La política monetaria europea

El Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC) comprende el Banco Central Europeo (BCE) y los bancos centrales nacionales de todos los Estados miembros de la Unión. El objetivo principal del SEBC es mantener la estabilidad de los precios. A fin de alcanzar este objetivo principal, el Consejo de Gobierno del BCE basa sus decisiones en un marco analítico integrado y ejecuta medidas de política monetaria tanto convencionales como no convencionales. Los instrumentos principales de la política monetaria ordinaria del BCE son las operaciones de mercado abierto, las facilidades permanentes y el mantenimiento de reservas mínimas. Como respuesta a la crisis financiera mundial, el BCE también ha cambiado su estrategia de comunicación al ofrecer orientación anticipada sobre la trayectoria futura de su política de tipos de interés, sujeta a las perspectivas de estabilidad de los precios, y ha adoptado una serie de medidas no convencionales de política monetaria.

Base jurídica

  • Artículos 119 a 144, 219 y 282 a 284 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE);
  • Protocolo (n.º 4) del Tratado de Lisboa sobre los Estatutos del Sistema Europeo de Bancos Centrales y del Banco Central Europeo.

Objetivos

En virtud del artículo 127, apartado 1, del TFUE, el objetivo principal del SEBC es mantener la estabilidad de los precios. Sin perjuicio de este objetivo, el SEBC apoya las políticas económicas generales de la Unión con el fin de contribuir a la realización de los objetivos de la Unión. El SEBC actúa con arreglo al principio de una economía de mercado abierta y de libre competencia, fomentando una eficiente asignación de recursos (artículo 127, apartado 1, del TFUE).

Resultados

A. Principios rectores de la actividad del BCE

1. Independencia del BCE

El principio esencial de la independencia del BCE se encuentra establecido en el artículo 130 del TFUE: «en el ejercicio de las facultades y en el desempeño de las funciones y obligaciones que les asignan los Tratados y los Estatutos del SEBC y del BCE, ni el Banco Central Europeo, ni los bancos centrales nacionales, ni ninguno de los miembros de sus órganos rectores podrán solicitar o aceptar instrucciones de las instituciones, órganos u organismos de la Unión, ni de los Gobiernos de los Estados miembros, ni de ningún otro órgano». La independencia del BCE se preserva, asimismo, mediante las prohibiciones enunciadas en el artículo 123 del TFUE, que también son aplicables a los bancos centrales nacionales: queda prohibida la autorización de descubiertos o la concesión de cualquier otro tipo de créditos en favor de instituciones, órganos u organismos de la Unión, Gobiernos centrales, autoridades regionales o locales u otras autoridades públicas, organismos de Derecho público o empresas públicas de los Estados miembros. La independencia del BCE se centra en la libre elección de los instrumentos de política monetaria. El Tratado prevé la utilización de instrumentos tradicionales (artículos 18 y 19 de los Estatutos) y permite al Consejo de Gobierno decidir sobre el uso de otros métodos que considere adecuados (artículo 20 de los Estatutos).

2. El principio de transparencia del BCE

Con el fin de garantizar la credibilidad del BCE, el artículo 284 del TFUE y el artículo 15 de los Estatutos le imponen unas obligaciones de información. El BCE elabora y publica informes sobre las actividades del SEBC con una periodicidad al menos trimestral. Además, se publica semanalmente un estado financiero consolidado del SEBC. Desde el principio, el boletín mensual del BCE ha ofrecido un análisis exhaustivo de la situación económica y de las perspectivas de evolución de los precios. Dicho boletín mensual fue sustituido en enero de 2015 por un nuevo boletín económico que, tras el cambio en enero de 2015 a un intervalo de seis semanas entre las reuniones de política monetaria del Consejo de Gobierno, se publicará dos semanas después de cada reunión de política monetaria. El 19 de febrero de 2015, el BCE publicó por primera vez un informe relativo a una reunión de política monetaria del Consejo de Gobierno y, al hacerlo, se adhirió a la política de comunicación de otros bancos centrales importantes.

3. Normas de votación en el Consejo de Gobierno del BCE (artículo 10, apartado 2, de los Estatutos)

En las votaciones del Consejo de Gobierno se respetaba el principio de «un miembro, un voto». No obstante, con arreglo a los Tratados de la Unión, se debía introducir un sistema de rotación en el mecanismo de votación del Consejo de Gobierno del BCE en cuanto la zona del euro contara con más de dieciocho Estados, como es el caso desde el 1 de enero de 2015 con la incorporación de Lituania. El propósito de la rotación es garantizar la eficacia del sistema de toma de decisiones del BCE incluso con un mayor número de participantes. Los gobernadores de los países de la zona del euro que ocupan las primeras cinco posiciones según el tamaño de sus economías y de sus sectores financieros (en estos momentos, Alemania, Francia, Italia, España y los Países Bajos) disponen de cuatro votos. El resto (actualmente catorce) comparten once derechos de voto. Para ejercer sus derechos de voto, los gobernadores se turnan siguiendo una rotación mensual. Los miembros del Comité Ejecutivo del BCE tienen derechos permanentes de voto.

B. Estrategia de política monetaria del BCE

1. Panorama general

El 13 de octubre de 1998, el Consejo de Gobierno del BCE estableció los elementos principales de su estrategia de política monetaria, a saber, i) una definición cuantitativa de estabilidad de precios, ii) un papel destacado del seguimiento del crecimiento monetario, identificado por un agregado monetario, y iii) una valoración amplia de las perspectivas de evolución de los precios. El BCE ha optado por una estrategia monetaria basada en dos pilares (análisis económico y monetario), cuyas respectivas funciones se volvieron a definir con motivo de la revisión de esta estrategia el 8 de mayo de 2003.

En enero de 2020, el BCE anunció la puesta en marcha de la revisión de su estrategia de política monetaria. La revisión se centró en la formulación cuantitativa de la estabilidad de precios, el conjunto de instrumentos de política monetaria, la estrategia de dos pilares y las prácticas de comunicación. También estudiará la importancia de elementos como el cambio climático, la digitalización, la globalización, la estabilidad financiera y la interacción entre la política fiscal y monetaria a la hora de ejecutar el mandato del BCE. En un esfuerzo por colaborar con las partes interesadas, el BCE creó un portal llamado «El BCE te escucha» y organizó una serie de «actos de escucha» con el público, las organizaciones de la sociedad civil y el mundo académico de toda la zona del euro. Inicialmente estaba previsto que la revisión de la estrategia concluyera a finales de 2020, se pospuso debido a la pandemia de COVID-19 y culminó, por fin, en julio de 2021.

La estrategia actual, que debe reevaluarse periódicamente (la próxima vez en 2025), redefine el objetivo de estabilidad de precios y el análisis basado en dos pilares. Reconoce, asimismo, que el cambio climático y la estabilidad financiera tiene implicaciones en la estabilidad de precios.

2. El objetivo de la estabilidad de los precios

Desde julio de 2021, la estabilidad de los precios se define como una tasa de inflación —incremento interanual del índice de precios de consumo armonizado (IPCA) de la zona del euro)— del 2 % a medio plazo. Este objetivo tiene carácter simétrico, es decir, las desviaciones, tanto negativas como positivas, con respecto al mismo resultan indeseables en la misma medida. Esto puede implicar un período transitorio en el que la inflación se sitúe moderadamente por encima del objetivo del 2 %.

3. Marco analítico integrado

En julio de 2021 se revisó la actual estrategia basada en dos pilares, que se convirtió en el «marco analítico integrado» compuesto por i) un análisis económico y ii) un análisis monetario y financiero.

El análisis económico se centra en la evolución económica real y nominal. El análisis monetario y financiero examina los indicadores monetarios y financieros, lo que permite centrarse en el mecanismo de transmisión monetaria y en las implicaciones de los desequilibrios financieros y de los factores monetarios en la estabilidad de precios a medio plazo.

4. Cambio climático

La revisión de la estrategia 2020-2021 reconoció que el cambio climático tiene implicaciones en la estabilidad de precios y dio lugar a un compromiso en virtud del cual, en el marco del mandato del BCE, se tendrán en cuenta las implicaciones del cambio climático y la transición hacia una economía hipercarbónica en la política monetaria y las actividades de los bancos centrales. El Consejo de Gobierno adoptó un plan de actuación relacionado con el clima destinado a incluir consideraciones climáticas en su estrategia de política monetaria, ampliar la capacidad analítica en relación con el cambio climático, adaptar el diseño del marco operativo de la política monetaria y aplicar medidas en materia de divulgación y presentación de información sobre sostenibilidad medioambiental.

C. Ejecución de la política monetaria: instrumentos y procedimientos

Al establecer los tipos de interés a los que los bancos comerciales pueden obtener dinero del banco central, la política monetaria del BCE influye indirectamente en los tipos de interés de toda la economía de la zona del euro y, más concretamente, en los tipos de los préstamos concedidos por los bancos comerciales y los tipos de los depósitos de ahorro. El BCE utiliza una serie de instrumentos para aplicar su política monetaria.

1. Instrumentos tradicionales

a. Operaciones de mercado abierto

Las operaciones de mercado abierto desempeñan un papel importante a efectos de controlar los tipos de interés y gestionar la liquidez en el mercado, además de señalar la orientación de la política monetaria. Las operaciones de mercado abierto regulares del Eurosistema son las operaciones de inyección de liquidez en euros a una semana, denominadas operaciones principales de financiación (OPF), y las operaciones de inyección de liquidez en euros a tres meses, conocidas como operaciones de financiación a plazo más largo (OFPML). Las OPF permiten controlar los tipos de interés a corto plazo, gestionar la liquidez del mercado monetario y señalar la orientación de la política monetaria de la zona del euro, mientras que las OFPML aportan otro tipo de financiación a plazo más largo al sector financiero.

Otras operaciones de mercado abierto no tan regulares son las de ajuste y las estructurales. Mientras que estas van dirigidas principalmente a adaptar la posición estructural del sistema del euro frente al sector financiero de forma permanente, el fin de aquellas es hacer frente a las fluctuaciones imprevistas de liquidez en el mercado, en particular con miras a suavizar los efectos sobre los tipos de interés.

b. Facilidades permanentes

Las facilidades permanentes proporcionan o absorben liquidez con vencimiento a un día y el EONIA (índice medio del tipo del euro a un día) mide el tipo de interés efectivo vigente en el mercado interbancario del euro a un día. El Eurosistema ofrece a las entidades de crédito dos facilidades permanentes: la facilidad marginal de crédito, para obtener liquidez con vencimiento a un día de un banco central, previa presentación de activos admisibles suficientes, y la facilidad de depósito, para realizar depósitos a un día en un banco central.

c. Mantenimiento de unas reservas mínimas

De conformidad con el artículo 19, apartado 1, de los Estatutos, el BCE puede exigir que las entidades de crédito establecidas en los Estados miembros mantengan unas reservas mínimas en el BCE y en los bancos centrales nacionales. La función del sistema de reservas mínimas es la estabilización de los tipos de interés a corto plazo en el mercado y la creación (o ampliación) de un déficit estructural de liquidez en el sistema bancario frente al Eurosistema, lo que facilita el control de los tipos del mercado monetario mediante operaciones periódicas que proporcionen liquidez. Los métodos de cálculo y determinación de la cantidad requerida son fijados por el Consejo de Gobierno.

2. Medidas no convencionales en materia de política monetaria y respuesta a las crisis

a. Operaciones monetarias de compraventa (OMC)

En agosto de 2012, el BCE anunció la posibilidad de llevar a cabo OMC en los mercados secundarios de deuda soberana para preservar una transmisión adecuada de la política monetaria y el carácter único de su política monetaria. Las OMC se concibieron para estar supeditadas a un programa de ajuste macroeconómico o un programa precautorio de la Facilidad Europea de Estabilización Financiera (FEEF)/Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE). Tras el anuncio, las OMT nunca se han utilizado pero siguen formando parte del conjunto de herramientas del BCE.

b. Orientación futura de la política monetaria

Desde julio de 2013, el BCE ha ofrecido orientación anticipada sobre la trayectoria futura de su política de tipos de interés, lo que ha supuesto un cambio importante en su estrategia de comunicación, dado que ha entrañado informar no solo de la valoración que el BCE hace de las condiciones económicas actuales y de los riesgos para la estabilidad de los precios a medio plazo, sino también acerca de las repercusiones de dicha valoración en la futura orientación de su política monetaria.

c. Operaciones de financiación a largo plazo

En junio de 2014, el BCE anunció una serie de operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico (OFPML), destinadas a aumentar el crédito bancario concedido a las entidades de crédito de la zona del euro, inicialmente durante un período de dos años. La segunda serie (OFPML II) dio comienzo en marzo de 2016, y una tercera serie (OFPML II) en marzo de 2019. En respuesta a la pandemia de COVID-19, el Consejo de Gobierno decidió suavizar considerablemente las condiciones de las operaciones OFPML III restantes, junto con una reducción temporal de los tipos de interés aplicables. A condición de conceder préstamos a la economía real, los bancos podrían obtener préstamos a niveles tan bajos como 50 puntos básicos por debajo del tipo de la facilidad de depósito en el período comprendido entre junio de 2020 y junio de 2022. Además, se decidió realizar once operaciones de refinanciación a largo plazo de emergencia por pandemia (PELTRO) entre mayo de 2020 y diciembre de 2021, con un tipo de interés de 25 puntos básicos por debajo del tipo de las OPF.

d. Programas de adquisición de activos

Desde 2009 se han ejecutado varios programas de compra de activos al objeto de mantener el crecimiento en toda la zona del euro de manera coherente con el objetivo de alcanzar unas tasas de inflación en niveles inferiores, aunque próximos, al 2 % a medio plazo. Se trata del programa de compras de bonos corporativos (CSPP), del programa de adquisición de bonos de titulación de activos (ABSPP) y del tercer programa de adquisiciones de bonos garantizados (CBPP3). Otros programas, finalizados ahora, incluyen el Programa para Mercados de Valores (PMV), el programa de adquisiciones de bonos garantizados y el segundo programa de adquisiciones de bonos garantizados (CBPP2). El ritmo mensual de adquisición neta de activos fue inicialmente de 60 000 millones EUR (marzo de 2015 a marzo de 2016) y posteriormente aumentó a 80 000 millones EUR al mes (abril de 2016 a marzo de 2017). A continuación, la adquisición neta de activos se redujo gradualmente a 15 000 millones EUR al mes (de octubre de 2018 a diciembre de 2018). En diciembre de 2018, el Consejo de Gobierno decidió poner fin a las compras netas de activos, con el fin de seguir reinvirtiendo los pagos principales de valores próximos al vencimiento y mantener las compras netas acumuladas en cada uno de los programas de adquisición de activos en sus respectivos niveles. El 12 de septiembre de 2019, se reanudaron las compras netas de activos a un ritmo mensual de 20 000 millones EUR a partir del 1 de noviembre de 2019, confiando en continuarlas durante tanto tiempo como sea necesario para reforzar el impacto acomodaticio de sus tipos de interés, y finalizarlas poco antes de que comience a aumentar los tipos de interés clave del BCE.

En respuesta a la pandemia de COVID-19, el Consejo de Gobierno decidió aumentar las compras netas de activos existentes con una dotación adicional de 120 000 millones EUR para utilizar antes finales de 2020. Además, se puso en marcha un nuevo programa temporal de compras de emergencia en caso de pandemia (PEPP, por sus siglas en inglés) para la compra de activos de los sectores público y privado con una dotación inicial de 750 000 millones EUR, que debía aplicarse hasta finales de 2020. El 4 de junio de 2020, el Consejo de Gobierno decidió aumentar la dotación del PEPP en 600 000 millones EUR, hasta 1,35 billones EUR. El 10 de diciembre de 2020, la dotación del PEPP se incrementó en 500 000 millones EUR, hasta 1,85 billones EUR. El horizonte previsto para las compras netas del PEPP se amplió como mínimo hasta finales de marzo de 2022. También se decidió reinvertir los pagos del principal que fuera venciendo en el marco del PEPP como mínimo hasta finales de 2023. En el PEPP se incluyó una flexibilidad sustancial, que permite «fluctuaciones en la distribución de los flujos de compra en el tiempo, para todas las categorías de activos y todos los países». La clave de reparto de capital orientó, en volumen acumulado, las compras netas en el marco del PEPP.

En diciembre de 2021 el Consejo de Gobierno decidió poner fin a las compras netas de activos en el marco del PEPP a finales de marzo de 2022. En ese momento, las compras netas en el marco del APP aumentaron a 40 000 millones EUR en el segundo trimestre y a 30 000 millones EUR en el tercer trimestre de 2022. A partir de octubre de 2022 el Consejo de Gobierno decidió continuar con las compras netas de activos en el marco del APP a un ritmo de 20 000 millones EUR al mes. En marzo de 2022, el calendario de compras netas en el marco del APP se revisó a la baja hasta 40 000 millones EUR en abril, 30 000 millones en mayo y 20 000 millones en junio, lo que indica que las compras netas finalizarían en el tercer trimestre si «las perspectivas de inflación a medio plazo no se debilitan incluso después del final de sus compras netas de activos». En junio de 2022 el Consejo de Gobierno decidió poner fin a las compras netas de activos a partir del 1 de julio. Está previsto que continúe la reinversión completa de los pagos del principal de los valores que venzan adquiridos, «durante un período de tiempo ampliado» para el APP y «al menos hasta finales de 2024» para la cartera de PEPP.

e. Instrumento de Protección de la Transmisión (TPI)

El TPI se anunció en julio de 2022 para apoyar la transmisión efectiva de la política monetaria mientras que el BCE sigue normalizando la política monetaria. Destinado a utilizarse como segunda línea de defensa, tras las reinversiones del PEPP, el TPI permite las compras selectivas en el mercado secundario de valores emitidos en ámbitos territoriales que experimentan un deterioro de las condiciones de financiación no justificado por los fundamentos específicos de cada país, para contrarrestar los riesgos para el mecanismo de transmisión en la medida necesaria. El TPI incluye cuatro criterios de admisibilidad: 1) cumplimiento del marco presupuestario; 2) ausencia de desequilibrios macroeconómicos graves; 3) deuda pública sostenible; y 4) políticas económicas sólidas y sostenibles. El Eurosistema acepta el mismo trato (pari passu) que los acreedores privados o de otra índole.

Papel del Parlamento Europeo

El BCE es directamente responsable ante el Parlamento Europeo. Esta responsabilidad se ejerce de cuatro formas principales.

De conformidad con el artículo 284, apartado 3, del TFUE y el artículo 15, apartado 3, de los Estatutos del Sistema Europeo de Bancos Centrales y del Banco Central Europeo, el presidente del BCE tiene la obligación de presentar un informe anual al Parlamento Europeo. El Parlamento suele aprobar una resolución sobre el informe anual del BCE. El BCE proporciona información sobre las resoluciones del Parlamento.

El presidente del BCE, de conformidad con la práctica establecida, comparece ante la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento (ECON) cuatro veces al año para explicar las decisiones políticas del BCE y responder a las preguntas de los miembros de la comisión (diálogo monetario). Estas reuniones son públicos y su transcripción se publica en los sitios web del Parlamento y del BCE. La Comisión ECON confía en que el Grupo de expertos en materia monetaria aporte información y experiencia independientes antes de cada diálogo monetario.

De conformidad con el artículo 140 del Reglamento interno del Parlamento Europeo, formalizado a raíz de un acuerdo entre el Parlamento Europeo y el BCE, cualquier diputado al Parlamento Europeo podrá formular al BCE un máximo de seis preguntas con solicitud de respuesta por escrito al mes.

Por último, el Parlamento desempeña un papel en el procedimiento de nombramiento de los miembros del Comité Ejecutivo del BCE (es decir, el presidente, el vicepresidente y otros cuatro miembros).

 

Dražen Rakić