Conferencia de clima de Marrakech: ¿qué está en juego?

Líderes y negociadores de todo el mundo se reúnen esta semana en Marrakech, Marruecos, menos de un año después de la firma del acuerdo climático de París, el primero mundial y vinculante, para discutir su aplicación. La reunión se produce en un momento de interés renovado tras las elecciones en Estados Unidos. El Parlamento participa esta semana en la fase final de la conferencia con una delegación de 12 eurodiputados.

Imagen del logo de la COP22 en MArrakech
Logo de la conferencia de la ONU sobre cambio climático en Marrakech (Marruecos)

El popular italiano Giovanni La Via lidera la delegación que estará en Marrakech de lunes a viernes. El comisario europeo de Acción por el Clima, Miguel Arias Cañete, informará a los eurodiputados a diario. La Eurocámara también participará en las conversaciones con las ONG y las delegaciones de distintos países.


Conferencia de París en 2015


La conferencia de la ONU sobre cambio climático, que el año pasado se celebró en París -conocida como “COP21”- supuso un paso histórico puesto que permitió la firma del primer acuerdo de clima legalmente vinculante y de alcance mundial.


Estableció un plan global para después de 2020, dirigido a limitar el calentamiento global del planeta muy por debajo de los dos grados centígrados, con respecto a los niveles preindustriales.


El acuerdo de París entró en vigor el pasado 4 de noviembre después de que el Parlamento Europeo diese su consentimiento para la ratificación del pacto por parte de la UE.


Conferencia de Marrakech en 2016


La conferencia de la ONU sobre cambio climático de este año, que se celebra en Marrakech (Marruecos) -también conocida como “COP22”- se centra en la aplicación del acuerdo de París. Comenzó el 7 de noviembre y terminará el día 18.


Entre los elementos clave de la negociación figuran los planes climáticos nacionales. El objetivo es que estos planes sean lo más transparentes posible y que los países aclaren qué tipo de información incluirán. También hay que asegurar que el cumplimiento de las acciones a las que se comprometan los países puede ser controlado de alguna manera, mediante un método estándar. Estos planes deberían además garantizar que los compromisos se traducen en acciones sobre el terreno.


El refuerzo de las acciones para frenar el cambio climático antes de 2020, cuando se aplicarán los planes climáticos nacionales, es otra de las metas, así como el acceso a la financiación y al apoyo para combatir el cambio climático en los países en vías de desarrollo.