El Presidente efectúa una declaración sobre las recientes inundaciones acaecidas en Rumanía, Asturias y otras regiones europeas.
El Presidente denuncia el tratamiento dado a miembros de la comunidad bahaí por parte de las autoridades iraníes y pide a estas últimas que respeten las normas internacionales relativas a los derechos de las minorías. Condena asimismo la pena de muerte aplicada a menores de edad en este país.
El Presidente evoca el décimo aniversario de la muerte de Jan Karski, el primero en informar a los aliados sobre el exterminio del pueblo judío en Europa.