Miguel Urbán Crespo, autor. – Señor presidente, las minorías étnicas y religiosas en la India son sistemáticamente discriminadas, estigmatizadas y perseguidas por la extrema derecha de Modi. Lo mismo ocurre con quienes critican al Gobierno: hay decenas de defensores de derechos humanos encarcelados, aunque este Parlamento no los mencione.
Lo que ocurre en Manipur también es el resultado de las políticas xenófobas del Gobierno indio, el mismo Gobierno que se dedica a enviar amenazas veladas para que debates como este no se produzcan en el Parlamento.
Ya está bien de diplomacia silenciosa: es hora de condenar alto y claro los abusos sistemáticos cometidos por el Gobierno indio, exigir la libertad de todas y todos los presos políticos y condicionar las relaciones comerciales y políticas al respeto a los derechos humanos. En definitiva, es hora de mandar un mensaje alto y claro de apoyo al pueblo indio.