quienes rechazan todas las relaciones con las instituciones de Kosovo. Un ataque a un diputado en cualquier lugar equivale a un ataque a la democracia y este ataque iba dirigido a los esfuerzos por conseguir una estabilidad duradera en la región de los Balcanes Occidentales.
No veo ninguna diferencia entre el asesinato del difunto Primer Ministro de Serbia, Zoran Djindjic, y este atentado. De manera alarmante, la resistencia política a la modernización y europeización ha vuelto de nuevo a la violencia. Debemos ser totalmente claros y firmes en nuestra reacción a este desafortunado incidente. Sólo si se fomenta el diálogo democrático y el proceso de integración europea se producirá algún progreso en las relaciones entre albaneses y serbios en Kosovo.
Judith Sargentini (Verts/ALE). – (NL) Señor Presidente, soy una persona optimista. Siempre veo el vaso medio lleno, pero cuando se trata de Albania en ocasiones esto puede ser un poco difícil. Creo que la Unión Europea está transmitiendo un mensaje claro. Vamos a liberalizar el régimen de visados para los ciudadanos albaneses que deseen viajar a Europa. Eso es algo que me parece muy importante, pero espero que las autoridades albanesas —es decir, la oposición y el Gobierno— comprendan que tienen que dejar de estar enfrentados permanentemente, porque tienen mucho que ganar con la adhesión a la UE. En esto, me hago eco de las palabras de la señora Pack. Los ciudadanos de Albania obtendrán importantes beneficios de la libertad de prensa, la igualdad de trato entre hombres y mujeres y la introducción de mejoras en la situación de los gays y lesbianas y las personas con discapacidad. Albania ahora también tiene que llegar a un acuerdo para la recepción de solicitantes de asilo. El país va avanzando poco a poco hacia una democracia y espero que acepte la mano que le tendemos en ese sentido.
Nirj Deva (ECR). – (EN) Señor Presidente, el reconocimiento internacional de la independencia de la provincia serbia de Kosovo —como el que propone la señora Lunacek— contraviene directamente la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que cuenta con el apoyo de los Estados miembros de la UE y de Belgrado.
Aunque yo acojo con satisfacción el compromiso de la señora Lunacek con la protección del patrimonio religioso ortodoxo serbio de Kosovo y los derechos de las comunidades minoritarias serbia, romaní, goraní, turca y bosnia, que siguen sufriendo el abuso de la mayoría albanokosovar, la Resolución 1244 establece de forma clara e inequívoca que toda discusión sobre el futuro de esa provincia debe tener en cuenta la soberanía y la integridad territorial de Serbia, fomentando la concesión de la autonomía social y la significativa autodeterminación de Kosovo.
Los grupos disidentes de KLS siguen operando en la frontera kosovar, haciendo más reivindicaciones irredentistas en el valle de Presevo al sur de Serbia y desestabilizando la gobernanza en la parte occidental de Macedonia, que es un país candidato a unirse a la Unión Europea que conozco muy bien.
La comunidad internacional debe tomar medidas para dar a aquellas personas que viven en las regiones de mayoría serbia de Pec y Mitrovica la oportunidad de decidir dónde y con quién desean vivir. Ahora no es el momento de reconocer la independencia kosovar. Insto a esta Cámara a rechazar esta resolución.
Takis Hatzigeorgiou (GUE/NGL). – (EL) Señor Presidente, en nuestra opinión, la política de la mayoría de los Estados miembros de la Unión Europea sobre la cuestión de Kosovo entra en conflicto con el propio espíritu político europeo, que es —creo yo— la cooperación y el acuerdo político. Todo esto se ha olvidado en el caso de Kosovo y no hemos intentado ayudar a la población serbia y kosovar tanto como podríamos haberlo hecho para avanzar hacia la cooperación y el acuerdo político. Lo que se impuso finalmente fue una división.
Pienso que es positivo que contemos la verdad. Esta posición que la Unión Europea mantiene hoy en día se basó en la violencia del pasado; sin embargo, la situación que apoyamos hoy también es el resultado de la fuerza que impusimos. Para que una solución sea viable y estable, todas las partes interesadas deben estar conformes con dicha solución. No debemos basarnos en que los Estados sean incapaces de defender su soberanía para crear entidades pequeñas e independientes. La declaración unilateral también entra en conflicto con la Resolución 1244 de las Naciones Unidas, que establece que Serbia sigue teniendo soberanía sobre los territorios de Kosovo.
Por último, el informe con frecuencia se refiere al principio de todos los Estados que siguen la misma ruta. Sin embargo, eso no se puede imponer. El informe también se refiere a menudo al reconocimiento de conceptos como «los principios de Kosovo», «las relaciones transfronterizas», etc.
(El Presidente interrumpe al orador)
Nikolaos Salavrakos (EFD). – (EL) Señor Presidente, me gustaría comenzar felicitando a mi honorable amigo, el señor Chountis, por su informe completo y bien presentado.
Albania, desde las elecciones de 2009, ha experimentado una prolongada crisis política. Desde luego, los progresos de Albania durante los últimos años no bastan para cumplir con los criterios de adhesión. No obstante, tratamos a este país con suma indulgencia porque durante muchos años sufrió el horrendo régimen del comandante Hoxha.
Seguirán existiendo los retos importantes de este país; estos son la lucha contra la corrupción y la delincuencia organizada y el fortalecimiento del Estado de Derecho y el restablecimiento de una economía moderna básica.
Grecia ha seguido una política estable e inflexible hasta la fecha, apoyando y promoviendo las expectativas europeas de los países de los Balcanes Occidentales, entre ellos Albania. Sin embargo, nos preocupa especialmente si el censo, que está previsto para 2011 y que pagará la Unión Europea, se llevará a cabo sin problemas porque, lamentablemente, existen numerosas denuncias de discriminación contra las comunidades emigrantes y minoritarias, como por ejemplo la minoría griega.
Por lo tanto, pido que se formulen preguntas en el censo sobre la lengua materna, el origen étnico y la religión, que son prerrequisitos para conseguir la condición de país candidato.
Andreas Mölzer (NI). – (DE) Señor Presidente, cuando discutimos sobre Kosovo, necesariamente debemos hablar también de Serbia. Si efectivamente el proceso de adhesión de Serbia desde el pasado diciembre todavía no se ha abordado en Bruselas, entonces surge la pregunta de si el Consejo Europeo realmente necesita tanto tiempo para enviar el documento de una oficina a otra o si en esto entra en juego cierto grado de cálculo político.
Después de todo, si bien la ocupación militar del territorio de un Estado miembro de la UE no impidió el inicio de negociaciones con Turquía, un país que no forma parte de Europa desde el punto de vista geográfico, espiritual o cultural, las normas obviamente son distintas para los Estados de la antigua Yugoslavia. Esto implica no sólo cooperar con la Tribunal Internacional de Justicia —algo que está bastante justificado— sino también de repente promover la integración regional e intentar resolver disputas bilaterales fuera del territorio de la UE.
La ampliación de los criterios de Copenhague puede parecer encomiable al principio, pero estos mismos principios también tendrían que aplicarse a Turquía y sin duda provocarían que se suspendieran inmediatamente las negociaciones. Sin embargo, el reconocimiento de Kosovo evidentemente pretende ser una especie de prueba de fuego para Serbia. A algunas personas les gustaría que la Unión Europea asumiera el papel de guardián de la población albanokosovar sin tener en cuenta los intereses legítimos de Serbia. Sin embargo, como todos saben, la declaración de independencia por parte de los albanokosovares infringe claramente el Derecho internacional. Como ya ha señalado el señor Deva, infringe la Resolución 1244 de las Naciones Unidas.
Según parece, forma parte de la política de la UE legitimizar este incumplimiento del Derecho internacional, a pesar de que cinco Estados miembros de la UE se niegan a reconocer la independencia de Kosovo por buenos motivos.
Bruselas está constantemente destacando que no se implica en asuntos internos. Si eso es así, entonces no podemos imponer nada a los serbios con respecto al reconocimiento de Kosovo.
Eduard Kukan (PPE). – (SK) Todos nosotros sabemos que los Balcanes Occidentales necesitan una perspectiva europea. Me alegro de que los dos informes que estamos debatiendo, así como la resolución, confirmen esta perspectiva y también de que la Presidencia belga haya incluido el proceso de ampliación de la UE entre sus prioridades.
Lo más importante para Albania será conseguir que se mantenga un entorno político democrático y estable dentro del país. En la resolución se aplauden justamente los progresos que Albania ha logrado durante el último año en muchos ámbitos y, en particular, a la hora de cumplir los criterios técnicos para llevar a cabo la liberalización del régimen de visados. No obstante, sin instituciones democráticas que funcionen correctamente y diálogo dentro de estas instituciones, será difícil conseguir más progresos hacia su integración en la UE.
Todos los problemas políticos espinosos, en especial aquellos que han continuado desde las elecciones parlamentarias del año pasado, pueden y deben resolverse sólo en el marco de la constitución y mediante el respeto por la legislación en el país. Todos los políticos albaneses deberían tener esto presente.
Tres observaciones sobre Kosovo. Para Kosovo, el proceso europeo ya ha comenzado, pero está claro que durará mucho tiempo. Independientemente de las distintas opiniones sobre la situación de Kosovo, el Parlamento Europeo debería confirmar la perspectiva europea de Kosovo a través de esta resolución y, por otra parte, los habitantes de Kosovo deberían ser capaces de cumplir todos los criterios necesarios en su camino hacia la integración europea.
Hannes Swoboda (S&D). – (DE) Señor Presidente, la situación de Kosovo todavía es poco satisfactoria, no sólo debido a los problemas internos, sobre los que la señora Lunacek ha presentado un informe excelente. Es fundamental que finalmente iniciemos un diálogo entre Kosovo y Serbia y que Bosnia y Herzegovina también esté incluida. Este diálogo debería asumir el dictamen de la Tribunal Internacional de Justicia como punto de partida. Nos estamos engañando a nosotros mismos si creemos que es posible dar el paso atrás de disolver la independencia; en su lugar, necesitamos dar un paso adelante para que ambos países, Kosovo y Serbia, puedan unirse a la Unión Europea, quizás incluso haciéndolo a la vez. Ese debe ser nuestro objetivo.
Pasando al tema de Albania, las relaciones entre el Gobierno y la oposición son tensas y debemos buscar una solución. Lamento decir que la señora Pack, que normalmente es muy ecuánime en sus argumentos, se ha convertido en una portavoz del Gobierno. Creo que esto es una lástima. El tema en cuestión no es si se participa en disputas políticas internas ni si se hacen discursos que puedan convenir al parlamento albanés aunque no se escuchen allí y no pretendo criticar al Gobierno a estas alturas para compensar las cosas. En el Grupo de la Alianza Progresista de los Socialistas y Demócratas en el Parlamento Europeo queremos que se encuentre una solución. Creemos que ambas partes, Gobierno y oposición, deberían cumplir con lo que han acordado, es decir, la creación de una comisión de investigación, y que deberían buscar una solución para el futuro, en especial, con relación al problema de las elecciones y su legitimidad.
Espero que finalmente Albania llegue a una situación en la que las elecciones no sean objeto de disputa, sino que sean aceptadas por ambas partes, Gobierno y oposición por igual. Eso es lo que se necesita. Esto no puede lograrse a través de una política partidista unilateral, sino que requiere una solución común del Gobierno y la oposición. Esto es algo que debería contar con el apoyo del Parlamento Europeo.
Stanimir Ilchev (ALDE). – (BG) Deseo felicitar a los autores de las dos propuestas de resolución porque presentan un sólo objetivo y una imagen precisa de la sociedad kosovar y albanesa en la coyuntura actual. Nuestra comprensión de esta imagen es que algunos problemas persisten, pero también hay otros nuevos. Esto es mérito de ambos autores.
Debemos tener en cuenta que Kosovo y, en mayor medida creo yo, Albania son sociedades de grandes contrastes. Nuestros esfuerzos deben centrarse en ayudarles a superar estos contrastes. Este punto de vista puede comprenderse con facilidad a lo largo de casi todo el texto de la propuesta de resolución.
Podemos ver que Albania disfruta de un crecimiento económico impresionante, mientras que, al mismo tiempo, existe una pobreza horrible en muchas regiones. Ha adoptado muchas leyes, pero su aplicación es deficiente. Hay diversidad en el sector de los medios de comunicación, pero estos son objeto de presiones políticas. Es posible que no tenga lugar la aplicación adecuada de reformas en la sociedad albanesa si continúa el notorio conflicto entre los dos grupos políticos principales.
Creo que el Comisario Füle debe dejarles muy claro que necesitan poner fin a este enfrentamiento por el poder y volver al enfoque parlamentario.
Lorenzo Fontana (EFD). – (IT) Señor Presidente, Señorías, los informes me producen la impresión de que empiezo a ver pruebas de europeanización a toda costa, un proceso que la UE intenta llevar a cabo en muchos países cuya situación geográfica es actualmente lo único europeo que tienen.
Creo que esto es lo que sucede con Albania, que, como se destaca en el informe objeto de este debate, no llega a los estándares de Estado miembro en varios aspectos. En concreto, me gustaría destacar los problemas relacionados con la gran economía sumergida. Las regiones del objetivo de convergencia reciben la mayor parte de los fondos concedidos por la Unión Europea y considerando que dichas regiones se determinan en función del PNB, simplemente imaginen las distorsiones que habrá, en detrimento de los países que combaten activamente la evasión fiscal, por ejemplo.
Además, la liberalización de visados significará la llegada de nueva mano de obra a Europa y en vista de la actual situación económica y las tasas de desempleo, desde luego las consecuencias no serían positivas.
Para terminar, espero que se consideren detenidamente las consecuencias de tener como Estado miembro de la Unión Europea a un país mayoritariamente musulmán que forma parte de la Organización de la Conferencia Islámica, muchos de cuyos principios entran en conflicto con las raíces cristianas de Europa.
Georgios Koumoutsakos (PPE). – (EL) Señor Presidente, todos nosotros deseamos y pretendemos mantener la paz, fortalecer la estabilidad y crear perspectivas de prosperidad, y al mismo tiempo, por supuesto, proteger los derechos de las minorías y respetar el patrimonio cultural de todos los habitantes de la zona y de Kosovo.
Es necesario que seamos sumamente prudentes en esta iniciativa. Kosovo es un asunto muy complicado. No deja lugar a los atajos. La realidad es que la independencia de Kosovo ha sido reconocida por 69 países y Taiwán desde 2008, un número muy inferior a lo que muchas personas esperaban. Cinco Estados miembros no la han reconocido. Al mismo tiempo, muchos consideran que el dictamen de la Tribunal Internacional sobre la legalidad de la declaración de independencia será muy cuestionado y confuso. La situación de seguridad en el norte de Mitrovica de nuevo está causando serias preocupaciones.
En esta situación, considero que la Unión Europea se arriesga a no alcanzar los nobles objetivos que todos apoyamos si sigue una política poco flexible y superficial. Por lo tanto, creo que sería conveniente que instáramos a Pristina y Belgrado a intentar negociar de nuevo, principalmente sobre las cuestiones que repercuten negativamente en su vida diaria y comunicaciones, como por ejemplo, gobierno local, aduanas, educación, energía, religión y cultura.
En lo que respecta a Albania, este país perdió la primera oleada de liberalización de visados en los Balcanes Occidentales y, a causa de su crisis política, se arriesga a perder una segunda oportunidad. Confío en que el liderazgo político de Albania, en especial el partido socialista y su Presidente, demuestren la seriedad y responsabilidad necesaria para resolver este problema lo antes posible.
Por último, felicito a mi honorable amigo, el señor Chountis, junto a los demás diputados, por su excelente informe.
Kristian Vigenin (S&D). – (EN) Señor Presidente, a pesar de que hoy celebramos un debate conjunto, Albania y Kosovo son muy diferentes. Lo que les une es la perspectiva europea, ofrecida y ratificada en varias ocasiones. Kosovo se está esforzando por crear instituciones estatales que funcionen correctamente, aunque cinco Estados miembros de la UE no han reconocido su independencia. No podemos presionar a estos países para que revisen su decisión, pero lo que deberíamos esperar es trabajar juntos para presentar un enfoque que permita a Kosovo avanzar irreversiblemente hacia su adhesión a la UE. El primer avance eficaz e importante debería ser el diálogo sobre los visados y el inicio de negociaciones sobre el acuerdo de estabilización y asociación, lo llamemos como lo llamemos.
En cuanto a Albania, la primera medida que se necesita con más urgencia es encontrar una solución a la permanente crisis política, que tiene la capacidad de bloquear el proceso de integración del país en la UE. En este sentido, si somos serios en nuestro apoyo a Albania, es nuestra responsabilidad común facilitar un acuerdo entre el Gobierno y la oposición. Quisiera expresar cierta decepción con respecto a nuestros colegas diputados del Partido Popular Europeo, donde bien no son lo bastante coherentes o su influencia política sobre el partido en el poder en Tirana y su líder, el señor Berisha, era simplemente demasiado limitada. No obstante, espero que las dos grandes familias políticas europeas reanuden sus iniciativas comunes con más éxito tras las vacaciones de verano.
Alf Svensson (PPE). – (SV) Señor Presidente, la resolución sobre Albania incluye algunos tragos bastante amargos, pero sin duda esto es totalmente correcto. Está bastante claro que Albania necesita una amplia y radical reorganización moral. Por supuesto, no debemos olvidar la historia de Albania. Visité Albania hace más de 40 años. Por aquel entonces, Enver Hoxha era el dictador de su pueblo. Era una dictadura tremendamente cruel: terror, opresión y corrupción, sin ningún sistema judicial, ni libertad de prensa ni libertad de expresión en absoluto. Hace 40 años, los estudiantes suecos —y no sólo los estudiantes e intelectuales suecos— consideraban a Albania un país arquetípico. Era entonces cuando Albania incluía el ateísmo en su constitución.
No creo que haya sido especialmente fácil para Sali Berisha poder desarrollar este país. Eso es algo que también debemos tener el valor de reconocer de vez en cuando. En mi opinión, lo que se necesita en un país que ha se ha visto demolido y destrozado, en cuanto a sus valores, es que consiga una base de valores firmes. Personalmente, espero que la Comisión se centre en que Albania adquiera un conjunto de valores sólido, porque sólo entonces, creo yo, podrá enfrentarse a los horribles problemas que tiene con la trata de personas y la esclavitud. No hay mayor vergüenza para un país que eso. Podemos hablar cuanto queramos sobre crecimiento económico y otras cosas, pero mientras haya personas que son vendidas y tratadas como mercancías, esto es una vergüenza que la Comisión debe hacer todo lo posible por erradicar.
Victor Boştinaru (S&D). – (EN) Señor Presidente, el Parlamento Europeo debería mantener una posición firme y común en cuanto a la crisis permanente de Albania.
Me preocupa profundamente la crisis institucional y política que Albania afronta desde hace ya un año, así como la actitud de la mayoría de las autoridades gobernantes, que están impidiendo todo acuerdo con la oposición y están dejando al país en un estado permanente de inestabilidad. Insto a la mayoría a negociar estrechamente con la oposición y aceptar el apoyo constante de los dos grupos políticos principales del Parlamento a fin de alcanzar una solución política —una solución positiva para el país— que asegure que Albania alcanza una solución estable para esta crisis y garantice que en todas las elecciones futuras, se respetará plenamente la voluntad democrática de los ciudadanos albaneses, al tiempo que se asegurará una actividad parlamentaria plena e ininterrumpida.
En última instancia, Primer Ministro Berisha, en lugar de intentar pronunciar mi nombre correctamente en el Parlamento albanés, usted debe darse cuenta de que está en juego la integración europea. La liberalización del régimen de visados podría ser sólo el primer paso pero los criterios de Copenhague son el prerrequisito.
György Schöpflin (PPE). – (EN) Señor Presidente, considero que el informe sobre Kosovo es muy positivo, pero de lo que quiero hablar es de que el gran impulso de la política europea hacia los Balcanes Occidentales se ha centrado durante mucho tiempo en el establecimiento de la democracia y la promoción de la estabilidad. Hay casos en los que ambas cosas no coinciden, donde la estabilidad realmente es el enemigo de la democracia porque in statu quo, aunque opresivo, garantiza la estabilidad a corto plazo.
Durante mucho tiempo, esta ha sido la situación de Yugoslavia en general y de Kosovo en particular. Se asumió de forma general que, incluso cuando Yugoslavia estaba lejos de ser una democracia, era mejor pasar por alto los defectos porque las alternativas eran peores. Con Kosovo, se ha demostrado lo contrario. El trato de la población albanesa por parte de las autoridades serbias llegó a ser intolerable y, en consecuencia, se produjo una sublevación.
El resultado fue una intervención occidental limitada, y entonces la aceptación reacia de la propuesta de que la población de Kosovo nunca aceptaría de nuevo estar bajo el dominio de Belgrado. Si Serbia reafirmaba su poder sobre Kosovo, el resultado sería más estabilidad y en consecuencia se declaró su independencia. Pero eso sólo puede ser un primer paso. Serbia todavía tiene que aceptar la pérdida de territorio, lo cual es difícil. Kosovo ha iniciado el proceso de construir una democracia, pero le llevará tiempo madurar, lo cual apenas sorprende, dada la traumática experiencia de su población, pero la negativa a reconocer la independencia de Kosovo no ayuda ni a la democracia ni a la estabilidad. El reconocimiento debe ser el camino a seguir.
PRESIDE: Diana WALLIS Vicepresidenta
Maria Eleni Koppa (S&D). – (EL) Señora Presidenta, me gustaría comenzar felicitando a mi honorable amigo, Nikolaos Chountis, por su excelente y equilibrado informe sobre Albania y a continuación me centraré en el informe sobre Kosovo.
El objetivo del Parlamento Europeo debería ser transmitir un mensaje positivo sobre las perspectivas europeas de Kosovo y, al mismo tiempo, reflejar claramente la situación de la Unión Europea sobre el problema principal del régimen.
En la actualidad, hay cinco Estados miembros que no han reconocido la independencia de Kosovo. Por supuesto, todos estamos de acuerdo en que no se puede dar marcha atrás y es necesario encontrar pronto una solución de común acuerdo. Nuestro objetivo, por lo tanto, era hallar un consenso, puntos en común. Encontramos estos puntos en común en la decisión sobre EULEX, que estipula que la misión sería neutral en la cuestión del régimen. Por lo tanto, no puedo estar de acuerdo con las dos ideas principales del informe Lunacek: en primer lugar, que los Estados miembros que no reconocen la independencia unilateral de Kosovo deberían aceptar lo que la mayoría considera un hecho consumado y, en segundo lugar, que sólo Serbia debería hacer concesiones.
Para alcanzar los acuerdos que son necesarios por su geografía y su futuro europeo común, ambas partes deberían ser constructivas. Además, seguimos estando firmemente convencidos de que la integración europea en el caso de los Balcanes Occidentales también requiere decisiones basadas en el acuerdo y no unilaterales.
Andrey Kovatchev (PPE). – (BG) Deseo agradecer a los dos ponentes y al señor Füle el trabajo que han realizado. Espero que los políticos de Albania estén dispuestos a trabajar en favor de un futuro europeo mejor para sus ciudadanos y a poner fin a la inestabilidad política del país.
La liberalización de visados debe completarse antes de finales de este año. Es muy importante para los albaneses y más importante para que los jóvenes de Albania puedan viajar y sentir que Europa está más cerca de ellos. En Albania se están logrando progresos tangibles en la lucha contra la corrupción. Sin embargo, todavía queda mucho por hacer, por supuesto. Se deben adoptar medidas contra la delincuencia organizada y mejorar las medidas contra el blanqueo de dinero, la trata de personas y el tráfico de drogas. Es importante llevar a cabo más reformas jurídicas y administrativas de gran repercusión y mejorar el Estado de Derecho.
En lo concerniente a Kosovo, la Unión Europea le debe ofrecer un plan de trabajo para introducir la liberalización del régimen de visados. Además de todos los beneficios, creo que esto también calmará la tensión interétnica. Transmitirá la señal de que la Unión Europea representa un futuro alcanzable para Kosovo.
Insto a la Unión Europea y a las autoridades de Kosovo a trabajar para conseguir la integración europea del país con mayor rapidez. Esto también implica, desde luego, proteger los derechos de todas las minorías nacionales, incluido su patrimonio cultural. La violencia es inaceptable. Kosovo debe fortalecer el Estado de Derecho en todo su territorio. Es importante que las autoridades kosovares adopten medidas adecuadas contra la delincuencia organizada y la corrupción generalizada en todas las esferas de la vida económica y política.
María Muñiz De Urquiza (S&D). – (ES) Señora Presidenta, en este momento de protagonismo internacional para los Balcanes, habría sido muy oportuna una resolución del Parlamento Europeo centrada en los problemas de los habitantes de Kosovo, pero lamentablemente corremos el riesgo de convertir esta oportunidad en un error si la resolución que aprobemos pasado mañana desconoce que una posición común solamente es posible si media una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas o hay un acuerdo entre las partes, es decir, si desconocemos que tiene que prevalecer la legalidad internacional, que no es una rama de la Estadística, sino que, en el caso del Derecho internacional, es muy precisa y no depende de mayorías, ni de porcentajes, ni de número de Estados miembros que reconocen un Estado o no, sino que establece unos criterios muy concretos.
También cometeremos un error si aprobamos una resolución que obvia que la ausencia de una posición común no impide el compromiso de la Unión Europea con Kosovo en el marco de un proceso de diálogo para la estabilización y la asociación.
La Unión Europea debe afianzar la estabilidad y la paz en Kosovo a través del apoyo a Estados multirreligiosos, pluripartidistas, multiétnicos, etcétera, y creo que a eso contribuyen los Estados que respetan la legalidad internacional.
Zoran Thaler (S&D). – (SL) Las funciones del Comisario Füle abarcan un área que va desde Marruecos hasta Azerbaiyán. Podemos ver que básicamente a lo que él presta más atención es a los Balcanes Occidentales. Le felicito por ello y se lo agradezco, porque eso es muy importante.
Los Balcanes Occidentales, desde Croacia hasta Albania, Kosovo y la Antigua República Yugoslava de Macedonia, se encuentran situados en mitad de la Unión Europea. Nosotros, la Unión Europea, debemos conseguir resultados por fin en nuestros esfuerzos por ayudar a estabilizarles y aumentar la calidad de vida de la población de esta región.
Los problemas de Kosovo no empezaron ayer. Eran irresolubles dentro de la Yugoslavia Federal, dentro de Serbia y ahora este asunto delicado ha pasado a las manos de la Unión Europea. Belgrado y Pristina deberían usar el dictamen de la Tribunal Internacional de Justicia que se espera a finales de este mes para iniciar negociaciones directas, sin ninguna condición previa.
Es realista esperar que Kosovo y Serbia se reúnan una vez que ambos países formen parte de la Unión Europea. Lo que ahora se necesita es fomentar las iniciativas constructivas de Belgrado y Pristina para asegurar que este proceso sólo lleve un breve periodo de entre cinco y diez años y no se prolongue durante otros veinte o treinta años.
Presidenta. – Ahora pasamos a la parte del debate de solicitud incidental de la palabra. Antes de que empecemos, debo decirles que un minuto significa un minuto. Llevamos retraso.
Raffaele Baldassarre (PPE). – (IT) Señora Presidenta, Señorías, Albania es un factor fundamental en la estabilidad de los Balcanes Occidentales y en el proceso de ampliación de la UE. Este país está tomando medidas importantes para desarrollar la democracia, mejorar las infraestructuras y la transición a una economía abierta y competitiva. No obstante, el camino de Albania hacia la Unión Europea todavía se encuentra bloqueado por la difícil estabilización del sistema de partidos, debido, en parte, al comportamiento obstruccionista de la oposición, que repercute negativamente en el desarrollo y la aprobación de reformas estructurales.
La economía todavía se encuentra frenada por un marco jurídico incierto, la ilegalidad generalizada, una gran economía sumergida y sistemas de energía y transporte inadecuados. Italia ha desempeñado, y todavía lo hace, un papel importante en la estabilización de Albania: Italia es su principal socio comercial, su principal inversor y su principal benefactor: en Italia viven 430 000 albaneses. Sin embargo, es necesario que estas formas de colaboración reciban apoyo de la Unión Europea, con cooperación a escala macrorregional, como por ejemplo, la cooperación adriática y jónica, para ayudar a preparar el terreno de Europa en el Mediterráneo.
Izaskun Bilbao Barandica (ALDE). – (ES) Señora Presidenta, el 17 de febrero de 2008, Kosovo declaró la independencia y sesenta y nueve países, entre ellos veintidós de la Unión Europea, han reconocido ya al nuevo país. Solo cinco no lo han hecho: uno de ellos es España, que ha perdido la oportunidad de aceptarlo durante su Presidencia europea, quizá condicionado por su realidad estatal.
Tenemos que apoyar la perspectiva europea de Kosovo como país independiente porque así lo ha decidido su ciudadanía. Tenemos que contribuir y colaborar con Kosovo para que consiga su estabilidad política y social, y trabajar con ellos para que mejoren sus relaciones con Serbia, para que consoliden sus instituciones y su democracia y para su posible integración en la Unión Europea.
Pido especialmente a España que reconozca la independencia de Kosovo porque así lo ha decidido su ciudadanía y así lo ha reconocido también Europa.
Jaroslav Paška (EFD). – (SK) En mi opinión, las discusiones sobre Kosovo, que es la región del sur del Estado de Serbia, son problemáticas desde la perspectiva del Derecho internacional, porque estamos a la espera del dictamen de la Tribunal Internacional de Justicia con respecto a la legitimidad del estatus de Kosovo en el entorno internacional. Ni el Gobierno serbio ni muchos Estados europeos soberanos han reconocido todavía la legitimidad del proceso mediante el cual Kosovo se embarcó en su conflictivo viaje hacia la administración autónoma de la región.
Sin duda, Kosovo puede llegar a formar parte de la Unión Europea como parte integral de Serbia, cuya legitimidad como Estado europeo, independiente y soberano creo que nadie pone en duda.
Los intentos por parte de grupos nacionalistas arbitrarios —como los albaneses y otros nacionalistas— de fragmentar Estados democráticos que funcionan sólo provocan sufrimiento entre los habitantes. La población kosovar tiene el mismo derecho a participar en la administración del Estado serbio como cualquier minoría étnica en cualquier país de la Unión Europea.
Creo firmemente que no deberíamos mantener a serbios y kosovares enfrentados, sino ayudarles a encontrar un camino europeo común.
László Tőkés (PPE). – (HU) El Presidente Herman Van Rompuy recientemente ha recorrido los países de los Balcanes Occidentales. Coincidió en que la integración de los países de los Balcanes Occidentales es crucial para el futuro de la región. En su reunión con el Presidente Boris Tadic, el Presidente serbio expresó su decepción con la ralentización del proceso de integración. Bueno, si el proceso de integración es tan importante y verdaderamente se ha ralentizado, los países afectados, Kosovo y Albania, deberían contribuir a acelerar el proceso. Deben cumplir su parte, deben conciliar sus diferencias con Serbia e iniciar negociaciones y diálogos para contribuir a que se agilice el proceso de integración. Al mismo tiempo, Europa no debe emplear un doble rasero. Los visados también deberían introducirse sucesivamente en los demás países que lo merezcan.
Elena Băsescu (PPE). – (RO) Considero que el informe elaborado por la señora Lunacek no refleja la posición de todos los Estados miembros de la Unión Europea. Permítanme recordarles que cinco de ellos, Chipre, Eslovaquia, España, Grecia y Rumanía, no han reconocido la independencia de Kosovo.
Mi país apoya el proceso de introducir estabilidad y democracia en Kosovo mediante la participación de fuerzas militares y policiales rumanas en las misiones EULEX y KFOR. Sin embargo, Rumanía no reconoce la declaración de independencia proclamada por Pristina, teniendo en cuenta los principios del Derecho internacional, que establecen el respeto por las fronteras y soberanía de Serbia.
Creo que reconocer la independencia de Kosovo podría sentar un precedente peligroso, dado que no se dispone de ninguna resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas al respecto. En Kosovo también hay serios problemas en relación con el alto nivel de corrupción y delincuencia organizada.
Quisiera terminar diciendo que, por estos motivos, no apoyaré el informe sobre el proceso de integración europea de Kosovo.
Doris Pack (PPE). – (DE) Señora Presidenta, señor Swoboda, debo contradecirle. No he dicho nada a título personal, pero he citado a nuestro colega socialista de Albania. He citado literalmente lo que se publicó en todos los periódicos. No he dicho nada más, ni he elogiado al Gobierno, que se compone de socialdemócratas y demócratas, sino que simplemente he declarado que supervisaríamos detenidamente lo que hiciera y lo que hubiera hecho.
También me gustaría decir al señor Rouček que lo que él pide ya se ha hecho. La comisión de investigación se ha creado y tiene una presidencia socialista; de hecho, ustedes son mayoría en esta comisión. En segundo lugar, la ley electoral, que se debe modificar por necesidad, según ha acordado el Gobierno o grupo que gobierna, sólo puede modificarse si los diputados socialistas asisten al parlamento y cooperan. Usted no puede pedirle al Gobierno algo que ya ha cumplido y que la oposición se niega a aceptar porque está boicoteando la labor parlamentaria.
Creo que deberíamos ser un poco más serios en esto. Soy totalmente imparcial. Me he pasado toda mi vida luchando por la causa justa de Albania, es decir, por los intereses de la población, no los intereses de un partido político. Seguiré este camino mientras sea diputada de esta Cámara, señor Swoboda. Usted hacía lo mismo al principio, pero por desgracia esto ya no es así, lo cual es lamentable.
Csaba Sógor (PPE). – (HU) Los Estados de los Balcanes Occidentales se encuentran en una situación sumamente difícil. El factor étnico y las relaciones entre la mayoría y las minorías repercuten negativamente en el desarrollo de la región. Está claro que la Unión Europea no puede ignorar los problemas de estos países puesto que la región tiene una importancia especial para el proceso de ampliación. Sin embargo, resulta desafortunado que, aunque estamos de acuerdo sobre la importancia de tener una voz común en política exterior y una posición común por parte de los Estados miembros con el fin de mejorar el papel internacional de la UE, lo que vemos es que Kosovo, el Estado más joven del mundo, todavía no ha sido reconocido por cinco Estados miembros de la UE. El futuro de Albania y Kosovo y también el de Bosnia y Herzegovina, Montenegro y Serbia depende de las circunstancias de su adhesión a la Unión Europea en un futuro próximo o lejano. Por nuestro interés común, debemos asegurarnos de que esta integración tenga un feliz desenlace. Por eso es imperativo que alcancemos una posición común acerca de los problemas más importantes.
Kristian Vigenin (S&D). – (EN) Señora Presidenta, simplemente quisiera responder a la segunda intervención de la señora Pack en este debate. Este comportamiento no ayuda a encontrar una solución. Con sus discursos y la manera en que responde, usted anima a Berisha y el partido en el poder a rechazar toda reconciliación con la oposición. No creo que eso sea responsable. Por lo tanto, le insto a usted y a su grupo político a cambiar el tono e intentar trabajar con nosotros para hallar una solución, en lugar de animar a Berisha a continuar como sabemos que puede hacerlo.
Presidenta. – No puedo conceder más peticiones de la palabra. He sobrepasado la cantidad habitual.
Hannes Swoboda (S&D). – (EN) Señora Presidenta, no deseo hacer ninguna observación sobre la declaración de Doris Pack.
Tenemos dos resoluciones y dos autores: la señora Lunacek y el señor Chountis. Son resoluciones muy positivas y el resultado de mucho trabajo. No entiendo por qué este Parlamento no acepta que estas son dos resoluciones con dos autores y que nosotros siempre tenemos que dar un gran rodeo y pedir una declaración oficial del señor Comisario para abordarlas.
Agradecería que la Presidencia del Parlamento pudiera reconsiderar cómo se abordan estas resoluciones en el futuro.
(Aplausos)
Štefan Füle, Miembro de la Comisión. – (EN) Señora Presidenta, me gustaría hacer un par de puntualizaciones sobre un debate excelente basado en resoluciones excelentes.
En primer lugar, en referencia al señor Tőkés, hacia el final del debate estamos hablando sobre el proceso de ampliación en general, así que me parece oportuno decir que lo que necesitamos para ese proceso de ampliación es presentar candidatos que estén completamente preparados para asumir todas las responsabilidades que implica ser miembro de la Unión Europea.
Necesitamos dos cosas. Necesitamos prestar atención más rigurosamente a las condiciones y, al mismo tiempo, una dirección política de este proceso, porque la ampliación no es sólo un proceso técnico. También se trata de un proceso político y sí, señor Tőkés, me aseguraré de que no sólo los Estados miembros forman parte de la dirección política, sino también los países aspirantes y candidatos. Ellos tienen mucho que decir al respecto.
También estoy de acuerdo con el señor Svensson en que, al tiempo que se cuenta el número de resoluciones aprobadas y el número de instituciones creadas, deberíamos mantener una perspectiva más amplia. Esa perspectiva más amplia es que estamos haciendo todo eso para establecer una base más firme de nuestros valores. Ninguna legislación ni ninguna de las nuevas instituciones resolverá los problemas en los que nos estamos centrando en las discusiones de hoy, pero esta base firme de nuestros valores será un cimiento adecuado para resolver y tratar estos problemas.
Esto me lleva a otro punto. Permítanme aprovechar esta ocasión para expresar de nuevo mi agradecimiento por la iniciativa de los honorables diputados, el señor Daul y el señor Schulz. Creo que es singular y sin precedentes y el Consejo Europeo ha tomado buena nota de ello. Espero que este Parlamento, a través de este tipo de iniciativa, continúe ofreciéndose a ser el lugar en el que podamos ayudar a quienes, por la razón que sea, no puedan resolver sus problemas nacionales. Les insto a mantener el consenso respecto a estos asuntos porque este es un prerrequisito para que ustedes desempeñen un papel muy importante y muy útil.
He escuchado las peticiones del señor Ilchev en referencia a que los partidos deberían sentarse otra vez a la mesa de negociaciones. Creo que así deberían hacerlo. No hemos podido resolver estos problemas. Albania se encuentra en un punto muerto político. Me gustaría mucho que los partidos políticos albaneses, en lugar de mirar hacia el pasado, miraran al futuro y se aseguraran —como ha dicho el señor Swoboda con toda la razón— de que en las próximas elecciones, no nos veamos otra vez ante la misma situación, en la que quienes han perdido cuestionan los resultados.
En cuanto a la cuestión de las vendettas —rencillas violentas entre familias— este es un fenómeno que la Comisión está siguiendo muy de cerca. Es un fenómeno que me preocupa mucho, en especial por las consecuencias para las familias y, sobre todo, para los niños. Es cierto que este fenómeno ha disminuido durante los últimos años, pero queda por adoptar una estrategia coordinada que haga frente a las rencillas violentas entre familias, incluidos los delitos cometidos con arreglo al derecho consuetudinario. Les enviaré información más detallada sobre lo que la Comisión está haciendo en este sentido.
El señor Kacin se ha referido al violento tiroteo del señor Miletić y otros han mencionado el incidente violento sucedido recientemente en Mitrovica. Los Estados miembros han condenado la violencia y han dejado absolutamente claro que, para lograr los objetivos en Kosovo, la violencia no puede tolerarse.
La baronesa Ashton, la Alta Representante y Vicepresidenta de la Comisión, estuvo discutiendo con los líderes en Belgrado y en Pristina para transmitir un mensaje firme sobre la moderación que hay que demostrar en este momento importante en que se acerca el dictamen de la Tribunal Internacional de Justicia sobre Kosovo.
Presidenta. – He recibido dos propuestas de resolución(1) presentadas de conformidad con el apartado 2 del artículo 110 del Reglamento.
El debate conjunto queda cerrado.
La votación tendrá lugar mañana (jueves, 8 de julio de 2010).
Declaraciones por escrito (artículo 149 del Reglamento)
Jiří Maštálka (GUE/NGL), por escrito. – (CS) Señorías, en los documentos de referencia para nuestros debates, a menudo existe un vínculo inadvertido entre el tendencioso análisis de la situación, las opiniones de los autores y las vagas recomendaciones. Me gustaría puntualizar algunos hechos: primero, la independencia de Kosovo se preparó y se declaró en contravención del Derecho internacional. La base en este caso es la Resolución 1244 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, según la cual Kosovo sigue formando parte de Serbia. La secesión de Kosovo de Serbia es consecuencia de las oscuras prácticas de diplomacia secreta, basadas en una política de doble rasero. Segundo, la creación de lo que son, en esencia, dos Estados puramente albaneses desde el punto de vista étnico, uno junto a otro, sólo es un preludio temporal de la creación de una Albania más grande. La unión de Kosovo y Albania siempre fue el objetivo de los separatistas de Kosovo. Tercero, la independencia de Kosovo ha sido reconocida sólo por unos pocos países de la Unión Europea; principalmente aquellos que tienen la mayor parte de culpa por el bombardeo ilegal de Yugoslavia en 1999. Cuarto, el supuesto Kosovo independiente es completamente dependiente. Se ha creado un Estado artificial, no histórico, que no es viable desde el punto de vista económico, político ni militar. Hoy en día existe sólo gracias a las donaciones exteriores y a las actividades delictivas internacionales. La ampliación de la UE para incluir ciertos Estados balcánicos sólo ofrece una tapadera para el intento de los «padrinos» kosovares de conseguir subvenciones de los fondos de la UE para Pristina. No importa lo bien que nosotros —el Parlamento Europeo, la Unión en su conjunto y Europa en general— logremos resolver el problema de Kosovo, el hecho fundamental sigue igual: la secesión de Kosovo contraviene el Derecho internacional.
Iuliu Winkler (PPE), por escrito. – (RO) El debate de hoy ratifica la posición del Parlamento Europeo de que la estabilidad regional en los Balcanes Occidentales y ofrecer una perspectiva definitiva de integración a todos los países de esta región son prioridades de la UE. Estoy convencido de que el futuro de los Estados de los Balcanes Occidentales reside en la UE. No obstante, la duración del proceso de integración depende de cómo van a afrontar los problemas heredados del pasado mientras miran hacia el futuro europeo común.
En relación a Kosovo, al tiempo que se reconoce la evolución positiva que ha llevado a cabo durante estos dos años desde que declaró su independencia, debe decirse que 2010 es crucial para intensificar las reformas democráticas, impulsar la actividad económica, consolidar y descentralizar la administración, con objeto de asegurar un respeto total por los derechos de las comunidades de minoría étnica. El grado en que un futuro en la UE llegue a ser una realidad para Kosovo depende, en gran medida, de los esfuerzos que el Gobierno y la nueva administración realicen para establecer la democracia y avanzar en el proceso de estabilización y asociación.
Mejorar la cooperación regional contribuye positivamente a hacer que la política de ampliación de la UE en los Balcanes Occidentales llegue a ser eficaz. Estos esfuerzos sólo tendrán éxito si cuentan con el amplio apoyo de la UE, lo cual también significa que todos los Estados miembros reconozcan las nuevas realidades geopolíticas.