Índice 
 Anterior 
 Siguiente 
 Texto íntegro 
Procedimiento : 2009/2198(INI)
Ciclo de vida en sesión
Ciclo relativo al documento : A7-0026/2010

Textos presentados :

A7-0026/2010

Debates :

PV 10/03/2010 - 6
CRE 10/03/2010 - 6

Votaciones :

PV 10/03/2010 - 7.10
CRE 10/03/2010 - 7.10
Explicaciones de voto
Explicaciones de voto

Textos aprobados :

P7_TA(2010)0061

Textos aprobados
PDF 255kWORD 107k
Miércoles 10 de marzo de 2010 - Estrasburgo
Aplicación de la Estrategia Europea de Seguridad y la Política Común de Seguridad y Defensa
P7_TA(2010)0061A7-0026/2010

Resolución del Parlamento Europeo, de 10 de marzo de 2010, sobre la aplicación de la Estrategia Europea de Seguridad y la Política Común de Seguridad y Defensa (2009/2198(INI))

El Parlamento Europeo,

–  Visto el Título V del Tratado de la Unión Europea, el artículo 346 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, y los Protocolos 10 y 11,

–  Vista la Estrategia Europea de Seguridad (EES) titulada «Una Europa segura en un mundo mejor», aprobada por el Consejo Europeo el 12 de diciembre de 2003,

–  Visto el Informe sobre la aplicación de la EES titulado «Ofrecer seguridad en un mundo en evolución», aprobado por el Consejo Europeo el 12 de diciembre 2008,

–  Vistos los informes de la Presidencia del Consejo de la UE sobre la Política Europea de Seguridad y Defensa (PESD), de 9 de diciembre de 2008 y 16 de junio de 2009,

–  Vistas las conclusiones sobre la PESD y la Declaración titulada «Diez años de la PESD: desafíos y oportunidades», adoptadas por el Consejo el 17 de noviembre de 2009,

–  Vistas sus resoluciones anteriores al respecto, en particular, la de 14 de abril de 2005 sobre la Estrategia Europea de Seguridad(1), de 16 de noviembre de 2006 sobre la aplicación de la Estrategia Europea de Seguridad en el contexto de la PESD(2), de 5 de junio de 2008 sobre la aplicación de la Estrategia Europea de Seguridad y la PESD(3), y de 19 de febrero de 2009 sobre la Estrategia Europea de Seguridad y la PESD(4),

–  Vista su Resolución, de 19 de febrero de 2009, sobre la función de la OTAN en la arquitectura de seguridad de la UE(5);

–  Vista su Resolución, de 26 de noviembre de 2009, sobre una solución política al problema de la piratería frente a las costas de Somalia(6),

–  Visto el Canje de Notas entre la Unión Europea y los Gobiernos de Kenia y de la República de Seychelles, sobre la entrega a estos países de sospechosos de piratería y robo a mano armada detenidos por EUNAVFOR en la zona de operaciones,

–  Vista su Resolución, de 22 de octubre de 2009, sobre los aspectos institucionales relativos a la creación del Servicio Europeo de Acción Exterior(7),

–  Visto el artículo 48 del Reglamento,

–  Visto el informe de la Comisión de Asuntos Exteriores (A7-0026/2010),

Estrategia Europea de Seguridad: enfoque integral

1.  Recuerda que en la Estrategia Europea de Seguridad (EES) y en su informe de aplicación se destacan los principales desafíos y amenazas a los que se enfrenta la Unión Europea, a saber:

   proliferación de armas de destrucción masiva,
   terrorismo y delincuencia organizada,
   conflictos regionales,
   descomposición de los Estados,
   piratería marítima,
   armas pequeñas y armas ligeras, municiones de racimo y minas terrestres,
   seguridad energética,
   consecuencias del cambio climático y de las catástrofes naturales,
   ciberseguridad,
   pobreza;

2.  Subraya que, a través de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) y la Política Común de Seguridad y Defensa (PCSD), la Unión actúa para hacer frente a los desafíos y las amenazas que se plantean en la EES, contribuyendo así a mejorar la seguridad de los ciudadanos europeos;

3.  Destaca que la Unión debe potenciar su autonomía estratégica mediante una política exterior, de seguridad y de defensa (PESD) sólida y eficaz, orientada a preservar la paz, prevenir los conflictos, reforzar la seguridad internacional, proteger la seguridad de los ciudadanos europeos y de los ciudadanos afectados por las misiones de la PCSD, defender sus intereses en el mundo y sostener sus valores fundacionales, contribuyendo al mismo tiempo a un multilateralismo eficaz en apoyo del Derecho internacional, y favoreciendo el respeto de los derechos humanos y los valores democráticos en todo el mundo, de conformidad con los objetivos establecidos en el artículo 21, apartado 2, letra e), del TUE, con los objetivos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, con los principios del Acta Final de Helsinki y con los objetivos de la Carta de París, incluidos los relativos a las fronteras exteriores;

4.  Subraya que la responsabilidad primaria de mantener la paz y la seguridad en el mundo corresponde al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas y reitera la necesidad de una reforma de las Naciones Unidas para que puedan ejercer mejor sus funciones y ofrecer soluciones eficaces a los desafíos y amenazas mundiales;

5.  Reconoce la necesidad de que la Unión persiga estos objetivos mediante un refuerzo de su capacidad institucional para responder a estos desafíos y mediante la cooperación multilateral con y en el seno de organizaciones internacionales ‐en particular, las Naciones Unidas‐ y regionales ‐en particular la OSCE y la Unión Africana‐, dentro del respeto de la Carta de las Naciones Unidas;

6.  Reitera su apoyo al desarrollo por parte de la Unión de un enfoque global y proactivo para responder a las amenazas y retos, basado en una sinergia de los distintos medios de acción, tanto civiles como militares, de que disponen la Unión y sus Estados miembros: la prevención de conflictos y la gestión de crisis, la asistencia financiera y la cooperación al desarrollo, las políticas sociales y medioambientales, los instrumentos diplomáticos y de política comercial y la ampliación; subraya que esta coordinación de los medios civiles y militares confiere un auténtico valor añadido a la Unión en su política de gestión de las crisis;

7.  Pide, en este contexto, a los Estados miembros que coordinen de manera más eficaz sus estrategias y medios nacionales con los de la Unión, a fin de lograr coherencia y eficacia y un mayor impacto y visibilidad sobre el terreno;

8.  Respalda que, en cuanto a la lucha contra el terrorismo, se mantenga la agenda marcada por la estrategia de la UE contra el terrorismo, así como por la estrategia de la UE de lucha contra la radicalización y el reclutamiento, particularmente en lo relacionado con el uso de Internet con fines terroristas y de radicalización; propone impulsar el debate sobre la protección y el fomento de los derechos humanos, con especial mención a las víctimas;

9.  Reconoce que la seguridad energética es crucial para el funcionamiento de los Estados miembros de la UE y, por ello, anima a los Estados miembros a cooperar estrechamente en este aspecto de la política de seguridad;

10.  Acoge con satisfacción los esfuerzos de los Estados miembros para hacer frente a las ciberamenazas; insta al Consejo y a la Comisión a que presenten un análisis de los desafíos de carácter cibernético y de las medidas para lograr una respuesta eficaz y coordinada a tales amenazas de acuerdo con las mejores prácticas, que se traduzca, en el futuro, en una estrategia europea de ciberseguridad;

11.  Reitera su recomendación de que se lleve a cabo una revisión de la EES cada cinco años, coincidiendo con el inicio de una nueva legislatura y previa consulta al Parlamento Europeo;

12.  Subraya que un Libro Blanco, que permita generar un amplio debate público, podría reforzar la visibilidad de la PCSD y la cooperación en materia de seguridad y defensa mediante una mejor definición de los objetivos e intereses de seguridad y defensa de la Unión en relación con los medios y recursos disponibles, y volvería así más eficaz y concreta la aplicación de la EES y la planificación y el mando de las operaciones de gestión de crisis de la Unión;

Tratado de Lisboa y estructuras de la Política Común de Seguridad y Defensa

13.  Pide al Consejo que entable en 2010 un debate importante con el Parlamento Europeo y los Parlamentos nacionales sobre la aplicación de las nuevas disposiciones del Tratado de Lisboa que afectan a la PCSD, en particular:

   a. la cláusula de asistencia mutua en caso de ataque armado en el territorio de un Estado miembro,
   b. la cláusula de solidaridad en caso de ataque terrorista o catástrofe, ya sea ésta natural o de origen humano;
   c. el cargo de Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad/Vicepresidente de la Comisión, respaldado por la creación de un Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE) que comprenda, de manera global, la prevención de conflictos y las estructuras de gestión de crisis civiles/militares y de consolidación de la paz,
   d. la ampliación de las misiones confiadas a la PCSD,
   e. la cooperación estructurada permanente para los Estados miembros que cumplan criterios más elevados de capacidades militares y que hayan suscrito compromisos más vinculantes en la materia para realizar las misiones más exigentes, así como cooperaciones reforzadas,
   f. la creación de un fondo inicial para los preparativos de las operaciones;

14.  Pide a los países de la Unión Europea que sean miembros de la Unión Europea Occidental (UEO) que, en vista de la introducción de una cláusula de asistencia mutua, formulada en el apartado 7 del artículo 42 del Tratado de la Unión Europea, pongan fin al Tratado de Bruselas modificado de 1954, incluida la Asamblea Parlamentaria de la UEO;

15.  Pide al Consejo que, en vista de la introducción de una cláusula de solidaridad en el nuevo Tratado, reabra el debate sobre la creación de una fuerza europea de protección civil, sobre la base en particular del informe Barnier de mayo de 2006, mutualizando los medios de los Estados miembros para ofrecer una respuesta colectiva eficaz en caso de catástrofes naturales o de origen humano; considera que con la PCSD militar también se debe poder responder a estos riesgos civiles;

16.  Subraya, a la vista de los progresos permitidos por el Tratado de Lisboa en el ámbito de la PCSD, la legitimidad y utilidad de establecer un Consejo de Defensa en el marco del Consejo de Asuntos Exteriores, que estaría compuesto por los ministros de defensa, bajo la presidencia del Alto Representante/Vicepresidente, y que tendría un papel especial en la intensificación de la cooperación y la armonización e integración de las capacidades militares;

17.  Considera que la Alta Representante/ Vicepresidenta debe actuar muy rápidamente en favor de un refuerzo de la coherencia de las distintas políticas exteriores de la Unión, y que esta coherencia debe reflejarse sobre el terreno a través de representantes especiales/jefes de delegación bajo su autoridad que puedan ejercer la autoridad necesaria ante las partes interesadas y la comunidad internacional;

18.  Respalda la creación de una dirección de gestión de crisis y planificación civil-militar (Crisis Management and Planning Directorate - CMPD) para la gestión de las crisis, que tenga como objetivo planificar, a nivel estratégico, las operaciones civiles y militares de la Unión y contribuir al desarrollo de la PCSD, sobre todo en lo que a capacidades civiles y militares se refiere; lamenta, sin embargo, los retrasos considerables que se están produciendo en la creación de esta nueva estructura; pide una cooperación estrecha dentro del SEAE entre, por un lado, el CMPD y las demás estructuras de PCSD, y por otro, la plataforma de crisis y los otros servicios correspondientes de la Comisión, que deberían estar englobados en el SEAR, para constituir una capacidad de planificación estratégica coordinada con vistas a definir un enfoque europeo global;

19.  Pide a la Alta Representante/ Vicepresidenta de la Comisión, al Consejo y a los Estados miembros que resuelvan el desequilibrio entre las capacidades civiles y militares de planificación y que velen por que las misiones de la PESD dispongan de conocimientos especializados suficientes y adecuados en los ámbitos de la justicia, la administración civil, las aduanas y la mediación;

20.  Aboga de nuevo por la creación de un centro de operaciones permanente de la Unión, bajo el mando del Alto Representante/Vicepresidente, encargado de la planificación operativa y el gobierno de las operaciones militares; pide que este centro de operaciones se vincule al SEAE; subraya que la división del sistema actual, con siete Estados mayores, conlleva una pérdida de eficacia y reactividad y unos gastos considerables, y que se impone un interlocutor permanente en el ámbito militar para lograr la coordinación civil-militar sobre el terreno; considera que el centro de operaciones permanente podría calificarse así de capacidad militar de planificación y ejecución, y podría situarse en el mismo lugar que la CPCC para permitir las sinergias indispensables a una coordinación civil-militar eficaz; insiste en que el centro de operaciones de la UE facilite la cooperación con la OTAN, sin comprometer la autonomía de decisión de ninguna de las dos organizaciones;

21.  Insiste en la necesidad de poner en marcha rápidamente la cooperación estructurada permanente sobre la base de unos criterios lo más inclusivos posible, lo que debería permitir alcanzar un mayor compromiso de los Estados miembros en el marco de la PCSD;

22.  Subraya que el progreso y el desarrollo de la PCSD deben respetar plenamente y no socavar la neutralidad y el no alineamiento de algunos de los Estados miembros de la UE;

23.  Insiste en la importancia de estas distintas reformas para responder al nivel de ambición fijado para la PCSD, renovado en diciembre de 2008 y aprobado por el Consejo Europeo, y para aumentar la eficacia y el valor añadido de la PCSD en un contexto en el que se recurre cada vez más a este instrumento;

Operaciones militares y misiones civiles

24.  Se felicita de los logros alcanzados por la PCSD con ocasión de su décimo aniversario y recuerda que la Unión pone en marcha operaciones civiles y militares en el marco de la PCSD para responder a las amenazas que se ciernen sobre la seguridad internacional y de los europeos; toma nota de que la mayoría de estas misiones se han realizado en el ámbito de la gestión civil de crisis; rinde homenaje a los cerca de 70 000 miembros del personal que han participado y participan en las 23 misiones y operaciones de la PESD (en curso y finalizadas); rinde homenaje a Javier Solana, hasta ahora Secretario General del Consejo y Alto Representante para la Política Exterior y de Seguridad Común, por los esfuerzos realizados en pro del desarrollo de la PESD; pide una vez más a los Estados miembros que definan los criterios para el despliegue de misiones PESD y que debatan la cuestión de las reservas nacionales;

Somalia - Cuerno de África

25.  Acoge con satisfacción la contribución fructífera de la operación naval de la Unión Europea en Somalia (EUNAVFOR Somalia - operación Atalanta) a la lucha contra la piratería en el Golfo de Adén y a lo largo de las costas de Somalia, en un esfuerzo especial por garantizar que la ayuda humanitaria llegue a toda la población que lo necesita en este país; destaca que la operación Atalanta se ha impuesto como actor central en la lucha contra la piratería, en particular a través del Centro de Seguridad Marítima en el Cuerno de África; acoge con satisfacción la decisión del Consejo de prorrogar la misión un año más, hasta diciembre de 2010, y toma nota de la ampliación del mandato de esta operación que responde a un interés directo de seguridad de la Unión (seguridad de los ciudadanos y de los suministros, protección de los buques vulnerables) y a una emergencia humanitaria y operativa (acompañamiento de los buques fletados por el Programa Mundial de Alimentos que transportan los alimentos destinados a la población somalí y de los buques que llevan apoyo logístico a la misión de observación militar de la Unión Africana en Somalia (AMISOM)); elogia, al mismo tiempo, su contribución a la mejora de la cooperación naval en Europa y el desarrollo de la dimensión marítima de la PCSD; celebra asimismo la participación de terceros países (Noruega, Croacia y Montenegro) en la operación y la buena cooperación con las demás fuerzas navales presentes en la región, en particular en el marco de los procesos SHADE (Shared Awareness and Deconfliction); lamenta, no obstante, los problemas continuos en el procesamiento de los sospechosos de piratería y robo a mano armada detenidos en la zona de operaciones, lo que socava la credibilidad de los esfuerzos internacionales para luchar contra la piratería;

26.  Hace hincapié en la necesidad de tratar las causas del fenómeno de la piratería, que encuentran su origen en la inestabilidad y la pobreza reinantes en Somalia, y considera por tanto que la Unión debe apoyar al Gobierno Federal de Transición (GFT) a través de medidas destinadas a restablecer la seguridad, la estabilidad política y el Estado de Derecho y promover el desarrollo sostenible, en colaboración con la Unión Africana y las Naciones Unidas y desarrollar una estrategia conjunta con el objetivo de iniciar un proceso de paz regional;

27.  Pide que el enfoque de la UE sobre Somalia tenga en cuenta que solo un ejercicio a gran escala y a largo plazo de creación de estructuras de estado ‐que vaya más allá de la formación de las fuerzas de seguridad del GFT‐ contribuirá a la paz y la seguridad en ese país de manera duradera; pide, por lo tanto, al Consejo y a la Comisión que propongan una estrategia ambiciosa conjunta e integral de la UE para Somalia;

28.  Hace especial hincapié en la necesidad de actuar urgentemente para que el GFT pueda mantenerse en el poder y extender su control en el territorio somalí; en este sentido, celebra que el Consejo haya acordado, el 25 de enero de 2010, crear una misión militar PCSD (misión de formación UE, EUTM Somalia) para contribuir a la formación de las fuerzas de seguridad somalíes en Uganda, en estrecha coordinación con los socios de la UE, incluidos TGF, Uganda, la Unión Africana, las Naciones Unidas y Estados Unidos; pide a la Alta Representante que informe y consulte oportunamente al Parlamento Europeo;

29.  Subraya asimismo la importancia de reforzar las capacidades de vigilancia marítima en la región, en particular gracias a la formación y la conexión en red de los guardacostas de los países de la región, y considera que la Unión debe participar en estos esfuerzos apoyando el Código de Conducta de Yibuti y su plan de ejecución desarrollado por la Organización Marítima Internacional, tal y como fueron acordados por los Estados de la región (Centro de intercambio de información en Yemen y Centro de entrenamiento del personal navegante en Yibuti);

30.  Recuerda, en relación con la situación en Yemen, su resolución de 10 de febrero de 2010, y pide a la Comisión y al Consejo que, conjuntamente con los socios internacionales, incluidos los vecinos de Yemen, ayuden al gobierno mediante un enfoque global que abarque reformas en el sector de la seguridad, lucha antiterrorista, diálogo política, asistencia económica y humanitaria, y educación;

Afganistán y Pakistán

31.  Recuerda la importancia de que se estabilice la situación política y de seguridad en Afganistán y Pakistán para contener las amenazas globales que se ciernen directamente sobre la seguridad de los europeos (terrorismo, tráfico de drogas, proliferación de armas de destrucción masiva) y, a este respecto, se congratula del Plan de acción de la Unión para Afganistán y Pakistán adoptado el 27 de octubre de 2009 por el Consejo; reitera la necesidad de un enfoque integral a la hora de abordar estas cuestiones, que vincule más estrechamente la seguridad con el desarrollo, el Estado de Derecho y el respeto de los derechos humanos, así como con los aspectos relacionados con la igualdad de género; pide, por lo tanto, al Consejo y a la Comisión que tomen iniciativas más concretas en esta dirección, también mediante un incremento de la contribución de la Unión y haciendo más coherentes entre sí las acciones de la Unión, las de los Estados miembros y las de la comunidad internacional;

32.  Opina que el refuerzo de las capacidades institucionales y administrativas del Estado afgano, sobre todo el sistema judicial y el Estado de Derecho -más allá de las fuerzas policiales- debe constituir una prioridad en la aplicación de una nueva estrategia europea;

33.  Insta al Consejo y a la Comisión a aumentar significativamente los recursos para el compromiso civil en Afganistán a fin de que la prioridad civil de la UE sea creíble y más visible tanto a los ojos de los afganos y como a los de los socios internacionales; resalta la importancia de crear una policía civil fiable y eficaz para la construcción de un Estado de Derecho en Afganistán y felicita el trabajo de la misión EUPOL Afganistán; pide al Consejo que colme urgentemente las lagunas que persisten en cuanto al número de efectivos de la misión EUPOL y que facilite su despliegue en las provincias proporcionando alojamiento adicional y un adecuado respaldo logístico a la misión; pide a la OTAN que coopere en mayor medida con la misión y que coordine sus acciones en el ámbito policial con EUPOL en el seno de la Junta internacional de coordinación policial (IPCB);

34.  Apoya la propuesta del Consejo de examinar la posibilidad de una misión de asistencia en Pakistán para reformar los sectores de la seguridad y construir una capacidad de lucha contra el terrorismo, a fin de ayudar a este país a definir una estrategia contra el terrorismo, que incluya a la vez un diálogo sobre el Estado de Derecho y los derechos humanos;

Los Balcanes

35.  Se congratula del despliegue realizado con éxito por la misión EULEX Kosovo en el conjunto del territorio de Kosovo, e insiste en la importancia de que todos los componentes de la misión (policía, justicia, aduanas) puedan seguir operando sin obstáculos en todo el territorio de Kosovo, norte incluido;

36.  Acoge con satisfacción, a este respecto, la firma del protocolo de cooperación policial entre EULEX Kosovo y Serbia, y recuerda el carácter estrictamente técnico de este protocolo, destinado a favorecer la lucha contra la delincuencia organizada;

37.  Condena todas las acciones hostiles contra EULEX Kosovo, cuya misión consiste en actuar, junto con las autoridades de Kosovo, para establecer y consolidar un Estado de Derecho, y ello en favor de todas las comunidades de Kosovo;

38.  Pide al Consejo que considere el posible despliegue de una operación militar de la PCSD para relevar a la KFOR;

39.  Recuerda, por lo que respecta a Bosnia y Herzegovina, que, a pesar de las dificultades políticas persistentes, la situación en materia de seguridad sigue siendo relativamente tranquila y estable, y subraya la contribución de la operación militar de la Unión (Althea) en este ámbito; respalda la decisión del Consejo de centrar de nuevo las actividades de la Misión de Policía de la Unión Europea (MPUE) en la lucha contra la delincuencia organizada y la corrupción, y subraya la necesidad de un enfoque integral del sector del Estado de Derecho (policía-justicia-prisiones); anima al Consejo a que tome rápidamente una decisión en pro de una evolución de la operación militar Althea, centrada en la formación de las fuerzas armadas bosnias; lamenta la falta de una decisión política concertada sobre el futuro del dispositivo internacional en Bosnia y Herzegovina, que está conduciendo a la retirada unilateral de algunos Estados participantes en esta operación y que corre el riesgo de perjudicar la credibilidad y coherencia de la acción europea en Bosnia y Herzegovina; recuerda al Consejo la oportunidad de mantener la perspectiva de la adhesión a la UE según lo acordado en Tesalónica en 2003;

Cáucaso

40.  Recuerda el papel determinante desempeñado por la Unión para evitar una escalada del conflicto entre Georgia y Rusia, gracias en particular al pronto despliegue de una misión de observación dirigida a controlar la aplicación de los acuerdos de 12 de agosto y 8 de septiembre de 2008; lamenta que la Federación de Rusia no haya cumplido hasta ahora los compromisos adquiridos en virtud de dichos Acuerdos; subraya que el papel de la misión de observación de la Unión en Georgia es todavía si cabe más crucial tras la retirada de las misiones de la OSCE y de las Naciones Unidas;

41.  Apoya la prórroga de la misión por un año más y pide que se refuerce su capacidad de observación, incluyendo sus equipos técnicos; lamenta que las fuerzas rusas y locales hayan impedido a los miembros del personal de la misión visitar las regiones separatistas de Osetia del Sur y Abjazia;

Oriente Próximo

42.  Considera que la Unión debe intensificar sus acciones en los territorios palestinos; se congratula del trabajo efectuado por la Misión de Policía EUPOL COPPS y pide al Consejo que examine un posible refuerzo de esta misión y proponga un nuevo modelo para el mantenimiento y la mejora de la eficacia de la misión de asistencia en el puesto fronterizo de Rafah (EUBAM Rafah) y para aliviar la dramática crisis humanitaria en la Franja de Gaza;

43.  Apoya, por lo que se refiere a la misión EUJUST LEX en Iraq, la puesta en pie paulatina de actividades en territorio iraquí, en función de la situación de seguridad que se dé sobre el terreno;

África subsahariana

44.  Reconoce la necesidad de un compromiso de la Unión en el ámbito de la reforma de los sectores de seguridad de determinados países africanos, como la República Democrática del Congo y Guinea-Bissau, y pide al Consejo que base sus acciones en un enfoque integral de la reforma del sector de la seguridad y que evalúe periódicamente la eficacia y el impacto de estas misiones;

Haití

45.  Subraya, en lo que concierne a la situación en Haití, la importancia de la coordinación de las medidas de apoyo europeas; se felicita, en este sentido, de la aportación colectiva de la UE, que supera los 300 efectivos policiales, destinados a reforzar temporalmente la capacidad policial de la Misión de las Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH), así como de la decisión del Consejo de crear una célula en Bruselas (EUCO Haití) para coordinar las aportaciones de elementos militares y de seguridad de los diferentes Estados miembros destinados a responder a las necesidades señaladas por las Naciones Unidas, complementando así al Centro de Información y Seguimiento (MIC); lamenta, no obstante, la falta de coordinación entre los Estados miembros y la Unión Europea sobre el terreno en Haití; pide a la Alta Representante/ Vicepresidenta que abandere los esfuerzos europeos en este ámbito;

Experiencia adquirida

46.  Subraya la importancia de los procesos de aprendizaje en las operaciones de la UE, y pide al Consejo que reflexione sobre un mecanismo que le permita asociarse a estos procesos; desea, en este sentido, que se le tenga al corriente del primer informe anual sobre los esfuerzos por identificar y poner en práctica las conclusiones obtenidas en relación con las misiones civiles; insta a la Alta Representante/Vicepresidenta a que realice una auditoría exhaustiva y transparente de las misiones pasadas y presentes de la PESD/PCSD para identificar sus virtudes y defectos;

47.  Se congratula de la transición realizada con éxito de la operación de la Unión en el Chad y en la República Centroafricana (operación EUFOR Chad/RCA) a la Misión de las Naciones Unidas en la República Centroafricana y el Chad (MINURCAT), y espera ahora que se le tenga al tanto de los actuales procesos de obtención de conclusiones, en particular en cuanto a la eliminación de carencias y problemas existentes en relación con la cooperación concreta con la Unión Africana y las Naciones Unidas en futuras misiones;

Política de ejercicios

48.  Destaca que la planificación y ejecución de ejercicios en el ámbito de la PCSD forma parte de una política de ejercicios de la UE más ambiciosa, incluyendo la posibilidad de realizar ejercicios reales (LIVEX), contribuiría notablemente a una coordinación más eficaz de las capacidades de los Estados miembros, potenciando así la interoperabilidad y el intercambio de experiencias;

Integración de las perspectivas de género y de derechos humanos
49.Recuerda la importancia de abordar sistemáticamente las cuestiones de derechos humanos y de igualdad de género en todas las fases de las operaciones de la PCSD, tanto durante la fase de planificación como durante la de ejecución; Insta a que se observen las Resoluciones 1325 (2000) y 1889 (2009) del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre la mujer y la paz y la seguridad, tanto durante la formación como durante las operaciones, y pide que se incremente la presencia de mujeres entre el personal enviado a las operaciones; insta a que se mejore la formación del personal en materia de derechos humanos y conocimiento de la sociedad civil;
No proliferación y desarme

50.  Acoge con satisfacción la Resolución 1887 (2009) del CSNU y apoya plenamente su llamamiento para que se ponga fin a la proliferación de armas nucleares y se intensifiquen los esfuerzos para lograr el desarme bajo un estricto y eficaz control internacional; pide a los Estados miembros que formulen una posición común sólida para el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP) 2010, y recuerda su Recomendación, de 24 de abril de 2009, destinada al Consejo sobre la no proliferación y el futuro del Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP)(8), en la que subraya la necesidad de reforzar aún más los tres pilares del TNP, a saber, la no proliferación, el desarme y la cooperación en el uso civil de la energía nuclear; insta, además, a la ratificación y a la entrada en vigor del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (TPCE);

51.  Destaca la importancia de desarrollar un sistema internacional de suministro seguro y garantizado de combustible nuclear (es decir, un sistema internacional de banco de combustible bajo el control del OIEA) y los mecanismos para mejorar el cumplimiento de la denominada cláusula de armas de destrucción masiva, que es parte de los acuerdos de cooperación de la UE con terceros países;

52.  Acoge con satisfacción las declaraciones y los objetivos anunciados por la nueva administración estadounidense, por los que se comprometen a avanzar en la vía del desarme nuclear y pide una estrecha cooperación entre la Unión Europea y los Estados Unidos para promover la no proliferación nuclear; pide a las dos potencias nucleares de Europa que expresen su apoyo explícito a este compromiso y que presenten nuevas medidas para llevarlo a cabo; acoge con satisfacción, al mismo tiempo, el compromiso de la Federación de Rusia y los Estados Unidos de continuar las negociaciones para concluir un nuevo acuerdo global jurídicamente vinculante que sustituya al Tratado sobre la reducción y limitación de armas estratégicas ofensivas (START I), que expiró en diciembre de 2009; permanece a la espera de resultados tangibles a este respecto en el plazo más breve posible;

53.  Toma nota del pacto de coalición alemán de 24 de octubre de 2009 sobre la retirada de armas nucleares estadounidenses de Alemania en el contexto de su apoyo a la política del Presidente Obama en favor de un mundo libre de armas nucleares, la conveniencia de los pasos intermedios para alcanzar este objetivo y la necesidad de introducir una nueva dinámica en el control de armamentos y el desarme en la Conferencia de Revisión del TNP de 2010; insta a otros Estados miembros con armas nucleares estadounidenses en su territorio a que asuman un compromiso igualmente claro; acoge con satisfacción, a este respecto, la carta remitida el 26 de febrero de 2010 por los Ministros de Asuntos Exteriores de Alemania, los Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo y Noruega al Secretario General de la OTAN en la que pedían un debate exhaustivo en el seno de la Alianza sobre el modo de aproximarse al objetivo político general de un mundo libre de armas nucleares;

54.  Reafirma su preocupación ante la situación en Iraq y Corea del Norte, y recuerda el compromiso contraído por la Unión de utilizar el conjunto de instrumentos a su disposición para prevenir, no fomentar, poner fin y, de ser posible, suprimir los programas de proliferación que suscitan preocupación a nivel mundial; recuerda, no obstante, que el desarme iniciado por algunos Estados miembros no guarda relación directa con la voluntad de otros Estados de acabar o continuar con sus programas de proliferación, lo que debe dar lugar a una política de firmeza frente a los Estados y organizaciones dispuestos a participar o que participan ya en procesos de proliferación de armas de destrucción masiva; subraya la importancia de que todos los Estados miembros actúen en consecuencia, de acuerdo con el enfoque que la Unión ha dado a este asunto;

55.  Recuerda que, en el ámbito del desarme convencional, deberá prestarse especial atención al avance de los debates en pos de un futuro tratado internacional para la regulación del comercio de armas;

56.  Reitera su pleno apoyo a un desarme más amplio y a la prohibición total de las armas que causan gran sufrimiento a la población civil, como las armas químicas y biológicas, las minas antipersonas y las municiones de racimo y de uranio empobrecido; insta, por consiguiente, al aumento de los esfuerzos multilaterales para garantizar la plena aplicación de la Convención sobre las Armas Químicas (CAQ), la Convención sobre la prohibición del desarrollo, la producción y el almacenamiento de armas bacteriológicas (biológicas) y toxínicas (CABT), la Convención sobre Municiones de Racimo (CCM), la Convención sobre las minas antipersonas (CMAP), y al desarrollo del régimen internacional contra la proliferación de armas de destrucción masiva; acoge con satisfacción, a este respecto, los compromisos asumidos por todos los Estados miembros de la UE con la adopción de la Posición común de la UE sobre las exportaciones de armas, así como lo dispuesto en el artículo 28 ter, apartado 1) del Tratado de Lisboa, por el que se confían a la UE operaciones conjuntas de desarme;

Desarrollo de capacidades

57.  Recuerda que, para responder a las cada vez mayores exigencias operativas y profesionalizar su gestión de crisis, la Unión debe desarrollar sus capacidades civiles y militares; anima, a este respecto, al Consejo a que defina un nuevo objetivo global, que podría ser de carácter civil-militar y que debería tender sobre todo a la producción eficaz de capacidades;

58.  Subraya la pertinencia de buscar sinergias entre las capacidades civiles y militares, y ámbitos de mutualización de capacidades entre Estados miembros en un contexto económico difícil, algo esencial para superar los efectos combinados del aumento de los costes del material de defensa y las actuales limitaciones del gasto de defensa, utilizando también la oportunidad facilitada por la creación del SEAE, que debería tener una única unidad que supervise el desarrollo de capacidades civiles y militares;

59.  Reitera su apoyo a los objetivos ambiciosos de refuerzo de las capacidades civiles y militares definidos en el Consejo Europeo de diciembre de 2008; pide al Consejo que siga avanzando en la puesta en práctica de los proyectos propuestos en este ámbito, a pesar de la actual crisis económica; pide al Consejo que le tenga regularmente informado de los esfuerzos realizados por los Estados miembros para alcanzar estos objetivos;

60.  Hace hincapié en los numerosos obstáculos al despliegue rápido de las misiones civiles que han sido identificados; pide a los Estados miembros que movilicen sus Ministerios de Justicia y de Interior para que asuman su responsabilidad en este ámbito; apoya, en este sentido, los esfuerzos del Consejo dirigidos a facilitar la puesta a disposición y el despliegue de personal civil cualificado, adecuadamente formado y en que estén representados ambos sexos de manera equilibrada (mediante la adopción de estrategias nacionales y normas comunes, mejora del proceso de generación de fuerzas y de la formación previa al despliegue, revisión del concepto de los equipos de intervención civil - CRT), así como la pronta puesta a disposición de equipos para las nuevas misiones civiles (establecimiento de contratos marco y proyecto de almacén permanente); se congratula, a este respecto, de la decisión de establecer a título provisional un almacén de equipos para la misión de policía de la Unión en Bosnia y Herzegovina;

61.  Resalta las necesidades de las misiones civiles a la hora de disponer de herramientas de comunicación integradas, seguras y compatibles con los sistemas de comunicación militares;

62.  Pide al Consejo que dote al SEAE de una estructura permanente que concentre las funciones de apoyo comunes a las misiones civiles y a las operaciones militares (procedimientos de contratación y de adjudicación de contratos) para que éstas puedan concentrarse en su tarea fundamental;

63.  Insiste en la necesidad de una coordinación estrecha entre las misiones civiles de la PCSD y los demás instrumentos de la Unión, para racionalizar el empleo de los recursos; pide a la Alta Representante/Vicepresidenta que coordine con la Comisión la planificación, junto con el SEAE, de sus acciones en ámbitos similares; aboga por un intercambio continuo de información entre las misiones civiles de la PCSD y los agentes encargados de la cooperación policial y judicial intraeuropea, en particular Europol, sobre todo en lo que a lucha contra la delincuencia organizada se refiere;

64.  Observa que, a pesar del coste que conllevan, las agrupaciones tácticas no se han utilizado nunca hasta ahora, por razones políticas pero también porque sus condiciones de despliegue son muy estrictas; respalda un uso más eficaz y flexible de las agrupaciones tácticas para que puedan emplearse también como fuerza de reserva o como sustituto parcial en caso de que el proceso de generación de fuerzas sea decepcionante, siempre y cuando se tenga debidamente en cuenta la voluntad de los países que conforman las agrupaciones en cuestión; solicita la prórroga del acuerdo provisional por el que se cubren los gastos vinculados al despliegue estratégico de las agrupaciones tácticas, así como la ampliación de los gastos comunes para el empleo de dichas agrupaciones; pide al Consejo que las despliegue en el marco de ejercicios militares a escala real; acoge con satisfacción los trabajos realizados bajo el impulso de la Presidencia sueca en el marco del empleo y la flexibilidad de empleo de las agrupaciones tácticas y, sobre esta base, pide a los Estados miembros que pongan en práctica las recomendaciones adoptadas;

65.  Se congratula de los avances logrados en el ámbito de las capacidades militares y civiles y pide que se progrese rápidamente en:

   los proyectos que permiten desplazar más rápidamente las misiones de la PESD y las fuerzas de la Unión, a saber:
   la creación de una flota europea de transporte aéreo y el proyecto de gobernanza adoptado por catorce Estados miembros en el Consejo de Asuntos Generales y Relaciones Exteriores, compuesto por los Ministros de Defensa, de 17 de noviembre de 2009, la creación de un mando europeo de transporte aéreo en Eindhoven y la creación de una unidad multilateral de aparatos A400M, lamentando los retrasos considerables en el suministro y pidiendo a los Estados miembros en cuestión y a EADS que lleven a buen término el proyecto A400M para que esta unidad pueda constituirse rápidamente; subraya la importancia del uso de la capacidad de transporte militar en apoyo de las operaciones de protección civil y gestión de crisis;
   la modernización de los helicópteros y el entrenamiento de la tripulación, así como el proyecto de futuro helicóptero pesado de transporte,
   los proyectos destinados a ofrecer una mejor información a los equipos militares desplegados por la Unión Europea;
   la nueva generación de satélites de observación (programa MUSIS);
   los acuerdos entre determinados Estados miembros y el Centro de Satélites de la Unión Europea (CSUE), destinados a facilitar el acceso de dicho centro a las imágenes gubernamentales (Helios II, Cosmo-Skymed y SAR-Lupe);
   los trabajos de la Agencia Europea de Defensa (AED) sobre las necesidades militares en el ámbito de la vigilancia espacial;
   el proyecto de sistema de vigilancia mundial del medio ambiente y la seguridad (GMES), lamentando no obstante que no tenga suficientemente en cuenta las necesidades específicas del sector de la seguridad y la defensa, en particular en términos de resolución de las imágenes; sugiere que el Centro de Satélites desempeñe un papel de interfaz en este ámbito;
   los proyectos destinados a reforzar la dimensión marítima de la Unión, poniendo los medios militares de la PCSD a su servicio:
   la creación de un sistema de vigilancia marítima basado en el modelo báltico (SUBCAS) para aumentar la seguridad del transporte marítimo, controlar la inmigración ilegal y la trata de seres humanos y, por último, luchar contra la contaminación marina;
   la hoja de ruta para la integración de la vigilancia marítima prevista para 2010; considera que la falta de cooperación entre los distintos agentes europeos no debería en ningún caso ser un obstáculo a la aplicación de los proyectos;

66.  Se felicita del papel determinante desempeñado por la AED a la hora de desarrollar estas capacidades de defensa críticas, sobre todo gracias a la creación de programas comunes; pide a los Estados miembros que exploten más el potencial de la AED de conformidad con el nuevo Tratado, que doten a esta agencia de un presupuesto a la altura de las expectativas depositadas en ella y que confieran una mayor previsibilidad a sus trabajos gracias a la aprobación de un marco financiero y de un programa de trabajo trienales; pide a los Estados miembros que concluyan cuanto antes el Acuerdo administrativo entre la AED y la Organización Conjunta de Cooperación en Materia de Armamento (OCCAR), así como el Acuerdo de seguridad entre la Unión y la OCCAR para organizar eficazmente su cooperación en materia de armamento;

67.  Respalda la creación de una base industrial y tecnológica de defensa europea competitiva y de un mercado europeo de material de defensa abierto y transparente; pide, en este sentido, a los Estados miembros que prosigan sus esfuerzos de búsqueda y desarrollo, respetando el compromiso contraído de dedicarles el 2 % de los gastos de defensa, y que transpongan de manera armoniosa las directivas del paquete de defensa;

68.  Pide a las agencias nacionales de contratación pública de defensa que adopten medidas concretas, con el apoyo de la AED, para hacer adquisiciones más europeas, por ejemplo, mediante la firma de un código de conducta voluntario que introduzca el principio de «preferencia europea» en algunos ámbitos del equipamiento de defensa en los que es importante mantener la autonomía estratégica y la soberanía operativa desde una perspectiva europea, y para sostener la preeminencia industrial y tecnológica europea;

69.  Respalda firmemente el establecimiento de sinergias civil-militares en el ámbito de las capacidades; espera que la CMPD y la AED puedan determinar rápidamente sus papeles complementarios, correspondiéndole a la CMPD, bajo la autoridad de la Alta Representante/ Vicepresidenta y en el marco del SEAE, un papel estratégico de impulso y coordinación de los trabajos, en particular en materia de identificación de las necesidades comunes, y a la AED, un papel operativo de desarrollo de las tecnologías duales y de las capacidades civiles y militares; considera que estas sinergias pueden investigarse en particular sobre la base del componente «seguridad» del Programa marco de investigación y desarrollo;

70.  Se congratula de los progresos realizados bajo la Presidencia sueca para crear una cantera de expertos civil-militares para la reforma de los sectores de la seguridad, al tiempo que deplora los plazos de aplicación de esta medida, aprobada en otoño de 2008, y espera que se cree rápidamente esta cantera;

71.  Apoya, con vistas a reforzar la capacidad del personal europeo para trabajar conjuntamente, las iniciativas en materia de formación, en particular:

   el desarrollo de intercambios entre jóvenes oficiales europeos, siguiendo el modelo del programa Erasmus;
   el refuerzo de las capacidades de formación a escala de la Unión; insiste, sobre todo, en la necesidad de crear lo antes posible la Escuela Europea de Seguridad y Defensa, con su nueva configuración, tal y como lo decidió el Consejo en diciembre de 2008;
   esfuerzos para incrementar las capacidades de formación a escala de la Unión; subraya en particular la necesidad de crear una Academia Europea para la Acción Exterior de nuevo corte que, en estrecha cooperación con los órganos pertinentes de los Estados miembros e incorporando las estructuras de formación existentes, como el Colegio Europeo de Seguridad y Defensa, ofrezca a los funcionarios de la Unión y de los Estados miembros llamados a desempeñar funciones en el ámbito de las relaciones exteriores, así como al personal de las misiones de la PCSD, una formación basada en programas uniformemente armonizados, con un entrenamiento exhaustivo y común para todos los funcionarios y una formación adecuada en materia de procedimientos consulares y delegación diplomática, mediación en conflictos y relaciones internacionales, con conocimiento de la historia y la experiencia de la Unión Europea;

72.  Considera, con vistas a mejorar la formación del personal desplegado y rentabilizar los medios de formación, que conviene establecer un vínculo más sistemático entre el personal participante en las formaciones y el personal desplegado en las misiones; pide al Consejo que elabore un estatuto común europeo del personal enviado en misión que regule el nivel de formación, las normas de intervención, el grado de libertad de operación, los derechos y deberes, la calidad de los equipos, y la atención médica y los aspectos de seguridad social en caso de fallecimiento, lesiones o incapacidad para el servicio;

73.  Acoge con satisfacción la firma, el 26 de febrero de 2009, del Tratado de Estrasburgo, que confiere personalidad jurídica al cuerpo militar europeo (Eurocuerpo); aboga por que, en su caso, la Unión recurra al uso de esta fuerza multinacional;

Financiación de la PCSD

74.  Recuerda que el Tratado de Lisboa no modifica de forma fundamental la financiación de las misiones y operaciones realizadas en el marco de la PCSD, a saber que:

   las misiones civiles se financian con cargo al presupuesto de la Unión,
   las operaciones militares se financian con cargo al mecanismo Athena por lo que a gastos comunes se refiere;

75.  Recuerda la disposición del Tratado de Lisboa relativa al fondo inicial, puesto a disposición del Vicepresidente/Alto Representante, y con el que se deben financiar los preparativos de las misiones de la PCSD que, por una razón u otra, no se imputen al presupuesto de la Unión; subraya la plusvalía de este fondo, con el que se debería poder reforzar la capacidad del Vicepresidente/Alto Representante para preparar eficaz y rápidamente las acciones de la PCSD; anima, en este sentido, a los Estados miembros a emprender rápidamente los trabajos de puesta en marcha;

76.  Pide a los Estados miembros que amplíen la lista de gastos comunes, financiados por el mecanismo Athena, para crear más solidaridad entre ellos e incitar a un mayor número de Estados a tomar parte en las operaciones militares de la Unión;

77.  Propone que, en el marco de la revisión del Reglamento financiero, se flexibilicen las normas y procedimientos aplicables para la gestión de crisis, ámbito que debe responder a unas exigencias específicas (rapidez del despliegue, consideraciones relativas a la seguridad, etc.);

78.  Recuerda el carácter determinante de los instrumentos financieros gestionados por la Comisión en la gestión de crisis, en particular el Instrumento de Estabilidad y el Fondo Europeo de Desarrollo (que incluye el Fondo de Paz para África); destaca la importancia de coordinar estos distintos instrumentos;

Asociaciones
UE-OTAN

79.  Recuerda la necesidad de consolidar la asociación estratégica entre la Unión y la OTAN, asegurando una cooperación constructiva entre ambas; recomienda evitar los bloqueos y pide una revisión de los actuales acuerdos de cooperación operativa UE-OTAN (acuerdo Berlín plus), así como el desarrollo de una nuevo marco funcional que facilite una cooperación más amplia cuando las dos organizaciones estén presentes en el mismo teatro de operaciones;

80.  Insiste en que la Vicepresidenta/Alta Representante debe entablar un diálogo riguroso con el Secretario General de la OTAN con respecto a la revisión que la Organización hace actualmente de su concepción estratégica, para garantizar que la OTAN tenga plenamente en cuenta la Política Común de Seguridad y Defensa de la UE, incluida la posible cooperación estructurada y permanente en el ámbito de la defensa;

81.  Lamenta que sigan sin firmarse los acuerdos técnicos entre las operaciones de la OTAN y de la Unión en Afganistán y Kosovo; pide al Consejo y a los Estados miembros que actúen políticamente en las instancias adecuadas de la UE y la OTAN para avanzar en este sentido;

82.  Subraya la buena cooperación entre las dos organizaciones en la lucha contra la piratería (operación Atalanta y operación Ocean Shield de la OTAN);

83.  Felicita al Secretario General de la OTAN por querer asociar a la Unión, Parlamento Europeo incluido, a los debates sobre la revisión del concepto estratégico de dicha organización; espera que la voluntad manifestada se plasme rápidamente en iniciativas concretas;

84.  Celebra la cooperación entre la Unión y la OTAN en el ámbito de las capacidades militares, a semejanza de los trabajos relativos a la mejora de la capacidad operativa de los helicópteros;

UE-Naciones Unidas

85.  Recuerda la importancia de una cooperación estrecha entre la Unión y las Naciones Unidas en la gestión de las crisis, en particular en los teatros de operaciones en los que se hallan presentes ambas organizaciones o en los que estén llamadas a relevarse mutuamente; pide que se refuerce esta cooperación en las fases previas a la crisis, en particular en el ámbito de la planificación;

UE-Unión Africana

86.  Destaca la importancia de una buena cooperación entre la Unión Europea y la Unión Africana, conforme a los compromisos adoptados en el marco de la asociación «Paz y Seguridad» de la estrategia UE-África; considera que la Unión Europea debería, en la medida de lo posible, apoyar a la Unión Africana, en particular en los teatros de operaciones en los que esta última sea, como en Somalia, la única organización presente sobre el terreno, y pide al mismo tiempo a la Unión Africana que se esfuerce en desarrollar la capacidad africana de respuesta frente a las crisis y en mejorar la eficacia en el uso de las ayudas recibidas de los socios internacionales; pide a la Comisión y a los Estados miembros que dediquen especial atención al problema de la proliferación incontrolada de armas de pequeño calibre y de armas ligeras, especialmente en África, y que en este sentido hagan hincapié en el cumplimiento por parte de todos los Estados miembros de las normas vigentes sobre armamento en regiones en crisis;

UE-Estados Unidos

87.  Insta al Consejo a que desarrolle la relación entre la Unión y los Estados Unidos en el ámbito de la consolidación de la paz y la gestión de crisis, incluidas las cuestiones de orden militar y las catástrofes naturales; cooperación ésta que resulta particularmente importante en la lucha contra la piratería y en Somalia, así como en la consolidación de las capacidades africanas de mantenimiento de la paz, también en Kosovo y Afganistán; se congratula muy especialmente de la participación de los Estados Unidos en la misión EULEX en Kosovo, bajo la cadena de mando europea;

88.  Considera que la nueva versión del escudo antimisiles previsto por la administración estadounidense debería examinarse en profundidad, y que si de ha de desarrollar dicho sistema debería tomar en consideración un enfoque común de los países europeos para proteger a Europa frente a amenazas balísticas, en el marco de un diálogo a escala continental, y favoreciendo la participación de la industria de defensa europea en el establecimiento de dicho escudo;

Participación de terceros países en la PESD

89.  Recuerda que, hasta ahora, ha habido 24 países de cinco continentes que han participado en 16 operaciones civiles y militares de la Unión; subraya que la participación de terceros países en las operaciones supone un valor añadido importante, a la vez político y operativo, para las operaciones de la Unión; opina que la Unión debe continuar por esa vía y examinar las posibles maneras de asociar mejor a esos países terceros, sin que ello afecte a su autonomía de decisión;

Prerrogativas parlamentarias

90.  Se congratula de la participación creciente del Consejo en los trabajos del Parlamento en materia de seguridad y defensa, en particular en el seno de la subcomisión especializada; acoge con satisfacción la inclusión de una sección sobre las relaciones con el Parlamento en las últimas conclusiones del Consejo sobre la PESD; anima a la Vicepresidenta/Alta Representante a que, en el marco del Tratado de Lisboa, prosiga esta vía para dotar a la PCSD de una fuerte legitimidad democrática;

91.  Recuerda que el Parlamento Europeo es la única institución supranacional que puede aspirar legítimamente a efectuar un seguimiento democrático de la política de seguridad y defensa de la Unión, y que este papel se ha visto reforzado con la entrada en vigor del Tratado de Lisboa; considera, en este contexto, que la Asamblea de la UEO -que debe su existencia a un tratado, el Tratado de Bruselas modificado, que no está firmado por el conjunto de los Estados miembros de la Unión Europea- no está políticamente equipada ni habilitada legalmente para ejercer el seguimiento parlamentario de la PCSD;

92.  Alienta, por tanto, al Parlamento Europeo y a los Parlamentos nacionales a que, en atención a las posibilidades que ofrece el Tratado de Lisboa, hagan plenamente uso del Protocolo nº 1 de éste para reforzar su cooperación en el ámbito de la PESC y la PCSD, mediante el desarrollo de relaciones de trabajo más estrechas y estructuradas sobre las cuestiones de seguridad y defensa entre sus respectivas comisiones competentes; subraya que esta cooperación reforzada entre el Parlamento Europeo y los Parlamentos nacionales irá sustituyéndose a las prerrogativas que la Asamblea de la UEO se ha arrogado indebidamente; subraya asimismo la necesidad de adaptar sus propias estructuras para garantizar un mejor seguimiento de la PCSD; insta al Consejo y a la Alta Representante/ Vicepresidenta a que encuentren formas para hacer que el Parlamento Europeo y su comisión competente participen desde las primeras etapas en la creación de los conceptos de gestión civil de crisis y en los planes operativos;

93.  Pide al Consejo que le informe por adelantado de las misiones y operaciones en fase de preparación, así como de su desarrollo; sugiere al Consejo que, en aras de la transparencia, le informe regularmente del uso del mecanismo Athena y del fondo inicial, como ya hace con el uso de los créditos de la PESC para las misiones civiles; considera que en aras de la claridad presupuestaria deberían consignarse en el presupuesto de la UE en primer lugar todos los gastos no militares, antes de consignar también en una segunda fase y previa modificación del Tratado en la medida necesaria, los gastos militares;

94.  Solicita la revisión de los acuerdos interinstitucionales de 2002 entre el Parlamento Europeo y el Consejo sobre el acceso del Parlamento Europeo a la información sensible del Consejo en los ámbitos de la PESD y de la PCSD, para que los diputados responsables, en particular los presidentes de las subcomisiones de Seguridad y Defensa y de Derechos Humanos, puedan disponer de la información necesaria para ejercer sus prerrogativas con conocimiento de causa;

o
o   o

95.  Encarga a su Presidente que transmita la presente Resolución al Consejo y a la Comisión, a los Parlamentos de los Estados miembros y a la Asamblea Parlamentaria de la OTAN, así como a los Secretarios Generales de las Naciones Unidas y de la OTAN.

(1) DO C 33 E de 9.2.2006, p. 580.
(2) DO C 314 E de 21.12.2006, p. 334.
(3) DO C 285 E de 26.11.2009, p. 23.
(4) Textos Aprobados, P6_TA(2009)0075.
(5) Textos Aprobados, P6_TA(2009)0076.
(6) Textos Aprobados, P7_TA(2009)0099.
(7) Textos Aprobados, P7_TA(2009)0057.
(8) Textos Aprobados, P6_TA(2009)0333.

Aviso jurídico - Política de privacidad