PROPUESTA DE RESOLUCIÓN COMÚN sobre los territorios georgianos ocupados diez años después de la invasión rusa
12.6.2018 - (2018/2741(RSP))
para sustituir a las propuestas de Resolución siguientes:
B8‑0275/2018 (PPE)
B8‑0276/2018 (ECR)
B8‑0277/2018 (ALDE)
B8‑0279/2018 (Verts/ALE)
B8‑0285/2018 (S&D)
Jaromír Štětina, Cristian Dan Preda, José Ignacio Salafranca Sánchez-Neyra, David McAllister, Dubravka Šuica, Sandra Kalniete, Laima Liucija Andrikienė, Michał Boni, Elmar Brok, Michael Gahler, Andrzej Grzyb, Gunnar Hökmark, Tunne Kelam, Julia Pitera, Fernando Ruas, Michaela Šojdrová, Željana Zovko en nombre del Grupo PPE
Victor Boştinaru, Clare Moody en nombre del Grupo S&D
Charles Tannock, Sajjad Karim, Jana Žitňanská, Jadwiga Wiśniewska, Kosma Złotowski, Anna Elżbieta Fotyga, Ruža Tomašić en nombre del Grupo ECR
Javier Nart, Petras Auštrevičius, Beatriz Becerra Basterrechea, Dita Charanzová, Gérard Deprez, Martina Dlabajová, Marian Harkin, Ivan Jakovčić, Petr Ježek, Ilhan Kyuchyuk, Valentinas Mazuronis, Louis Michel, Urmas Paet, Maite Pagazaurtundúa Ruiz, Jozo Radoš, Frédérique Ries, Robert Rochefort, Marietje Schaake, Jasenko Selimovic, Viktor Uspaskich, Ivo Vajgl, Cecilia Wikström en nombre del Grupo ALDE
Heidi Hautala, Rebecca Harms en nombre del Grupo Verts/ALE
Resolución del Parlamento Europeo sobre los territorios georgianos ocupados diez años después de la invasión rusa
El Parlamento Europeo,
– Vistos el Acuerdo de alto el fuego, de 12 de agosto de 2008, en el que la Unión actuó como mediador y que firmaron Georgia y la Federación de Rusia, y el Acuerdo de aplicación, de 8 de septiembre de 2008,
– Vista su Resolución, de 21 de enero de 2016, sobre Acuerdos de Asociación / Zonas de libre comercio de alcance amplio y profundo con Georgia, Moldavia y Ucrania[1],
– Vista su Resolución, de 13 de diciembre de 2017, sobre el Informe anual sobre la aplicación de la política exterior y de seguridad común[2],
– Vistas las declaraciones conjuntas de las cumbres de la Asociación Oriental, en particular la acordada en 2017 en Bruselas,
– Vistas las Comunicaciones conjuntas de la Comisión y el Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) sobre la Política Europea de Vecindad (PEV), en particular el informe de 18 de mayo de 2017 sobre la aplicación de la revisión de la Política Europea de Vecindad (JOIN(2017)0018) y el documento de trabajo conjunto de 9 de junio de 2017 titulado «Eastern Partnership – 20 Deliverables for 2020: Focusing on key priorities and tangible results» (Asociación Oriental – 20 objetivos para 2020: Centrarse en las prioridades clave y los resultados tangibles) (SWD(2017)0300), así como la Comunicación de 2016 sobre la Estrategia Global sobre Política Exterior y de Seguridad de la Unión Europea,
– Vistas sus anteriores resoluciones sobre la situación en la vecindad oriental, en particular su Recomendación, de 15 de noviembre de 2017, al Consejo, a la Comisión y al SEAE sobre la Asociación Oriental en la fase previa a la cumbre de noviembre de 2017[3],
– Visto el despliegue de la Misión de Observación de la Unión Europea (EUMM) en Georgia el 15 de septiembre de 2008,
– Visto el informe de la Misión de Investigación Internacional Independiente sobre el Conflicto de Georgia de 2009 encabezada por Heidi Tagliavini,
– Visto el artículo 123, apartados 2 y 4, de su Reglamento interno,
A. Considerando que Georgia está celebrando el centenario de la fundación de la primera república democrática de Georgia en 1918, y se enorgullece con razón de sus logros contemporáneos;
B. Considerando que la Unión respalda firmemente la soberanía y la integridad territorial de Georgia dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente;
C. Considerando que diez años después de la agresión militar rusa a Georgia de agosto de 2008, la Federación de Rusia continúa ocupando ilegalmente los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur, lo que menoscaba el Derecho internacional y el sistema internacional basado en normas; que los llamados «tratados de integración y alianza», firmados entre Rusia y Abjasia y Osetia del Sur en 2014 y 2015, constituyen claras violaciones del Derecho internacional, de los principios de la OSCE y de los compromisos internacionales suscritos por Rusia; que la Unión no reconoce el marco de las supuestas elecciones y del referéndum celebrados por separatistas apoyados por Rusia en las regiones georgianas de Abjasia y Osetia del Sur en 2016 y 2017;
D. Considerando que la Unión sigue sólidamente comprometida con una resolución pacífica del conflicto ruso-georgiano, en pleno cumplimiento de las normas y principios fundamentales del Derecho internacional;
E. Considerando que Rusia está reforzando constantemente su presencia militar ilegal en los territorios ocupados de Georgia mediante la construcción de nuevas bases, la llegada de nuevas tropas y equipos, y la realización de ejercicios militares;
F. Considerando que Rusia continúa incumpliendo sus obligaciones internacionales y se niega a aplicar plenamente el Acuerdo de alto el fuego de 12 de agosto de 2008, en el que la UE actuó como mediador;
G. Considerando que Rusia sigue manteniendo aisladas a Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur del resto del país mediante el cierre de más pasos fronterizos, la colocación de barreras físicas a lo largo de la línea de demarcación administrativa y la ejecución de una campaña destinada a erradicar la cultura georgiana;
H. Considerando que esta línea está siendo desplazada, de forma lenta pero segura, hacia el interior del territorio controlado por Tiflis, en un proceso conocido como «definición de fronteras» que la sitúa en algunos lugares muy cerca de infraestructuras críticas tales como autopistas y gasoductos;
I. Considerando que cientos de miles de desplazados internos y refugiados expulsados por la fuerza de los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur como consecuencia de varias oleadas de limpieza étnica siguen estando privados de su derecho fundamental a un retorno seguro y digno a sus hogares;
J. Considerando que en las regiones ocupadas de Georgia se están violando derechos humanos fundamentales, incluidos el derecho a la libertad de circulación y de residencia, a la propiedad y al acceso a la educación en la lengua materna; que siguen teniendo lugar detenciones ilegales y secuestros;
K. Considerando que recae en la Federación de Rusia, como potencia que ejerce el control efectivo sobre los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur, la plena responsabilidad por las graves violaciones de los derechos humanos y la situación humanitaria sobre el terreno;
L. Considerando que la invasión de 2008 fue el primer ataque importante de Rusia abiertamente en contra del orden europeo; que fue seguido más tarde por otros, como la anexión de Crimea y la guerra en Ucrania oriental;
M. Considerando que los desplazados internos georgianos Archil Tatunashvili, Giga Otjozoria y Davit Basharuli perdieron la vida como consecuencia de las brutales acciones ilegales de los regímenes de ocupación rusos en Sujumi y Tsjinvali;
N. Considerando que la Corte Penal Internacional (CPI) ha iniciado una investigación de los crímenes de guerra y los crímenes de lesa humanidad cometidos presuntamente durante el conflicto;
O. Considerando que una visita ad hoc conjunta a Georgia el 12 de agosto de 2008 de los líderes de Europa Oriental Lech Kaczyński, presidente de Polonia, Toomas Hendrik Ilves, presidente de Estonia, Valdas Adamkus, presidente de Lituania, Ivars Godmanis, primer ministro de Letonia, y Viktor Yushchenko, presidente of Ucrania, es percibida por muchos como un factor esencial que impidió el avance ruso hacia Tiflis, cuando las tropas se encontraban a tal solo 50 km de la capital georgiana, y facilitó la intermediación en el alto el fuego por parte de la Presidencia francesa del Consejo de la UE;
P. Considerando que la Federación de Rusia sigue denegando el acceso de la EUMM a los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur, violando así el Acuerdo de alto el fuego de 12 de agosto de 2008, logrado con la mediación de la UE, lo que obstaculiza la capacidad de la misión para cumplir plenamente su mandato;
1. Reitera su apoyo inequívoco a la soberanía e integridad territorial de Georgia; reconoce que los principios consagrados en la Carta de las Naciones Unidas, el Acta final de Helsinki de 1975 y la Carta de París de la OSCE de 1990 sientan las bases de un continente europeo en paz;
2. Reitera que la soberanía, la independencia y la resolución pacífica de litigios son principios esenciales del orden europeo en materia de seguridad; subraya que la resolución de conflictos en Georgia resulta fundamental para reforzar la seguridad y estabilidad del conjunto del continente europeo; estima que dichos conflictos y la continua ocupación de territorios georgianos siguen representando una posible amenaza para la soberanía de otros países de Europa;
3. Pide a la Federación de Rusia que revoque su decisión de reconocer la denominada independencia de los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur; condena la decisión de Venezuela, Nicaragua, Siria y Nauru de reconocer a Abjasia y Osetia del Sur y pide que se revoque dicho reconocimiento;
4. Destaca la necesidad de que la Federación de Rusia cumpla incondicionalmente todas las disposiciones del Acuerdo de alto el fuego de 12 de agosto de 2008, en particular el compromiso de retirar todos sus efectivos militares del territorio de Georgia;
5. Insta a la Federación de Rusia a que ponga fin a la ocupación de los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur y respete plenamente la soberanía y la integridad territorial de Georgia, así como la inviolabilidad de sus fronteras reconocidas internacionalmente, y que paralice la integración de facto de ambas regiones en la administración rusa;
6. Confirma el compromiso firme de la Unión de contribuir a la resolución pacífica del conflicto entre Rusia y Georgia recurriendo a todos los instrumentos que están a su disposición en el marco de un enfoque global, que incluye al representante especial de la Unión para el Cáucaso Meridional y la crisis en Georgia, a su copresidencia de las conversaciones internacionales de Ginebra, a la EUMM Georgia y a la política de no reconocimiento y compromiso;
7. Insta al Gobierno de Georgia a que siga cooperando con la CPI facilitando las investigaciones de la Oficina del Fiscal de la CPI, así como garantizando que el Registro de la CPI pueda cumplir su mandato en términos de alcance y participación de las víctimas;
8. Pide a la Federación de Rusia que permita el acceso incondicional de la EUMM a los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur, de conformidad con su mandato; recuerda que la EUMM, que constituye la única presencia internacional permanente sobre el terreno, facilita información imparcial sobre la situación a lo largo de la línea de demarcación administrativa, y solicita la ampliación de su mandato después del 14 de diciembre de 2018;
9. Pide a la Federación de Rusia que ponga fin a la conversión de la línea de demarcación administrativa en una frontera, objetivo que intenta lograr con la instalación de alambradas y otras barreras artificiales; pide asimismo que se ponga fin a la injerencia en el territorio controlado por el Gobierno de Georgia y a la ampliación adicional de la línea de demarcación administrativa, que impide deliberadamente los contactos interpersonales y aísla a la población de ambas regiones ocupadas;
10. Reprueba la destrucción deliberada de docenas de pueblos e iglesias georgianos en las regiones ocupadas de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur, así como el intento deliberado de eliminar cualquier vestigio de la cultura e historia georgianas de los territorios ocupados, y condena las iniciativas antagónicas y divisorias, como el llamado referéndum de 2017 para la aprobación de un cambio de nombre de la región de Tsjinvali/Osetia del Sur;
11. Pide a la Federación de Rusia que respete el principio de la resolución pacífica de los conflictos y que se adhiera al compromiso unilateral de Georgia de no hacer uso de la fuerza, tal y como afirmó el presidente de Georgia en su discurso ante el Parlamento Europeo de 23 de noviembre de 2010;
12. Celebra la nueva iniciativa de paz del Gobierno de Georgia, denominada «Un paso hacia un futuro mejor», destinada a mejorar las condiciones humanitarias y socioeconómicas de la población que reside en los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur y a impulsar los contactos interpersonales y la confianza entre comunidades divididas;
13. Recuerda a la Federación de Rusia, como potencia ocupante, sus obligaciones con respecto a la población y que deben cesar las violaciones de los derechos humanos, las restricciones a la libertad de circulación y de residencia, la discriminación por razón de origen étnico, y la violación del derecho a la propiedad y de acceso a la educación en lengua materna en los territorios ocupados de Georgia;
14. Pide, además, a la Federación de Rusia que ponga fin a la impunidad y a los crímenes por motivos étnicos en los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur, así como que elimine cualquier obstáculo que impida que los autores de los asesinatos de los desplazados internos georgianos Archil Tatunashvili, Giga Otjozoria y Davit Basharuli respondan ante la justicia;
15. Acoge con satisfacción la aprobación por el Parlamento de Georgia de la resolución bipartita que establece una «lista negra» de autores y responsables del encubrimiento de tales violaciones (lista Otjozoria-Tatunashvili) y pide a los Estados miembros y al Consejo que impongan sanciones a escala nacional o de la Unión sobre quienes figuran o puedan figurar en dicha lista;
16. Insta a la Federación de Rusia a que permita el retorno seguro y digno de los desplazados internos y refugiados a sus hogares, así como que garantice el acceso sin trabas sobre el terreno de mecanismos internacionales de supervisión de los derechos humanos;
17. Reitera su condena de las políticas subversivas de propaganda, desinformación e infiltración de las redes sociales destinadas a debilitar la democracia y la sociedad en Georgia mediante el descrédito de las instituciones, la manipulación de la opinión pública, la propagación de relatos inciertos, el avivamiento de las tensiones sociales y el fomento de la desconfianza general en los medios; denuncia, en este sentido, la guerra informativa lanzada por Rusia, que se sirve de los medios de comunicación controlados por el aparato estatal para difundir deliberadamente noticias falsas e influir así en la política nacional y socavar los procesos de integración europea;
18. Subraya que la comunidad internacional debe mantener una posición coherente, coordinada, unida y firme contra la ocupación y anexión política rusas, como único medio de garantizar la resolución pacífica de los conflictos en Georgia y la prevención de conflictos similares en los países vecinos;
19. Pide a las instituciones de la Unión que adopten un planteamiento coherente con el del Parlamento Europeo y las políticas de los Parlamentos nacionales de los Estados miembros, utilizando términos más claros y precisos para definir la agresión rusa contra Georgia como una ocupación por la Federación de Rusia de los territorios georgianos de Abjasia y la región de Tsjinvali/Osetia del Sur;
20. Encarga a su presidente que transmita la presente Resolución al Consejo, a la Comisión, al Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), a la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), a los Gobiernos y los Parlamentos de los Estados miembros, a los Gobiernos y los Parlamentos de los países de la Asociación Oriental, y al Gobierno y al Parlamento de la Federación de Rusia.
- [1] DO C 11 de 12.1.2018, p. 82.
- [2] Textos Aprobados, P8_TA(2017)0493.
- [3] Textos Aprobados, P8_TA(2017)0440.